Batalla de los Cinco Ejércitos

Batalla de los Cinco Ejércitos
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Conflicto bélico ficticio
Aparece en la obra El Hobbit
Batalla cinco ejercitos.jpg
Plano de la batalla
Lugar Lindes de Erebor, Tierra Media
Fecha 2941 de la Tercera Edad
Causas Disputa por el tesoro de Erebor luego de la muerte de Smaug el Dorado
Resumen Batalla ocurrida durante la Tercera Edad en los contornos de la Montaña Solitaria entre un ejército de orcos y huargos contra las fuerzas combinadas de los enanos, los hombres de Valle, los elfos del Bosque Negro y las águilas.
Resultado Derrota total de los orcos y los huargos
Consecuencias Restablecimiento del Reino bajo la Montaña y de la alianza entre los pueblos libres de la región; exterminio casi total de orcos y huargos.
Territorio Erebor
Beligerantes
Hombres de Valle
Enanos de Erebor
Enanos de las Colinas de Hierro
Elfos del Bosque Negro
Águilas
Orcos
Huargos
Comandantes
Bardo el Arquero, Jefe de los hombres de Valle
Thorin Escudo de Roble, Rey bajo la Montaña (Muerto en batalla)
Dain Pie de Hierro, Señor de las Colinas de Hierro
Thranduil, Rey del Bosque Negro
Gandalf el Gris
Gwaihir, Rey de las águilas
Bolgo del Norte (Muerto en batalla)
Fuerzas en combate
Ejército del Bosque Negro
Ejército de Esgaroth
Ejército de Enanos de Dain
Compañía de Thorin
Ejército de las águilas
Orcos guerreros del Norte
Huargos
Bajas
Se desconocen Los orcos y los huargos fueron casi exterminados y muy pocos escaparon con vida

Batalla de los Cinco Ejércitos. Producto del imaginario de JRR Tolkien. Batalla ocurrida en la Tierra Media en el año 2941 de la Tercera Edad. Tras la muerte de Smaug el Dorado a manos de Bardo el Arquero, los hombres de Valle y los elfos del Bosque Negro exigieron una parte del tesoro de Erebor, como compensación por las depredaciones de Smaug. Thorin Escudo de Roble, cegado por la ambición, no aceptó y trató de mantener para sí todo el tesoro mandando a buscar en su ayuda a su pariente Dain al frente de una fuerza de enanos de las Colinas de Hierro.

Justo cuando iba a comenzar la batalla entre los enanos contra los elfos y los hombres aparecieron los orcos en gran número junto con huargos y murciélagos. Estos se habían reunido luego de la muerte del Gran Trasgo y venían capitaneados por Bolgo del Norte. Luego de una reñida batalla de suerte cambiante los orcos fueron finalmente derrotados por la llegada sorpresiva de las águilas y la intervención en batalla de Beorn quien aniquiló la guardia de Bolgo y le dio muerte.

Causas del conflicto

Al morir Smaug el Dorado a manos de Bardo el Arquero, el gran tesoro que custodiaba el dragón en el Reino bajo la Montaña quedó en manos de Thorin Escudo de Roble quien renovó el reino de los enanos como legítimo heredero. Thorin se negó entonces a compartir el tesoro o compensar de forma alguna a los elfos del Bosque Negro y los hombres de Valle, que también habían sufrido las depredaciones de Smaug durante el tiempo que este reinó bajo la Montaña y luego de la llegada de la Compañía de Thorin. Por este motivo los elfos y los hombres pusieron cerco a la Compañía en Erebor y se negaron a darle paso a los enanos que comandados por Dain, Señor de las Colinas de Hierro habían venido en su ayuda.

También los orcos, que se habían enterado de la muerte de Smaug y que se encontraban furiosos tras la muerte del Gran Trasgo, se reunieron en gran número y junto con los huargos marcharon sobre Erebor a reclamar el tesoro. Los orcos y huargos llegaron a Erebor justo cuando iba a comenzar la batalla de los enanos contra las fuerzas aliadas de elfos y hombres. En el momento en que se iban a acometer elfos, hombres y enanos, Gandalf el Gris les advirtió del peligro parándose en medio de las dos fuerzas:

"¡El terror ha caído sobre vosotros! ¡Ay! Ha llegado más rápido de lo que yo había supuesto. ¡Los trasgos están sobre vosotros! Ahí llega Bolgo del Norte, cuyo padre, ¡oh, Dain!, mataste en Moria, hace tiempo. ¡Mirad! Los murciélagos se ciernen sobre el ejército como una nube de langostas. ¡Montan en lobos, y los huargos vienen detrás!"

La llegada de los orcos dio un vuelco a la situación y los enanos, elfos y hombres, junto con Gandalf celebraron consejo y se prepararon para combatirlos. De esa forma aconteció la que después se conocería como Batalla de los Cinco Ejércitos.

