Historia del municipio Caibarién (Provincia de Villa Clara)


Historia del municipio Caibarién (Provincia de Vila Clara)
Información sobre la plantilla
ESCUDO CAIBARIEN.jpg
Escudo de Caibarién
Cronología
Período aborigen
Período colonial
Guerras de Independencia
Período Neocolonial
La república neocolonial (1899-1952)
Lucha insurreccional
Período Revolucionario

Historia del municipio Caibarién (Provincia de Villa Clara). Caibarien, ciudad cabecera del municipio de igual nombre, en la Provincia de Villa Clara, Cuba. En el municipio conocido como la Villa Blanca, existió presencia de aborígenes desde preagroalfareros tempranos hasta agroalfareros. Durante muchos años, fue una hacienda de la villa de San Juan de los Remedios hasta su fundación como poblado el 26 de octubre de 1832. Su participación fue activa solo en la última gesta, durante la Guerra Necesaria desplegaron acciones combativas y actividades en la clandestinidad con la fundación de clubes revolucionarios. Como resultado de la crisis de la democracia burguesa republicana y en contra de la tiranía batistiana, la población apoyo la lucha insurreccional desde el Movimiento 26 de Julio y el Partido Socialista Popular. En el período revolucionario, el territorio se destacó en el proceso de nacionalizaciones de las diferentes instalaciones privadas existentes. Históricamente, el municipio tiene una fuerte relación economía y mar, manteniéndose desde su fundación como una de sus principales actividades productivas: la pesca. En la actualidad, se le añade el desarrollo del turismo en la cayería norte caibarienense.

Período aborigen

En el territorio que en la actualidad comprende el municipio de Caibarién , se asentaron aborígenes de diferentes grupos y en distintas fases de desarrollo que abarca desde preagroalfareros tempranos hasta agroalfareros. Estudiosos del tema defienden la hipótesis de la llegada de hombres procedentes desde el sur de La Florida utilizando como puente Las Bahamas. Idea muy acertada si se tiene en cuenta que la presencia humana en la isla data de seis milenios de antigüedad, época en la que fluctuaciones del nivel del mar dejaron al descubierto áreas de tierra que actualmente se hayan sumergidas; de manera que, la costa norte de Cuba estaba separada de la Florida por un conjunto de islas que les permitieron a estos individuos trasladarse en embarcaciones de estructuras rústicas. Se conoce, además, del arribo de aborígenes desde otras regiones del país como Yaguajay; por las condiciones geográficas.

De acuerdo a las diferentes periodizaciones, en Caibarién se encontraron huellas de la presencia de todas las culturas aborígenes que habitaron la isla, a excepción de los grupos agroalfareros más tardíos, conocidos como Taínos que se asentaron solamente en la región oriental del país. Los grupos preagroalfareros elaboraron sus instrumentos de trabajo principalmente a partir de la concha de los grandes moluscos marinos, conocidos como "Cobos", realizando sus actividades económicas estrechamente relacionadas con el mar. Mientras que en los agroalfareros son muy comunes las hachas petaloides, los burenes y la selección de tierras fértiles para sus cultivos.

Independiente a las diferencias con respecto a las actividades productivas que desempeñaban, también se pueden distinguir en cuanto a características físicas propias de cada grupo. Por ejemplo, los primeros fueron de estatura mediana, de complexión fuerte, los cráneos pequeños y normales (se refiere en este caso a que no practicaban ninguna deformación artificial), las piezas dentarias se encuentran con el típico desgaste coronario ubicados en maxilares robustos. Mientras que los segundos, se ubican dentro de la población americana de más baja estatura, con un promedio de 1,58 m para los individuos masculinos y 1,48 m para los femeninos, un aspecto muy importante para este grupo lo constituye la deformación artificial craneana, siendo la más típica para Cuba la fronto - occipital tabular oblicua, que hacía que el individuo pareciera de cráneo corto y ancho, esta deformación se practicaba desde la infancia, a todos los miembros del grupo y su práctica desapareció a raíz de la conquista.

Todos estos aborígenes fueron expuestos a una explotación fuerte por los españoles, lo que condujo a su extinción. A pesar de su temprana desaparición, legaron al territorio parte de su cultura toponímica como Yagüey, Managüimba, Guajabana, Guaní, Jiquibú, etc., que no hubiese sido posible su perdurabilidad en el tiempo sin un contacto directo entre colonizadores y colonizados.

Período Colonial

Planos de Remedios y Caibarién elaborado por Estratón Bausá, quien realizara el trazado urbano de "La Villa Blanca".

Caibarién fue durante muchos años una hacienda de la villa de San Juan de los Remedios o Santa Cruz del Cayo, en varias ocasiones visitada por distintas personalidades con el fin de explorar la zona. Durante el siglo XVI presentaba una población estable dedicada a la agricultura de subsistencia y a la ganadería, actividades que permitieron los suministros de abastecimiento a las tropas españolas que posteriormente conquistaron la Florida. Entre las principales haciendas estaban Yagüey y Guaní, de cuyos bosques se talaban maderas preciosas que eran enviadas a Europa, donde tenían una gran demanda.

