Historia del municipio La Lisa (La Habana)


Historia del municipio La Lisa (provincia La Habana)
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Escudo del Municipio La Lisa.
Cronología
Etapa colonial
Surgimiento de los poblados
División político–administrativa 1778
Desarrollo de la industria alfarera
Esclavitud y desarrollo económico en el siglo XIX
Manifestaciones de rebeldía
Guerras independentistas
República Neocolonial
División político–administrativa de 1902
Desarrollo económico–social
Rebeldía
Guerra de Liberación Nacional
Revolución en el poder
Medidas revolucionarias
Enfrentamiento a la contrarrevolución
Desarrollo político y socioeconómico
División político-administrativa 1964
División político-administrativa 1976
Recuperación económica y social
Defensa de la Revolución

Historia del municipio La Lisa (provincia La Habana). La historia del municipio comenzó con el otorgamiento en el siglo XVI de las primeras concesiones de tierras, que trajo la aparición de sus primeras actividades económicas. Surgió como poblado en 1794.

Durante la República Neocolonial perteneció una parte al ayuntamiento de Marianao y la otra al ayuntamiento de Bauta, período caracterizado por un bajo nivel de desarrollo económico pese a la construcción de nuevas urbanizaciones.

Con el triunfo de la Revolución Cubana se abrió una etapa de profundas transformaciones, de crecimiento y desarrollo en el territorio que hoy abarca.

Este territorio, que pertenece a la provincia La Habana; se constituyó como municipio a partir de 1976 con la división política – administrativa de Cuba, aprobada ese año. Está ubicado en la periferia oeste de la capital, limita al norte con el municipio Playa, al este con Marianao, al sur-suroeste con Boyeros y al oeste con el municipio Bauta, de la provincia Artemisa.

Etapa colonial

Con el otorgamiento en el siglo XVI de las primeras mercedes de tierra en el territorio del actual municipio La Lisa aparecieron sus primeras actividades económicas. El derecho a donar tierras fue concedido al cabildo municipal por lo que esta institución local cobró mayor importancia en los siglos XVI y XVII, pues su mayor poder radicó en la entrega de esos beneficios.

Surgimiento de los poblados

El Cano

Iglesia de El Cano (vista actual).

El corral de El Cano fue la primera merced otorgada, admitido a diligencias el 10 de mayo de 1587 y otorgado a merced el 25 de mayo del propio año a Martín González Cano. La explotación de la ganadería fue el objetivo fundamental en este territorio, en sus inicios.

En fecha 23 de enero de 1711 se dio licencia, por el cabildo de La Habana, para demoler el corral El Cano y al mismo tiempo se autorizó a Don Francisco del Barco, médico llegado del Perú, para que construyera un ingenio en terrenos de Don Lucas Franco.

El proceso de expansión azucarera cobró auge con el paso de los años; hacia 1762, El Cano era zona productora de azúcar, hallándose enclavados en su jurisdicción los ingenios Coca, Duarte, Pacheco y León en los cuáles la molienda se hacía aplicando procedimientos muy rudimentarios.

Hasta 1827 la baja del precio del azúcar provocó la ruina de numerosos hacendados que se vieron forzados a emprender otros tipos de actividades. Se dedicaron fundamentalmente a la agricultura con los cultivos de mayor difusión: arroz, café, frijoles, maíz, plátanos, hortalizas, frutas, viandas, entre otras.

Guatao

Iglesia del Guatao (vista actual).

La primera referencia a la merced de Guatao, es de 1675 fecha en que se adjudica a la marquesa de Pinar del Río, quien la cede, a Jacinto Pedroso, quien solicita licencia al cabildo de La Habana para ampliar los terrenos en los que Castellón y Pedroso, propietarios del corral El Cano, pudieran reparar y resguardar sus ganados concentrados en los corrales Guatao y El Cano.

En 1750 Don Esteban Godínez cedió gratuitamente una caballería de tierra de su propiedad para fundar el poblado, hecho acompañado de cierto desarrollo económico local y un aumento de la población.

Arroyo Arenas

Bases del puente de Arroyo Arenas.

La actividad poblacional de Arroyo Arenas se remonta a la segunda mitad del siglo XVII cuando el sitio fue concedido en merced a Domingo Pérez Silva, el 29 de abril de 1672, quien dedicó sus tierras a algún tipo de explotación agrícola para la cual necesitó fuerza de trabajo.

La ubicación de este sitio a la vera del Camino Real a Vueltabajo favoreció su desarrollo poblacional que, además, fue enriquecido por la migración de población campesina de origen canario asentada inicialmente en Vueltabajo.

La fundación del pueblo de Arroyo Arenas se registró en 1790 al constituirse una capilla.

La Lisa

Arcada Puente La Lisa.

En 1794 el Real Consulado de Agricultura, Industria y Comercio, que debía trabajar en el mejoramiento vial que conectara a la capital con importantes puntos del interior de Cuba, en lo referente al territorio del actual municipio de La Lisa trabajaría por mejorar la comunicación desde la capital con Guanajay, importante centro agrícola, mediante el mejoramiento del antiguo Camino Real a Vueltabajo. Esto implicó la construcción de la Calzada del Oeste, que se acometió siguiendo el mismo trazado de dicho camino.

Un obstáculo importante era el paso por el río Quibú, por lo que el 6 de marzo de 1827 el gobierno del general Don Francisco Dionisio Vives, inició la construcción del puente sobre el río Marianao, conocido hoy como el puente de La Lisa, obra que concluyera en 1832, se construyó bajo la dirección del maestro de obras francés Arsenio Lacarrere Latour, y fue considerado como una de las más importantes obras públicas de esa época, en esta construcción se utilizó catalanes como mano de obra.

Bases del Puente La Lisa.

La construcción del puente fue factor muy importante en el desarrollo poblacional de La Lisa. Existía allí desde la culminación del puente, un establecimiento comercial constituido por una bodega y una taberna nombrada “Liza". Esta taberna servía de alojamiento y aprovisionamiento a los viajeros y comerciantes que transitaban desde la capital a Vueltabajo y viceversa.

Desde mediados del siglo XIX, las familias acaudaladas de La Habana, habían convertido al río en una zona de veraneo (disfrutar de los baños). El puente y la taberna, en un primer momento, y los turistas veraneantes después, fueron determinantes en la urbanización de este territorio.

El 29 de septiembre de 1857 Miguel Antonio Navarrete propietario del potrero San Antonio Abad y coheredero de la estancia Santa Ana, ambas al suroeste de la Calzada de Guanajay, solicitó al Gobierno Superior Civil la autorización correspondiente para parcelar y repartir a censo una parte de esos terrenos con vistas a la creación del poblado La Lisa. El proyecto de urbanización fue aprobado ese año y fue el origen de un poblado nacido hacia 1858 como barrio rural, apéndice de Marianao.

Punta Brava

Ruinas de Punta Brava.

El área que más tarde ocupó el poblado de Punta Brava estuvo comprendida en el siglo XVI como parte de los corrales de Guatao, Ojo de Agua y Bauta. La evolución económica de esta zona derivó, tras la desaparición de los corrales dedicados a la ganadería, en zona de agricultura cañera, con algunos ingenios, y más tarde la gran propiedad cañera se subdividió en fincas más pequeñas en las que se diversificó la producción agrícola, dedicando parte de sus tierras a viandas y frutos menores. Esta es la característica de la zona en el siglo XIX cuando se produce la aparición del poblado hacia 1870 del pueblo bautizado como San Vicente de Punta Brava, situado a orillas del Camino Real de Vuelta Abajo, a poco más de una legua al noreste de Hoyo Colorado, el último de los aparecidos en la época colonial, en el actual territorio del municipio La Lisa.

División político–administrativa 1778

Desde las primeras mercedes de tierra durante toda la época colonial se produjeron numerosos cambios en la subordinación político–administrativa en el actual territorio de La Lisa. Las primeras entregas de tierras hacia 1778 todavía subordinaban su existencia al cabildo o Ayuntamiento de La Habana.

A partir de 1878, según la nueva división político–administrativa establecida por el gobierno colonial en esa fecha, se crearon hacia el oeste de la capital los Municipios (Ayuntamientos y alcaldes) de El Cano, Marianao y Santiago de las Vegas.

En el orden judicial, todos estos municipios se subordinaban a Bejucal hasta 1880.

Desarrollo de la industria alfarera

Las actividades agropecuarias alcanzaron gran importancia en El Cano y debido a la naturaleza de su suelo (zona arcillosa flanqueada por dos pequeños arroyos tributarios del río Marianao comenzó a desarrollarse la industria alfarera a partir de 1845. Al final de 1858 existían 15 tejares, donde laboraban alrededor de 41 maestros alfareros. Este pueblo se convirtió a mediados del siglo XIX, en uno de los más importantes núcleos alfareros de la porción occidental de Cuba, y con el andar de los años dicha actividad representó la principal fuente de riqueza de la zona.

Esclavitud y desarrollo económico en el siglo XIX

La evidencia de la esclavitud asiática en la historia del actual municipio La Lisa, se aprecia en la presencia de trabajadores chinos en los tejares después de 1878 en El Cano y en la construcción del puente “Salas” sobre el arroyuelo que cruzaba la carretera de enlace entre El Cano y Arroyo Arenas.

En la zona de San Vicente, hacia mediados del siglo XIX, cuando todavía no existía el poblado de Punta Brava, se practicaba la agricultura de cultivos tales como habas limas, tabaco, yuca, calabaza, café y piña. Considerada la primera zona piñera de Cuba, se registraban también grandes envasaderos de esta fruta, talleres de despalillo, empaque y escogidas de tabaco, un taller de carretas, carretones y coches, y otros establecimientos que muestran el desenvolvimiento económico que alcanzó Punta Brava, al final del siglo XIX.

La zona el Guatao contó con el ingenio Macastá situado en el camino de Guatao a Corralillo que era propiedad de Don Pedro R. Armenteros, y que registraba una cifra total de 100 esclavos. En el mismo llegó a utilizarse vapor de agua para sus trapiches, En 1859 y 1860, produjo 4143 cajas de azúcar y contaba con 42 caballerías dedicadas al cultivo de la caña.

En la misma época contaba, el Guatao, con otro Ingenio en la finca San Joaquín propiedad de Alberto Monserrate, que llegó a tener 100 esclavos. Del mismo se conserva aún un enorme pozo y otras huellas que indican la existencia de un barracón.

El negro liberto también participó en el desenvolvimiento económico de la zona del Guatao, en el despalillo de tabaco y en el agro, siembra de piñas, habas, limas y frutos menores, pues muchos trabajaban en sus propias parcelas y vivían del producto de ellas. Así una población creciente de negros libres, se desarrolló con tendencia a asentarse en la conocida como Calle de la Laguna.

Aunque actualmente no pertenece al territorio liseño, existía en la comarca aledaña a lo que después fue el poblado de Punta Brava, los ingenios Tahoro, Maurín (o Baracoa) que tenían de 150 a 200 esclavos aproximadamente del primero aún se conservan ruinas de lo que fuera esta fábrica de azúcar. Está considerado Monumento Nacional.

El factor más importante del desenvolvimiento económico de Arroyo Arenas fue su ubicación a orillas del Camino Real a Vuelta Abajo. Al establecerse las líneas de diligencias entre La Habana y Guanajay, Arroyo Arenas se convirtió en un sitio de paradas de esos carruajes, pero resultaba un molesto obstáculo el cruce de la pequeña corriente del río Arroyo Arenas que, en época de lluvia, cuando aumentaba su caudal se hacía intransitable. Por tal razón la administración colonial determinó la construcción del puente cuya primera piedra fue colocada el 8 de diciembre de 1848 en un acto que contó con la presencia del Gobernador General Don Leopoldo O´ Donnell.

