Dolores Paján
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Dolores Paján. Fue la primera mujer guantanamera que se sumó a la revolución cespedista.
Síntesis biográfica
Nacida en Tiguabos, fue una joven rebelde que defendió los ideales de libertad junto a su hermano.
Labor revolucionaria
La tiguabeña de 23 años, fue la primera mujer guantanamera que se sumó a la revolución iniciada por Céspedes.
Fue designada para incorporarse junto a su hermano Antonio a la impedimenta, al lado de las mujeres y de los hombres encargados de garantizar los aseguramientos de la retaguardia.
Al enterarse de tal disposición se presentó ante el capitán Burgos y le dijo con voz firme:
- “Yo no me he incorporado a la revolución para cocinar ni para buscar la leña de los fogones”.
Burgos impresionado por el carácter de la joven, le asignó la responsabilidad de abanderada de las fuerzas insurrectas. Con honor recibió la bandera de La Demajagua, símbolo de los patriotas de Oriente de 1868, llevando el estandarte rebelde en las primeras jornadas combativas por el valle y en el combate de Chapala.
Cuatro días después, Rondón tomó la determinación de atacar la protegida villa de Guantánamo, decisión que resultó desacertada al apreciar erróneamente las fuerzas y medios combativos del colonialismo y que culminó con una costosa derrota para las armas revolucionarias.
En medio del campo de batalla del enemigo observó cómo la valiente mambisa se mantuvo erguida en su caballo con la bandera rebelde de la Damajagua desplegada, mientras la artillería y fusilería española ocasionaban numerosas bajas en las filas cubanas.
Desde la pequeña altura de la finca La Vivita, escenario del primer ataque mambí a Guantánamo, con el estandarte insurreccional ondeando, confundida por momentos su figura por la humareda de la artillería peninsular, alentaba a mantenerse firmes en sus posiciones a los soldados de la revolución.
Aquella tarde del 27 de noviembre de 1868 los rebeldes fueron derrotados por la superioridad militar del enemigo, que causa la muerte por los disparos de los fusiles y la artillería a más de doscientos mambises, entre ellos el capitán Mánico González y a Antonio Paján, hermano de Dolores.
Muerte
Nunca se supo el destino final de la primera mambisa del Alto Oriente.
Es probable su caída en el combate del 27 de noviembre de 1868 al atacar la protegida villa de Guantánamo.
Los patriotas que sobrevivieron a aquella matanza, e incluso algunos enemigos, durante muchos años, en las tardes lluviosas del penúltimo mes del año, quisieron ver en la altura de La Vivita, en medio de la lluvia, la silueta fantasmal de una mujer en su cabalgadura con una bandera desplegada, que continuaba arengando a aquel ejército diezmado.
Fuente
- Mambisas Guantanameras, de Juan Sánchez Guerra, publicado en el 2000 por la Editorial El mar y la montaña, del Centro Provincial del Libro y la Literatura de Guantánamo.
