Combate de Río Hondo

Combate de Río Hondo
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Mapa Combate Rio Hondo.jpg
Contienda del Ejército mambí durante la campaña a Occidente
Fecha:24 de febrero1895
Lugar:Río Hondo, San Cristóbal
Consecuencias:
Victoria del Ejército Rebelde en este sector, que contendría por un tiempo los planes de la ofensiva enemiga
País(es) involucrado(s)
Bandera de Cuba Cuba
Líderes:
Antonio Maceo
Ejecutores o responsables del hecho:
Ejército mambí

Combate de Río Hondo. Se desarrolló el 24 de febrero de 1895 y tuvo como escenario el municipio San Cristóbal, perteneciente entonces a la provincia de Pinar del Río, y actualmente a la provincia Artemisa.

Por su significación el combate constituye uno de los hechos históricos más relevantes ocurridos durante la Guerra de 1895, el cual fue señalado por Fidel Castro Ruz en su alegato de autodefensa conocido como La Historia me Absolverá.

Fue un combate sangriento, donde se puso de manifiesto la valentía y el heroísmo de los hombres que allí combatieron, encabezados por el General Antonio Maceo.

Antecedentes

Durante la Guerra del 95, el municipio San Cristóbal, pertenecía a la provincia de Pinar del Río, y actualmente pertenece a la provincia Artemisa.

San Cristóbal tiene su propia historia, forjada con la sangre y sacrificio de sus mejores hijos, los que jugaron su papel en cada una de las etapas de luchas por la plena independencia y posterior al triunfo revolucionario del 1 de enero de 1959 en la construcción y consolidación de una sociedad nueva.

En este territorio se produjo uno de los hechos históricos más relevantes ocurridos durante la Guerra de 1895, el cual fue señalado por el doctor Fidel Castro Ruz en su alegato de autodefensa conocido como La Historia me Absolverá, como demostración de la forma en que son capaces de luchar los pueblos para ver a su patria libre: El Combate de Rio Hondo.

Con anterioridad el General Antonio Maceo y Grajales, llegó a Mangos de Roque, en Mantua, Pinar del Río, el 22 de enero de 1896, llevando la guerra desde Oriente hasta Occidente, donde se le unieron cientos de compatriotas pinareños, deseosos de ver a Cuba libre del yugo español.

El día 24 de enero dio inicio “La Campaña de Occidente”, combatiendo sin descanso al enemigo, realizando cruentos combates y batallas. Su plan inicial era luchar contra las fuerzas españolas, posteriormente dirigirse a La Habana para llegar el mismo día en que Valeriano Weyler tenía previsto publicar el bando de su toma de poder como Capitán General de la Isla.[1]

Entre los combates y batallas desarrollados en esta campaña se encuentran: Paso Real de San Diego, Cacarajícara, Ceja del Negro y Río Hondo, entre otros muchos que se inscriben en la historia del accionar de Maceo en tierras pinareñas.

Después del combate de Paso Real de San Diego, el 1 de febrero del 1986, el General Antonio Maceo estableció su campamento en Santa Cruz de Los Pinos, donde concibió el plan de atacar a Candelaria, una fuerte plaza española, con el objetivo esencial de concentrar la atención y convergencia del enemigo hacia el oeste, debilitando de esta forma la línea defensiva de Mariel-Majana, lo que facilitaría su posterior paso hacia la provincia de La Habana para recibir a Valeriano Weyler el 12 de febrero combatiendo en las cercanías de la capital.

Desarrollo de las acciones combativas

El General Antonio Maceo y su columna, llegaron al territorio de San Cristóbal el día 4 de febrero y encontraron una población ocupada por los insurrectos, uniéndosele 300 hombres al mando del teniente coronel Pedro Delgado; llegando a tener una tropa de 2 500 hombres. Entre ellos se encontraba José Reyes Trujillo, quien alcanzó los grados de Capitán, el cual sobrevivió al a guerra y pasó a ser el patriota insigne de la localidad. El día 5 de febrero, a las 5 p.m. realiza el asedio a Candelaria, quedando demostrada la capacidad táctica de Maceo.

En la madrugada del 7 de febrero Maceo emboscó a sus tropas en la estratégica intercepción de Río Hondo, en el camino real a Vuelta Abajo. Esa mañana salió de Candelaria hacia San Cristóbal el coronel Enrique Segura, con una fuerza de 600 hombres. En las inmediaciones de Río Hondo y cerca del puente Yaguasas, esperó Maceo a los españoles.