El área del barrio La Lisa, durante el auge azucarero del XIX, existió el ingenio Nuestra Señora de la Candelaria, y otro ingenio en el antiguo callejón de El Cano a La Lisa, en la finca Jaramillo.

Manantial de los Pocitos en la actualidad

La característica fundamental del barrio La Lisa a partir de la declinación del azúcar fue su acento urbanístico, alentado por ser sitio de paso de las caravanas mercantiles que iban de La Habana a Guanajay y viceversa, y por contar con los baños del río Quibú, que según las crónicas de la época llegó a ser el lugar preferido de las familias adineradas que venían a veranear a Marianao.

A estas circunstancias se suma que hacia 1829 se produjo el hallazgo a orillas del río Quibú, en la zona de la loma "La Vigía" de un caudaloso manantial de exquisita agua que denominaron Manantial del Pocito (en el actual municipio Marianao). Las autoridades, percatadas de su utilidad, dispusieron en 1830, según orden del alcalde de La Habana José María Calvo, que sus aguas fueran analizadas.

El examen comprobó que el líquido poseía propiedades curativas, y pronto el citado funcionario, con auxilio del Real Consulado, y cooperación del vecindario, impulsó la construcción de una fuente que preservase a dichas aguas de la contaminación. Esta fuente se inauguró el 22 de julio de 1831, y contribuyó a aumentar la afluencia de personas deseosas de recuperar la salud quebrantada por alguna dolencia del aparato digestivo.

Fachada del antiguo Cuartel de Milicias Españolas en El Cano

Manifestaciones de rebeldía

En el Siglo XVIII, se apunta esta zona en la participación a la resistencia ante el ataque inglés a La Habana, con las milicias del Coronel Laureano Chacón a quién estuvo asignada la defensa de la parte oeste de la ciudad. En estas tropas participaron pobladores del Guatao, existiendo importantes manifestaciones de actividad conspirativa que marcaba los inicios del ideal independentista en Cuba.

Entre las primeras manifestaciones de rebeldía estuvo la existencia de un palenque llamado Guanímar en el Guatao. Hubo sublevaciones de esclavos en la hacienda Guatao en 1795 y en varios ingenios en febrero y octubre de 1798. Se carece de datos precisos sobre el lugar exacto en que se ubicó el refugio, la cantidad de negros participantes y el carácter de dicha sublevación.

En 1822, las ramificaciones de la Conspiración de Soles y Rayos de Bolívar se habían extendido hasta Guatao. En agosto de 1823 el Capitán General de la isla de Cuba, designa al coronel José Coppinger como jefe de las tropas que marcharían hacia los partidos de Guatao y El Cano para investigar la participación de sus moradores en dicha conspiración. Como resultado de las investigaciones se descubrió un plan armado en el que participarían numerosos vecinos de Guatao, incluido el alcalde Eusebio Martínez, miembros de la milicia nacional y numerosos esclavos. La operación concluyó con el arresto de 6 dirigentes de la conspiración, entre ellos el alcalde Martínez.

En 1830 la Conspiración de la Legión del Águila Negra se extendió por todo el territorio habanero y de nuevo tuvo repercusiones en la zona de Guatao.

Guerras independentistas

Guerra de los Diez Años

Cuando se produjo en Cuba el inicio de las guerras por la independencia el 10 de octubre de 1868, convocado por Carlos Manuel de Céspedes desde su ingenio La Demajagua, el occidente del país, en apariencias, se mantuvo marginado del hecho. Tuvo otras repercusiones como el laborantismo, en el actual territorio del municipio La Lisa de donde marcharon a la manigua oriental Francisco Herrera y otros pobladores de El Cano y el 21 de marzo de 1869 fueron deportados a la isla de Ceuta 250 personas acusadas de conspirar a favor de la independencia de Cuba, entre las cuales se encontraba el joven Luis Blanco, natural y vecino de Guatao.

Tregua Fecunda

El período posterior a la Guerra de los Diez Años, conocido para la historia de Cuba como "Tregua Fecunda", recoge información sobre los grupos de conspiradores y la creación de los clubes revolucionarios que los agruparon hacia 1878.

Guerra del 95

Al estallar la guerra del 95 muchos vecinos de El Cano, Punta Brava y Arroyo Arenas, y particularmente Guatao, se lanzaron a la manigua o colaboraron con los insurrectos. Se destacan las figuras de Carlos Marrero Brito, quién murió en 1898, con el grado de Comandante del Ejército Libertador y vecinos como Juan Santos y su esposa Clara Rivero, Francisco Gómez, Alberto Guzmán, Andrés Baeza, Ignacio Zamora, entre otros fueron también activos colaboradores de la revolución. La llegada de las tropas mambisas a esta zona se produce el 6 de enero de 1896 por Hoyo Colorado, Bauta.

Tras la toma del poblado los Generales Máximo Gómez y Antonio Maceo se trasladaron al encuentro con Perfecto Lacoste; dejaron a otros oficiales encargados de las avanzadas hacia Punta Brava, El Cano, Arroyo Arenas y las cercanías del río Marianao. Después de la entrevista con Lacoste y su propuesta de Baldomero Acosta como reclutador, quedaron incorporados 69 combatientes de esta zona al Ejército Libertador. Al día siguiente fuerzas mambisas y tropas españolas combatían en las inmediaciones de Arroyo Arenas con gran alarma para las autoridades españolas de la capital que veían amenazadas su seguridad.

Matanza del Guatao

Entre los hechos más sangrientos de esta guerra, está la Matanza del Guatao el 23 de febrero, cuando el entonces Capitán Calvo, Jefe de la columna compuesta por unos 200 hombres, ordenó registrar cada una de las casas del pueblo, desalojando a sus moradores con el pretexto de que había insurrectos ocultos entre ellos. La soldadesca instigada por sus jefes, disparó a mansalva contra los indefensos vecinos, asesinando a 16 de ellos. Además, de los 20 prisioneros que condujeron hacía Marianao solo 15 llegaron con vida. Cervera por su parte consideró este abominable suceso como una victoria, y así lo comunicó por telégrafo a Weyler.

En 1896 para consolidar la guerra en La Habana, el actual territorio del municipio La Lisa quedó adjudicado a la Brigada del Centro que incluía San Antonio de los Baños, Santiago de las Vegas, San José de las Lajas, Quivicán, Wajay, Bauta, Caimito y Marianao.

En opinión del Lugarteniente General Antonio Maceo, era imprescindible crear una división que actuara permanentemente en este territorio, como parte del Quinto Cuerpo del Ejército Libertador. Así la Segunda División Habana (la Primera División operaba en Matanzas), quedaría compuesta por tres brigadas: norte-nordeste, centro y sur. Se constituyó bajo la jefatura de Baldomero Acosta el núcleo básico del nuevo Regimiento al que se sumarían progresivamente campesinos de Caimito, Bauta, El Cano, Arroyo Arenas, así como vecinos de estos poblados y del propio Marianao. En el primer trimestre de 1896, se incorporaron 208 nuevos combatientes con aproximadamente el 55% de sus fuerzas montadas, es decir de caballería, y el resto de sus fuerzas se organizó como infantería.

Regimiento Goicuría

La zona de operaciones del Regimiento Goicuría durante las campañas de 1896, 97 y parte del 98, estuvo delimitada a la zona que desde Marianao se extiende por el norte hasta el mar y por el oeste hasta Mariel. En dirección sur, siguiendo la trocha de Mariel a Majana, las zonas de Artemisa, Guanajay y Las Cañas, Vereda Nueva, Mazorra y Wajay, que incluían al centro de ese escenario a Bauta, Caimito, Anafe, Punta Brava, Arroyo Arenas y El Cano.

Algunas de las acciones sobresalientes de los hombres del Goicuría: quema, por un destacamento, de más de 30 casas en el caserío Jaimanitas, el 25 de marzo; la acción emprendida a las 10 de la noche del 4 de mayo de 1896 por fuerzas cubanas bajo el mando de Cándido Villanueva, Rufino Urra, Baldomero Acosta y Pedro Delgado que atacan Punta Brava, la incendian y logran éxito frente a fuerzas élites del ejército español. Una acción semejante que no tuvo éxito se produjo el 18 de junio del propio año cuando patrullas insurrectas comandadas por Rufino Urra y Juan Delgado atacaron e intentaron incendiar a Arroyo Arenas.

Unos días antes, el 9 de junio de 1896 en atención a los méritos acumulados y al cumplimiento de la orden recibida, el General Maceo, otorgó a Baldomero Acosta el grado de Comandante. Sin embargo, según el testimonio de Miró Argenter, cuando el total de las decisiones adoptadas fue puesto en conocimiento del Jefe de División, las juzgó indebidas y dio su aprobación solo al nombre del Regimiento.

Por otra parte, Antonio Maceo se mantenía en exitosa campaña en Occidente, pero se ve obligado a interrumpirla ante la solicitud del Generalísimo de marchar a su encuentro para resolver delicados problemas de gobierno. La llegada de Maceo se produjo el 5 de diciembre, sin que los patriotas habaneros hicieran contacto con su grupo hasta el día 6, en cuya madrugada Ricardo Sartorio, jefe del Regimiento Goicuría y Baldomero Acosta, su segundo al mando, hicieron contacto con el Titán en el ingenio La Merced, después de larga caminata de este por la costa. Los demás hombres y los caballos habían quedado en lugar seguro por lo que se vieron obligados, después de la entrevista, a salir en su busca. En las primeras horas de la tarde volvieron a hacer contacto con Maceo, que impaciente por la espera había reanudado la marcha. Se dirigieron entonces al ingenio Garro donde Maceo se entrevistaría con Lacoste. De esta entrevista nació la idea de un posible ataque a Marianao.

Al resto de las fuerzas se había cursado la orden de concentrarse en San Pedro. El Comandante Andrés Hernández, al frente del resto del Goicuría llegó a San Pedro en la tarde del 6 de diciembre. Los sucesos del 7 de diciembre de 1896 “Estaban con el Caudillo en el momento de la sorpresa: José Miró Argenter, Pedro Díaz, Silverio Sánchez Figueras, Baldomero Acosta, Juan Delgado y Ricardo Sartorio. El autor de las Crónicas de la Guerra solazaba a Maceo y los allí congregados con pasajes de sus relatos, cuando oyeron los primeros disparos. Las descargas dejaron estupefactos a todos los presentes en el Cuartel General.

«¡Fuego, fuego en San Pedro!, gritó Baldomero Acosta. Rápidamente una parte del grupo [...] salió en busca del enemigo.»

Los hombres del Goicuría que estaban ubicados en el sector norte, justamente el opuesto al punto del ataque, salieron a combatir sin tener consigo a ninguno de los jefes que estaban, a la sazón, reunidos con el general Antonio; al moverse indisciplinadamente, pero con muchísimo arrojo, descubrían el sector que tenían que defender. Cuando las fuerzas españolas contratacadas se replegaron por la carretera del Guatao y ocuparon la cerca de piedra de la Finca Bobadilla, se acercaron al sector que cubría el Regimiento Goicuría, pero para hacerles frente ya quedaban en el área sólo una porción de sus efectivos.

La caída del Titán de Bronce fue un golpe demoledor cuyos efectos hay que considerar en el desarrollo de la guerra en La Habana. Después de la caída de Maceo, Baldomero Acosta volvió a ocupar la jefatura del Regimiento.