Entre los años 1650 a 1713 permaneció la hacienda completamente abandonada, cubierta de mangles y bosques. Aunque, según el historiador remediano José A. Martínez Fortún en el 1713 todavía habitaban en la zona numerosos aborígenes, quienes fueron desapareciendo paulatinamente a causa de los rudos métodos utilizados por los colonizadores españoles. Este abandono se debió, en gran medida, al terror que sentían los pobladores ante los ataques de corsarios y piratas que sufrían las distintas zonas costeras del territorio nacional. [1]

Una vez rehabilitado el puerto, era preciso la creación de un centro poblacional que facilitara el desarrollo comercial de la zona. Así, en octubre de 1831 comienzan las gestiones por la fundación de la villa de la mano de Don Narciso de Justa asesorado por Don Braulio de Gavilán.

Parroquial Mayor "Inmaculada Concepción" de Caibarién.

Quedó fundado definitivamente el poblado de Caibarién el 26 de octubre de 1832, en la ensenada de su nombre, fueron aceptadas las donaciones y se levantó acta en la junta de población. Además, se acordó la construcción de una calzada desde el punto de embarque hasta San Juan de los Remedios. Entre los fundadores del pueblo tenemos a los señores Narciso José de Justa, Braulio Gavilán, Esteban Bauzá, Domingo García Loyola, Miguel Coloma, Pedro de la Rosa, Francisco de la Rosa, Juan de Córdova, Hipólito Escobar, la familia de Cabrera y otros más hasta el número de 40. [2]

De manera paralela al desarrollo de la economía, en la Villa Blanca, se dio un incremento poblacional y urbanístico. La vida económica de la población, a inicios del siglo XIX, giraba alrededor de las exportaciones de azúcar a través del puerto, que era de poco calado. Sin embargo, esto no implicó el cese de las actividades comerciales; se utilizaron pequeños buques de vapor que permitían la comunicación con otros puertos de la costa norte como La Habana, Matanzas, Puerto Príncipe, los Estados Unidos y la Isla Providencia (Bahamas). [3] Unido a ello, se comenzó de forma acelerada la construcción del ferrocarril, que permitiera el intercambio comercial por vía terrestre, el primer tramo construido fue hacia Remedios, luego se extendió a otras zonas como Zuluetas.

Guerras de Independencia

Los crímenes, torturas, persecuciones, destierros y maltratos estuvieron muy presentes en Caibarién , durante toda la contienda emancipadora, cometidos esencialmente por el Cuerpo de Voluntarios. Don Rafael Falero y Don Francisco María Jiménez fueron víctimas de las crueldades de los voluntarios y son considerados los primeros mártires de la localidad, al ser asesinados de manera injusta sin previo juicio [4]. En la jurisdicción se levantaron en armas alrededor de 30 hombres en la zona de Mayajigua. Allí se incorpora un joven caibarienense que con solo 22 años de edad dio su paso al frente, siguiendo el ejemplo de su padre y dos de sus hermanos, Jesús Crespo Moreno, él participó en alrededor de una treintena de combates entre ellos Palo Seco, Las Guásimas, Naranjo, Jacinto. También lo hizo Carlos Roloff, que si bien, no era originario de la zona, fue allí donde se inició en las labores conspirativas contra España.

Al valorar la composición social de la población de la villa en esta etapa, integrada en su mayoría por comerciantes, algunos pequeños industriales y pescadores, se puede entender la escasa participación de este territorio en el conflicto beligerante. No existía un interés generalizado ni en lograr la independencia, ni en abolir la esclavitud. Resultado, por una parte, a las actividades económicas que se practicaban en la región; y por otra, a la escasa masa de negros esclavos presentes en la misma (En la localidad el porciento de la población blanca en 1879 era de 76,2 % y el de la población negra de 8,6%). La economía caibarienense no se vio afectada por la guerra, pues su base era esencialmente comercial e industrial y el territorio no fue escenario directamente de la contienda, como sucedió en otras regiones aledañas como la jurisdicción remediana.

Producto de la apertura que sucedió a la deposición de las armas, se prosiguió a la creación de partidos políticos en todo el país, proceso del que Caibarién no estuvo ajeno. De igual forma, se crearon el Partido Liberal y el Unión Constitucional, resultando el primero vencedor en las elecciones con la figura de Hipólito Escobar al frente. Las pugnas entre estos partidos marcaron su devenir durante los años subsiguientes, si bien los liberales tenían objetivos menos conservadores, ninguno de ellos planteaba la solución al problema nacional.

