Educación Especial en Pilón

Escuela especial
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Institución con sede en Cuba
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Fundación:12 de octubre de 1983
País:Cuba
Sede:Granma
Dirección:Costa Sur Oriental

La Enseñanza especial en Pilón. Comienza a desarrollarse en Pilón a raíz de la necesidad de proporcionarle atención especializada a un grupo de seis niños diagnosticados por el CDO provincial que cursaban el nivel primario.

La educación especial comienza a desarrollarse en Pilón a raíz de la necesidad de proporcionarle atención especializada a un grupo de seis niños diagnosticados por el CDO provincial que cursaban el nivel primario.
La atención especializada de estos niños comienza a desplegarse con ahínco, el 12 de octubre de 1983 en un local de la escuela primaria Mártires del Mareón.

Para la preparación de personal profesional se ofrecieron cursos de maestras terapéuticas y de auxiliares pedagógicas en Bayamo, capital provincial. La deposición de Elsa Martínez Vázquez, Erlinda Aguilar e Isabel Rodríguez Virilla hace posible que ya la incipiente escuela cuente con un personal apto para brindar atención y apoyo a estos niños.

La incorporación de seis niños más, diagnosticados por el CDO de Niquero, condiciona la apertura de una nueva aula en el Seminternado Augusto César Sandino, dos en la escuela de oficio Ignacio Agramonte y Loynaz y la incorporación de otros maestros a la enseñanza especial.

En el año 1985 se abren nuevas aulas en locales de albergues pertenecientes al Central Azucarero del municipio, al frente de la maestra Idelisa Torres Leyva, fundadora y futura directora del centro.

La necesidad de reorganizar a los estudiantes de la enseñanza especial dispersos por los diferentes centros educativos de nivel primario y la incorporación de nuevos niños diagnosticados por el CDO, dio origen a la inauguración, en el curso escolar 90 – 91, de la escuela Especial en el municipio Pilón.
La inauguración de la escuela Especial trajo consigo el surgimiento, en el año 1996, de un equipo multidisciplinario del CDO, con el objetivo de diagnosticar e intervenir en los niños con necesidades educativas especiales que había en todo el territorio municipal. Este equipo ha desarrollando desde entonces, una eficiente labor en la preparación y la capacitación técnica de docentes que refuerzan la calidad del proceso educativo en esta enseñaza.

El mártir de la Escuela Especial

Una vez inaugurado el centro de enseñanza especial, se decide a propuesta de la directora buscar un nombre que identificara esta importante escuela. La lectura de un artículo localizado en el libro Tras las huellas de los Mártires, por Niuman Suárez, fiel colaborador del centro dio origen a una propuesta interesante. Después de escuchar varios criterios y llegar a un acuerdo se tomó la decisión de nombrar al centro: Urselia Díaz Báez.

Urselia Díaz Báez perteneció al grupo de mujeres firmes, decididas y consecuentes que sellaron con su vida la voluntad de vencer para lograr una existencia decorosa en una sociedad superior a la que le tocó vivir. Nació el 21 de febrero de 1939 en Guanabacoa, La Habana. Hija de padres seguidores de Antonio Guiteras y luchadores de la tiranía de Machado, Urselia manifestó desde temprana edad sus inquietudes políticas, su vocación por la justicia social y el odio contra el régimen sometido al imperialismo yanqui.

Ejemplo de rebeldía y juventud combatiente en se centro de estudios, Urselia participo en el Seminario “Martí Alumno Ejemplar”, en el año del Centenario del Apóstol. En varias ocasiones intervino en manifestaciones de protesta estudiantil contra los crímenes de la tiranía, junto con los compañeros del Instituto y los de la Universidad de la Habana. Repartió propaganda revolucionaria y recopiló medicinas para enviar a la Sierra Maestra o utilizarlas en la ciudad en caso necesario y participó en la organización de fiestas bailables entre los compañeros del curso, para recaudar fondos y costear los gastos de materiales con los cuales se confeccionaban, en su propia casa, botellas incendiarias utilizadas en sabotajes revolucionarios.

Dando vivas a Fidel, Urselia, interrumpió valientemente los cultos religiosos que se ofrecían en una iglesia católica, exhortando al pueblo allí presente a unirse a la lucha revolucionaria contra la tiranía. Trabajó incansablemente en la confección de banderas rojinegras que aparecieron en lugares céntricos y mantuvieron a los esbirros batistianos constantemente movilizados.
En septiembre de 1958 Urselia se dirigió al instituto donde tenía examen de Ciencias Naturales, para finalizar el cuarto año de su bachillerato, al salir le informaron de una reunión que tendría lugar en horas de la tarde. La madre temerosa de la acción que le fue encomendada esa tarde en la reunión, trató de convencerla para que participara en otros frentes de lucha menos riesgosos. La respuesta de Urselia fue firme y decidida: “madre no me pasará nada; pero no dejaré de ir aunque me cueste la vida”.

Esa noche del 3 de septiembre se producirían acciones simultáneas en varios cines de la capital. La misión de Urselia era colocar un petardo tipo reloj, en el Cine América a las nueve de la noche hora del tradicional cañonazo. El artefacto era transportado por la joven en los muslos. Debido a su fabricación casera resultaba peligroso. Pasadas las ocho se propuso cumplir el plan a cabalidad. Entró en el baño del cine y al manipular el artefacto dinamitero, este le explotó en las manos. Su cuerpo quedó totalmente destrozado.

La lucha contra la dictadura seguía cobrando vidas, ahora era una mujer, Urselia Díaz Báez, con solo dieciocho años. Urselia con solo esta edad ya había alcanzado la plena conciencia de sus deberes como miembro de acción del M-26-7. Hoy su nombre en Cuba es símbolo de lucha y victoria del pueblo cubano y la escuela de la Enseñanza Especial del municipio de Pilón se enorgullece de poner bien alto, el nombre de esta heroína caída en la insurrección contra el régimen de Batista.

Logros de la Educación Especial

Teniendo en cuenta las características especiales de los niños y las condiciones de vida de la mayoría de las familias; la escuela ha buscado alternativas para amenizar la estancia de los estudiantes en escuela. Como desarrollo de esas alternativas en la actualidad, se mantiene el vínculo del proceso docente educativo con actividades recreativas, deportivas y productivas. La celebración de cumpleaños colectivos con el apoyo y participación de familiares y vecinos de la comunidad es otra de las vías trazadas por el colectivo educativo del centro para estimular a los estudiantes.
En el 2005 el huracán Denis afectó seriamente a la escuela. A pesar de la insuficiencia de locales en la actualidad, el proceso educativo docente no ha tenido interrupción alguna. Este centro ha multiplicado sus esfuerzos y ha obtenido resultados satisfactorios como:

  • Estabilidad de la cobertura docente.
  • Compromiso político de los docentes para asumir las prioridades de la Enseñanza Especial.
  • Preparación de las reservas.
  • Incorporación de los docentes a la maestría en ciencia de la educación.
  • Participación de los estudiantes en concurso a nivel de base, municipio y provincia.
  • Participación de los estudiantes en círculos de interés a nivel municipal.
  • Incrementos de deportistas y mayor apoyo familiar en el movimiento de Olimpiadas Especiales y logros a nivel municipal y provincial.

Fuente

Colectivo de autores: Mujeres en Revolución, La Habana, 1974.