El 8 de marzo de 1897 está registrada una importante acción en la zona de operaciones del Regimiento Goicuría, al ser atacado el fortín de la finca Maurín y resultar herido el Capitán Corcada que mandaba las fuerzas libertadoras.

Con fecha 28 de mayo de 1897 el Teniente Coronel Acosta, grado conferido por el Presidente en Campaña Salvador Cisneros Betancourt, recibió una comunicación de Perfecto Lacoste, intermediario de otra recibida del exterior, en la que le imponía la necesidad de ejecutar una resonante acción.

El 27 de junio del propio año otro ataque a Maurín por fuerzas de caballería al mando de Baldomero Acosta y Juan Delgado obligan a una retirada de los españoles con más de 80 bajas. Aun cuando el propio Acosta fue herido en esta acción, en ese mismo año combatió contra fuerzas combinadas de la guerrilla de Punta Brava y tropas regulares de Guanajay, Mariel, Hoyo Colorado y Marianao. En su retirada volvió a la carga en Encarnación y El Mamey con resultados desastrosos para las fuerzas españolas.

A finales de julio los mambises de la región estaban listos para el ataque a Marianao. El día 28, una fuerza mambisa compuesta por 400 hombres ejecutó el plan. Al frente de la tropa figuraba Acosta y también Juan Delgado, Jefe del Regimiento Santiago de las Vegas, que se había sumado al apoyo del Goicuría para esta acción. El combate duró aproximadamente 3 horas y tuvo por escenario las principales calles de la localidad, con lo que se logró, a pesar de la censura, que los medios informativos de la capital y de la metrópoli, se hicieran eco del suceso. Semanas después Baldomero Acosta contrajo paludismo y el 6 de septiembre de 1897 salió al exterior para reponer su salud y cumplir una misión de servicio.

Antes de finalizar el año 1897 hubo otros importantes combates, tales como: “el macheteo de Gorrín a las guerrillas de Hoyo Colorado, Caimito, Vereda Nueva y Ceiba. En Cayo La Rosa, Banes, Corralillo, Callejón de Hoyo Colorado, Perdigón, San Pedro, Macastá, Unión, Zaldívar, Playa del Salado, El Tahoro y Jíbaro”.

Archivo:Clara Rivero y Juan Santos .jpg
De izquierda a derecha:
Clara Rivero Roque, vivienda del matrimonio Juan Santos y Clara Rivero Roque en El Cano, y bóveda en cementerio de El Cano.

El año 1898 volvió a ser período de auge en la incorporación de nuevos combatientes al Regimiento Goicuría, registrándose alrededor de 236 incorporaciones, la cifra más alta en la historia de esta fuerza. No fue solo este el indicador de pujanza de la Revolución en la zona, también el laborantismo continuó creciendo y para septiembre de ese año se creó el Club Patriótico Juan Bruno Zayas, en El Cano, del que fue electo primer presidente Carlos Ramírez Oquendo y uno de sus vocales. Juan Santos y su esposa Clara Rivero Roque se habían vinculado a la guerra desde mucho antes. Fue particularmente importante la actividad desplegada por Clara, para su actividad de laborantismo utilizó el seudónimo de Teodora, que ejecutó verdaderas proezas en el trasiego de correspondencia, medicinas, parque, armas, alimentos; acciones todas que la vincularon con grandes patriotas de la guerra: Máximo Gómez, José María Rodríguez, Juan Delgado, Baldomero Acosta, Perfecto Lacoste, entre otros. En justo reconocimiento a su meritoria labor recibió el grado de Capitana.

Caída de Juan Delgado

Una acción adversa a las fuerzas cubanas se produjo el 23 de abril de 1898, cuando el Coronel Juan Delgado y sus hermanos el Comandante Donato y el Capitán Ramón, se dirigían a la finca Pastrana, en El Cano, propiedad de la colaboradora mambisa Lolita Pastrana. Estos fueron sorprendidos por la guerrilla volante de Peral y en el encuentro caen los tres oficiales Delgado, su asistente Eugenio Pedroso y otros patriotas hasta el número de veintiuno.

Armisticio

El 12 de agosto del propio año, se firmó el armisticio con el que comenzó un período en el que las huestes mambisas permanecieron en campamentos alrededor de los poblados.

El 4 de diciembre se produjo la entrada de los libertadores en El Cano. Alrededor del parque les recibió el pueblo alegre y engalanado, encabezado por los esposos Juan Santos y Clara Rivero y el Club Patriótico de ese pueblo.

República Neocolonial

División político–administrativa de 1902

A partir de 1902 se estableció la subordinación del territorio de La Lisa en su extensión municipal actual, a dos municipios o ayuntamientos. Al ayuntamiento de Marianao se subordinaban los barrios que antes habían pertenecido al municipio El Cano, que perdió su condición de municipio, y el barrio La Lisa; al ayuntamiento de Bauta se subordinaban Punta Brava y Guatao.

Desarrollo económico–social

La Guerra dejó pavorosas pérdidas en todo el territorio nacional; en La Lisa la producción agropecuaria era casi inexistente. No obstante, las tierras de El Cano produjeron excelentes cosechas de tabaco en las primeras décadas del siglo XX.

Alfarería

Producción típica de vasijas de barro en El Cano.

El Cano alcanza un mayor nivel de desarrollo, al introducir en las producciones alfareras mejoras técnicas, sin abandonar las formas originales. Hacia 1925 existían en El Cano alrededor de 4 ó 5 tejares grandes y 10 pequeños, con una elevada demanda de su producción de cazuelas de barro, utensilio imprescindible en los hogares del país, así como de otros objetos.

El desplome de algunos tejares durante el ciclón del 26 provocó una sensible reducción de las producciones, lo que unido a la competencia que ofrecían los útiles de cocina elaborados con aluminio, hizo que la industria alfarera de El Cano atravesara una profunda crisis, de la que se iría recuperando durante la década del 40, al introducirse una tecnología más avanzada para elaborar tubos de barro para instalaciones sanitarias y la incorporación de nuevas producciones como bebederos para conejos, de gran aceptación popular.

Transporte

Intersección de Ave. 51 y calle 160

El sector del transporte en el territorio experimenta cierto desarrollo desde las primeras décadas del siglo XX, según evidencian los siguientes datos: entre 1906 y 1920 se inaugura por una empresa inglesa, de la línea del ferrocarril entre La Habana y Guanajay, que atravesaba Marianao a Arroyo Arenas y Punta Brava.

Se estableció el 22 de noviembre de 1920 de la línea de Ómnibus Automotores entre El Cerro y La Lisa y la construcción de la carretera Central hacia finales de la década del 20.

En años posteriores se produce una ampliación de las terminales con el paradero de las Rutas 21 y 22 (51 y 160), y la construcción de una nueva terminal en el reparto Sans Souci para la ruta 43. Además, otras líneas de ómnibus tenían sus travesías a través de La Lisa (Ruta 35 hacia Pinar del Río, Autobuses Modernos hasta El Cerro, Ruta 48 hacia Ceiba del Agua (Caimito) y Alquízar, etc.)

Pequeñas industrias

El período republicano se caracterizó por un bajo nivel de desarrollo económico en el municipio. Pequeños establecimientos industriales, con técnicas atrasadas que no alcanzaban a superar la cantidad de 100 trabajadores, dedicados fundamentalmente a confecciones textiles, producciones de calzado, fósforos, brochas, papel de techo, envasaderos de vegetales, tenerías, carpinterías, la Fundición General Atanasio López (Calle 170 y 51); Fábricas de Calzado Cary y Llanza en Punta Brava; fábrica de alimentos para aves Rodsay (81 y 160); Fábrica de caramelos (204 y 81); Fábrica de papel de Techo (65 y 190); Carpintería Bailey (164 y 65); Fábrica de Fósforos Acebo y Mejías (160 e/ 65 y 59) y la Fábrica de Almohadillas Sanitarias (192 y 81). Aunque algunas de estas pequeñas industrias se remozaron o ampliaron, no resultaron representativas de un sostenido crecimiento, sus producciones no siempre pudieron trascender el marco local o provincial.

Educación

Clorinda Ruiz Braña.

La situación educacional en la etapa neocolonial en el territorio, se corresponde con la política de desgobierno e indolencia que caracterizaba a toda la República. Durante la alcaldía del General Leyte Vidal, primer alcalde de Marianao en 1899 durante la Ocupación Militar Norteamericana, se procedió a la creación de nuevas aulas y activó el funcionamiento de una escuela de varones en La Lisa, donde además se creó un aula para niñas bajo la responsabilidad de la maestra Sabina Martínez.

En las primeras décadas del siglo, aparecen referencias a una escuela pública para varones en Punta Brava, otra en el Guatao y dos en El Cano una para varones y otra para hembras, en la primera de las cuales desempeñaba su magisterio Clorinda Ruiz. Hacia 1910 hay referencias de la existencia de una escuela pública en Arroyo Arenas. En 1920 comenzó a prestar servicios como directora del centro escolar de La Lisa la primera maestra normalista que tuvo el territorio Elvira Carreño Herrera.

En la década de 1930 se constituyó el Colegio de Maestros Normalistas y Equiparados. Esta agrupación en La Lisa participó en protestas por el desempleo de maestros, por el no pago de sus salarios, y en el movimiento huelguístico contra Machado, lo que lo ubica entre los sectores más activos de la sociedad liseña.

Escuela M.Sanguilí.
Liceo de Punta Brava (Década de 1950)

La primera construcción diseñada para escuela se realizó en 1944 en la localidad de Arroyo Arenas y adoptó el nombre de “Manuel Sanguily”, con ella se sustituyeron dos viejas casonas que hacían esa función, a la que siguió otra en Punta Brava que se denominó “La Rosa Blanca”, y en los alrededores de La Concepción, exactamente en Cruz de Piedra, una escuela bautizada por Batista con el nombre de su madre Carmela Zaldívar y una creche en la Novia del Mediodía, obras en el entorno de su Finca Kuquine, para enriquecer su imagen y favorecer la situación de sus empleados y de los que servían a otros parientes instalados en esos predios.

Así mismo, después de muchas gestiones y peticiones populares de los vecinos por las pésimas condiciones e insuficiencia se emprende la construcción de un nuevo centro escolar en el poblado de El Cano, actual Escuela Primaria Clorinda Ruiz, que quedó inaugurado en septiembre de 1958. Las escuelas públicas del barrio de La Lisa para la década del 50 permanecían en deplorables condiciones materiales (Nº 7, en 158 y 53; Nº 43, 162 y 49 y Félix Varela, en Alturas de La Lisa.)

En la década de 1950 funcionaban como escuelas privadas la Saint Thomas Academy, Hamilton, Academia Barrios, Alcover, Sara Lorenzo y Bray, así como la exclusivista escuela de monjas americanas creada a finales de esa década; la escuela parroquial anexa a la iglesia de El Cano, otra del mismo tipo en la iglesia de Punta Brava y un Kindergarten vinculado a la Logia masónica de Punta Brava. En el Guatao dos pequeñas escuelas la Riquelme y la Tamayo y otra dirigida por monjas completaban el cuadro de este tipo de instalaciones en territorio.

Los datos del censo de 1953 son significativos para resumir la situación de la educación en La Lisa, sumando las cifras que allí se ofrecen sobre distintos barrios o poblados que hoy conforman el municipio. Sólo el 41% de las personas en edad escolar asistían a la escuela, en esta área se localizaba un 19,2% de analfabetismo en base a la población de 10 años o más, y en la parte rural de El Cano, Arroyo Arenas y Wajay, que entonces era parte del territorio, solo el 2% de la población era universitaria.

