Academias musicales en México

Academias musicales
Información sobre la plantilla
Institución con sede en México
Academias musicales.jpg
Tipo de unidad:Educativa
País:México

Academias musicales. Antes de la llegada de los europeos en México existieron diversos centros de enseñanza de música y danza, tanto entre los aztecas como entre los mayas.

Hubo escuelas en que se enseñaba a tocar instrumentos, a cantar y a bailar, sobre todo con el objetivo de preparar a los jóvenes para que participaran en las celebraciones religiosas. Empero, ninguna de aquellas escuelas sobrevivió tras el arribo de los españoles (1521). Tampoco se conservan documentos que permitan comparar la enseñanza en esos recintos con lo realizado en las academias europeas de aquella época.

Durante el siglo XVI los frailes franciscanos instruidos en los principios básicos de la música fundaron en México las primeras instituciones de educación musical con características europeas. En Texcoco se abrió la primera escuela de música, fundada por Pedro de Gante.

Otras escuelas a las que asistieron miles de indios fueron el Colegio de la Santa Cruz de Tlatelolco y la Escuela de Pantitlán, ambas llamadas academias en diversos documentos. En el siglo XVIII también se llamaron academias a las reuniones de instrumentistas fuera del ámbito religioso.

En 1743 abrió sus puertas el Colegio de las Rosas de Santa María, en Valladolid (hoy Morelia), en cuyo seno se creó una academia musical para niñas. De manera semejante, a fines del mismo siglo se creó otra academia musical en el Colegio de Niñas de San Diego, en Guadalajara.

Después de la guerra insurgente (1810-1821) se fundó la academia de José Mariano Elízaga y en 1838 abrió sus puertas la academia de Agustín Caballero y Joaquín Beristáin, cuya existencia se prolongó hasta fundirse con la del Conservatorio de la Sociedad Filarmónica de Tomás León, nacionalizado por el gobierno porfirista en 1877 y convertido en el CNMque hasta la fecha perdura.

Otras muchas academias abiertas durante el siglo XIX en las ciudades de Chihuahua, Mérida, Morelia, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Veracruz,Xalapa y Zacatecas, aportaron una gran cantidad de músicos, principalmente pianistas y cantantes.

En el porfiriato, la Academia Hernández Acevedo, enriquecida luego por la actividad del Grupo de los Seis, llamó la atención por sus novedosas propuestas pedagógicas. Más tarde, con las transformaciones sociales que provocó la Revolución Mexicana (1910 - 1917), muchas academias independientes fueron clausuradas, pero aproximadamente desde los años 1919 -1925 nacieron muchas más por toda la República, de los cuales cabe citar la Escuela Libre de Música, la Academia de Música Serratos y la Academia de Piano de Puebla.

El género religioso, rezagado desde el siglo XIX (sobre todo desde el gobierno juarista) renació en el Seminario Palafoxiano (Puebla) y en las escuelas diocesanas de música sagrada de Guadalajara, Morelia, Querétaro y Pachuca. Especialmente después del Decreto Presidencial de 1937 pasaron a la administración pública antiguas academias privadas en los estados de la República.

No obstante, desde 1945 se han abierto nuevas y numerosas academias musicales privadas en las ciudades de Aguascalientes, Chihuahua, Colima, Guadalajara, Guanajuato, Mérida, Monterrey, Querétaro, Xalapa y Zacatecas, principalmente.

Fuente

  • Pareyón, Gabriel. Diccionario Enciclopédico de Música en México. Universidad Panamericana. ISBN 968-5557-79-9 (tomo 1).