Las ansias independentistas de los cubanos no cejaron, al contrario, a tan solo un año de la capitulación de la guerra grande, ya se daba inicio a otro intento por liberar a la isla del dominio colonial español. De manera similar a lo sucedido en la Guerra de los Diez Años se desarrollaron los acontecimientos referentes a la Guerra Chiquita. Si bien en noviembre se apreció alguna agitación en la villa, producto del estallido de la guerra, no se produjeron combates de relevancia en la zona, ni hubo una fuerte representación de residentes de Caibarién en el conflicto. Mientras que en la cercana Remedios se alzó el brigadier Francisco Carrillo con alrededor de treinta o cuarenta hombres (cifra que se incrementó a 200 luego de darle la libertad a un número de esclavos). En apoyo al alzamiento en Santiago de Cuba, de la Villa Blanca se incorporó el veterano sargento José María Falero.

Escultura dedicada al Apóstol en el paseo José Martí en Caibarién.

Para la década de 1890 la situación en el país se hacía más compleja y los independentistas cubanos, con José Martí al frente, organizaban el movimiento tanto fuera como dentro de Cuba, con el fin de reiniciar las luchas por la libertad del territorio nacional. En Caibarién se conspiraba en la clandestinidad, se destacan los nombres: Federico Malgrat, Antonio Gavilán y María Escobar Laredo y otros con ideas separatistas. Ellos obedecieron a las orientaciones del Partido Revolucionario Cubano de aglutinar a los simpatizantes de la independencia y fundar clubes con esta idea durante la Guerra Necesaria.

La Guerra Necesaria, tuvo un mayor impacto en el país; pensada, organizada y ejecutada con mejor precisión, logró que regiones antes desentendidas se vincularan a la gesta independentista. En el caso particular de la Villa Blanca, se aprecia un incremento de la participación no solo de combatientes, sino también de contribuyentes que realizaron aportes de distintas maneras. Los revolucionarios caibarienenses apoyaron con sus esfuerzos a los combatientes en armas. Confeccionaban ropas, recogían dinero, víveres y medicinas, conseguían pertrechos bélicos para surtir a las tropas mambisas de Remedios y del Cuarto Cuerpo.

En Caibarién funcionaba un Club Revolucionario llamado el "Diablo" presidido por Federico Malgrat y su ayudante Antonio Gavilán. Los trabajos revolucionarios comenzó a dirigirlos directamente María Escobar Laredo y Mariano Esperón [5], así como Federico Pedrosa Raimundo. Se creó un club más fuerte llamado" Vencedor" cuya presidenta fue la ya mencionada patriota Escobar y el Secretario Federico Pedrosa, contaba con una totalidad de 47 asociados. En años posteriores, se creó la Junta Patriótica que se encargaba en gran medida de la inteligencia mambisa. Esta organización tenía ubicados a distintos agentes cubanos en zonas claves como ferrocarriles, puertos, correos, telégrafos, comercios, lo que facilitó, no pocas veces, la obtención y traslado de información valiosa para los independentistas; así como también el movimiento de compatriotas de una región a otra, e incluso, hacia otro país.

Varias fueron las acciones desplegadas en la localidad, por ejemplo, en 1895 se ejecutaron distintos ataques en los campos aledaños como el incendio del matadero, bajo el liderazgo de José Acosta Carvajal (Pajarito) y José María Falero. En diciembre de ese mismo año el combate de Texico contra tropas españolas dirigido por Acosta Carvajal. Sin embargo, existe un elemento fundamental en el desarrollo de la guerra en la zona y es, precisamente, los constantes asaltos a los trenes por parte de las tropas mambisas. El descarrilamiento de estas maquinarias pesadas constituyó una gran victoria para los mambises, pues en estos se transportaban armas, pertrechos y soldados hacia otras regiones, imposibilitando la llegada de refuerzos y municiones a los colonialistas.

La reconcentración de Weyler se dejó sentir en la zona, obligando a los campesinos a internarse en los pueblos y zonas fortificadas sobre todo en febrero de 1896. El puerto estaba lleno de buques de guerra y a ello se le suma que el general Weyler entraba y salía de la región por Caibarién, lo que trajo como consecuencia la intensificación de la vigilancia de los españoles. La escasez de alimentos se acrecienta, las familias se lanzan a los campos en busca de viandas. Si a esto se le suma la precaria situación sanitaria existente, se puede entender por qué las cifras de mortalidad aumentaron aceleradamente.

La dramática situación existente en el país, producida por la estrechez de todo tipo de provisiones y el agotamiento de los bandos en conflicto, fue aprovechada por el gobierno norteamericano para sacar provecho del complejo escenario. En abril de 1898 se aprobó la Resolución Conjunta, los Estados Unidos declararon la guerra formalmente a España y unos días después se inició el bloqueo de los puertos cubanos por la Marina de Guerra Norteamericana. [6].

En el puerto de Caibarién se tomaron medidas previsoras ante esta situación por parte del gobierno español, así el20 de mayo de 1898 la comandancia militar de Remedios interinamente a Caibarién con su jefe el Sr. Idoate para enfrentar el bloqueo y la guerra contra Estados Unidos. A inicios de julio los jefes militares ordenaron el cierre del puerto y temerosos del inminente enfrentamiento de los americanos hundieron un grupo de lanchas en el canal. El 10 de diciembre de 1898se firma el Tratado de París que dio fin a la guerra Hispano -Cubano- Norteamericana.