Salud pública

La situación de la salud pública en el territorio que hoy constituye el municipio La Lisa durante la etapa que se analiza era reflejo de la situación del país, solo se contaban con los servicios de la mal atendida Casa de Socorros de Marianao y otra en peor estado ubicada en Punta Brava. En 1938 el Dr. Alberto Fernández Bravo, quien más tarde fuera el Presidente de la Sociedad de Medicina y Cirugía cuando esta se crea en 1942, crea en La Lisa (190 y 49) la clínica privada María Milagrosa, que se traslada después a Marianao.

En la década del 40 el Dr. Bernabé Iruretagoyena sitúa su consultorio para enfermos mentales crónicos en la antigua Quinta Villa Flora (152 / 67 y 69, donde además crea una clínica para ingreso de pacientes de ambos sexos cuyo costo mensual era de $150. Durante la alcaldía de Francisco Orúe se construyeron algunos centros de socorro, correspondiendo en El Cano la inauguración del “Julio Galetti” (284 y 81).

Durante los años 50 se crearon en el país algunas instituciones de corte filantrópico, así se construyeron en este territorio, la ONDI de Arroyo Arenas (actual policlínico Dr. Pulido Humarán) y la ONRI de La Lisa (actual Hospital Ortopédico Frank País). Ambas instituciones aparecieron como parte de la obra “filantrópica” de Marta Fernández Miranda de Batista. Nacían con fondos provenientes de colectas, además de la donación de parte del capital necesario por la Organización Mundial de la Salud.

En marzo de 1955 La Lisa fue azotada por un brote de fiebre tifoidea. El territorio tuvo más esfuerzo individual de profesionales de la salud, radicados en él e interesados en aliviar en algo la difícil situación de sus habitantes, que, de las instituciones y organismos destinados a ella, ejemplo de ello fueron: los doctores Rafael Piña, Julián Castelló, Romero Miranda, Heriberto Hernández y Julián Valladares Tabío, entre otros. Este último llegó a ejercer la alcaldía de Punta Brava, poblado en el que radicó durante 14 años. Así mismo el Dr. Miguel Jáuregui Pérez, clínico y psiquiatra, junto a su esposa Aurora Rodríguez Coro, enfermera auxiliar, en medio del terror que desató la tiranía de Batista contra los combatientes clandestinos, colaboraron con el Movimiento 26 de julio y prestaron asistencia al joven revolucionario Arístides Viera en ocasión de encontrarse herido.

Deporte

A pesar del profundo abandono por parte de las instituciones del estado, el territorio en el orden deportivo puede mostrar ejemplos de figuras, que de forma individual y con enormes esfuerzos, forman parte hoy de la historia del deporte en Cuba, entre estos se destacan: Rafael Fortún, Campeón Centroamericano de Atletismo y Andarín Carvajal que llegó a ocupar el 4º lugar en una Olimpiada, ambos residentes en La Lisa y algunos peloteros procedentes de las novenas de Punta Brava llegaron a integrar las nóminas del béisbol profesional de los Estados Unidos.

A lo largo de la República Neocolonial se registra la construcción de algunas instalaciones destinadas al deporte, ninguna de ellas con apoyo del estado, sino de los vecinos, propietarios, miembros de sociedades y algunas escuelas privadas que estimularon su creación: un frontón (158 y 43) que quedó destruido con el ciclón de 1926 y que a pesar de los esfuerzos realizados no pudo ser reconstruido, por lo que devino irregular área de patinaje, la fundación el 5 de octubre de 1945, de la Sociedad Juventud Deportiva, hoy Gimnasio Roberto Balado (156 / 53 y 57), dedicada fundamentalmente a voleibol y juegos de mesa se encargó de la construcción por estas décadas de dos campos de béisbol en Punta Brava, uno en La Lisa y otro en El Cano y el inicio de la construcción a finales de los años 50 de un campo de tiro en el Reparto La Ermita que fue concluido por la Revolución.

Cultura

Las condiciones del país no favorecían el desarrollo físico espiritual en los habitantes de la localidad, sin embargo, proliferaban las peleas de gallos, de perros, los juegos de azar y el billar. Aparecieron también, para justificar la depredación del erario público, algunos parques y merenderos para la recreación infantil.

Los cines de barrio, por su módico costo, constituyeron el lugar de expansión por excelencia para los residentes de la localidad. Punta Brava, Arroyo Arenas y El Cano contaron con un cine cada uno, mientras que en La Lisa existieron dos. Los liceos o sociedades recreativas fueron representativas de las grandes divisiones sociales de la época.

En 1919 se inauguró en Arroyo Arenas un Liceo para blancos que fue remozado y ampliado en la década del 50 por compromisos del dictador Fulgencio Batista con vecinos de Arroyo Arenas (hoy Casa de la Cultura), más tarde se inauguró la Sociedad para Negros ubicada en el lugar que hoy ocupa el correo.

A pesar de las diferencias raciales y sociales que establecían fueron las sociedades recreativas las promotoras, en alguna medida, de la cultura, de tradiciones y contribuyeron a formar un sentido de pertenencia a la localidad, ejemplo de sus actividades fueron los bailes de salón en Punta Brava entre los que se destacaban el Baile de las flores, De las Camisas Raras, Adiós al Carnaval o el de Las Guayaberas, entre otros.

La mayor y más importante celebración del pueblo de Arroyo Arenas fue la fiesta religiosa que cada año celebraba para venerar a Jesús Nazareno del Rescate de Arroyo Arenas, considerado el Patrón del pueblo, la misma recibió en 1955 la condición de Santuario Nacional, otorgada por la alta jerarquía eclesiástica. Desde el punto de vista cultural es también importante registrar que, en el área de Arroyo Arenas, donde hoy se levanta la Planta de Sueros y Hemoderivados, se filmaron las primeras películas de Cuba en la década de 1930, las que se revelaban en la finca del frente, denominada El Dulce Nombre de María.

El salón Maresma en el Guatao (solo para blancos) era el sitio para bailes y fiestas campesinas típicas del territorio, el “Baile de los Conguitos” de indudable ascendencia esclava, en la llamada calle de la Laguna (hoy 48) del Guatao. La Fiesta del Alfarero en El Cano formó parte de las tradiciones culturales nacidas en la época de la República Neocolonial. Aparece en 1945 coincidiendo con el centenario de esa industria local patrocinada por los dueños de tejares que buscaron en estas fiestas una vía para aumentar sus ventas, en el último fin de semana de septiembre.

La Lisa propiamente dicha, contaba con el “Casino de la Lisa” (160 y 51) destinado a bailables, reuniones, y cenas protocolares de carácter oficial, fiestas privadas y otras actividades sociales. Los innumerables bares, prostíbulos, y otros centros de aparente recreación fueron consolidando a lo largo de la Avenida 51 la imagen de un territorio de escaso desarrollo cultural.

La situación de territorio donde se conjugaban el desempleo y la miseria de una parte de la población hacinada en ciudadelas, barrios de indigentes o en el mejor de los casos de inquilinos, con lujosas mansiones en repartos rústicos, no impidió que su ubicación a solo unos minutos de la capital, con fácil acceso, lo convirtiera en un lugar ideal para vicios y negocios sucios. Así surge en 1944 el cabaret Sans Souci ubicado en 51 y 222, en una villa de estilo español. Por supuesto solo la alta burguesía tenía acceso a esos salones, incluidos los jugadores profesionales, representantes de la mafia y de la política.

En Sans Souci se presentaron figuras de fama internacional: Tony Martín, Frank Sinatra, Kirk Douglas, Nat King Cole, Mario Moreno, Libertad Lamarque.

Solo podían entrar negros cuando se trataba de estrellas invitadas. A finales de la década del 50 Sans Souci comienza a declinar pues Tropicana, Parisién (Hotel Nacional) y Montmatre (23 y P) se imponen paulatinamente en el gusto de la burguesía.

Panteón municipal.
Portada del cementerio de La Lisa.
Casona en la Coronela.
Casona en Barandilla.

El territorio de La Lisa sirvió de residencia a importantes personalidades de la cultura cubana en los años de la República Neocolonial, entre ellos al trovador Sindo Garay, Ernesto Lecuona, Flor Loynaz del Castillo, la menor de los Loynaz, fue sin duda la poetisa una de las figuras más atractivas de las radicadas en el territorio, de personalidad compleja e inquieta, buscó en La Lisa un refugio acogedor que ella misma diseñó en la década del 40 y en donde vivió hasta su muerte ocurrida el 22 de junio de 1985.

Urbanización

En las áreas del actual municipio liseño el desarrollo de nuevas urbanizaciones propició no sólo el completamiento paulatino de las áreas parceladas en el siglo anterior, correspondiente a la estancia de Santa Ana y al potrero San Antonio Abad, sino además el ensanche urbano de La Lisa mediante la construcción de nuevos repartos poblacionales. El 26 de noviembre de 1914, la Cámara Municipal de Marianao autorizó el proyecto de urbanización de la finca Torrecilla dedicada hasta entonces a la producción de frutos menores.

El 25 de noviembre de 1918 el ayuntamiento marianense aprobó el proyecto presentado por la Sociedad Anónima “Fincas de recreo” para la creación del reparto rústico La Coronela, este nuevo reparto tenía una concepción urbana más moderna que el anterior. Poco tiempo después se llevó a cabo una división similar en terrenos agregados de la finca Barandilla.

A partir de 1945 se hace ostensible el ensanche de La Lisa, mediante la creación de nuevos repartos entre los que sobresalieron; [[Alturas de La Lisa (La Lisa)|Alturas de La Lisa autorizado el 28 de marzo de 1945; Ampliación de Alturas de La Lisa, el 7 de abril de 1948; Elena, 27 de agosto de 1948; Parcelación del Puente, 23 de marzo de 1949; Ampliación de Elena, 7 de agosto de 1950; Versalles, 7 de agosto de 1950; Ampliación de Versalles, 7 de febrero de 1951; Balcón de La Lisa, 7 de enero de 1952.

Todos estos repartos se fomentaron muy próximos a La Lisa y no constituyeron otra cosa que prolongación de esa primera urbanización, que dio origen a un amplio conglomerado ubicado entre los ríos Quibú y Jaimanitas.

Hacia 1953, La Lisa se enlazaba con el pueblo de Arroyo Arenas mediante una cadena de núcleos urbanos intermedios formados por los repartos San Gabriel (1940), Sans Souci, San Rafael y San Agustín (1950) y San Patricio (1951).

Este proceso de urbanización matizado por negocios se vio favorecido por el clima de corrupción político–administrativa que entronizaron en el país los llamados Gobiernos Auténticos. Estos repartos carecían de espacios para obras de uso social, porque se construía sin respetar lo establecido en el plan director.

A lo largo de la década del 50, los viales de los repartos Versalles, Barandilla y La Coronela serán prolongados, mejorados y se diseñan nuevas calles y manzanas. En los primeros meses de 1955 el tirano Batista anunció la construcción de una autopista que enlazaría Columbia con la carretera central a la salida de Arroyo Arenas.

En abril de 1956 estaba terminada y con ella se lograba el verdadero propósito de enlazar a Kuquine con una vía expedita a Columbia y se aprueban los proyectos para la creación de nuevos repartos: La Ermita y Country Club, se proyectaron para enlazarse con el reparto Riviera del Biltmore, Boulevard del Biltmore y Montecarlo, que se extenderían hasta Novia del Mediodía.

