Alejo I

Para otros usos de este término, véase Alejo I (desambiguación).
Alejo I
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NombreAlexéi Mijáilovich
Nacimiento19 de marzo de 1629
Bandera de Rusia Rusia
Fallecimiento30 de enero de 1676
Moscú, Bandera de Rusia Rusia
Causa de la muerteAsesinato
NacionalidadRusa
CiudadaníaRusa
PadresMijaíl Fiódorovich y Evdokíya Lukiánovna


Alexéi Mijáilovich o Alejo I. (1629-1676). Fue el segundo zar de la dinastía Románov y gobernó Rusia 31 años, de 1645 a 1676, entrando en la historia con el apodo de “el Apacible”, aunque el apelativo no se correspondía con la autocracia con la que gobernó el país.

Síntesis biográfica

Alexéi nació el 19 de marzo de 1629, hijo del zar Mijaíl Fiódorovich y su esposa Evdokíya Lukiánovna. Su padre Mijaíl Románov había sido elegido por los boyardos en 1613 para ser zar, y éste iniciaría la casa Románov que se mantuvo en el poder durante más de 300 años, hasta 1917.

Niñez y juventud

Fue criado por unas niñeras palaciegas. El joven Alexéi empezó su enseñanza a los cinco años de edad, al principio aprendiendo las letras del abecedario, luego leyendo el Salterio y otros libros religiosos. Sus mentores, los boyardos Morózov y Streshnióv, educaron a Alexéi según las tradiciones y ritos religiosos de la ortodoxia cristiana.

Apodo

A pesar de que el zar Alexéi I fue apodado el Apacible, este mote no tenía ninguna relación con el carácter real de Alexéi Mijáilovich. El Apacible hace mención a la regencia de este zar: su reinado se caracterizó por la tranquilidad y el bienestar.

Matrimonios

Alexéi I se casó dos veces: la primera con María Miloslávskaya, con la que tuvo trece hijos (cinco hijos y ocho hijas), aunque muchos de ellos murieron siendo niños. Entre los que sobrevivieron se encontraban los débiles y enfermos Fiódor e Iván, futuros zares.

Es posible que el miedo a quedarse sin herederos estimulara al zar ruso para contraer un segundo matrimonio. En 1669, dos años después de la muerte de su primera mujer, se casó con su segunda esposa, la bella Natalia Narýshkina, que le dio tres bebés: un hijo, el futuro zar ruso Pedro I el Grande, y dos hijas, Natalia y Teodora.

Muerte

Los últimos días de enero de 1676, a la edad de 46 años, Alexéi Mijáilovich se sintió mal, llamó a sus asesores e hizo sus últimos mandatos: indultó a encarcelados, devolvió a desterrados y perdonó todas las deudas. Después tomó la eucaristía, recibió la extremaunción y con paciencia comenzó a esperar su muerte.

Al día siguiente, 30 de enero de 1676, a las 9 de la mañana el silencio de Moscú fue roto a por las campanas de la catedral de la Asunción del Kremlin, que anunciaban la muerte del zar Alexéi Mijáilovich.

Religión

Los rusos habían adoptado la religión bizantina. Su padre, el zar Mijaíl Fiódorovich, y su abuelo, el Patriarca de Rusia Filareto, habían mirado a Constantinopla, donde se situaba la residencia del Patriarca cabeza de la iglesia ortodoxa, como único centro de la civilización, intentando defender así a Rusia del influjo de la idolatría antediluviana de la ‘Rus’ antigua, por un lado, y, por otro, eliminar la influencia occidental y de la iglesia del oeste de Europa.

Fueron los antagonistas de la creciente Europa de esa época manteniendo la opinión de que las influencias europeas podrían causar conflictos en el estado.

El padre y el abuelo eran personas muy religiosas, adeptos de la ortodoxia pura, y dejaron en herencia a su sucesor la creencia en Dios y la fidelidad a las tradiciones ortodoxas. Así, el joven príncipe y futuro zar también intentó vivir según las leyes de la iglesia ortodoxa.

Alexéi cumplía junto a su padre con todos los ritos religiosos, diariamente visitaban un templo, recorrieron algunos lugares santos rusos como peregrinos, celebraban ceremonias públicas de la Iglesia, etc.

Hay que decir que gracias a esos esfuerzos hasta el reinado de Pedro I el Grande, el hijo menor de Alexéi I, Rusia quedó libre de influencias europeas que pudiesen alterar la situación existente y Alexéi Mijáilovich se centró en las necesidades de su país.

