Guanaco

Guanaco
Información sobre la plantilla
Guanaco3.jpg
Presenta orificios nasales obturables, la cola mide unos 25 cm y siempre es llevada en posición erecta. El pelaje es espeso y rizado, de color castaño rojizo sobre el lomo y blanco en el vientre. Su lana es muy gruesa. Vive en rebaños a grandes altitudes, en América del Sur, y se alimenta de hierbas y musgos. Se lo caza por su carne y por su piel.
Clasificación Científica
Nombre científicoLama guanicoe
Reino:Animalia
Familia:Ciconiforme de la familia Ardeidae
Hábitat:América meridional

Guanaco (Lama guanicoe). Es uno de los mayores y más importantes mamíferos de América meridional. Tiene un tamaño semejante al del ciervo europeo y su aspecto recuerda al de la vicuña.

Descripción

Estos animales tienen los ojos grandes y vivaces, de pupila transversal y en los párpados, sobre todo el inferior, adornados por largas pestañas. Las patas son largas y delgadas; los dedos, hundidos hasta su mitad acaban en pequeños pesuños incompletos, estrechos y agudos. Las plantas de los pies son grandes y callosas, faltando en las articulaciones de los pies delanteros las callosidades que casi siempre están presentes en los camellos. La cola es muy corta, cubierta de pelos espesos en la parte superior y casi desnuda en la inferior, y está siempre erguida. El cuerpo está cubierto de un pelaje bastante largo, espeso y rizado, formado por una lanilla corta y fina y por pelos más largos, delgados y cerdosos. Ciertas zonas de los flancos carecen de pelaje y sirven de ventilación para eliminar el exceso de calor. Tiene el pelaje castaño rojizo con el vientre blancuzco. La diferencia que existe en el aspecto de los ejemplares de ambos sexos es que la hembra es más pequeña que el macho.

Distribución

La distribución del guanaco es bastante extensa gracias a que puede soportar la ausencia de agua durante determinado tiempo. Vive en la zona andina de Perú y Bolivia, extendiéndose por Chile hasta la costa del Pacífico, entre el desierto de Atacama y la provincia de Colchagua, y también por el noroeste de Argentina, a través de la Pampa hasta las sierras del sur de Buenos Aires, siguiendo por toda la Patagonia extra andina, Tierra del Fuego y la isla Navarino. Prefiere vivir en la alta montaña, aunque a veces se lo encuentra en la llanura, especialmente en la de la Patagonia meridional.

Alimentación

La alimentación del guanaco es diversa, lo que le permite adaptarse a medios diferentes. Ingiere hierbas jugosas y musgos.

Reproducción

La reproducción es estacional, correspondiendo la época de celo a los meses de noviembre y diciembre para los guanacos de la Patagonia y comienzo del verano para los del norte; entonces los machos luchan encarnizadamente, los rivales se precipitan unos contra otros con gran violencia y dando estridentes gritos: se muerden, se dan patadas e intentan despeñarse mutuamente por los precipicios.
La gestación dura once meses (entre 345 y 360 días), al término de los cuales la hembra da a luz un pequeño que pesa entre 8 y 15 Kg, nace perfectamente formado, cubierto de pelo y con los ojos abiertos. Casi todas las crías nacen en la mañana, lo que permite que en la tarde estén secas y puedan afrontar las tormentas con granizo y el frío de la noche. La madre lo amamanta durante cuatro meses y lo cuida en forma atenta, manteniéndolo junto a ella hasta que es adulto. La hembra puede dar a luz a su cría a partir de los 2 años de edad.

Comportamiento

Es sociable, formando rebaños numerosos. La mayoría de los guanacos viven en harenes y el resto en grupos de machos célibes formados por adultos y adolescentes. La hembra abandona con facilidad el harén para integrar grupos unisexuales. Los jóvenes no son expulsados hasta la edad de 13 a 15 meses. Por lo tanto un harén incluye comúnmente a las crías de ese año y los jóvenes del año anterior.
Cuando dos guanacos se encuentran luego de haber estado temporalmente separados se reconocen y comunican uniendo sus hocicos y moviendo la cola horizontalmente.
El guanaco, como los demás camélidos tienen la extraña costumbre de deponer sus excrementos siempre en el mismo lugar formando montículos de cierto tamaño. Los indios recogen este estiércol seco para emplearlo como combustible.
Los movimientos del guanaco son rápidos y vivos, es un inmejorable escalador: trepa por las pendientes más abruptas y por las faldas montañosas más inclinadas con una ligereza asombrosa; sin embargo en la llanura es fácil alcanzar un rebaño si el perseguidor monta un buencaballo, en cambio le resulta difícil a los perros.
Cuando el guanaco reposa rumia en una especia de duermevela; se apoya sobre el pecho y las patas, como el camello y se acurruca y levanta igual que él.
En general se trata de animales silvestres y en extremo prudentes. Vigilan cuanto ocurre a su alrededor, en una extensa área, en caso de peligro el grupo se mantiene unido hasta el momento en que la amenaza es muy grande y deben huir precipitadamente. Cuando han sido heridos, los guanacos se dirigen al río más próximo, para morir en sus orillas.
De sus semejantes, el guanaco se defiende con coces y mordiscos, pero ante los adversarios más peligrosos huye sin poner resistencia. Cuando se acostumbra a la presencia del hombre y de los animales domésticos se hace más audaz, ataca decididamente al adversario, intenta morderlo o cocearlo y emplea por último un método defensivo común a los animales de este grupo: permite que el enemigo se le acerque, baja las orejas y escupe a la cara su saliva o las hierbas que tenga en ese momento en la boca.

El guanaco y los seres humanos

El hombre ha sido y es aún el peor enemigo de los guanacos. De sus otros perseguidores el animal logra escapar gracias a su gran velocidad, pudiendo alcanzar una velocidad de 50 km/h. En América se cazan los guanacos para aprovechar la carne y sobre todo, el cuero; viéndose reducido notablemente el número de ejemplares.
Los guanacos se domestican tanto en zonas de montaña como en la llanura. Mientras son jóvenes se muestran confiados, mansos y cariñosos pero con la edad se vuelven más ariscos y rebeldes, acabando por perder toda buena disposición hacia el hombre. Los individuos mantenidos en cautividad comen heno, pan y grano. Se adaptan muy bien al medio, incluso en Europa donde se pueden reproducir sin dificultad.

Fuente