Colimbo
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Colimbos. Estas aves están muy bien adaptadas para su vida acuática. Tienen las patas en la parte posterior del cuerpo y los tres dedos delanteros en cada pata unidos por una membrana interdigital. Excelentes zambullidores, se sabe que logran los 75 metros de profundidad.
Sumario
Hábitat
Durante gran parte del año, los colimbos permanecen en los océanos. Muchos de ellos se internan en los continentes para anidar en los islotes de las lagunas y los ríos de poca corriente, otras parejas prefieren anidar en las costas del Océano Ártico. Durante las migraciones también se les ve congregados, en ciertos casos hasta mil de ellos, en algunos lagos dentro de los continentes.
Adaptación al medio ambiente
Estas aves están muy bien adaptadas para su vida acuática. Tienen las patas en la parte posterior del cuerpo y los tres dedos delanteros en cada pata unidos por una membrana interdigital. Excelentes zambullidores, se sabe que logran los 75 metros de profundidad. Pero el precio de tan especializada evolución lo pagan en la tierra, apenas pueden caminar, y se ven obligados a arrastrarse o dar saltos cuando sale del agua.
En el aire
A pesar que en el aire los colimbos son muy buenos, tienen un vuelo fuerte y alto, el despegar es un evento que presenta dificultad, más pronunciado en las especies más grandes. Las dos especies de mayor tamaño en este grupo de aves no pueden despegar desde la tierra y en el agua requieren una considerable distancia donde batir las alas y “correr” sobre la superficie antes de hacerse al aire.
Variedad de especies
Diferencias de otras especies
Cuando se les ve nadando de lejos, se asemejan mucho a los patos, gansos y otras aves acuáticas. Sin embargo, a poca distancia es bien fácil diferenciarlos. Los colimbos tienen el pico largo, terminado en una punta pronunciada. Su plumaje no es muy colorido pero de líneas y marcas muy bien definidas, siendo muy atractivos.
