Francisca Eduviges Herrera Hernández
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Francisca Eduviges Herrera Hernández. Fue colaboradora en la célula del M-26-7 en Isla de Pinos y representante del Partido Ortodoxo.
Primeros años
Francisca Eduviges nació el 17 de septiembre de 1905, en el Poblado de Santa Fe, en el seno de una familia humilde. Allí permaneció durante los primeros años de su vida, hasta que pasó a vivir en el barrio Sierra Caballos; en una casita de madera ubicada muy cerca al río Sierra de Casas, donde se ganó el respeto y el cariño de todos los miembros de aquella comunidad, la mayoría eran trabajadores vinculados al mar. Día a día frente a su casa en la Vigía, Santa Fe, esperaba el carretón alado por un caballo con una campana que melódicamente sonaba, tin tan. Fueron tantas las veces, que al oír ese sonido le gritaba a su mamá, ahí viene Tin Tan. El carbonero, dueño de la carreta le decía, Tin Tan, eres tú. Desde entonces, fue hasta su muerte fue conocida como Tin Tan.
Fue una madre muy preocupada por la educación de sus hijos y la situación de su país.
Labor revolucionaria
La popularidad alcanzada por la labor hecha en beneficio del lugar, la convirtieron en representante del Partido Ortodoxo en la Isla de Pinos, llegó a ser Presidenta de este partido por el barrio de Sierra Caballos durante la presidencia de Eduardo Chivas. Más tarde se creó en Nueva Gerona la célula del Movimiento Revolucionario 26 de julio y aparece entre las mujeres colaboradoras de esa organización. El 13 de octubre de 1953 llegaron al Presidio Modelo los jóvenes de la Generación del Centenario, sancionados por haber participado en el asalto a los cuarteles Moncada de Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes de Bayamo, entre quienes se encontraba el combatiente Juan Almeida Bosque, hijo de Rosario y Juan residentes en el reparto Poey, en la Habana. La casa de Eduviges sirvió de albergue para los hermanos de Almeida cuando venían a la Isla. El 15 de mayo de 1955, fecha de la excarcelación de los Moncadista, el joven revolucionario se dirigió a la casa de Tin Tan, junto a sus familiares, y allí se mantuvieron hasta la hora de partir hacia La Habana en el Barco Pinero, en el que también iba Fidel y el resto de sus compañeros liberados. La familia conserva aún las fotos de Tin Tan junto a Almeida, con quien se encontraba cada vez que el Comandante de la Revolución iba a Isla de Pinos.
Muerte
Francisca Eduviges hasta el último momento de su vida se mantuvo fiel a sus principios revolucionarios. Allí, donde antes vivió, sus hijos y nietos conservan sus recuerdos que forman parte de la memoria histórica del pueblo pinero. Fue cederista y federada destacada Murió el 25 de abril de 1981, entre las ofrendas florales que la acompañaron se encontraba la enviada por Juan Almeida Bosque.
Fuente
- Juan Colina La Rosa. Historiador de la Isla de la Juventud
