Artemisa Precolombina

Artemisa precolombina
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Lugar:Artemisa
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba


Artemisa precolombina comunidad de aborígenes que tuvieron en este territorio amplia diversidad en los elementos del paisaje que les propició la explotación de diferentes ecosistemas como los manglares costeros; los bosques en las elevaciones de la Sierra del Rosario y de las llanuras circundantes; bahías como la de Mariel, Cabañas y Bahía Honda; lagunas como la de Ariguanabo y numerosos ríos y arroyos.

Nombre

Artemisa según los nativos de esa área geográfica su nombre proviene de una especie herbácea que crecía profusamente en la zona en los momentos en que se establecieron las primeras viviendas y era utilizada por los habitantes del lugar como pasto para el ganado. Otra versión corresponde al de una diosa de la mitología griega llamada Artemisa, que representa a la diosa de la caza.

Origen y asentamiento del archipiélago cubano

La presencia humana en el archipiélago cubano está vinculada a travesías marítimas desde la tierra continental circuncaribeña. Esta migración con “destino” al archipiélago cubano se realizó en diferentes períodos de tiempo, y sus protagonistas poseían niveles culturales y socioeconómicos desiguales, pues a su vez provenían de distintas zonas geográficas. Estos grupos humanos tenían un nivel equivalente al paleolítico, mesolítico y neolítico europeo, lo que representan para los dos primeros una economía de apropiación vinculada a actividades subsistenciales de caza, pesca, captura y recolección; mientras que el tercero exhibía una economía de producción en su forma inicial.

El arribo a nuestro territorio de seres humanos no se considera movimientos migratorios sino que consistían en misiones de exploración de nuevas zonas que por alguna razón terminaron asentándose en las localidades descubiertas. Las corrientes marinas superficiales contribuyeron a que los navegantes de las rústicas canoas tuvieran posibilidad de poblar el suelo cubano.

Aún cuando no hay fecha exacta para comprobarlo la ruta migratoria de los primeros pobladores de Cuba se produjo alrededor de 10000 años antes del presente (AP), desde una zona aún no comprobada de Norteamérica, específicamente de la península de la Florida y de Bahamas hasta la costa norte de oriente y centro de Cuba. Ello se fundamenta en las comparaciones de las evidencias líticas y la similitud entre las halladas en ambas zonas geográficas.

Luego ocuparon aisladamente el occidente cubano con bajas densidades demográficas, además no eran sedentarios sino que se trasladaban en función de sus necesidades alimentarias. Posteriormente hace aproximadamente 3500 a 5000 años arribaron al archipiélago grupos de mayor desarrollo procedentes de la región norte de Venezuela y de Centroamérica. Estas comunidades conocidas como preagroalfareros y protoagrícolas elaboraban objetos de concha, artefactos de piedra, de madera y de cerámica. Estos grupos se dispersaron por toda Cuba y es posible que se mezclaron cultural y biológicamente con otros ya establecidos.

El grupo aborigen que más recientemente encalló sus canoas en Cuba fue hace aproximadamente 1300 años y portaba una tradición económica social más compleja que las anteriores, estos son los llamados agroalfareros. Elaboraban vasijas de cerámicas de diversos tipos y funciones, incluyendo una en forma de plato conocida como burén, la que se utilizaba para cocer el pan de yuca o casabe y además practicaban formas de agricultura. Estos nativos pertenecían al tronco lingüístico aruaco y provenían del norte de Venezuela y Guyana siendo su ruta principal hacia el Caribe a través del arco de las Antillas menores, Puerto Rico y La Española; y desembarcaron en el oriente cubano. Este grupo fue más sedentario, necesitaron espacios más o menos permanentes para el desarrollo de la agricultura; se esparcieron desde el oriente al centro y algo hacia el occidente, coincidiendo este último con el arribo europeo a nuestra tierra. La disminución paulatina de la población aborigen provocada por los colonizadores truncó la dispersión agroalfarera a gran parte del territorio nacional.

La abundancia de recursos alimentarios, la vegetación y el clima favorecieron la presencia aborigen cuya característica física revelaban su origen ancestral mongoloide: cara ancha, pómulos prominentes, estatura media a baja. Solo algunas comunidades agroalfareras practicaban la deformación craneal.

Presencia aborigen en la provincia de Artemisa

Cuando se superponen los mapas de la actual provincia de Artemisa con otras proyecciones derivadas de estudios de regiones aborígenes, se obtiene que las llamadas regiones de Marién y Sabana coinciden con las zonas centro oeste y este respectivamente de la nueva división político administrativa.

