Clemente Gómez

Clemente Gómez Díaz
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General de Brigada
LealtadEjército Libertador Bandera de Cuba Cuba
Participó enGuerra Necesaria

Nacimiento7 de febrero de 1866
Pedro Betancourt, Matanzas, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento24 de diciembre de 1917
Matanzas, Bandera de Cuba Cuba

Clemente Gómez Díaz. General de Brigada del Ejército Libertador. Participó en la Guerra del 95. Combatió en las guerras independentistas de Cuba bajo las órdenes del Coronel Antonio Núñez y del Mayor Máximo Gómez, participó en innumerables batallas. Fue el primer alcalde cubano que tuvo el municipio de Jovellanos.

Síntesis biográfica

Nació el 20 de febrero de 1866 en una finca conocida como “La Cuerda”, perteneciente a Corral Falso de Macurijes, poblado que posteriormente recibió el nombre del también matancero general mambí Pedro Betancourt.

Sus padres fueron don José Clemente Gómez y doña Rosa Díaz, naturales de Corral Falso de Macurijes y fue bautizado en la iglesia Santa Catalina Mártir de esa localidad por el padre don Castor Hierro, actuando como padrinos don Bruno Díaz y doña Celestina Ortega. Sus abuelos paternos fueron don Clemente Gómez y doña Francisca Pérez y sus abuelos maternos don Ramón Díaz y doña Celestina Ortega.[1]

El niño era sobrino de don José Díaz Ortega, el mismo que atendió a los generales Máximo Gómez y Antonio Maceo cuando, en la invasión a Occidente, acamparon en su ingenio llamado “Josefita”, en un lugar próximo a Crimea.[2]

Según expresa el investigador Rodríguez Abreu en su monografía, ha resultado imposible trazar en el tiempo datos sobre la niñez de Clemente Romualdo; pero, a juzgar por su conducta posterior, se infiere que debe haber sido un niño inquieto, introvertido y alegre, al que le gustaba comer caña, según Santos Rodríguez, citado por Rodríguez Abreu.

La finca donde nació y creció se encontraba en el centro de una zona eminentemente cañera, que abastecía a los ingenios “Flora” y “Progreso” y en la que vivían y trabajaban también algunos peones con sus familias. El padre de Clemente Romualdo era dueño, además, de otra finca llamada “San Juan”, dedicada también a la producción de la caña de azúcar. El investigador Rodríguez Abreu aclara en sus apuntes biográficos sobre Clemente Gómez que, según fuentes orales, ha trascendido que la familia Gómez se consideraba un tanto progresista en cuanto a la sociedad esclavista de la época.[3]

Se desconoce, asimismo, la manera en que Clemente Romualdo se hizo de las ideas revolucionarias que lo llevaron a incorporarse a la guerra necesaria que comenzó el 24 de febrero de 1895; pero gracias a la obra de Pedro Rodríguez Abascal, citado por Rodríguez Abreu, se ha conocido que, antes de 1895, ya estaba vinculado a algunos personajes que con posterioridad entrarían en la historia nacional como figuras cimeras.

Guerra Necesaria

El 26 de febrero de 1895, dos días después del levantamiento en Jagüey Grande, ocurrió el encuentro entre tropas españolas e insurrectos cubanos, comandados por el Dr. José Lázaro Martín Marrero y los hermanos José Agustín y Aurelio Rodríguez, en el lugar conocido como “Palmar Bonito”.

Tras algunos meses de inactividad, en los que algunas fuerzas cubanas se acogieron al indulto del gobierno español, el 16 de diciembre de 1895, otro grupo de patriotas jagüeyenses comandados por los hermanos José Agustín y Aurelio Rodríguez se alzaron nuevamente en el mismo lugar que lo hicieron el 24 de febrero de ese mismo año.

El 24 de diciembre de 1895 se alzó Clemente Romualdo Gómez Díaz junto a una partida de hombres con ideales independentistas, uniéndose a los hombres del teniente coronel mambí Antonio Núñez; pero enseguida fue incorporado a las fuerzas cubanas bajo las órdenes del mayor Máximo Gómez.

