Ferrocarril en Matanzas

Ferrocarril de Matanzas
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Via ferrea de Provincia MatanzasBandera de Cuba Cuba
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TipoVia ferrea
OrientaciónEste a oeste

Ferrocarril de Matanzas. El ferrocarril actuó como un elemento centralizador de la producción, en tanto a través de él se unificaron los principales centros productivos de la jurisdicción, tornando más fácil la comunicación entre los puntos industriales (ingenios) y las cada vez mas extensas plantaciones y contribuyendo con ello a viabilizar la comercialización del producto resultante. No debe olvidarse al respecto que la escasez y pobreza de las vías de comunicación era uno de los factores que más laceraban el pleno crecimiento de la agricultura.

Historia

En 1839 el Gobierno General había concedido el permiso para la construcción del ferrocarril matancero; iniciándose la obra en los primeros meses de 1842 y concluyéndose el primer tramo (de 5 millas) en agosto de 1843. Entonces la línea sólo llegaba hasta el puente de Buey Vaca y fue cubierta por la locomotora La Junta, que actualmente se conserva en la Estación Central de Ferrocarriles de La Habana.

Entre los accionistas del Ferrocarril de Matanzas a Sabanilla -así se llamó este primer ferrocarril- se contaban varios hacendados con importantes propiedades en la jurisdicción, entre otros los Alfonso, los Aldama y Francisco de la O García quien fue su primer presidente. Esto explica porqué las primeras líneas se construyeron muy próximas a sus ingenios y demás propiedades.

El trazado no se hizo en línea recta con Sabanilla, sino que se desvió al este con el objetivo de alcanzar el caserío y partido de Guanábana por constituir el mismo uno de los más descollantes centros azucareros de la jurisdicción. A este punto llegó el ferrocarril el 22 de octubre de 1843 coincidiendo con los preparativos de la zafra de ese año.

¨La Junta¨, una de las locomotoras más antiguas, la más original y mejor conservada de América. Una verdadera reliquia de gran valor para la historia de la tecnología ferroviaria.

El 1 de noviembre de 1843 quedó inaugurado el camino de hierro que unía a Matanzas con el poblado de Guanábana. La locomotora que rindió ese primer viaje y que se le impuso el nombre de ¨La Junta¨. Al siguiente año la mencionada compañía Cárdenas, prolongó su ramal a Bemba hasta el poblado de Montalvo (hoy Navajas). La competencia que había comenzado dio magníficos frutos ya que en el año 1849, el 24 de mayo la compañía de Cárdenas obtenía autorización para un ramal de Bemba a Agüica, llegando el primer tren a Perico en diciembre de 1850, a Nueva Bermeja (hoy Colón) en febrero de 1851 y a Agüica en diciembre de ese mismo año.

También el Ferrocarril de Matanzas no perdía su tiempo, pues en diciembre de 1837 obtuvo de igual modo la concesión de un ramal desde Navajas a Jagüey Grande, inaugurándose el primer tramo hasta Tramojos (hoy Pedroso) en febrero de 1859 llegando el tren a Jagüey el 10 de julio de 1878. Esta línea fue prolongada hasta Murga en Octubre de 1893, cuando ya se habían unido Unión y Guareiras en 1870. Las empresas de los Ferrocarriles de Matanzas a Jovellanos no fue sola la que inició y continuó los trabajos de línea ferrea, fueron varias empresas las que contribuyeron a dejar instalado ese medio de comunicación exigido por los adelantos.

Puentes de ferrocarriles entre Banagüises y San José de los Ramos.

La construcción de esta línea había sido asumida por el ingeniero norteamericano Alfred Kruger desde septiembre de 1841, cuando fuera contratado por los hacendados matanceros que habían conformado en sociedad anónima la Empresa del Camino de Hierro de la Sabanilla. Kruger había dirigido antes la línea de La Habana a Güines, la primera erigida en todo el imperio español. Su presencia en Matanzas ratificaba la solidez de los capitales que se movían en la jurisdicción y la importancia que aquella clase social le concedía a la implantación del ferrocarril como vía idónea para acelerar el crecimiento económico y con este su poderío, todo lo cual condujo a que fuera precisamente en esta jurisdicción -conjuntamente con la colombina y la cardenense- donde la creación de líneas de ferrocarril tomara especial auge en correspondencia con su rol de región azucarera por excelencia.

En 1845 se concluyó toda la vía y se inauguró en la Calzada de Tirry de esta ciudad la Estación de Sabanilla realizándose el primer viaje a este partido el 20 de abril. El trayecto fue recorrido por un tren se pasajeros en medio de los festejos que motivó la inauguración del ramal. En cuanto a este particular el nacimiento del camino de hierro no quedó excluido de las contradicciones sociales y los prejuicios raciales de la época, pues en el mismo Reglamento Interior del Ferrocarril de Matanzas a la Sabanilla del Encomendador quedó establecido que no se admitirían "personas de color" en los coches de primera clase, sino únicamente en los de segunda o tercera.

Ese mismo año se inicia la construcción del Ferrocarril de Matanzas a Coliseo, concluido en 1848 e inaugurado oficialmente el primero de junio del mismo año. En la construcción de esta vía estuvieron implicados los ricos hacendados Simón Ximeno, Cosme de la Torriente y Antonio García Oña, ex-gobernador de Matanzas, quienes tenían propiedades en distintos puntos de la jurisdicción y específicamente en las tierras por donde debía pasar el ferrocarril.

Al año siguiente, en 1849 se efectúan los empalmes del Ferrocarril Matanzas- Sabanilla con el de Cárdenas y con el de La Habana en Unión de Reyes mejorando considerablemente la vinculación de Matanzas con dos de las zonas económicas más importantes de la Isla.