Las comunidades aborígenes tuvieron en este territorio amplia diversidad en los elementos del paisaje que les propició la explotación de diferentes ecosistemas como los manglares costeros; los bosques en las elevaciones de la Sierra del Rosario y de las llanuras circundantes; bahías como la de Mariel, Cabañas y Bahía Honda; lagunas como la de Ariguanabo y numerosos ríos y arroyos. En todas estas áreas pudieron utilizar recursos de gran variedad, como son moluscos marinos y terrestres, cangrejos, majaes, tortugas, peces marinos y dulceacuícolas, aves y jutías.

El trabajo arqueológico en esta área puede brindar varios elementos. Hasta el momento no hay evidencias que permitan afirmar el asentamiento de los grupos aborígenes más antiguos, los conocidos protoarcaicos, arcaicos o apropiadores tempranos, cuya presencia en el archipiélago es aislada. El grupo preagroalfarero es el mejor y mayor representado de todos, pues existen en el territorio sitios de habitación costeros y de tierra adentro. Estos parecen confirmar la idea de la regularidad de la migración estacional, que consiste en una estrategia de aprovechamiento de los recursos que necesitaban, de modo que en la época de verano -que coincide con el período lluvioso- los grupos humanos se trasladaban tierra adentro, tanto a zonas montañosas como llanas, para obtener recursos alimenticios -animales y frutas- que abundaban en estos lugares para esta época del año. En cambio al arribar el invierno -coincidente con el período más seco- se ubicaban cerca de las costas aprovechando así los recursos del manglar y del mar, consistentes principalmente en moluscos marinos y peces.

Las evidencias arqueológicas indican que grupos preagroalfareros tenían un sistema de asentamientos que dominaba las bahías y desembocadura de los ríos, dada la gran cantidad de alimentos que estos lugares ofrecían.

Sitios funerarios en la provincia

En la provincia se localizan dos sitios funerarios importantes para el occidente cubano, dado el volumen de individuos exhumados: la Cueva del Perico I, municipio de Bahía Honda (162 individuos -53 adultos y 78 subadultos-) y el sitio Marién II, conocida también como la Cueva de la caña quemada (50 individuos -11 adultos y 39 subadultos-). Fechados realizados a evidencias de la Cueva del Perico I arrojaron resultados de hasta el 1990 años antes del presente; y en el caso de Marién II la fecha antes del presente es 2020 años.

Por sus características estos sitios se integran a otros de la región occidental, fundamentalmente de comunidades preagroalfareras, las que enterraban a sus muertos en cavernas seleccionadas para ello, las que podían o no estar cerca de la costa, como es el caso de varias cavernas de la sierra del Pan de Guajaibón, situada a más de 10 km de la costa y donde se encuentran 4 de ellas con evidencias funerarias.

En los dos sitios funerarios antes mencionados permiten inferir aspectos demográficos como por ejemplo la alta mortalidad infantil; costumbres funerarias de entierros primarios colocados en diferentes posiciones; la existencia de entierros secundarios, tal vez por la necesidad de reutilizar el espacio fúnebre. Sobre estos temas, en el caso de la localidad arqueológica Marién II, estudios realizados en la zona permiten hipotetizar con prácticas de sacrificios de infantes (infanticidio) por motivos aún desconocidos, pero la asociación de niños y adultos hace pensar en sacrificios como ofrendas relacionadas con rituales mortuorios. Los estudios antropológicos en la Cueva del Perico I, confirmaron la pequeña estatura de esos pobladores: 1,57 metros como talla promedio para las mujeres y 1,63 metros como talla promedio para los hombres.

Asentamiento y desarrollo

En el área de la cuenca del río Banes en Caimito estuvo asentada una importante comunidad protoagricultora, como demuestra el sistema de asentamiento hallados que incluye los sitios con diferentes funciones: conchales, paraderos y de habitación. También en la zona de Guanajay hubo un asentamiento de esta naturaleza.

La presencia de comunidades de filiación agroalfareras, tal vez coincidiendo con otras de distinta filiación, que estuvo asentada en las estribaciones del suroeste de la Laguna Ariguanabo, abarcando territorios de los municipios Bauta, Caimito y San Antonio de los Baños, en donde aparecen en cuevas circundantes restos de cerámicas, vasijas y cazuelas de factura agroalfarera, además se han hallado fragmentos de burén, pieza importante en la alimentación de estos grupos. Hoy se conoce que el burén fue multifuncional, pues no solo se usaba para cocer alimentos a base de yuca, sino que en él se elaboraban comidas de otro tipo. Estudios de fechado hecho con evidencias de la Cueva de Los Barrenos (conocida también como Los Pedregales) que se localiza en esta zona ariguanabense, indican que la fecha antes del presente es de aproximadamente 1770 años.

