Félix Rojas Lahera
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Félix Rojas Lahera. Conocido como Felelo. Mártir del Ejército Rebelde, nacido en el municipio Gibara y muerto en combate en en Pestán.
Síntesis biográfica
Primeros años
Nació en Candelaria, municipio Gibara, el 28 de enero de 1936, hijo de Félix y Fidelina, con 6 hermanos, 3 varones y 3 hembras.
Desde pequeño se caracterizó por ser muy amistoso, sencillo, amoroso y preocupado por su familia. Era alto, delgado, ojos verdes, pelo rubio, piel blanca y carácter muy alegre.
Sus primeras letras las aprendió en la escuela José Martí de la localidad. A los 14 años interrumpe sus estudios para incorporarse al trabajo en las labores agrícolas por 40 ó 60 centavos diarios.
Más tarde se traslada a Lewington y comienza trabajar en comercio, en el almacén de Gervacio Galván, ganando $ 48.00 mensuales. Le gustaba practicar el béisbol, leer mucho y escribir poemas, además de salir de casería en el tiempo libre.
Trayectoria revolucionaria
Se incorpora al Movimiento 26 de Julio a finales de 1956, entre las actividades estaban vender bonos del Movimiento, tratar de convencer a la gente para que se incorporara, recoger informes, buscar información y practicar el tiro.
Participó en las acciones en apoyo a la Huelga del 9 de Abril. Se incorpora a las filas del Ejército Rebelde, en el combate contra el enemigo.
Al incorporarse a la lucha le envió a su madre la siguiente carta:
Madre mía, no se como empesar estas líneas que se que te han de causar mucho disgusto pero quiero pedirte que seas fuerte y que tengas valor, hoy 31 de marzo nos alzamos en armas un grupo de cubanos que amamos la libertad, quizás no muera, porque voy a pelear, pero estaré tranquilo si te veo a ti contenta y feliz por haber tenido un hijo que supo cumplir con su deber.
Espero que sepas comprender mi situación y que no sufras, cuídate mucho y que Dios te de mucha salud y suerte.
Mamá tuve que pensar mucho esto antes de hacerlo, comprendo que ahora que papá está enfermo es cuando yo más falta le hago, pero el derecho a ser libre me obliga a esto.
Te besa tu hijo que te recordara siempre.Muerte
El 16 de mayo de 1958, en Pestán es herido, cuando vio caer a Reimundo Verdecia se puso en pie y dijo:
Otra bala enemiga terminó de cegar su joven vida. Los casquitos lo despojan de los bienes, lo entierran en ese mismo lugar.
Al triunfar la Revolución son trasladado sus restos a Cantimplora, su tierra natal.