Búfalo africano

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Búfalo Africano
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Bóvido salvaje.
Clasificación Científica
Nombre científicoSyncerus caffer
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Mamíferos
Orden:Artiodactyla
Familia:Bovidae
Hábitat:Bosques y sabanas del África subsahariana.

Búfalo Africano. Es un gran bóvido salvaje que habita en los bosques y sabanas del África subsahariana, especialmente al este del continente. A veces también se le llama búfalo africano o búfalo del Cabo, ya que fue en esa región de Sudáfrica donde se descubrieron los primeros ejemplares.

Distribución

Común y ampliamente distribuido. Habita una gran variedad de hábitats, desde el bosque denso hasta las llanuras herbáceas. En montaña se encuentra hasta los 4000 m. Es frecuente en zonas pantanosas. Por el contrario, no habita las regiones extremadamente áridas sin fuentes de agua cercanas.

Características físicas

Cuerpo

Constitución masiva y gran corpulencia, aspecto de buey. Cuerpo de color marrón negruzco, con pelaje escaso excepto en los terneros, cuyo pelo es abundante y de color más claro, marrón rojizo, que no adquiere el tono oscuro hasta el tercer año. Extremidades fornidas. Cola larga, rematada por un penacho. Altura en la cruz: 1,5 m. Longitud: 1,8-2,5 m. Cola: 60-70 cm. Hembras menores que los machos. Peso: machos 500-800 kg, hembras 550 kg.

Cabeza

Hocico grande y ancho, desnudo y húmedo, con grandes orificios nasales en el extremo. Ojos pequeños y orejas grandes, perpendiculares al cuerpo. Cuello corto y fornido. Cuernos muy desarrollados y gruesos, unidos en una base frontal masiva, curvados hacia fuera y hacia abajo, con los extremos virados hacia arriba y hacia dentro. Presentes en ambos sexos, aunque en la hembra están menos desarrollados y la base no es tan voluminosa.

Alimentación

Pasta todo tipo de hierbas, hasta las más duras. También ramonea, especialmente en zonas forestales donde come hojas, brotes y ramitas, sobre todo en la estación seca. Es muy voraz y necesita beber hasta 30 litros de agua al día, lo que limita su distribución a las regiones húmedas o con puntos de agua próximos. Frecuenta los depósitos de sal.

Comportamiento

Gregario, a menudo forma grandes manadas. Los machos son solitarios o bien se asocian en pequeños grupos de 5 a 10 individuos, lo mismo que los animales heridos. En áreas de bosque, el búfalo suele encontrarse en núcleos reducidos, de 3-4 o hasta de 10 cabezas. Por el contrario, en hábitat abierto se observan fácilmente manadas de varios cientos de individuos, llegando hasta los 2.000. Las mayores manadas se forman durante las lluvias, mientras que en la estación seca se rompen en grupos más pequeños formados por varias hembras relacionadas y sus terneros, lo que constituye la unidad social mínima. El instinto gregario de los búfalos es de naturaleza altamente cooperativa, hasta tal punto que si una manada atraviesa el territorio de un macho solitario, éste tomará el control del rebaño y lo guiará hasta el confín de sus dominios, entregando después el testigo al macho vecino. Son silenciosos, excepto en la estación de celo, al final de las lluvias largas. En esta época, los gruñidos y mugidos se convierten en una música habitual en la manada y se puede ver a los machos peleando con fiereza, presionando las bases de sus cuernos en una competición de fuerza. A pesar de todo, el búfalo es en realidad un animal muy apacible, salvo si se ve herido o acorralado. En estas ocasiones puede manifestarse con mucha agresividad.

Hábitos

Uno de los Hábitos del búfalo africano, es frecuentar las charcas de barro, para aliviar su cuerpo de las picaduras de los parásitos

El búfalo es tanto diurno como nocturno, aunque fuera de las zonas protegidas tiende a ser más activo por la noche. Durante el día permanece oculto en la vegetación para protegerse del calor, a menudo cerca de una fuente de agua. Al atardecer y de noche sale a beber y alimentarse, regresando después a rumiar a cubierto. Cuando la manada está pastando, los exploradores permanecen alerta para avisar al grupo de cualquier posible peligro. Es un animal sedentario, ocupando amplios territorios de forma permanente. Suele frecuentar las charcas de barro, donde se revuelca para aliviar su cuerpo de las picaduras de los parásitos. El baño de barro sirve de barrera contra los tábanos y otros insectos, y al mismo tiempo aprisiona a los parásitos cuando se seca. Así, el animal se libra de ellos rascando el barro seco de su cuerpo contra la corteza de un árbol. Su vista y oído son pobres, por lo que los búfalos confían en su finísimo olfato, capaz de detectar un depredador a 250 m de distancia.

Compañeros permanentes

Los búfalos tienen dos compañeros permanentes, las garcillas bueyeras y los picabueyes o bufagos. Las primeras comen los insectos que saltan del suelo al paso de los bóvidos. A cambio, estas aves advierten a los búfalos de cualquier posible amenaza. Por su parte, los picabueyes o bufagos se cuelgan del cuerpo de los búfalos y se alimentan de las garrapatas y larvas de mosca que se esconden entre el pelaje y en las heridas. Al complementar su dieta con las costras y pedazos de piel y carne seca, estos pájaros realizan una beneficiosa tarea de limpieza de las heridas.

Depredadores

El principal depredador del búfalo es el león, que ataca con preferencia los pequeños grupos de solteros, ya que las grandes manadas ofrecen un alto nivel de protección a sus miembros. Las hienas depredan los terneros y los animales débiles o enfermos, y los cocodrilos pueden atraparlos cuando cruzan un río. Los búfalos han sido seriamente golpeados a lo largo de la historia por las epidemias de peste bovina como las acaecidas en la década de 1890. A pesar de todo, su población hoy sigue siendo numerosa, y en algunas áreas es incluso más abundante de lo que nunca lo fue.

Longevidad

Su longevidad es de 16 a 20 años.

Reproducción

La mayor parte de los nacimientos se produce durante las lluvias largas. Las hembras tienen su primera cría a los 5 años de edad y en lo sucesivo conciben cada dos años. La gestación dura entre 11 y 11,5 meses. La hembra pare entre la manada en reposo o bien busca el abrigo de la vegetación. La única cría alumbrada permanece oculta hasta que es capaz de caminar para acompañar a su madre de vuelta a la manada.

Especies relacionadas

La sistemática del búfalo ha sido controvertida, ya que se encuentran grandes variaciones en tamaño, coloración y forma de los cuernos. Los búfalos africanos en una única especie, Syncerus caffer, integrada por animales probablemente derivados de dos tipos diferentes que se han cruzado en distintos grados. Estos dos tipos se consideran subespecies diferentes, el búfalo del Cabo, S. c. caffer, y el búfalo enano de bosque o búfalo rojo, S. c. nanus, que no se encuentra en Kenya. Entre ambos se encuentra una amplia gama de tipos intermedios.

Fuentes