Acantosis nigricans

Acantosis nigricans
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Enfermedad rara de la piel, caracterizada por la presencia de hiperqueratosis e hiperpigmentación en los pliegues cutáneos perianales y de las axilas.

Acantosis nigricans. Trastorno pigmentario, debido a una hiperinsulinemia secudario a la resistencia de las células del cuerpo en contra de la insulina, tal como se presenta en la diabetes tipo II, el Síndrome Metabólico y en la obesidad. Al parecer, la incrementada concentración de insulina activa o estimula a ciertos receptores celulares promotores de la proliferación de células de la piel. Algunas drogas como los anticonceptivos orales, linfomas y algunos canceres pueden causar casos de acantosis pigmentaria.

Características

La acantosis nigricans (AN) se caracteriza por la existencia de placas hiperpigmentadas aterciopeladas en los pliegues, aunque también puede afectar a otras áreas corporales]. La hiperinsulinemia secundaria a la resistencia a la insulina que lleva aparejada la obesidad estimula la formación de estas características placas. Como consecuencia del incremento de la incidencia e intensidad de la obesidad en la población, se espera un aumento concomitante en la incidencia de AN que puede esperarse.

Debido a que el subtipo de pacientes obesos con AN tienen hiperinsulinemia y posiblemente tengan mayor riesgo de padecer una enfermedad vascular aterosclerótica (EVA), los dermatólogos juegan un papel clave en la identificación de estos pacientes .

La acantosis nigricans no constituye únicamente un trastorno dermatológico benigno de tratamiento no definido. La presencia de obesidad debería ser una indicación para su búsqueda. La existencia de acantosis nigricans en un sujeto obeso refleja la presencia de un trastorno bioquímico serio que debe ser corregido. En estos pacientes su obesidad está produciendo una enfermedad sistémica que debería ser combatida con modificaciones en sus hábitos de vida (dieta y ejercicio físico).

Ante un paciente con acantosis nigricans se debería obtener un registro de su peso corporal, de su glucemia y de su insulinemia en ayuno. La presencia de hiperinsulinemia sirve para demostrar a los pacientes tanto la causa de su dermatosis y la necesidad de instaurar medidas terapéuticas. El seguimiento del paciente se debería coordinar con los médicos de atención primaria, con monitorización periódica del peso corporal y de la insulinemia.

Afectaciones

En algunas personas, también afecta a las palmas de las manos, la cara interna de los muslos, las ingles, los labios u otras partes del cuerpo. Puesto que la piel no suele ponerse rugosa ni oscura, la palabra "aterciopelada" se utiliza a menudo para describir los síntomas de la acantosis nigricans.

A veces, afecta a personas que padecen diabetes tipo 2 o que tienen un riesgo incrementado de desarrollar este tipo de diabetes. En estos casos, la acantosis nigricans no es peligrosa en sí misma. No obstante, puede ser un signo de diabetes u otros problemas de salud que los médicos deberían descartar. A veces, diagnosticar y tratar el problema de salud puede mejorar o hacer desaparecer esta afección cutánea.

Esta afección es más frecuente en personas de ascendencia africana, caribeña e hispana, pero cualquiera puede padecerla. Muchas personas que desarrollan acantosis nigricans no tienen ningún otro síntoma y, por lo demás, están sanas. Pero, puesto que la acantosis nigricans puede ser un signo de otros problemas médicos, es aconsejable ir al médico.

Causas que la origina

Las personas con sobrepeso u obesidad tienen más probabilidades de desarrollar acantosis nigricans, que a menudo mejora o desaparece si adelgazan. Algunas personas la heredan. Determinados medicamentos, como la píldora anticonceptiva y otros tratamientos hormonales, también pueden provocar esta afección cutánea.

La causa que más frecuente produce acantosis nigricans, son los niveles elevados de la insulina que suelen encontrase en personas obesas y, prácticamente en todas las personas con insulinoresistencia.

La acantosis nigricans, corresponde a una alteración en ciertas áreas de la piel, en algunos pliegues cutáneos. Los que más frecuente se afectan son los pliegues de la nuca, axilas, codos y los perianales.

La piel en esas zonas se torna más gruesa, algo acartonada, y adquiere una tinción amarilla-café, que muchas personas la atribuyen a la suciedad. Sin embargo la suciedad no tiene nada que ver con la acantosis nigricans. Y por mucho jabón y escobilla que se pase por esos pliegues, esta no disminuirá salvo que se trata la causa que la originó: La hiperinsulinemia.

En muy raras situaciones la acantosis nigricans, se puede dar en algunos tumores del intestino. Sospecha que habría que realizar en personas muy delgadas.

Sin embargo, en las personas obesas, es tan estrecha la relación que existe entre la insulinoresistencia y la acantosis nigricans en la nuca y axilas; que para muchos la presencia de tales lesiones, constituye fuerte sospecha del diagnóstico de una insulinoresistencia.

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