Reinado de Alexéi I

Alexéi I subió al trono en julio de 1645, a los 16 años de edad, tras la muerte de su padre el zar Mijaíl Fiódorovich. Sus antecesores, el zar Mijaíl Fiódorovich y el Patriarca Filareto, habían hecho un gran trabajo para estabilizar la vida socio-política tras la situación caótica de la Smuta (‘Tiempos de los disturbios’), un período de desgobierno en Rusia.

Durante el reinado de Alexéi I el país adquirió el carácter de un régimen absolutista al crear leyes y estructuras que llevaron a su campesinado a la servidumbre a los terratenientes y al Estado. Este ley firmada en 1649 sería la base de la ley rusa que existió hasta 1861.

Conflicto

En 1648 el pueblo moscovita se levantó contra el zar y los boyardos cercanos (Borís Morózov, un astuto mentor de Alexéi I) en los disturbios conocidos como la Revuelta de la Sal. Esta situación obligó a Alexéi I a exiliar a Morózov en un monasterio por algunos meses, aunque instando a los guardias a tratar a su mentor lo más civilizadamente posible.

La Revuelta de la Sal no fue la única durante el reinado de Alexéi Mijáilovich ya que el descontento social fue la característica principal de aquel periodo: en 1654 Rusia vivió la Revuelta del Cobre (contra las monedas de cobre en vez de las de plata) y en 1667-1670 estalló la guerra de cosacos encabezada por Stepán Razin, entre otras.

En 1649 el joven zar convocó el Zemski Sobor (Consejo de los diferentes representantes del Estado, en aquel momento la Asamblea Nacional) y emprendió algunas reformas: introdujo el ‘Ulozhénie’, un nuevo código legal que llevó a definir todos los servicios de los súbditos al Estado.

Alexéi Mijáilovich aumentó el papel de la autoridad creando unas estructuras burocráticas que centralizaban todas las decisiones en su persona a través de las cancillerías de Moscú. La principal consecuencia de este periodo de reinado fue la disminución del papel de la Duma de boyardos y la ruina parcial de esta antigua nobleza.

El Patriarca Nikon que tras las rebeliones peligrosas en las ciudades de Pskov y Gran Nóvgorod, con que el gobierno no podía hacer frente, a inicios de los años 1650 se convirtió en un favorito y ministro principal de Alexéi I. Mientras tanto, el joven zar nada habría sometido al dictado de Nikon.

Su apoyo a la reforma de la iglesia del Patriarca Nikon provocó la división de los creyentes (aparecieron los denominados viejos creyentes, que no aceptaron las reformas) y duras luchas religiosas. En 1660 el Patriarca Nikon fue destituido de su orden y del Patriarcado, y exiliado al monasterio de Belooziórsk, en el norte de Rusia.

Alexéi I apoyó la lucha de los ucranianos, sus hermanos de ortodoxia, contra Polonia: en enero de 1654 se firmó el Tratado de Pereyaslav entre Rusia y Ucrania por el hetman.

Política

La política exterior de Alexéi I se caracterizó por un expansionismo hacia el Sur para reforzar las fronteras con los tártaros de Crimea y el Imperio Otomano.

La campaña militar contra Polonia en 1654 fue un triunfo de Alexéi I y cayeron en sus manos pueblos y ciudades, incluso la importante fortaleza de Smolensk.

Descripción de los coetáneos

Según explicaban sus coetáneos, el zar ruso tenía unos ojos azules que resplandecían de bondad sincera, una cara gruesa y rosada con un aspecto muy atractivo. Era una persona de grandes capacidades, ávida de saber algo nuevo, bastante activo y, a pesar de su gordura, un gran aficionado a la caza.

Los rasgos del carácter de Alexéi Mijáilovich impresionaban incluso a los extranjeros, indicaron los contemporáneos:

“El zar ruso está dotado de unos talentos extraordinarios, tiene brillantes cualidades y está adornado con virtudes excepcionales”.

Subrayaban los huéspedes del país

“Conquista los corazones de sus súbditos”
“Es el gobernador que desearían tener todos los pueblos cristianos, pero no todos lo tienen”.

Opinión de los historiadores

En opinión de los historiadores, la persona de Alexéi Mijáilovich fue la personificación de algunos rasgos característicos de su época: la ideología estatal, la concepción religiosa y los usos y costumbres que eran típicos de aquellos tiempos, como puede apreciarse en el libro del diplomático y escritor de aquel siglo Grigori Katoshyjin ‘En Rusia durante el reinado de Alexéi Mijáilovich’.

Sucesor del trono

En 1674 el zar nombró a su hijo mayor, Fiódor, nacido de su primera esposa, María Miloslávskaya, como su sucesor en el trono.

Fuente