En este lugar, reclutas pinareños al mando del teniente coronel Pedro Delgado desarmados, voluntariamente participaron en la carga que ordenó Antonio Maceo contra las tropas españolas comandadas por el Coronel Segura y formadas en línea.
El combate que comenzó cuando el sol estaba ya en la cúspide, término al anochecer con 85 bajas mambisas y 17 muertos por la parte española, las cuáles se retiraron derrotados y donde el propio jefe cubano recibió un balazo en la pierna derecha.
La carga mambisa que se produce en Río Hondo es fuerte, llena de todo el vigor patriota e imprimida por unos 4 jinetes, que llevaron a Maceo, acostumbrado a ver la muerte en todas las posiciones y aspectos a señalar:

"Yo nunca había visto eso; gente novicia que ataca inerme a los españoles; con el vaso de beber agua por todo utensilio. ¡Y yo le daba el nombre de impedimenta".

El combate que duró 3 horas fue trasladándose hasta las cercanías de la casilla de obras públicas que había sido previamente incendiada por los mambises para evitar que los españoles se atrincheraran en ella.

Maceo arremetió con una poderosa carga al machete, demostrando la valentía y arrojo que lo caracterizaba, cayendo heridos o muertos hombres de ambas parte. Los españoles reciben dos batallones de refuerzos que son interceptados a dos kilómetros de Río Hondo. Maceo es herido en una pierna, haciendo caso omiso y continúa el combate que se extendió hasta el anochecer. Al día siguiente comprueba que las fuerzas españolas tomaban en dirección a Candelaria, con mucha prisa, los que son hostigados por sus fuerzas, no teniendo tiempo para enterrar a sus muertos.

Antonio Maceo

Maceo regresó al campo de batalla, hallando 17 muertos españoles, montones de caballos, equipos, cartucheras, cápsulas y fusiles inutilizaos. Las tropas insurrectas sufrieron alrededor de 85 bajas siendo casi diezmada la tropa bisoña que mandaba Pedro Delgado.

Fue un combate sangriento, donde se puso de manifiesto la valentía y el heroísmo de los hombres que allí combatieron.

La fecha 7 de febrero de 1896 y el lugar Río Hondo, marcan un hito en las luchas por la independencia, según narra en Crónicas de la Guerra José Miró Argenter, jefe del Estado Mayor de Antonio Maceo.
Después del asedio a Candelaria el 6 de febrero el Titán de Bronce se trasladó al cafetal de Frías, situado en la vertiente sur de Sierra del Rosario, al norte de dicho poblado y de ahí el día 7, enterado del movimiento de una columna española de 600 hombres hacia San Cristóbal la interceptó en las cercanías del puente de Yaguasas.

Recordando un pasaje de la guerra expuesto por Miró Argenter, jefe del Estado Mayor de Maceo, el doctor Fidel Castro Ruz hace alusión a este combate en su alegato conocido como La Historia me Absolverá en su defensa ante los sucesos acaecidos el 26 de julio de 1953, cuando se produjo el asalto al Cuartel Moncada, de Santiago de Cuba y al cuartel Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo:

“La gente bisoña que mandaba Pedro Delgado, en su mayor parte provistos solamente de machetes, fue diezmada al echarse encima de los soldados españoles, de tal manera que no es exagerado afirmar que de cincuenta hombres cayeron la mitad. Atacaron a los españoles con los puños ¡sin pistolas, sin machetes, y sin cuchillos! (…), los muertos no presentaban ningún vestigio de haber empuñado armas, esos hombres, siguiendo a su esforzado jefe, el teniente coronel Pedro Delgado, habían obtenido la palma del heroísmo, se arrojaron sobre las bayonetas con las manos solas… Maceo se sintió conmovido, él tan acostumbrado a ver la muerte en todas las posiciones y aspectos, murmuró este panegírico: ¡“Yo nunca había visto eso, la gente novicia, que ataca inerme a los españoles, con el vaso de tomar agua por todo utensilio. Y yo que le daba el nombre de impedimenta! (…) ¡Así luchan los pueblos cuando quieren conquistar su libertad, les tiran piedras a los aviones y viran los tanques boca arriba!”.[2]

Monumento al combate de Río Hondo

De aquel acontecimiento, se conservan unas pequeñas ruinas en las inmediaciones de Río Hondo, que fueron propuestas a Monumento Nacional como orgullo de los sancristobalenses, de que el territorio fuera escenario de importantes acciones combativas de Antonio Maceo.

Referencias

Fuentes

  • /El Combate de Rio Hondo una lección inolvidable
  • Joven Club San Cristóbal
  • Castro Ruz, Fidel: La Historia me Absolverá. Instituto Cubano del Libro, La Habana 1973, Pág. 35-36.
  • Miró Argenter, José: Crónicas de la guerra. T.II, pág. 63-74. Ediciones Huracán, La Habana, 1970
  • Ramírez Jorge Freddy: Acciones combativas de Antonio Maceo en la llanura meridional de Pinar del Río, enero –febrero 1986. Pinar del Río 1996.
  • Santos Castillo, Miriam B. Artículo El Combate de Río Hondo: una lección inolvidable. Periódico El Historiador: Órgano oficial de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba, ISSN- 06-09 año IX No. 2 de febrero del 2009. Editora: Instituto de Historia de Cuba.