De esta manera, se separaba nuevamente de su familia para hacerse soldado del Ejército Libertador. Era solo un cubano sencillo que deseaba ver su tierra libre de la dominación española, que ya duraba casi cuatro siglos y, como cientos de compatriotas y contemporáneos, elegía la senda de la sagrada causa patria y convertía en acción el ideal separatista. [4]

El 29 de diciembre de 1895 participó en el combate de Calimete, poblado del suroeste matancero, acción que fue una de las más importantes de aquella legendaria invasión al constituirse el regimiento “Tiradores de Maceo”, perteneciente al Quinto Cuerpo de Infantería. Fue en esa batalla que se le designó como segundo jefe de esa unidad mambisa.

Combates en que participó

Según el investigador Rodríguez Abreu, Clemente Romualdo Gómez participó en las siguientes acciones combativas: [5]

26 de enero de 1896: Junto a fuerzas dirigidas por Severino Cepero, Clemente Romualdo Gómez destruyó dos fuertes españoles en la zona de Sofía, próxima a Jovellanos.
21 de febrero de 1896: Al frente de sus hombres causó cuatro bajas a fuerzas españolas en Santa Isabel.
4 de marzo de 1896: Estableció combate con la guarnición del ingenio “Atrevido” y les causó a los españoles cuatro muertos y quince heridos.
27 de marzo de 1896: El coronel español Luis Molina enfrentó a fuerzas cubanas dirigidas por Clotilde García, Clemente Romualdo Gómez, Cepero y Felino Álvarez en los potreros Paz y Encrucijada.
20 de mayo de 1896: Resultó herido cuando participaba en uno de los más de ochenta hechos de guerra que a comienzos de ese año se sucedían.
3 de junio de 1896: Sostuvo combate con la columna española de Zamora, entre el ingenio “Nieves” y San Miguel de los Baños.
7 de junio de 1896: Sus fuerzas, junto a las de José Roque y Junco, sostienen combate con el coronel español Moroto en las lomas de Moliné.
13 de junio de 1896: Enfrenta al oficial español Parnía en la Vigía. Las fuerzas cubanas tuvieron seis heridos y causaron doce bajas a los españoles.
24 de junio de 1896: Sus fuerzas enfrentan a otra columna española en la Vigía y le propinan cinco bajas.
24 de septiembre de 1896: Clemente Romualdo Gómez atacó el poblado de Claudio (hoy Torriente).
14 de octubre de 1896: Fuerzas de Lacret Morlot y Clemente Romualdo Gómez sostuvieron combate durante cuatro hojas en el ingenio “Olimpo” contra el destacamento español del propio ingenio y otros de Jovellanos, Cimarrones y Cárdenas.
13 de diciembre de 1896: Junto a fuerzas dirigidas por Nicolás Suárez, entablaron combate con la guerrilla de Limonar.
7 de febrero de 1897: Junto a fuerzas comandadas por Regino Alfonso, combatió contra el batallón español de Bailén en Monte Verde.
1 de marzo de 1897: Sostuvo combate con la guerrilla de Boca de Camarioca, causándole cuatro bajas.
9 de marzo de 1897: Sostuvo encuentro con tropas españolas en Limonar.
6 de abril de 1897: Enfrenta nuevamente al batallón de Bailén en los ingenios “Audaz” y “Dichoso”.
19 de mayo de 1897: Junto a insurrectos dirigidos por Pedro Betancourt, causó cuatro muertos y diez heridos a fuerzas españolas en el combate del ingenio “La Luz”.
22 de mayo de 1897: Junto a Carlos Rojas y Tabares, combatieron en Camarioca con las tropas del español Luis Molina.
2 de junio de 1897: Sostuvo combate en la zona de Jovellanos contra la columna del coronel Mario causándole cinco muertos.
Septiembre de 1897: Participó en el combate de Loma del Pan, cerca de la ciudad de Matanzas.