Las fuerzas españolas de Caibarién empezaron la evacuación de la Villa en la noche del 25 de diciembre. El día 26 salieron las tropas de Pavía, en tren para Cienfuegos y poco después la población de Caibarién fue ocupada por fuerzas del Brigadier González Planas que fueron aclamados desde su salida de "Reforma". Cuando se izó la bandera cubana en el ayuntamiento hicieron uso de la palabra el Alcalde Domingo García Loyola y Bernardo Escobar Laredo.

Período Neocolonial

La república neocolonial (1899-1952)

Parque La Libertad de Caibarién a inicios del siglo XX.
Parque Infantil de Caibarién durante el periodo Necolonial.


“El fin de la dominación española en Cuba inició un período incierto que habría de resolverse con el establecimiento de la República el 20 de mayo de 1902. Surgía así un estado nacional con soberanía limitada, que estaría bajo las nuevas formas de dominio colonial del emergente imperialismo de Estados Unidos (…)”[7].

En Caibarién, al igual que en el resto de la isla, se hicieron sentir los efectos devastadores de la recién concluida contienda bélica de 1898. Los cultivos, ingenios azucareros, ferrocarril y otras vías de comunicación con el puerto, mostraban visibles huellas de la misma, el tráfico de cabotaje igualmente había sido afectado. La situación de los trabajadores caibarienenses en las diferentes ramas de la producción era difícil, sobre todo los obreros del sector marítimo y portuario debido a la inexistencia de convenios de trabajos, ni contratos laborales.

La transportación de mercancías para el comercio de importación y exportación se realzaba mediante embarcaciones de vela y toldo con personal fijo y generalmente de nacionalidad española, contratado por los armadores y propietarios de navíos. La estiba y desestiba a bordo de los buques de travesía era mediante el sistema de trabajos por contratos dirigidos por el español Lucio Ugalde. En estas condiciones el 13 de septiembre de 1899 es inscripto en el Gobierno Provincial de Santa Clara el Gremio de Pescadores de Caibarién, organización ésta que debido al incremento de su membresía y al surgimiento de nuevos patrones y negocios en el sector marítimo, pasó a denominarse " Gremio de marinos de Caibarién ", a partir del 28 de septiembre de 1902. A inicios del siglo XX, van resurgiendo y reanimándose las actividades económicas del territorio y consecuentemente con ellas las operaciones portuarias y aduanales relacionadas con el tráfico de cabotaje, importación y exportación a través del puerto de Caibarién.

El 28 de marzo de 1922 se coloca la primera piedra del hospital en Punta Brava donado por María del C. Zozayas, esta obra se inaugura el 31 de mayo de 1925. En mayo de 1923 los Gremios de Marinos y portuarios crean dos escuelas para sus trabajadores e hijos. En 1925 se crea el Caibarién Yatch Club, donde a decir de la investigadora Marial Iglesias, veranea la alta sociedad [8]. Fueron muchas las organizaciones que surgieron en el período republicano, sociedades de distintos tipos aparecen a lo largo y ancho del territorio nacional.

El territorio desde su fundación desarrolló una economía comercial e industrial y pesquera esencialmente, elementos que se mantuvieron a lo largo del siglo XX. Sus riquezas agrícolas eran escasas y de relativa importancia.

Un rasgo característico de la Villa Blanca, fue tener en las dos primeras décadas del siglo XX mayor cantidad de ciudadanos norteamericanos viviendo en ella, que Remedios , Camajuaní y Vueltas. Singularidad que se explica por la importancia de sus grandes almacenes, la propia actividad portuaria, los aserraderos de maderas y la banca, negocios que servían de campo inversionista para los yanquis.

Calles de Caibarién durante el periodo Necolonial.

Durante las dos primeras décadas de la República Neocolonial los imperialistas norteamericanos ponen en práctica una serie de mecanismos económicos y políticos para consolidar su dominación Neocolonial sobre la isla. Un ejemplo de ello es el incremento de las inversiones del capital en diferentes sectores de la economía; Caibarién no fue ajeno a esta práctica y ya en 1903 los ingenios de la comarca comienzan a pasar a manos foráneas fundamentalmente norteamericanas. Este año el central Narcisa hoy Obdulio Morales (actualmente en Yaguajay, Sancti Spíritus) pasó a manos de la North American Sugar Company, que presidía John Fowler.

Un acontecimiento que muestra el desarrollo de la lucha política por el poder en el territorio, fue la llegada a Caibarién el día 25 de abril de 1903 del general José Miguel Gómez, gobernador civil de la provincial y representante del Partido Liberal, quien al día siguiente en un almuerzo y mitin celebrado en el paseo Los Laureles en Cayo Conuco, pone de manifiesto sus aspiraciones a la presidencia de la República. Otro acontecimiento de singular importancia en la vida política y social del municipio lo constituye el nombramiento del General Francisco Carrillo, como hijo adoptivo de Caibarién el 1 de noviembre de 1905.