Rebeldía

La lucha entre partidos que se había manifestado desde el inicio de la República alcanzó carácter de enfrentamiento armado en agosto de 1906, cuando los liberales se enfrentan al presidente Tomás Estrada Palma y sus seguidores del Partido Moderado, exigiendo la anulación de las elecciones consideradas fraudulentas. Como resultado figuras de renombre nacional como los Generales Faustino Guerra (Pino), Enrique Loynaz del Castillo, Baldomero Acosta y Quintín Bandera; estos dos últimos desarrollaron algunas de sus acciones en la zona de La Lisa.

General Quintín Bandera

En La Habana fue el General Quintín Bandera quien encabezó el alzamiento antireeleccionista. Quintín desarrolló sus principales acciones en el territorio, con la detención del tren de la línea HabanaGuanajay en Arroyo Arenas, el requisamiento de armas y víveres en el mismo poblado, en El Cano y Wajay, así como el encuentro armado en Garro donde fue muerto el teniente de la Guardia Rural Gregorio Roque. En la madrugada del 23 de agosto el capitán Ignacio Delgado al frente de 40 soldados atacó el campamento de Quintín Bandera situado en la zona rural de La Lisa (Finca Torrens). Este y sus compañeros se defendieron valerosamente, pero fueron vencidos; el propio capitán Delgado dio muerte al heroico mambí.

La lucha contra la corrupción imperante y por reivindicaciones sociales en las primeras décadas del siglo XX también tuvo resonancia en La Lisa, así lo refleja con fecha 30 de diciembre de 1921, el periódico El Sol, “Chocan en La Lisa huelguistas y rompehuelgas”.

El 16 de enero de 1932 un grupo de revolucionarios constituyen en Punta Brava una sección comunista.

A principios de julio de 1933 trabajadores del transporte, de la tenería y de producciones textiles en la barriada, son los primeros en manifestar su protesta contra el régimen machadista. En el proceso de luchas que se desarrolló en el actual territorio del municipio La Lisa en esta etapa, se destaca el papel de la mujer en la figura de Alicia Sanfield, la cual participó en huelgas, en reuniones de los comunistas y en otras tareas de colaboración con el Partido, lo que la identifica como ejemplo de luchadora antimachadista.

Panteón Mártires en el Guatao.

En Punta Brava el Partido ABC, a la caída del dictador Gerardo Machado realizó arrestos y ajusticiamientos contra connotados machadistas, así como el incendio de la “Casa de Socorros” donde algunos buscaron refugio. A mediados de la década de 1930 se produjo una reestructuración del Partido Comunista en Punta Brava.

La década del 40 se caracteriza por un ascenso en la lucha del débil movimiento obrero del territorio, siendo los más destacados los combates librados por los obreros de la tenería, los del transporte, y los de la industria textil Cayo La Rosa (Bauta) con importante volumen de obreros de Punta Brava y sus alrededores.

La huelga fue el principal instrumento de lucha; en el caso de la tenería, en 1940 los curtidores hacen una huelga de brazos caídos, reclamando que fuera discutido el convenio de trabajo y la reposición de trabajadores que como represalia por las actividades sindicales fueron despedidos del centro, otras huelgas importantes se desarrollan en 1945 y 1948 por mejores salarios y el pago del retiro de los curtidores. En estas jornadas los logros se redujeron al derecho al retiro y a la creación de un panteón en el Cementerio de La Lisa.

En los transportistas la lucha por mejores salarios, contra la especulación, por la restitución de los despedidos y contra el aumento del pasaje animaron sus jornadas combativas, contra la división del movimiento obrero, y los gánsteres impuestos en el sindicato de Ómnibus Aliados. Mártires de esta lucha en el sector serían Eulalio García, trabajador de la Ruta 22 asesinado en una asamblea celebrada en Monte y Pila, presidida por Facundo Pomares Soler, donde se exigía un aumento de un 10% del salario, la cual fue asaltada por matones a sueldo; y Carlos Febles Lugo miembro de Partido Socialista Popular y trabajador de la Ruta 43, asesinado el 21 de octubre de 1948. Durante esta etapa los militantes comunistas agrupados en la sección de Punta Brava desarrollaron una gran combatividad en defensa de los obreros, fundamentalmente en los enfrentamientos librados en la Textilera Ariguanabo y en la fábrica de fósforos de Bauta durante los años de los llamados “Gobiernos Auténticos”.

Junto a estas formas de lucha, otras formas pasivas fueron: el no pago del pasaje, el paso lento en los viajes, la no afiliación al Sindicato Amarillo, afiliado a la CTK oficialista, y algunas protestas que concluyeron en el Ayuntamiento de Marianao o en el Palacio Presidencial con la intervención del Presidente de la República. Ejemplo de ello fue la manifestación de protesta unificada el 29 de septiembre de 1947 en la que un grupo de trabajadores permanecen 150 horas sin ingerir alimentos.

En 1951 se produjo una reorganización de los partidos políticos en Marianao al asumir Francisco Orúe la máxima dirección del Partido Auténtico. Orúe había ascendido a la primera magistratura del municipio Marianao el 10 de septiembre de 1948, precedido por una campaña política que prometió un gobierno dinámico y constructivo.

Las campañas contra la inmoralidad administrativa desarrollada por el PPC (O) le ganó la admiración y el apoyo de amplios sectores en especial de la juventud. En el barrio La Lisa se sumaron al Partido Ortodoxo más de 800 afiliados, apasionados seguidores de Juan Manuel Márquez y Eddy Chibás. Otro ejemplo significativo de que la Juventud Ortodoxa liseña fue mayoritaria, fue el distrito #2 (Lisa–Pocitos) donde el 90 % del Ejecutivo era de La Lisa.

En la madrugada del 10 de marzo de 1952 los toques finales de la acción golpista se fraguaron en la finca Kuquine, ubicada en la carretera del Guatao.

En el momento del golpe eran concejales por La Lisa los ortodoxos Ezequiel Barrios González y Armando Paz, este último caracterizado por ser un individuo timorato y conservador. No obstante, ambos se negaron a firmar los Estatutos Constitucionales, nacidos a la sombra del golpe de estado. El entonces alcalde Francisco Orúe fue, sin embargo, de los primeros en brindar su apoyo al sátrapa.

Los concejales ortodoxos antes mencionados integraron la oposición junto a Pedro Fumero quien era miembro de PSP y formaba parte de la Alcaldía.

Un ejemplo de las actividades de los ortodoxos contra el golpe fue la emisión de La voz de la Libertad pocos días después del 10 de marzo. Desde una pequeña planta que inicialmente había funcionado en Marianao y que tuvo que ser trasladada de forma clandestina para una casa en Medrano y San Miguel, La Lisa (hoy 158 # 4508, en días alternos a las 9 a.m., Juan Manuel Márquez, bajo el seudónimo de “El hombre X” fustigaba con su palabra vibrante a quienes en franca alevosía a la Constitución y con el respaldo yanqui habían usurpado el poder o se plegaban al tirano.

Pedro Véliz Hernández.

Otro ejemplo de combatividad del movimiento obrero se produjo en la industria textil Ribbon Fabric en La Lisa donde los obreros se apoderaron de la instalación para hacer patente su protesta contra la medida de clausura tomada por su propietario Francisco Onill que prácticamente les lanzaba al hambre; se recurrió a la policía para el desalojo del centro de trabajo; por otra parte el 10 de octubre de 1955 los obreros tejaleros como prueba de descontento con la política seguida por el régimen, protagonizaron una fuerte protesta frente a la Cámara Municipal, en reclamo por la rebaja de un 20% de sus salarios.

En una atmósfera de intensa lucha la ortodoxia se consolidaba en el territorio como una importante fuerza política conformada por una membresía joven entre la que se destacaban Pedro Gutiérrez, Gildo Fleitas López, Pedro Véliz, Pablo Agüero y Elpidio Aguilar Rodríguez.

Arriba izquierda: Roberto Negrín, Arriba derecha: Pedro Véliz, Abajo izquierda: Carnet de trabajador de la empresa de ómnibus a favor de Cristóbal Labra, Abajo derecha: Elpidio Aguilar.

Guerra de Liberación Nacional

De acuerdo con esas ideas se preparó el Asalto al Cuartel Moncada, segunda fortaleza militar del país y para apoyar esta acción, se decidió tomar simultáneamente el cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo.

En las acciones del 26 de julio de 1953 estuvo representada La Lisa, en el asalto al Moncada cayó Gildo Fleitas; al frente de las acciones por la toma del cuartel Carlos Manuel de Céspedes, en Bayamo estuvo el liseño por nacimiento Antonio (Ñico) López y, en las horas posteriores, víctimas de la represión desatada por la tiranía fueron asesinados Pedro Véliz Hernández y Pablo Agüero Güedes, el más joven de los combatientes.

Después de la acción revolucionaria del 26 de julio de 1953 el enfrentamiento a la dictadura de Batista en el territorio que es hoy municipio La Lisa, asumió diversas formas conjugándose el arrojo individual con la estrategia emanada de otras experiencias combativas como sería la lucha clandestina.

El Movimiento 26 de julio en el territorio que hoy conforma el Municipio La Lisa creó tres células: La primera de ella radicaba en Marianao y su jefe era el destacado revolucionario Arístides Viera. En ella militaron algunos jóvenes residentes en La Lisa.

La segunda estuvo situada en La Lisa. El centro fundamental de sus contactos fue el puesto de frutas, ubicado en 51 e/ 158 y 160, llamado “Placita de la Libertad”, dirigida por Francisco Guzmán Figueroa (Chin).

La tercera célula se vinculaba con revolucionarios radicados en Pinar del Río, abarcaba miembros residentes en Punta Brava, El Cano, y Guatao, y era su jefe Jesús Soto Díaz.

Entre las muchas actividades contra la tiranía que desarrollaron estas células del Movimiento 26 de julio se destacan los sabotajes con riego de puntillas para interferir el tránsito, rotura de teléfonos, venta de bonos, reproducción de La Historia me Absolverá, y venta de medicamentos para enviar a la Sierra, acciones de sabotaje y atentados a figuras de la tiranía en el territorio; 3 bombas fueron colocadas en el Casino de La Lisa para impedir que hablara el Alcalde de Marianao; participaron en el Asalto a una cantera ubicada en Alamar con el objetivo de obtener dinamita; produjeron un incendio en la Tenería de La Lisa.

Por otra parte, brindaron apoyo a la organización del Frente de Pinar del Río, así como a la quema de caña en San Pedro y Punta Brava, cortes en el fluido eléctrico; ponches de carros con alcayatas; localización y captura de armas, dinero y medicinas para enviar a la Sierra. En estas actividades se destacó Elpidio Aguilar Rodríguez y en la organización y preparación de los grupos revolucionarios de Punta Brava y Guatao.

En Punta Brava, el luchador clandestino Gonzalo González puso una bandera del Movimiento 26 de julio en la fachada del Liceo en 1956, en combinación con el conserje Antonio Cabrera que dejó abierta la puerta con anuencia del entonces Presidente del Liceo Candelario Cruz.

Hubo también participación liseña en acciones encabezadas por el Directorio Revolucionario y por otras fuerzas revolucionarias, así, por ejemplo, cuando el 13 de marzo de 1957 se produjo el Asalto al Palacio Presidencial, cayó en desigual combate el obrero del transporte residente en La Lisa, Adolfo Delgado Rodríguez.

Arroyo Arenas también fue escenario de acciones contra la tiranía; el Liceo fue sacudido por una bomba; el 26 de julio de 1958 flameó la enseña rebelde en la asta de ese centro recreativo, ante el asombro y la alegría de gran parte de la población y la rabia de los sicarios del tirano.

La propaganda cobró un auge extraordinario, hasta en la madriguera de Batista, su fastuosa Finca Kuquine, en los últimos días de noviembre de 1958 ondeó la bandera del Movimiento 26 de julio, gracias al valor y la audacia de Severino Rodríguez Pérez, campesino desmochador.