La batalla

Fuerzas contendientes

Enanos. Los enanos que participaron en la batalla lo hicieron divididos en dos fuerzas: La dirigida por Dain, señor de las Colinas de Hierro, era la más numerosa. Llegaban luego de que el cuervo Roác les transmitiera las noticias de la muerte de Smaug, la renovación del Reino bajo la Montaña y la petición de ayuda de Thorin Escudo de Roble que se encontraba sitiado por hombres y elfos. Vestían cotas de malla de acero que les cubrían hasta las rodillas, calzado de hierro flexible y estaban armados con pesados azadones, espadas cortas y escudos redondos.

La fuerza más pequeña la mandaba Thorin Escudo de Roble, Rey bajo la Montaña, quien disponía de su compañía de doce enanos (Fíli, Kíli, Balin, Dwalin, Dori, Nori, Ori, Óin, Glóin, Bifur, Bofur y Bombur), atrincherados en la puerta de entrada al Reino Bajo la Montaña. Los enanos de Thorin se ataviaron con magníficas armas y corazas del tesoro de Erebor y cuando entraron en batalla, a pesar de su pequeño número, constituyeron una fuerza poderosa.

Elfos. Los elfos habían acudido en ayuda de los hombres de Esgaroth cuando estos fueron atacados por Smaug que era acosado por la Compañía de Thorin. Eran elfos silvanos del Reino del Bosque Negro y estaban comandados por Thranduil, su rey. Entre los mismos había notables arqueros, como era habitual en este pueblo. Formaban una fuerza conjunta con los hombres y su número era de al menos un millar.

Hombres. Los hombres de Esgaroth y Valle se enfrentaron en batalla a Smaug que asolaba sus tierras y ya se encontraban en pie de guerra cuando marcharon sobre la Montaña Solitaria a reclamar el tesoro. Eran la hueste más numerosa de los ejércitos aliados que se enfrentaron a los orcos y huargos en la Batalla de los Cinco Ejércitos. Los hombres estaban comandados por Bardo el Arquero, quien había dado muerte de un flechazo al terrible dragón Smaug.

Orcos. Los orcos procedían de las Montañas Nubladas y se habían reunido en gran número luego de la muerte del Gran Trasgo. Al enterarse de la muerte de Smaug marcharon sobre Erebor para tratar de apoderarse del tesoro del dragón. Los orcos cabalgaban sobre huargos como jinetes y usaban pesadas cimitarras y otras armas de mala factura pero muy eficaces. El núcleo élite de su ejército era la guardia personal de su comandante Bolgo del Norte, unos orcos que eran de tamaño gigantescos en comparación con otros de su raza.

Huargos. Los huargos eran una raza malvada de lobos que a menudo peleaban junto a los orcos. En la Batalla de los Cinco Ejércitos sirvieron de cabalgadura a los orcos ofreciendo a su ejército gran fuerza en batalla. Aunque los huargos eran contendientes temibles, su propia naturaleza les hacía atacar a enemigos o aliados sin mucha distinción.

Águilas. Las águilas se contaban entre las razas más antiguas y sabias y caían sobre sus enemigos como el rayo. En la Tercera Edad del Sol, Gwaihir el Señor del Viento, gobernaba a las águilas de la Tierra Media y al frente de ellas se presentó en la Batalla de los Cinco Ejércitos. Aunque no alcanzaba las dimensiones de la más pequeña de las águilas de la Primera Edad, para la escala de la Tercera Edad era la más grande de su tiempo. El pueblo de Gwaihir, las águilas de las Montañas Nubladas, era fiero y muy temido por todas las razas malvadas de la Tierra Media.

Desarrollo de la Batalla

Primer ataque

Ante la superioridad de numérica de sus enemigos enanos, elfos y hombres decidieron atraer a los orcos a las estribaciones de Erebor y enfrentarlos ahí. El riesgo que tenía el plan era que los orcos invadieran la montaña y los atacaran por la espalda y desde arriba. En la estribación sur, en la parte más baja de la falda y entre las rocas, se situaron los elfos; en la del este, los hombres y los enanos comandados por Dain.

La vanguardia del ejército orco se arremolinó en el extremo de la estribación y entró atropelladamente en Valle. Primero llegaron los jinetes más rápidos que cabalgaban en huargos y arrollaron la escasa resistencia. Tras la vanguardia se precipitó el resto del ejército de los orcos y se disgregó a ambos lados de la montaña para enfrentarse a las dos alas de los defensores.

"Innumerables eran los estandartes, negros y rojos, y llegaban como una marea furiosa y en desorden."

Entonces tras lanzarles a los orcos una lluvia de flechas los elfos se lanzaron a la carga. Cuando los orcos lograron detener la embestida de los elfos se lanzaron al ataque desde el flanco opuesto los enanos y los hombres. Los orcos se desconcertaron y quedaron atrapados entre los tres ejércitos por lo que se dieron a la fuga. En ese momento parte de los huargos comenzó también a atacar a los orcos.