En este periodo el movimiento obrero caibarienense influenciado por las ideas reformistas y anarquistas continúa ganando en organización y combatividad muestra de ello son estos hechos entre otros:

  • El 1 de abril de 1911 se desarrolló una importante huelga portuaria en Caibarién la cual tuvo repercusión nacional.
  • El 14 de enero de 1918 se produce una huelga por aumento de jornales para marinos y estibadores.
  • En 1922 se desarrolla una huelga de marinos y estibadores por el aumento de salarios y nuevos convenios de trabajo, esta duró 22 días y contó con el apoyo de otros sectores laborales y el pueblo en general, a pesar de la represión, atropellos y detenciones; constituyó un triunfo absoluto y coadyuvó a la creación del "Gremio Unión".
  • En 1925 una representación de marinos de Caibarién participa en el II y III Congreso Nacional Obrero de Cienfuegos y Camagüey donde nace la C.N.O.C.
  • En agosto de 1926 se produce una huelga de Torcedores de tabaco en Caibarién por demandas económicas fundamentalmente.
  • En 1929 es creado el gremio de estibadores "El Yara" que luego en coordinación con el gremio "Unión" se reparten las labores de estiba y desestiba, equitativamente.
  • El 20 de mayo de 1931 un grupo de jóvenes intenta quemar el Cuartel de la Guardia Rural (vieja construcción de Madera) solo queman una parte, son perseguidos y se produce un tiroteo pero no logran darle alcance, en esta acción tomó parte el joven revolucionario Alberto Gómez Rodríguez.
  • Se fundan el 21 de diciembre de 1931 el Partido Comunista y la Liga Juvenil Comunista de Caibarién; en el local de la Hermandad Ferroviaria (María Escobar entre Jiménez y Agramonte).
  • El 12 de agosto de 1933 a la caída de Machado, se izó la bandera roja en el ayuntamiento y cumpliendo orientaciones del PCC se intentó crear un gobierno local a semejanza de los Soviets, lo cual es frustrado por las autoridades del gobierno.
  • En 1933 el Central Reforma fue tomado por los obreros armados de machetes, palos y escopetas, quienes se suman a la huelga general, crean un Comité de estaca para impedir la labor de los rompe huelgas.

La esfera cultural adquirió gran esplendor en este período, representada en las diferentes manifestaciones culturales, se enriqueció la vida de la sociedad caibarienense de esa etapa. El 20 de mayo de 1905 desfila por primera vez la Banda Municipal de Caibarién, creada este año y dirigida por Pilar Montalván Raimundo y posteriormente por destacadas personalidades de nuestra música como Ernesto Jarque Gómez. En el ámbito musical ocupa un lugar cimero la personalidad de Manuel Corona Raimundo, destacado compositor y trovador de Caibarién con fama nacional e internacional.

Vista aérea de la ciudad y puerto de Caibarién en la primera mitad del siglo XX.

Entre 1924 y 1925 Balmaseda (Titiritero y Ventrílocuo) junto a Alberto Habichuela, Macho Manguito, Quíjano y la señorita Aguado crean una carpa circense en la que mezclan el humor y la acrobacia, con los títeres de Balmaseda para deleite de la población. Además, se destacan Cayito Crespo y Cándido Pérez (el mago Predette) que hacían sus puestas en escenas a modo de juglares, con una mezcla de actores y magos. En el período de 1925 a 1935 circulan entre otras las siguientes publicaciones: Los Duendes 1926, El Meridiano 1927, La Opinión 1929, El Combate 1929.

La revista "Archipiélago" mantuvo incólume su política editorial toda vez que defendió y promovió la obra de intelectuales y artistas de cualquier parte del continente sin atender a rangos, posiciones sociales, ni reconocimientos oficiales o académicos e hizo implícito su interés por agrupar, divulgar y defender, sobre todo, a los escritores de provincia que pugnaban por ganar un puesto en la cultura nacional.

Por estos años se produce un acontecimiento de extraordinaria relevancia para la vida cultural y social de Caibarién, la fundación de la radio emisora local por Manuel Álvarez Álvarez (Manolín) pionero de la radio cubana. Él había iniciado en 1920 las instalaciones y pruebas de lo que sería nuestra primera emisora, la 6 EV, ubicada entonces en Céspedes # 7, hoy Ave 11 # 613.

Chalet ubicado en Punta Brava, Caibarién, durante el periodo Necolonial.

En las Artes Plásticas se destacan entre otros el pintor Leopoldo Romañach con sus innumerables marinas inspiradas en los bellos paisajes del litoral. Figura importante de este periodo es el historiador remediano José A. Martínez Fortún, quien se dedicó a recopilar la historia de varios municipios de la región central como Caibarién, Camajuaní , Placetas y por supuesto de Remedios . Gracias a la obra de Fortún se conoce, en la actualidad, la historia de estos territorios.

