Adolfo Chuiman
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Adolfo Chuiman. Destacado artista cómico peruano.
Síntesis biográfica
Nació en Lima en 1947, aunque se siente chalaco e hincha del Sport Boys. Es el penúltimo de 9 hermanos. En 1968 contrae matrimonio con Lucy y tiene 2 hijos, el varón trabaja en televisión y la hija en publicidad.
Estudio
Realizó estudios superiores en la Universidad Particular Inca Garcilaso de la Vega y estudios teatrales en el Teatro de la Universidad Mayor de San Marcos (TUSM).
Carrera profesional
Comenzó su carrera como Actor dramático, participando en muchas obras clásicas de Pirandello, Bretch, Lorca, etc, luego se incorpora a trabajar en la televisión trabajando en programas como En Tradiciones de Ricardo Palma donde hizo alrededor de 37 programas.
Fue estrella del gran programa cómico de los años setenta, “Risas y salsa”, donde interpretaba a Papa, personificando a un joven embaucador enamorado de Chelita (Aurora Aranda) que con ayuda de Machucao buscaba conquistarla participando en múltiples situaciones cómicas,También incursiona en Café Teatro y en el canto de música salsa. Destaca en la teleserie “Al fondo hay sitio” en el papel del mayordomo Rodolfo Rojas (alias “Peter Mackey”).
En 1996, cumplidos los 50 años, Lucho Llosa lo llamó para la novela “La noche”, en donde trabajó con Diego Bertie, Christian Meier y Alberto Ísola.Como el productor era su amigo, le dijo que actuaba en su novela como “un favor” para que luego Llosa lo ponga en una de sus películas. “Pa’ conocer Hollywood… Hasta ahora sigo esperando”, recuerda entre risas.
Llegarían los tiempos de las series, y “Taxista Ra Ra” (1998) sería el puntillazo inicial. Acabado “Risas y salsa”, se puso a ‘taxear’ a los 52 años y, ante el éxito de la serie, deja el taxi por cuanto oficio se le cruzara en “Mil oficios” (2001). ‘Renato Reyes’, más conocido como ‘El rey del recurseo’, era la personificación de muchísimos peruanos.
Es en esta época, trascendió la actuación y postuló al Congreso por el Frente Popular Agrícola del Perú (Frepap). Ganó, “pero lamentablemente me quitaron la curul”. “Todo fue muy cuestionado en esa época por causa de Montesinos”, dijo en una entrevista hace ya varios años. Al menos se le abrieron las puertas para una nueva película: “Un marciano llamado deseo, en donde compartió roles con Christian Meier y César Ritter. “No me gustó. Había leído el guión y no quería participar, pero me convencieron”, se lamenta