En este batallar, jóvenes de la localidad, en su condición de combatientes clandestinos, ofrendaron sus vidas en disímiles circunstancias. Elpidio Aguilar Rodríguez cae asesinado el 20 de marzo de 1958, frente al antiguo Coney Island Park, en la Playa de Marianao, junto al revolucionario Arístides Viera González.

Vicente Ponce

Otro ejemplo de desinterés material e identificación con la causa revolucionaria fue Domingo Fernández Alfaro, hombre de ciertos recursos económicos, y que entregó importantes sumas de dinero a la causa revolucionaria además de utilizar sus relaciones personales y su condición de contratista para vulnerar el acceso a Columbia. Tras la explosión en dicho campamento de un artefacto explosivo, fue detenido el 27 de mayo de 1958, sometido a terribles torturas y finalmente desaparecido de su celda sin que nunca más pudiera encontrarse rastro de su cadáver.

Vicente Ponce Carrasco es asesinado en el Castillo del Príncipe el 1 de agosto de 1958, mientras se encontraba en prisión por su actividad destacada en la huelga del 9 de abril, Pedro Gutiérrez muere en la acción de O´Farril y Goicuría, en compañía de Rogelio Perea y Ángel ''Machaco'' Ameijeiras, el 8 de noviembre de 1958, luego de enfrentar la inmensa superioridad en hombres del enemigo que los acorraló en el lugar y que recibió una fuerte resistencia de más de 4 horas.

Roberto Negrín, residente del Guatao y tesorero del Movimiento 26 de julio en Bauta fue asesinado el 19 de diciembre de 1958 y arrojado en las proximidades del Mariel. Estos mártires de la localidad, son símbolos de la cuota de sacrificio que esa generación entregó, para que llegara el triunfo de la Revolución.

Revolución en el poder

A partir del 1 de enero de 1959 se toman por la nueva dirección revolucionaria numerosas medidas indispensables para encauzar el ejercicio del gobierno, el sostén de la soberanía y el alcance de la justicia social. Las leyes 36, 37 y 106 dictadas en febrero de 1959, y después la ley 121 del 1 de marzo del propio año establecieron los gobiernos provinciales y municipales con la vieja división política heredada de la República Neocolonial y con las, desempeñadas ahora por Comisionados.

En el territorio que hoy forma el Municipio La Lisa quedó dividido en dos Municipios: Marianao que incluía los barrios o poblados de La Lisa, El Cano y Arroyo Arenas y el Municipio Bauta que incluía a Punta Brava y Guatao, esto significó subordinación provincial a La Habana.

Medidas revolucionarias

En 1961 se crean con igual subordinación las Juntas de Coordinación, Ejecución e Inspección (JUCEI) a nivel provincial y municipal.

La confiscación de todos los bienes mal adquiridos en la parte del territorio subordinado a Marianao permitió de manera inmediata la ocupación de propiedades y residencias de personeros de la tiranía entre las que se incluye la propia finca del Dictador Fulgencio Batista, Kuquine, la de Panchín Batista, la de Mujal, entre otras, así como la confiscación de una gran cantidad de joyas que con un valor aproximado de $35 000, fueron entregadas al recién creado Ministerio de Recuperación de Bienes Malversados. Luego se sumarán otras propiedades de personas que abandonaron definitivamente el país.

La eliminación del juego provocó el cierre inmediato del cabaret Sans Souci, negocio de casino y gallos que enriquecía a empresarios extranjeros inescrupulosos, así como de otras vidrieras de apuntaciones, billares, etc.

En 1960 recibió el impulso de las nacionalizaciones de las medianas y pequeñas fábricas existentes antes de la Revolución, entre las que se destacan la fábrica de muebles Bayley, Hoy Guillermón Moncada, la Textilera Versalles, la fábrica de papel de techo, tres pequeñas fábricas de zapatos y la fábrica de piensos Tropical, entre otras.

Ley de Reforma Agraria

En los primeros meses posteriores al triunfo revolucionario fue probablemente la Ley de Reforma Agraria, la más esperada y aclamada por el pueblo, quien bajo la consigna ¡La Reforma Agraria, Va!

La Ley de Reforma Agraria, aprobada en mayo de 1959, benefició en esta zona a 1 115 campesinos arrendatarios que constituían la inmensa mayoría en las áreas de Guatao y Punta Brava, como productores de caña de azúcar para el central Toledo, hoy Manuel Martínez Prieto; así como para otra importante parte de pequeños productores de frutos menores, viandas, cría de ganado y producción de leche, producciones que se extendían hasta El Cano y Arroyo Arenas, estos campesinos, convertidos en propietarios de sus tierras, se organizaron bajo la dirección del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) agrupados en dos bases campesinas: El Cano y Arroyo Arenas.

Entre las primeras acciones del Gobierno Municipal de Marianao estuvo la búsqueda de nuevas fuentes de trabajo. Con esa intención en octubre de 1959 esta municipalidad adquiere 7 caballerías de tierras de manos de arrendatarios, subarrendatarios y aparceros que recibieron la correspondiente indemnización. El terreno adquirido estaba situado en la margen izquierda de la carretera de La Lisa a El Cano, y poseía facilidades de transporte, agua, electricidad de alto voltaje y líneas telefónicas, lo que favorecía alcanzar su destino para zona industrial con el tiempo llegó a ser el cinturón industrial del actual municipio La Lisa.

Educación

Primaria A.Viera.

Entre los sectores priorizados por la Revolución desde el primer momento estuvo la educación.

De manera inmediata, a partir de enero de 1959, se amplió en el territorio el número de escuelas. El primer paso fue convertir en escuelas antiguas casonas y residencias de la burguesía y de antiguos colaboradores y familiares de Batista que habían vivido en la zona: ejemplo de ello es la actual Escuela Especial William Soler ubicada en la residencia de parientes del tirano que inicialmente fue escuela para niños campesinos, así como la escuela de la casona de 240 y 51, inaugurada por el propio Comandante Camilo Cienfuegos, que en aquél momento fue designada como Escuela No. 8, y que hoy lleva su nombre.

Simultáneamente se venía trabajando en la construcción del moderno centro escolar Arístides Viera en la calle 162 y ave 93, que fue inaugurado el 20 de mayo del propio año. Este centro fue el primero construido por la Revolución en el barrio de La Lisa en igual fecha quedaron inauguradas otras 2 construcciones más modestas destinadas a escuelas rurales: la “Evelio Faret” en la finca “El Morado”, así como la “Conrado Duany” en la finca “Pacheco” en Arroyo Arenas Paralelamente.

En ese propio año, se organizó la Campaña de Alfabetización que, en La Lisa, como en el resto de la capital, tuvo su mayor fuerza en las Brigadas Patria o Muerte. Cada uno de los 11 barrios con que contaba Marianao fue dividido en 14 zonas. En la zona que hoy ocupa el municipio La Lisa, por tener una extensa área semirrural participaron también brigadistas “Conrado Benítez” y se crearon Brigadas Especiales Campesinas que desarrollaron su labor en la zona de El Cano, Wajay, Guatao y Punta Brava. En La Lisa se alfabetizaron aproximadamente mil personas de todas las edades, ese fue el resultado más hermoso e importante de esta batalla.

Salud pública

En la esfera de la salud la Revolución heredó de la República, en el actual territorio del municipio La Lisa, poquísimas y mal atendidas instalaciones.

Uno de los primeros pasos encaminados a dar respuesta a la demanda de atención médica, fue en la barriada de La Lisa la revisión de las obras de construcción de la Casa de Socorros, actual policlínico Aleida Fernández Chardiet, iniciadas bajo el mandato del alcalde Francisco Orúe, hasta demostrar los costos alterados, un verdadero negocio de enriquecimiento ilícito. Esta obra fue concluida bajo la nueva dirección revolucionaria, y esta le convierte en la primera instalación del país con la concepción del trabajo integral de salud para la comunidad.

En el período posterior a abril de 1961 y hasta 1976 no se emprendió en el territorio obras importantes para infraestructura de atención a la salud.

Urbanización

Durante el segundo año de la Revolución se inició el proceso de construcción de viviendas ejemplo el reparto Gerardo Abreu Fontán en el Balcón de La Lisa al que fueron trasladados los pobladores del llega y pon de Los Quemados.

En la zona de Barandilla, se otorgaron en 1961 las primeras casas del hoy conocido como Barrio Nuevo que estaban destinadas a sustituir una parte del Reparto Zamora, barrio insalubre de Marianao. Este reparto adoptó el nombre de “Quintín Bandera”, aunque la tradición oral ha impuesto el de Barrio Nuevo.

En una extensa área despoblada del Balcón de La Lisa en ave 81 y 240 se inició la construcción de un reparto que daría albergue al resto de las familias del reparto Zamora de Marianao y en años posteriores el reparto continuó creciendo con nuevas construcciones, hasta conformar el actual reparto “Bello 26”.

En la zona aledaña a la Autopista que conduce a San Antonio de los Baños, se produjo la construcción de otro importante asentamiento que debía sustituir un barrio insalubre aparecido con anterioridad alrededor del Autocine Novia del Mediodía.

La construcción de este reparto se inició el 13 de noviembre de 1967 y fue inaugurado 44 días después, el 6 de enero de 1968 con la presencia del Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz. Contó inicialmente con 120 casas del tipo prefabricado.

En el acto inaugural Fidel planteó a la multitud el problema del nombre que denominaría a la nueva comunidad. Fue aprobado por todos “Valle Grande”, en tributo de recordación al Comandante Ernesto Guevara. El crecimiento urbano en el territorio continuó a ritmo acelerado.

En 1963 se entregaron para ser habitadas las primeras 250 viviendas bajo la concepción del Movimiento de Microbrigadas. El punto de partida fue la visita que el 29 de octubre de 1970 hizo el Comandante en Jefe Fidel Castro a la Escuela de Cuadros de Mando Agrícola, ubicada en 222 y Ave 25, Fidel sugirió la idea de la edificación de viviendas en dicha área para los profesores, alumnos y trabajadores de dicho centro. Esta experiencia, apenas iniciada, se extendió al área de San Agustín, reparto residencial que comenzó a urbanizarse en la década de 1950, y marcaba el inicio de la solución al acuciante problema de la vivienda.

En 1979 se inauguró en el territorio el reparto XX Aniversario, en las cercanías de Punta Brava. En los últimos años del siglo XX se crea la comunidad “La Victoria” proyecto dirigido a la eliminación definitiva del barrio insalubre existente en las márgenes del río Quibú.

En 1962 la extensión territorial de El Cano comprendía desde Arroyo Arenas a Cuatro Caminos del Chico, no rebasaba los 6 000 habitantes, de los cuales alrededor de 3 000 vivían en la zona urbana compuesta por 374 casas y el resto en áreas rurales donde se enclavaban unas 200 casas.

Enfrentamiento a la contrarrevolución

El Cano, uno de los poblados más alejados de la influencia del Municipio Marianao al que estaba subordinado, contó con una parte de su población, especialmente jóvenes que se incorporaron de inmediato a las tareas de la revolución y que formaron parte de las MNR, CDR, FMC y otras organizaciones políticas y de masas; sin embargo, también existía una contrarrevolución muy activa y organizada. El núcleo fundamental de las fuerzas contrarrevolucionarias estaba integrado por los dueños de comercios, tejares y fincas, los que además ponían sus propiedades, vehículos y dinero al servicio de reuniones contrarrevolucionarias, de sabotajes, del comercio ilícito y de todas aquellas acciones que contribuyeran al descontento de la población.