En este período el movimiento revolucionario en el municipio se desarrolla, reorganiza y activa en difíciles condiciones por la politiquería, persecución y asesinatos a todos los que manifiestan ideas progresistas. El Partido Comunista, la Liga Juvenil y los Sindicatos lograron reorganizarse y, a pesar de las difíciles circunstancias, despliegan una gran labor de luchas por las demandas obreras y de solidaridad con las luchas del proletariado mundial. En 1935 se celebra una plenaria a la que es invitado y participa Lázaro Peña, quien con uso de la palabra desenmascara maniobras del gobierno para desacreditarlo.

En 1947 y 1949 desarrollan los azucareros dos importantes huelgas, esta última en apoyo a los portuarios que habían declarado a Caibarién "Ciudad Muerta" en protesta contra el agio, la especulación y el alto costo de la vida. Las huelgas fueron un elemento importante dentro de los movimientos estudiantiles y obreros en esta etapa. Es válido destacar, que uno de los sectores más afectados en el municipio de Caibarién, eran los obreros del sector portuario y marítimo, por lo que las manifestaciones estuvieron representadas por los mencionados en su gran mayoría.

Durante los gobiernos auténticos se produjeron desvíos de azúcar que agudizaban el desempleo entre los portuarios. Esto condujo a crear por la Asociación de estudiantes un Comité Cívico Pro- Caibarién, el 14 de julio de 1948, que unió a muchas organizaciones. El pueblo se interesó tanto por las sesiones del Comité, que a la salida de una de ellas integró, junto a sus miembros, una nutrida manifestación. Entonces, se desencadenaron detenciones contra los directores del Comité; el pueblo los respaldó llenando las calles de basura para hacerlas intransitables.

Lucha insurreccional

En el período de 1952 a 1958 la vida económica de Caibarién se medía por la actividad anual del puerto y este laboraba en correspondencia con la venta de azúcar al exterior. Ahondando la crisis local los excedentes de la "Gran Zafra" de frío, el puerto estaba sin embarque y eran muchos los días que no trabajaba, Caibarién representaba una "Ciudad Muerta". Las Tenerías en algunas épocas trabajaban con menos del 40% de su personal normal. La pesca se mantenía con sus métodos rudimentarios de captura y era controlada por un puñado de empresarios y dueños de barcos que ahogaban este sector de la economía. La juventud desempleada emigraba hacia la capital del país y otras regiones en busca de trabajo y oportunidades, al comienzo de cada zafra la gente sin trabajo de la Villa salía por los caminos en busca de corte de caña. Era triste el panorama existente en el territorio, el desempleo era uno de los males que más golpeaban a la población que solo lograba conseguir trabajo una parte del año.

En 1952 al producirse el golpe de estado de Batista, en el Central Reforma los obreros se volcaron a la calle Real y realizaron mítines de condena al golpe y a Batista. El Partido Socialista Popular (P.S.P) en 1952 cuenta con gran influencia en Caibarién sobre todo en los sindicatos del Puerto, Tenerías y Azúcar, contaba además con 2 concejales en el ayuntamiento Municipal: Nicolás Parra y Antonio Martín.

De 1952 a 1958 la estructura del P.S.P consistía en una dirección regional que radicaba en Caibarién, compuesta por un Presidente: Ángel Roque, un Secretario: Pedro Rodríguez (Pipe), un Organizador y a la vez responsable de Finanzas y Propaganda, Eloy Guas Serpa cuenta, con un grupo de actividades que realizan una labor meritoria en la lucha.

A fines de 1954 comienza a reunirse y organizarse un grupo de jóvenes conspiradores del municipio, en una pequeña casa en la calle Quinta entre Jiménez y Agramonte; propiedad de Perico Prieto, abuelo de Héctor Pedrera uno de los jóvenes conspiradores. Entre las actividades que realizaban se destacaron sabotajes a una fiesta batistiana y religiosa en la Escuela Primaria Superior; pintar carteles con consignas revolucionarias en la residencia del burgués Pedro Casabón; confección y distribución de proclamas revolucionarias y contra la tiranía.

El 26 de marzo de 1958 un grupo de revolucionarios del movimiento se alzó con algunas escopetas y armas cortas, cerca de la finca Monteagudo próxima a Dolores. En esta acción participan entre otros Gil González Fidalgo, Juan Fernández Bolaño, Orlando Moreno, Andrés Fernández, Evelio García, Emir Rodríguez , Sandalio Bravo, otros compañeros conocidos como José Irene Jiménez y su hermano Armando, nombrado el Mexicano, estos no reciben las armas prometidas y regresan a Caibarién. Luego se incorporan a los preparativos de la Huelga General, el 8 de abril a las 9:00 p.m. es cortado el fluido eléctrico por un grupo dirigido por Adrián Menéndez, señal esta con la que se inicia la huelga. El 9 de abril amanece el pueblo en huelga respondiendo al llamado nacional, se regaron grampas y tachuelas en las calles, aparecieron vidrieras rotas, letreros y proclamas.