Al finalizar la década, Matanzas está atravesada en su mayor parte por el ferrocarril y ella es una de las cinco localidades cubanas -todas en el Departamento Occidental- a cuyos puertos llega el avanzado medio de transporte. Las restantes son La Habana, Batabanó, Cárdenas y Júcaro.

Unos años más tarde, en 1856, se realizan las primeras gestiones para construir un ferrocarril que debía unir directamente las ciudades de La Habana y Matanzas. Así en 1857, en medio del auge inversionista que vivía el país, quedó constituida la sociedad del Ferrocarril de la Bahía de La Habana a Matanzas, aprobada por Real Orden en 1858. La nueva línea se extendería entre esta ciudad y Regla y tenía entre sus objetivos atraer hacia La Habana -almacenes de Regla- una parte importante del azúcar que se almacenaba y exportaba en Matanzas y comunicar de manera más rápida y directa las ciudades habanera y matancera donde estaban ubicadolos dos puertos principales de la Isla. Este ferrocarril comenzó a funcionar en 1861.

También en 1857 se inicia la construcción del Ferrocarril de Güines a Matanzas que el 29 de septiembre de 1859 inaugura su primera sección de Güines hasta Corral Nuevo y que fue concluido totalmente en 1860. La inauguración oficial se realizó el 14 de octubre con una fiesta auspiciada por Miguel Aldama en el Liceo y que fue presidida por el Capitán General Francisco Serrano. El Paradero de San Luis, en la Plaza de Villanueva fue la estación terminal de este ferrocarril que entre otros partidos pasaba por Ceiba Mocha.

Esta empresa a la que nos referimos tuvo a su cargo la siguiente labor: El primer tramo de Coliseo a Ranchuelo se inauguró el 23 de mayo de 1858 y de este a Jovellanos el 4 de septiembre de 1859. La línea entre Guanábana y Coliseo fue inaugurada el 3 de febrero de 1847, quedando estas líneas unidas entre Guanábana y Matanzas el 26 de febrero de 1861 por el Ferrocarril de Bahía. Tres años después de haberse inaugurado en la ciudad de La Habana el primer Ferrocarril, o sea diez años antes que en la propia Metrópoli se corrió el primer tren en Cárdenas primero de los pueblos matanceros que tuvo el camino de hierro como se denominaba entonces.

Para entonces la llamada zona occidental azucarera (Güines, Alacranes, Matanzas, Colón y Cárdenas) utilizaba a su favor el ferrocarril y en el caso específico de Matanzas la comunicación es incesante tanto por tierra como por mar.

Casi a la par de la realización de estas vías férreas se fueron inaugurando las estaciones telegráficas que contribuyeron también a hacer más rápida y eficaz la comunicación. En 1852 se estableció la primera entre esta ciudad, Unión de Reyes y La Habana a través del ferrocarril y en 1862 comenzó a funcionar la del Ferrocarril de la Bahía de La Habana a Matanzas.

Terminal Matanzas

"The Matanzas Terminal Railroad", ferrocarril de servicio público fue inaugurado el día 3 de julio de 1911, tiene sus líneas enlazadas con los ferrocarriles unidos de la Habana y con el Ferrocarril Cubano de Hershey, con los cuales tiene establecido un tráfico de interlineas, así como con todos los ferrocarriles de servicio público de Cuba. Su organización toda , desde su principio fue obra del Administrador General el señor Ernesto Prieto Figueroa. La terminal de Matanzas realizaba la distribución entre los diferentes almacenes de depósito, muelles, y refinerías, de todos los azúcares que se consignaban en Matanzas.

La Empresa tenía 20 kilómetros de carriles dentro de la municipalidad de Matanzas, extendidas en diferentes direcciones, con las que proporcionaba grandes comodidades de comercio e industrias en General, especialmente aquellos donde los carros de ferrocarril se situaban al costado de sus propios almacenes. El cruce del Río San Juan lo verificaban sus trenes por medio de un puente giratorio, único de su clase que existía en Cuba. Antes que existiese este ferrocarril de la ciudad de Matanzas era una ciudad dormida , la ruina, la calma, eran sus más exponentes características, el silbato de las locomotoras, la despertó y se vio fortalecida con la recepción de tres millones de sacos de azúcar por zafra y en actividad por el gran movimiento existente de mieles, alcoholes, petróleo, habanos, carbón, maquinarias y cargas generales que proporcionaron en su manipulación el sustento de millares de seres.

Línea electrificada

Tren electrico de la Habana a Matanzas

Además, existe la línea Casablanca-Hershey-Matanzas, la única electrificada del país y que tiene un carácter histórico. Atraviesa regiones de paisajes de gran belleza por lo que es una buena opción en un viaje de La Habana a Matanzas o viceversa. Casablanca es un pueblo que está en la margen este de la Bahía de La Habana y al que se puede llegar, además de por carretera, por un ferry que atraviesa la bahía y que es también el camino mas corto y pintoresco. Es conocido como el tren de Hershey o el tren de Casablanca y tiene 5 salidas diarias de Casablanca y las mismas de Matanzas.

Horarios de salidas de Casablanca y Matanzas:

  • Casablanca 04:10 08:32 12:05 16:30 21:00 -Matanzas 04:15 08:30 12:30 16:23 21:00
  • Hershey 06:05 09:54 14:08 18:32 22:38 -Hershey 06:08 09:54 14:08 18:28 22:38
  • Matanzas 07:38 11:14 15:41 20:05 00:10 -Casablanca 07:41 11:31 16:05 20:01 00:11
Tren electrico de la Habana a Matanzas

Fuentes