En mayo de 1962 una posta de la milicia en la finca “Los Mameyes” fue agredida, de donde resultó un miliciano herido, sin que se pudiera descubrir a los autores del hecho. Las fuerzas del Ejército Occidental que estaban en los alrededores de la zona fueron advertidas de la presencia en ella de elementos contrarrevolucionarios.

El 29 de mayo en horas del atardecer, relata la investigadora Ana Monroy, las tropas militares tuvieron conocimiento de que en zonas aledañas a esa unidad se celebraba una reunión de aproximadamente 15 hombres. Fue destinada una patrulla de reconocimiento y a la voz de “Alto” los que allí se encontraban emprendieron la huida, produciéndose de inmediato un intenso tiroteo en el que falleció instantáneamente el joven Miguel Ángel Escalante, resultó herido José A. González (Pichile) y fueron detenidas otras cinco personas. Más tarde se comprobó que se trataba de jugadores.

La contrarrevolución actuó con rapidez, al amanecer del 30 se produjeron las primeras reuniones, adquirieron tela negra para colocar crespones en las casas y crearon una comisión nutrida para recolectar dinero para los funerales e incitar al cierre de los comercios. La confusión que creó entre los vecinos este comportamiento hizo que muchas personas que no eran contrarrevolucionarias se sumaran a estas manifestaciones, cuya apariencia era solo luctuosa y de solidaridad con las familias afectadas.

Inmediatamente fue creada una Comisión al frente de la cual actuaba Ramón Calcines como miembro de la Dirección Nacional de las ORI (Organizaciones Revolucionarias Integradas), quien se encargaría junto a otros representantes de las organizaciones revolucionarias locales de investigar lo sucedido y disponer las medidas oportunas.

En primer lugar, se determinó la intervención y confiscación de las propiedades de todos aquellos que se habían involucrado en actividades contrarrevolucionarias. Una vez aplicada esta medida se hizo necesario crear un órgano local que administrara los comercios de forma tal que los servicios a la población continuaran ofreciéndose con eficiencia. A tal efecto se dictó la Resolución 612-A del Comisionado Municipal de la JUCEI de Marianao mediante la cual quedaba constituida la Comisión Económica de El Cano, primera forma experimental de gobierno local. Las fincas fueron entregadas para su administración por el INRA.

Inmediatamente se determinaron otras medidas de carácter político. Se inició el proceso para la construcción del PURSC (Partido Unido de la Revolución Socialista de Cuba) y El Cano devino en el Primer Seccional del PURSC en el país, en asamblea celebrada el 14 de octubre de 1962.

Desarrollo político y socioeconómico

A finales de la década del 60 el sector que con mayor pujanza se proyectó y ejecutó en La Lisa fue el de la industria sidero–mecánica. En mayo de 1965 se inauguró el Laboratorio Central para el Desarrollo Metalúrgico.

Hacia 1967 se inició el desarrollo de un plan de transformaciones alrededor de la capital, denominado Cordón de La Habana Dentro de esta concepción se utilizó el área de La Lisa para experimentar el procedimiento de siembra de las cortinas rompe vientos.

En julio de 1966 en virtud de convenios anteriores establecidos con algunos países socialistas por el comandante Ernesto Guevara en su época de desempeño como Ministro de Industrias, comenzó a funcionar el primer horno, de los 10 que llegaría a tener, del Complejo Industrial Combinado del Vidrio Amistad Cubano–húngara ubicado en la parte segregada a la antigua Finca Coca, inmediata a la calle 240.

En el sector industrial otros importantes centros se suman al esfuerzo productivo que en el actual territorio de La Lisa se sostiene en estos años: las fábricas de calzado particularmente en Punta Brava; la Fábrica de papel de techo 1 de Mayo impermeabilizantes asfálticos; la Fábrica de oxígeno 1 de Mayo, la Julio Antonio Mella de prefabricados de El Cano con resultados ascendentes.

Así se produjo el desarrollo de las empresas industriales que ya existían en el territorio y se crearon otras nuevas industrias como: Empresa de Producciones Metálicas y de Aluminio, Empresa de Producción Mecánica del MINAZ (TASIA); a los que se suman industrias productoras de medicamentos como la Planta de Sueros y Hemoderivados, el Centro de Producción de la Vacuna Antimeningocóccica y las fábricas de Insulina y de tabletas; Taller de Prótesis y Óstesis Frank País y el Centro de Histoterapia Placentaria.

Hospital Ortopédico Frank País y monumento en recordación a este mártir en dicha instalación.

A finales de la década del 80 surgió el movimiento de creación de contingentes. En La Lisa se asentó por iniciativa del Comandante en Jefe el [[Contingente Blas Roca Calderío con aproximadamente 3 000 constructores.

Particular importancia tuvo para el territorio del municipio La Lisa el desarrollo del Polo Científico del Oeste de la capital, Instituto de Geofísica y Astronomía, al Centro de Investigaciones Metalúrgicas, al Instituto de Investigaciones Porcinas y al Instituto de Investigaciones para la Industria Alimenticia; además de completarse la ampliación del Complejo Científico Ortopédico Internacional Frank País y de inaugurarse el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí y el Centro de Investigaciones Aplicadas a la Salud Carlos J. Finlay.

En la década de los 90 el cuentapropismo en el territorio alcanza la cantidad de 4 855 trabajadores por cuenta propia con predominio de los servicios, en particular los gastronómicos. En igual sentido se expresan las licencias otorgadas a cuentapropistas relacionados con el transporte. El problema de la tierra adquirió nuevas dimensiones en la última década; se redujo el área agrícola a 73, 8 caballerías, y se desarrollaron nuevas formas de agricultura urbana, así como otros planes de mayor especialización.

Continuidad de la obra educacional

Estuvo garantizada desde esos primeros años. El primer círculo infantil que se construyó en el territorio se inauguró en 1962 con el nombre del famoso escritor para niños Hans Cristian Andersen; en escuelas primarias se construyeron en este período, entre otras la José María Pérez que inicialmente se llamó Unidad Revolucionaria, Fernando Chenard, José Carlos Mariátegui, y Latinoamérica Libre.

Primer círculo infantil construido por la Revolución en La Lisa.

La primera Secundaria Básica construida fue la Osvaldo Rafael Sánchez en Barandilla, para los centros tecnológicos y las escuelas especiales fueron adaptadas y ampliadas instalaciones ya existentes. Hacia 1975 el territorio contaba con 74 instituciones educacionales, que absorbían una matrícula de aproximadamente 28 000 alumnos. En lo sucesivo se crearon nuevas instituciones educacionales como la Facultad Universitaria de Farmacia y Alimentos, la Universidad de las Ciencias Informáticas y otros centros docentes de alto nivel y carácter especial como son la Escuela Provincial del PCC Orlando Pantoja Tamayo “Olo Pantoja” y la Escuela de Cuadros Sindicales Lázaro Peña.

En los primeros años de este siglo puede mostrar un alto desarrollo en la investigación científica educacional expresada en la graduación de más de 270 másteres en Ciencias de la Educación.

En la primera década del siglo XXI La Lisa cuenta con 80 centros educacionales, con una matrícula total de 24 222 estudiantes en los distintos niveles de educación. Se han incorporado un nuevo Hogar de niños sin amparo familiar, 2 institutos preuniversitarios y los centros ubicados en la comunidad El Morado que pasaron a subordinación de este municipio, entre otros.

Desarrollo cultural

El trabajo cultural, afianzado en el rescate de tradiciones de la zona tales como la música campesina y la artesanía del barro, se amplió con el trabajo de los instructores de arte que y muy especialmente con el trabajo artístico con el vidrio soplado que pronto constituyó un sello de identificación del territorio.

La radicación en La Lisa del importante artista plástico y promotor cultural Domingo Ravenet durante los 10 últimos años de su vida constituyó un importante aporte al patrimonio cultural de esta localidad.

Domingo Ravenet.

En el orden cultural el salto cualitativo del municipio se produce a partir de 1982 al crearse un grupo de instituciones culturales básicas en el Municipio. Se cuenta con Casas de Cultura en Punta Brava, El Cano, Arroyo Arenas y San Agustín; con la Biblioteca Municipal que tiene además de su instalación central, dos subsedes en El Cano y Punta Brava respectivamente; el Museo Municipal, además de otros dos museos de temáticas especializadas:

La Galería de Arte Domingo Ravenet, desde su creación en 1982 ha desarrollado un importante trabajo de promoción de las artes plásticas, con artistas locales, nacionales o de otras latitudes.

En el desarrollo cultural del territorio se incluyen, además, proyectos comunitarios, y acciones culturales, así como eventos, tales como la Jornada de la Cultura Liseña, el Festival de la Cultura Popular Sindo Garay, el de Décima Mural, el de teatro “Tocororo”, el Simposio de Estudios Socio- Culturales e Históricos y la Pluma de Cristal. Tres Video Club juveniles en el Reparto Elena, Versalles y San Agustín. Entre los proyectos de mejores resultados se destacan: “LASA”, “Orquesta de Guitarras Vocal Clave de Sol” y “Coloreando mi barrio”.

La masonería ha sido tradicionalmente fuerte en Punta Brava, Arroyo Arenas, y La Lisa; en la de Arroyo Arenas se protegió la vida en alguna ocasión al revolucionario Juan Manuel Márquez.

En el periodo revolucionario el trabajo cultural procuró desde los primeros años encauzar las tradiciones culturales, por lo que se mantuvieron las peñas o guateques campesinos, a veces por generación espontánea entre los aficionados, en los que las controversias jugaban el papel fundamental.

Importante ha sido la influencia de los Joven Club de Computación y Electrónica para los liseños en las ultimas 3 décadas. Existiendo cinco de ellos en el municipio, enclavados en las comunidades de Alturas de La Lisa, Balcón Arimao (La Lisa)Balcón Arimao, San Agustín, Arroyo Arenas y Punta Brava.

Asimismo, la Fiesta del Alfarero celebrada anualmente en el mes de septiembre, devino, despojada de su carácter mercantil y competitivo, en la más importante manifestación de arte popular del actual municipio.

Deporte

Roberto Balado.

La práctica del deporte masificada ya en el territorio, amplió sus instalaciones en el período posterior a 1976 con la construcción del “Gimnasio de la Amistad” inaugurado en 1987 y equipado para entrenar boxeo y karate, un gimnasio de pesas y terreno de baloncesto en Punta Brava, instalaciones futbol y academia de ajedrez en San Agustín.

El boxeo, en su recién acondicionado Gimnasio 13 de Marzo continuó siendo un deporte de arraigo en el territorio, al igual que el béisbol.

En el orden deportivo, el boxeo tenía ya en La Lisa una tradición conquistada.

El béisbol, deporte nacional con particular arraigo en Punta Brava, desplegó también sus potencialidades. En 1960 estaban inscritos por La Lisa para el campeonato beisbolero los equipos Tigres de La Lisa, Club Barandilla, Liga Rebelde y Deportivo Elena.

La Lisa en la primera década del siglo XXI cuenta con 13 campeones olímpicos, 22 mundiales, 34 panamericanos, 47 centroamericanos y 72 en otros eventos internacionales. Se destacan deportes como boxeo, ciclismo, béisbol, kárate, atletismo, judo, lucha, y voleibol.

PCC

El 29 de septiembre de 1963 quedó constituido el Seccional La Lisa con 17 núcleos y 117 militantes, bajo una dirección de 7 miembros.

