Antonio Aúcar Jiménez
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Antonio Aúcar Jiménez. Mártir revolucionario nacido en Santa Clara.
Síntesis biográfica
Nació el 16 de febrero de 1936, Santa Clara, Cuba.
Estudios
Cursó los primeros grados en la primaria de esta ciudad y por su inteligencia y espíritu de superación obtuvo una beca para la Escuela Politécnica de Matanzas, con sólo 11 años de edad. Allí tomó parte en una protesta estudiantil por la mala alimentación y la desatención que sufrían. Por su actitud, perdió la beca.
De nuevo en Santa Clara, Villa Clara, concluyó la enseñanza primaria y luego comenzó a trabajar como mensajero de una farmacia, en bicicleta, mientras por la noche estudia Mecanografía y Taquigrafía, graduándose en 1952.
Trayectoria revolucionaria
Ante el golpe de estado del 10 de marzo de ese propio año, Antonio manifestó su repulsa al régimen e ingresó en la Organización Auténtica. Para ese tiempo comenzó a trabajar en la Internacional Harverster. Luego del Asalto al Cuartel Moncada integró en las filas del Movimiento 26 de Julio y comenzó a organizar un grupo en su propio centro de trabajo.
Se destacaban en él entre los rasgos fundamentales de su carácter, la serenidad y el valor para enfrentar todos los riesgos. Esto le permitió participar con éxito en numerosas acciones de sabotaje. Estas características, y la experiencia que alcanzó en la organización de la lucha revolucionaria, le llevaron a ser designado Capitán de los grupos de acción y sabotaje del Movimiento 26 de Julio en Santa Clara.
Perseguido por las fuerzas represivas Aúcar se trasladó a La Habana donde continuó sus tareas revolucionarias con el nombre de Carlos. De allí fue enviado a cumplir misiones en Sancti Spiritus para reorganizar las milicias.
Muerte
De regreso a Santa Clara cumplió múltiples tareas. Tomó parte activa en la organización de la huelga revolucionaria del 9 de abril de 1958. En esta, su última acción, enfrentó la policía motorizada en gran número dentro de la ciudad para detener el brote. Antonio combatió hasta sus últimas posibilidades pero cayó junto a varios compañeros, convirtiéndose en ejemplo permanente para los jóvenes de su pueblo.