De los luchadores que resaltan en esta etapa, está Marcelo Salado, joven deportista y profesor de Educación Física devenido líder nacional. Prisionero de la tiranía, se vinculó al M-26-7 y no tardó en ascender, efectuó un incendio en el Ten Cent del Vedado y volvió a la cárcel.

De abril a diciembre de 1958 se recrudece la represión de la tiranía y con ella aumenta el odio popular, se produce la apertura de los frentes Norte y Sur de la Provincia de Las Villas. Caibarién se convierte por su situación geográfica y la actividad de su movimiento revolucionario en el principal abastecedor de armas y recursos a los combatientes de las guerrillas: Máximo Gómez y Marcelo Salado, posteriormente al Frente Norte. Esta actividad se consolida a la llegada de la columna # 2 dirigida por el Comandante Camilo Cienfuegos a Yaguajay, por estas circunstancias y cumpliendo orientaciones de la dirección Nacional disminuyen las acciones de los grupos de acción y sabotaje del M-26-7 con el objetivo de aminorar la vigilancia de la fuerza represiva sobre la población.

El 26 de diciembre de 1958 fuerzas combinadas de las Columna 8 Ciro Redondo y 2 Antonio Maceo bajo la dirección del Comandante Ernesto "Che" Guevara liberaron a Caibarién de la oprobiosa tiranía batistiana, convirtiéndose en territorio libre de Cuba. El Comandante Guevara designó al Capitán "Guile", hoy General de División Ramón Pardo Guerra, integrante de la columna # 8 "Ciro Redondo" para dirigir el sitio y la toma de la ciudad de Caibarién, por lo que se dispuso la partida de las tropas asignadas, por distintos itinerarios y con la orden de no emplear la carretera que une la ciudad de Remedios y Caibarién.

Período Revolucionario

La situación general de Cuba al Triunfo de la Revolución era penosa. Muchos males aquejaban a la sociedad de la época y había que reorganizar el país y destruir las bases del sistema precedente. La economía caibarienense tenía su base esencial en la red comercial amplia y diversificada con numerosas tiendas, almacenes y muelles, la industria (fundamentalmente 2 tenerías, 1 central azucarero, además pequeñas industrias como 2 fábricas de hielo , 2 licorerías, varias tabaquerías, Talleres Textiles, Zapaterías etc.) la colchonería Botas, una fábrica de fideos, dos fábricas de escobas de brillo, dos fábricas de mosaicos la Charolera "West Indias", la fábrica de refrescos "Punch", el taller de vía estrecha, dos terminales de mieles , dos molinos arroceros , una fundición y una pailería, además de una cooperativa de ómnibus S.A, Empresa Eléctrica y Telefónica.

Con el triunfo el 1ro de enero era necesario democratizar esta economía, pasando a manos del pueblo todos los bienes de la clase burguesa. Un momento de singular importancia en la historia de Caibarién es la visita y recorrido que realiza el 3 de mayo de 1959 por distintos lugares del municipio el guerrillero Camilo Cienfuegos, dentro de ellos la escuela Antonio Maceo y el Cuartel del Ejército Rebelde. También se reúne en el teatro América con los combatientes del Ejército Rebelde y en los altos del Liceo con la burguesía local.

Fidel sobre el puente del "Canal de los Barcos" en el pedraplén Caibarién-Cayo Santa María el 29 de septiembre de 1996, fecha en la cual sería abanderado el contingente "Campaña de Las Villas".

Desde el propio inicio de la Revolución se comienzan a dar solución a los disímiles problemas existentes, recuérdese la tierra, la vivienda, el desempleo, el analfabetismo entre muchísimos otros. En la localidad se inicia este proceso con la intervención de 23 barcos (los mejores), y el 17 de diciembre de 1959, se crea la Cooperativa de Pesca, "Capitán Miguel Ángel Rojas", agrupando en sus inicios a 372 familias. A partir de entonces se comienza a trabajar en la identificación de la "Ciudad Pesquera" ubicada en el reparto "Las Varas". Este reparto contará inicialmente con más de 400 viviendas, que se le entregaron a los pescadores, eliminando así toda la ranchería existente en el lugar, cuenta además con un centro escolar (para que estudien los hijos de los pescadores que hasta entonces no contaban con esa posibilidad, por no tener sus padres recursos para pagar los estudios), un hospital y un astillero.