Recibieron por contacto con la etapa anterior elementos de tradiciones económicas y técnico estilísticas. Fueron dominados por los europeos y descritos por los cronistas. Es la más promocionada y de mayor impacto en la conciencia social actual e influencia en la identidad nacional.

Desarrollaron la agricultura, aunque la caza, pesca y captura de animales constituía el sustento en dependencia de peculiaridades ambientales. En la agricultura utilizaron la técnica de cultivo de rosa, rotación de cultivos o barbecho, hacían montículos para mejorar el suelo. La coa es una evidencia de instrumento agrícola.

Estos grupos manufacturaban ídolos diversos, piezas talladas en madera de las que podemos citar el dujo, que era en donde el cacique se sentaba para oficiar las ceremonias religiosas. Un exponente de ello es una importante pieza de este tipo, la que fue encontrada en la desembocadura del río Santa Ana, límite entre Bauta y Santa Fé; el hallazgo se produjo en la década de 1930 y se exhibe hoy en el Museo Montané de la Universidad de La Habana.

Otro sitio de la provincia donde aparecen evidencias de los grupos agroalfareros es el asentamiento Los Negros I en San Antonio de los Baños cercano al río Ariguanabo. Como es conocido los grupos agroalfareros estaban ocupando la zona occidental y avanzaban paulatinamente cuando se produjo la llegada europea, la que impidió dicho avance. Un aspecto importante del legado aborigen es el registro pictográfico. Aunque son pocas, existen en la provincia …… estaciones rupestres.

Tradicionalmente se piensa que los colonizadores exterminaron a los aborígenes cubanos y que esta cultura colapsó, pero eso no es totalmente así, pues si bien es cierto que a la llegada de los europeos había un promedio de 250000 aborígenes y apenas en el año 1550 llegaban a unos pocos miles, no se debe plantear el colapso. Manifestación de ello es que en nuestro país existen gran cantidad de topónimos; nombres de aves, animales, plantas y de diversos objetos que hoy utilizamos.

Determinar la significación exacta de muchos de los topónimos, por ejemplo es difícil, tanto por los escasos conocimientos sobre la lengua de los primitivos habitantes de Cuba, así como por las deformaciones lógicas que han sufrido estas palabras durante cientos de años de uso. Ejemplos de topónimos de origen aruaco en la provincia artemiseña podemos citar a Ariguanabo, Mariel, Guanajay, Guajaibón, Ceiba, Guanímar, Bacunagua, Bayate, Baracoa, Banes, Güira, Cayajabos, Guaniguanico, Sabanilla, El Mamey, Majagua.

Algunos sitios aborígenes en la provincia

Sitio Filiación Municipio Coordenadas

  • Cueva de los Caracoles Preagroalfarera San Cristóbal
  • Cueva del Agua Preagroalfarera San Cristóbal
  • Cueva de la Lechuza Preagroalfarera San Cristóbal
  • Solapa del Muerto Preagroalfarera Bahía Honda
  • Cueva de los Huesos Preagroalfarera Bahía Honda
  • Cueva del Guano Preagroalfarera Bahía Honda
  • Cueva de la Espiral Preagroalfarera Bahía Honda
  • Cueva del Perico I Preagroalfarera Bahía Honda
  • San Claudio Preagroalfarera Bahía Honda
  • El Jobo Protoagrícola Guanajay
  • Marién II Protoagrícola
  • Marién III Protoagrícola
  • Marién IV Protoagrícola
  • Cobo Preagroalfarera Cueva Los Barrenos
  • (Ariguanabo I, Los Pedregales) Agroalfarera Caimito
  • Cueva Garay Preagroalfarera Bauta
  • Cueva Peñas Blancas Agroalfarera Bauta
  • Los Negros I Agroalfarera San Antonio de los Baños

Fuente

  • José Antonio Fernández Riesgo
  • Biblioteca Municipal
  • Caner Román, A.: La tierra que es América, Ed. Academia, La Habana, 2004.
  • Martínez Fuentes, A. et al.: El poblamiento antiguo del Caribe. Análisis del ADN mitocondrial en preagroalfareros de la región occidental de Cuba, Revista Catauro, Año 5/ No. 8/ 2003, Fundación Fernando Ortiz, La Habana.
  • Ortega Pereyra, O.: Historia prehispánica de La Habana. Ed. Historia, La Habana, 2010.
  • Suárez Cairo, A. y L. Marichal: Sistema de asentamientos de comunidades protoagroalfareras en la cuenca del río Banes, provincia La Habana, Revista El Caribe Arqueológico, No. 5/ 2001, Casa del Caribe, Cuba.
  • http://www.artemisa.gob.cu/nuestra-region-es