Francisco Estrampes

Francisco Estrampes
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NombreD’Strampes Gómez, Francisco José
Nacimiento4 de diciembre de 1827
villa de Matanzas,
provincia de Matanzas,
capitanía general de Cuba,
Reino de España Bandera de España
Fallecimiento31 de marzo de 1855 (27 años)
castillo de La Punta,
ciudad de La Habana,
capitanía general de Cuba,
Reino de España Bandera de España
Causa de la muerteejecución mediante tortura (garrote vil)
Nacionalidadcubana
Ciudadaníacubana

Francisco Estrampes Gómez (Matanzas, 4 de diciembre de 1827 - La Habana, 31 de marzo de 1855) fue un maestro y periodista cubano, colaborador con la causa independentista cubana.[1]

Síntesis biográfica

Labor independentista

Desde joven conspiraba con ideales separatistas en la ciudad de La Habana.[2] Cuando Narciso López desembarcó en Cuba, por segunda vez, el 12 de agosto de 1851, Estrampes acudió a su encuentro; pero fue detenido por los españoles en el trayecto.[3]

Después de ser puesto en libertad fue uno de los organizadores de la conspiración de Vuelta Abajo, en 1852. Al ser descubierto por las autoridades, huyó hacia Estados Unidos.

Frustrada expedición a Cuba

Artículo principal: Expedición naval de Francisco Estrampes (1854)

Encomendado por la Junta Cubana en Estados Unidos, aceptó el plan de dirigirse a la provincia de Oriente para introducir armas y promover un alzamiento de la jurisdicción de Baracoa. Con ese objetivo zarpó de Nueva York, a comienzos de octubre de 1854, al frente de una expedición con dos barcos tipo pailebote nombrados John G. White y Charles T. Smith.[4]

Ambas naves arribaron a la zona de Baracoa, en la provincia de Oriente, del 21 al 24 de octubre de 1854. En la primera de ellas desembarcó Estrampes.

La mayor parte del armamento fue enterrado en la finca Jaitesico, cerca de la costa; pero las indiscreciones o quizás la traición de los elementos con los que contactaron, hicieron que la acción quedara al descubierto y los seis expedicionarios fueran capturados.[5]

Ejecución

Estrampes fue trasladado a la ciudad de La Habana y condenado a muerte, con 27 años de edad.

El 31 de marzo de 1855, en la explanada del castillo de La Punta, Estrampes fue ejecutado mediante la dolorosa tortura del garrote vil: fue atado a una silla fija al piso y se le fijó la cabeza mediante una prensa, y por detrás se le introdujo por la nuca un gran perno de hierro que le rompió las vértebras ―de la manera más lenta posible, para aumentar el sufrimiento― y finalmente seccionó la médula, lo que interrumpió las funciones respiratorias; tras varios minutos de dolorosa agonía, Estrampes murió asfixiado.[6]

Fuentes