Segundo ataque

Pero cuando la victoria de humanos, hombres y elfos parecía cercana un grupo numeroso de orcos que había escalado la montaña y ya estaba sobre la Puerta de Erebor y las laderas se lanzó al ataque tomándolos por la espalda. Los pocos defensores que cubrían ese frente fueron aniquilados. De esa forma llegaron hasta el valle y volvieron a reunirse los ejércitos orcos. Una nueva oleada de huargos se les unió en el ataque al que se incorporó también la guardia personal de Bolgo del Norte, orcos enormes armados con cimitarras de acero.

Bardo luchaba aún defendiendo la estribación del este, pero retrocedía poco a poco. Los señores elfos se habían reunido en el otro extremo alrededor de su rey. En ese momento el muro de la Puerta se derrumbó y Thorin se lanzó al ataque seguido de su compañía. Tocando el cuerno el Rey de los enanos llamó a uníseles a los soldados de Dain y también a los elfos y hombres. Un buen grupo se le incorporó y Thorin se lanzó contra la guardia de Bolgo, pero no pudo superar las primeras líneas. Pronto su núcleo se fue reduciendo en el medio del valle sin poder recibir ayuda de las estribaciones y quedó envuelto por los orcos.

Derrota de los orcos

En ese momento llegaron a la batalla fila tras fila las inmensas águilas guiadas por su rey Gwaihir y atacaron a los orcos en las alturas lanzándolos desde los acantilados y limpiando la montaña de enemigos, lo que permitió a elfos, enanos y hombres bajar de las estribaciones y reunirse en el valle.

Pero aún contando las águilas, los orcos eran muy superiores númericamente. Los soldados que habían seguido a Thorin se habían refugiado en una pequeña colina donde resguardaban al Rey bajo la Montaña que había caído mortalmente herido. Cuando aún la suerte de la batalla no se había decidido apareció Beorn con forma de oso y atacó a los orcos desde la retaguardia, recogió a Thorin y lo alejó del combate. Luego regresó y atacó y dispersó la guardia de Bolgo. Alcanzó al comandante de los orcos, lo tiró al suelo, y lo aplastó. La muerte de Bolgo desmoralizó a los orcos que huyeron despavoridos en todas direcciones abandonando el campo de batalla.

Consecuencias

Luego de la muerte de Bolgo los orcos huyeron en todas direcciones. Los enanos, elfos y hombres los empujaron hacia el Río Rápido, y así huyesen al sur o al oeste, fueron acosados en los pantanos próximos al Río del Bosque; y allí pereció la mayor parte de los últimos fugitivos, y quienes se acercaron a los dominios de los elfos del Bosque fueron ultimados, o atraídos para que murieran en la oscuridad impenetrable del Bosque Negro. Aproximadamente las tres cuartas partes de los orcos guerreros del norte encontraron la muerte en la Batalla de los Cinco Ejércitos y entonces reinó la paz en las montañas por largos años.

Thorin Escudo de Roble cayó mortalmente herido en la batalla y murió poco después. Cubriendo el cuerpo del rey con sus escudos habían caído en combate sus sobrinos Fili y Kili. Poco antes de morir Thorin se reconcilió con el hobbit Bilbo Bolson y con los elfos y hombres de Valle. Fue enterrado en lo más profundo de Erebor y Bardo le colocó sobre el pecho la Piedra del Arca, la joya que más deseaba Thorin y que le había sido hurtada del tesoro por Bilbo, quien se la había entregado a Bardo. Thranduil como muestra de arrepentimiento y respeto colocó sobre la tumba a Orcrist, la espada élfica que le había arrebatado al enano cuando lo apresó. Dain Pie de Hierro se convirtió entonces en Rey bajo la Montaña y como tal dispuso el reparto del tesoro de Erebor:

No hubo ninguna discusión sobre la división del tesoro en tantas partes como había sido planeado, para los miembros de la Compañía de Thorin: Balin y Dwalin, y Dori y Nori y Ori, y Óin y Glóin, y Bifur, Bofur y Bombur. Dain honró la plabra de Thorin y entregó una catorceava parte de toda la plata y oro, labrada y sin labrar a Bardo (quien luego se convertiría en Rey de Valle). Este a su vez recompensó a amigos y servidores y envió grandes riquezas al gobernador de la Ciudad del Lago. Bilbo Bolson sólo aceptó dos pequeños cofres, uno cargado de oro y el otro cargado de plata.

Fuentes

  • Tolkien, J. R. R. El hobbit anotado. Con introducción y notas de Douglas A. Anderson, trad. Manuel Figueroa (texto) y Rubén Masera (notas). Capellades: Minotauro. ISBN 978-84-450-7153-3.