En 1960 es nacionalizado el antiguo Central Reforma, hoy "Marcelo Salado" el 24 de octubre, allí se nombra su primer administrador, Lincoln Otero Rieva, además se eligen 3 compañeros, como asesores por departamentos. Se crea la Comisión Local de Prevención de Accidentes, y es designado el compañero Jesús González Pérez para que presida la comisión local, que debe aplicar La Ley de Reforma Agraria en el central, ubicado este en la zona de desarrollo agrario L.V.13.La Tenería Curtidora Genín, hoy Patricio Lumumba, es nacionalizada en el propio año 1960 y nombrado su primer administrador Rolando Legua, esta medida se ejecuta precisamente al cumplirse el 1er centenario de su surgimiento.

En Caibarién se nacionalizaron las escuelas privadas como: la escuela Apostolado que hoy lleva el nombre de Luis Arcos Bergnes; el colegio Champagnat, hoy escuela Secundaria Básica Julio Antonio Mella; el colegio Presbiteriano, hoy Alberto Pis; la Parroquial de Punta Brava por aquel entonces, luego se convirtió en la Escuela Jacobo Cruz. Pero con los centros nacionalizados, no era suficiente para garantizarles estudios a todos los niños por lo que se hizo necesario crear nuevas escuelas urbanas y rurales.

La Comisión Municipal de Alfabetización estuvo presidida por José Esquivel, esta comisión logró movilizar más de 428 alfabetizadores populares, además 109 Brigadistas "Conrado Benítez, 4960 alumnos y 137 maestros. El 17 de diciembre de 1961 se habían alfabetizado 2158 analfabetos de los 3080 inscriptos para un 70%. De este municipio fueron enviados al Congreso de Alfabetización (septiembre de 1961) como Delegados: Isabel Reyes, Dominica Balboa y Matilde Pérez Salas. Es meritorio destacar la labor realizada por María Justa Álvarez, quien fue nombrada asesora técnica de la Alfabetización del Reparto Pilar, asesoraba ella 10 alfabetizadores y a la vez alfabetizaba, y atendía en horas nocturnas a 8 obreros en la escuela "Marcelo Salado".

Es constituida en 1976 la Asamblea Municipal del Poder Popular después de la nueva División Política - Administrativa en su primer mandato de los 41 delegados de circunscripciones de Caibarién, resultó electo presidente Jesús René Martínez Hernández, como vicepresidente Alfredo Reinaldo Prida y como Secretario Pablo Velázquez Aguilar.

En la salud se incrementaron las instalaciones, se inauguró el policlínico comunitario "Pablo Agüero Guedes" y el centro de Higiene y Epidemiología. Además, la ciudad cuenta con un Hospital General Docente y dos policlínicos que son instituciones básicas encargadas de brindar atención médica a la población. Cuenta además Caibarién con un módulo de 10 instituciones culturales básicas.

El 12 de septiembre de 1989 recibe Caibarién la visita del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, quien junto a otros especialistas delinearon en el propio terreno el desarrollo del programa turístico para la Cayería Noreste de Villa Clara, en este proyecto se incluye un viejo anhelo del pueblo de Caibarién, quien desde la década de 1980 hizo gestiones para la construcción de un pedraplén hasta la cayería norte de la ciudad. Esta grandiosa obra está acompañada de un amplio proyecto de desarrollo turístico en los cayos tanto para el turismo nacional como Internacional, de utilidad aún vigente.

Imágenes actuales de Caibarién

Apodada también "La Villa de los Cangrejos", a la entrada de la ciudad un gigantesco crustáceo, obra del famoso artista local Florencio Gelabert, da la bienvenida a los visitantes.
Playa "Mar Azul", ubicada en una isleta próxima a la ciudad convertida en península con la construcción de un pedraplén de 700 m de longitud sobre el canal de Las Varas.
Con una larga tradición en la práctica de deportes marítimos, ha sido agasajada, además, con el título de "Capital de las velas de Cuba".
Parque La Libertad en la actualidad. Al fondo, la parroquia San Francisco de Caibarién.
Sede del Gobierno Municipal
Sede de la UNEAC en Caibarién.
Avenida 7, entre Avenida 6 y el puerto.
Vista aérea de Caibarién
Avenida 9, frente al parque La Libertad.

Referencias

Fuentes

  • Colectivo de autores: Historia del municipio de Caibarién. Desde los orígenes hasta 1990. Formato digital
  • Tomado de Sánchez Gómez, Oscar: Folleto sobre la Villa Blanca, 1840.
  • Martínez Fortún, José A. Apuntes históricos de Caibarién. Impreso por Eduardo Valdés e Hijos. Caibarién 1939.
  • Apuntes de la Historia de Cuba. José A. Martín Fortún y Foyo (1939).
  • Colectivo de autores: Las luchas por la independencia nacional y las transformaciones estructurales 1868-1898. Editorial Pueblo y Educación, La Habana, 2002, p. 528.
  • López Civeira, Francisca: Cuba. Seis décadas de historia entre 1899-1959. Editorial Félix Varela, La Habana, 2009, p.1.
  • Iglesias Utset, Marial: Las metáforas del cambio en la vida cotidiana: Cuba 1898-1902. Ediciones Unión, La Habana, 2010.