También libró las acciones de Jicaritas, Río de Aurora, Cantabria, La Madamita, Potrero de Severino de Armas y la del Ingenio Santa Rita. Lamentablemente, no se han encontrado evidencias sobre su pensamiento militar en cuanto a táctica y estrategia. A juzgar por la cantidad de acciones en que participó, pudiera inferirse que se trataba de un combatiente astuto y valiente.

A mediados de 1897, Clemente Romualdo Gómez fue designado al frente de la Brigada Norte de Matanzas, dirigida hasta entonces por José Roque de Escobar quien fue licenciado del Ejército Libertador por razones de salud[6] y, en febrero de 1898, estuvo entre los jefes cubanos que con sus hombres protegieron y auxiliaron el duodécimo desembarco del buque Dauntless, por Caleta del Barco en la bahía de Matanzas, operación que representó para las tropas cubanas un refuerzo logístico de diez mil cartuchos de guerra, unas cuatro decenas de fusiles, revólveres, cerca de 200 machetes, ropa, calzado y medicina.

Desde su incorporación a las fuerzas mambisas, en rápida sucesión acelerada por el fuego de las batallas, transitó por los grados de subteniente (24 de diciembre de 1895), capitán (1 de enero de 1896), comandante (1 de mayo de 1896), teniente coronel (12 de junio de 1896), coronel (27 de julio de 1897) y general de brigada (12 de febrero de 1898).

Grados militares

Desde su incorporación a las fuerzas mambisas y en rápida sucesión de seguro acelerada por el fuego de las batallas, transitó por los grados de Subteniente, Capitán, Comandante, Teniente Coronel y Coronel.

En febrero de 1898 estuvo entre los jefes cubanos que con sus hombres protegieron y auxiliaron el duodécimo desembarco del Buque Dauntless, por Caleta del Barco en la Bahía de Matanzas, una operación que representó para las tropas cubanas un esfuerzo logístico de 10 mil cartuchos de guerra, unas 4 decenas de fusiles, revólveres, cerca de 200 machetes, ropa, calzado y medicina.

El día 12 del mismo mes era ascendido a General de Brigada del Ejército Libertador, 5 días antes había cumplido 32 años de edad.

Fechas de sus ascensos en el Ejército Libertador:

  1. Sub-Teniente 24 de diciembre de 1895
  2. Capitán 1 de enero de 1896
  3. Comandante 1 de mayo de 1896
  4. Teniente Coronel 12 de junio de 1896
  5. Coronel. 27 de julio de 1897
  6. General de Brigada 12 de febrero de 1898

Tareas al finalizar la guerra

Al concluir la guerra -con la intromisión estadounidense que frustró la independencia de la isla-, tras el licenciamiento del Ejército Libertador que permitió borrar de las charreteras criollas los grados conquistados al ritmo de cargas al machete, el gobierno interventor lo nombró alcalde del municipio de Jovellanos, cargo en el cual el voto popular lo ratificó en dos procesos eleccionarios consecutivos, a partir de 1900.

Durante esta etapa, Clemente Romualdo Gómez Díaz contrajo nupcias con la señora Guillermina Sicre, hija de una familia adinerada de la zona de Cimarrones (hoy Carlos Rojas). Todo parece indicar que sus nuevas responsabilidades al frente de las fincas de sus antepasados - “La Cuerda” y “San Juan”, en la zona sur de Matanzas-, además de las propiedades de su esposa, saberse veterano de la guerra de Independencia y persona influyente en la vida económica, política y social de Jovellanos, lo llevaron a tomar un rumbo equivocado al defender los intereses de la nueva clase a la que ya pertenecía.

La investigación de Rodríguez Abreu confirma que participó en muchas campañas contra el Partido Liberal y, al terminar su segundo período de mandato como alcalde de Jovellanos, Clemente Romualdo se asentó en la ciudad de Matanzas, en la calle Milanés No. 126, al ser designado comandante alistador de la Guardia Rural y, posteriormente, jefe de esa fuerza en la provincia yumurina, con rango de coronel.

Muerte

Murió a la edad de 51 años en Matanzas el 24 de diciembre de 1917. Sus restos descansan en el cementerio de Jovellanos.

Referencias

Fuentes