Una nueva reestructuración ocurre en 1972 al crearse dos seccionales del PCC en el territorio. El Seccional Lisa con 32 núcleos y 278 militantes y el Seccional Arroyo Arenas con 14 núcleos y 180 militantes (incluidos El Cano y Valle Grande)

A partir de 1963 se procedió a crear una nueva instancia que funcionaría como eslabón intermedio entre la provincia y el municipio: la región. En Marianao, convertida en una región de La Habana Metropolitana, funcionaban desde 1964 siete seccionales: Ceiba, Libertad, Centro, Buenavista, La Lisa, Playa, y El Cano. El municipal Punta Brava —que incluía Guatao— se subordinaba a la Región Bauta en Habana Interior.

El fortalecimiento del aparato del PCC, del Gobierno y de las organizaciones de masas en el territorio está proporcionalmente relacionado con el crecimiento de la población que abarca el nuevo municipio, del cual el 75% provenía del antiguo seccional la Lisa y el resto reúne a la población de Arroyo Arenas, Punta Brava, El Cano, Valle Grande, La Concepción y Guatao.

FMC

La FMC se constituyó en 1964 en el Seccional Lisa con una población femenina de 27 215 mujeres. Se conformaron 28 delegaciones con 2485 federadas.

CDR

En 1964, con la aparición de los seccionales, se crearon para los CDR, como instancias intermedias, los Comités de Zona. En La Lisa se crearon 19 zonas.

En julio de 1966 en virtud de convenios anteriores establecidos con algunos países socialistas por el comandante Ernesto Guevara en su época de desempeño como Ministro de Industrias, comenzó a funcionar el primer horno —de los 10 que llegaría a tener— del Complejo Industrial “Combinado del Vidrio Amistad Cubano Húngara” ubicado en la parte segregada a la antigua Finca Coca, inmediata a la calle 240.

División político–administrativa 1964

En 1964 se aplica un nuevo proyecto de división político. En el actual territorio de La Lisa, en virtud de esta concepción, se crearon los Seccionales Lisa (que incluía Arroyo Arenas) y El Cano, ambos subordinados a Marianao y el Municipal Punta Brava (que incluía Guatao), subordinado

División político–administrativa 1976

En 1976 se aplicó la nueva división político-administrativa que convirtió a La Lisa en el municipio que es actualmente con 37,5 kilómetros de extensión y una población, en esa fecha, de aproximadamente 94 000 habitantes.

Quedaron incluidos en este municipio el área de La Lisa propiamente dicha y los poblados de Arroyo Arenas, El Cano, Punta Brava y Guatao.

En este momento el Partido contaba en el nuevo municipio con 121 núcleos y 1 473 militantes.

La Lisa tenía aproximadamente 56 484 electores en 63 circunscripciones, al momento de constituirse los Órganos del Poder Popular.

En 1990 se constituyeron, por acuerdo del Consejo de Estado, los Consejos Populares. La Lisa quedó estructurada en 7 Consejos: Alturas de La Lisa, Balcón Arimao, Cano-Valle Grande, Bello 26, Punta Brava, Arroyo Arenas, San Agustín y Versalles Coronela.

Recuperación económica y social

En franco desarrollo la Empresa de Montaje de Camiones Narciso López Roselló, la Fábrica 1 de Mayo, en 1980 era desplazada por las nuevas tecnologías y la afectación medio ambiental que producía por su ubicación urbana fueron factores que determinaron que sus instalaciones se acondicionaran para viviendas y su producción se sustituyera por la existencia en el territorio de la Fábrica de impermeabilizantes Manuel Casimiro Hernández Torres, ubicada en El Cano.

También se destacan la Empresa de Producciones Metálicas y de Aluminio; la Empresa de Producción Mecánica del MINAZ (TASIA), la de Espejuelos Deportivos y de Protección; a los que se suman industrias productoras de medicamentos.

A finales de la década del 80 surgió el movimiento de creación de contingentes. En La Lisa se asentó por iniciativa del Comandante en Jefe el contingente Blas Roca Calderío con aproximadamente 3 000 constructores.

En 1997 el Combinado del Vidrio, insignia del territorio, continuó en franco desarrollo productivo.

Particular importancia tuvo para el territorio del municipio La Lisa el desarrollo del Polo Científico del Oeste de la capital como el Instituto de Geofísica y Astronomía, al Centro de Investigaciones Metalúrgicas, al Instituto de Investigaciones Porcinas y al Instituto de Investigaciones para la Industria Alimenticia; además de completarse la ampliación del Complejo Científico Ortopédico Internacional Frank País y de inaugurarse el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí y el Centro de Investigaciones Aplicadas a la Salud Carlos J. Finlay. Los éxitos alcanzados en estas instituciones científicas; han sido de significativa relevancia para el país.

La existencia de 4 855 trabajadores por cuenta propia con predominio de los servicios, en particular los gastronómicos, que vienen a dar continuidad a la tradición liseña de ofrecer servicios al transeúnte. En igual sentido se expresan las licencias otorgadas a cuentapropistas relacionados con el transporte.

Agricultura

El problema de la tierra adquirió nuevas dimensiones en la última década, se redujo el área agrícola a 73, 8 caballerías, y se desarrollaron nuevas formas de agricultura urbana. La Lisa contaba en 2010 con 4 Cooperativas de Créditos y Servicios (CSS): “Orlando López” en Arroyo Arenas, “Roberto Negrín” en Punta Brava, “Leonor Pérez” en La Concepción y “Juan Manuel Márquez” en El Cano.

En 2010 cuenta el municipio con 1, 331 hectáreas de tierra de superficie agrícola, según informe derivado de la tarea “Hectárea por hectárea” desarrollada por el Ministerio de la Agricultura en el 2007, lo que favorece la actualización del modelo económico cubano en cuanto a la aplicación del Decreto Ley 259, al posibilitar que 391 liseños se conviertan en tenentes de tierras y que el 100% de las tierras entregadas están cultivadas como parte de 28 sub-programas de la agricultura urbana

Avances en la salud pública

Policlínico “Cristóbal Labra”

En obras de atención a la salud se inauguraron en 1977 los policlínicos “Elpidio Berovides” en San Agustín y el “Pedro Fonseca” en Punta Brava, y en la década del 80 el “Cristóbal Labra”, sumados a los dos existentes en La Lisa y Arroyo Arenas; la Clínica Estomatológica Elpidio Berovides y la Unidad Municipal de Higiene y Epidemiología.

Desde la última década del siglo XX en el territorio se crearon las condiciones, para incorporar a la red de atención primaria el Plan del Médico este plan cuenta 173 Consultorio del Médico de la Familia, 302 médicos especialistas en Medicina General Integral y 364 enfermeras. En 1996 se creó, además, la Unidad de Urgencias del Policlínico Elpidio Berovides. Se creó el Centro de Salud Mental, el centro extractor de sangre, una casa de abuelos y 2 hogares maternos. Se reorganizó el número de consultorios médicos a 145. Los resultados de salud, que convierten a esta esfera en una verdadera conquista de la Revolución para el pueblo.

Defensa de la Revolución

Es necesario consignar que en el enfrentamiento a la contrarrevolución este territorio perdió a uno de sus milicianos fundadores, trabajador del Instituto Biológico Cubano en Arroyo Arenas y también fundador de los CDR en esa zona: Orlando López González, cayó en el cumplimiento del deber, víctima de las manos asesinas que pagó la CIA.

También contra desastres naturales el pueblo de La Lisa ha tenido que defender su Revolución.

En la cuota de sacrificios que este tipo de empeño ha cobrado a este poblado, se inscribe el ejemplo del joven Cristóbal Labra Pérez, establecido en Punta Brava desde que contaba 3 años de edad, se incorpora a un contingente de la UJC que trabajaría en la Isla de la Juventud. Un sorpresivo incendio en un almacén de fertilizantes es la ocasión para el despliegue de heroísmo de este joven comunista que en ese desafío se afecta de tal manera que no pudo ser salvado de la asfixia por intoxicación.

La formación de las Milicias de Tropas Territoriales se produjo fundamentalmente por la captación voluntaria en las cuadras, barrios y pequeñas fábricas, y en Punta Brava por las aguerridas fuerzas del movimiento obrero proveniente de los trabajadores de Cayo La Rosa, fundamentalmente.

Entierro de Pedro Fonseca en trayecto hacia el cementerio del Guatao.

La finca Kuquine, durante esos primeros meses se convirtió en Escuela de Milicias para el Batallón 116, integrado por milicianos de los distintos barrios que hoy integran el Municipio La Lisa. Su Compañía Ligera de Combate fue enviada a la lucha contra bandidos en el Escambray, donde permaneció por espacio de 76 días cubriendo un cerco que se extendía desde Sancti Spíritus a Trinidad y en las arenas de Playa Girón regaron su sangre José M. Lazo de la Vega, Reinaldo Fabián González Galainena, milicianos mártires que representaban el Bon 116 como Pedro Fonseca. También cayó en Girón el miliciano Armando Ramos Velazco, domiciliado en La Lisa; sumaron en total 14 mártires de la Compañía Ligera.

Como reflejo de la capacidad defensiva de Cuba, aún en esos primeros tiempos, a que el 1 de febrero del 1960 fue detenido en el territorio un grupo de contrarrevolucionarios acusados de pertenecer a una organización denominada Movimiento Nacional Cubano Anticomunista. De un total de 12 detenidos 5 eran de La Lisa y Arroyo Arenas y celebraban sus reuniones en el Bar “Oasis” sito en Ave. 51 y 244.

Cuando Fidel Castro, el 28 de septiembre de 1960, expresa la idea del establecimiento de un sistema de vigilancia colectiva este comenzó precisamente en territorio del actual municipio La Lisa. El 3 de diciembre de 1960 se constituyó el primer Bloque de la Federación de Mujeres Cubanas en el poblado de Arroyo Arenas.

Otros mártires aportaron este territorio en defensa de la Revolución cuando muchos hombres de este suelo, asumieron misiones internacionalistas, civiles unas y militares otras.

Entre las primeras, constituye un ejemplo Elpidio Berovides, que había sido secretario del Partido en el Seccional Lisa–Cano y en 1971 es designado Jefe de Brigada Constructora de Hospitales cuando el carro donde viajaba se despeñó por un barranco ocasionándole la muerte. Bravos combatientes pasaron al martirologio en circunstancias diferentes. En 1975, por ejemplo, cae en Angola Manuel C. Hernández Torres, residente en La Lisa; y en 1976 cayeron en una emboscada, también en tierras angolanas el Capitán Aramís Faule Ramírez radicado en La Lisa, y el liseño por nacimiento Ernesto Dimas López, entre otros que salidos de estas tierras se inmolaron en aras del internacionalismo.

Más de 2 000 pobladores de este municipio cumplieron misiones civiles o militares; en estas últimas el mayor peso en las guerras de liberación de Angola y Etiopía. De los soldados internacionalistas de La Lisa 32 resultaron caídos en combate. La agresividad contra Cuba por parte del imperialismo norteamericano continuó siendo una constante en estos años.

En 1984 estaban organizadas 60 zonas, con 830 CDR y 59 663 miembros, pero a finales de esa década se habían creado dos nuevas zonas con 36 CDR. La constitución en 1993 de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana permitió la incorporación de 4, 433 combatientes, que incluyeron 324 del Ejército Rebelde, 329 luchadores clandestinos, 372 combatientes de Girón, 543 de la lucha contra bandidos y 2 746 con misiones internacionalistas, entre otras categorías.

La Batalla de ideas tiene connotación especial en el territorio en lo relacionado con la lucha por la liberación de los Cinco Héroes pues existen vínculos estrechos con dos de ellos: Ramón Labañino Salazar, quien nació y cursó sus estudios primarios y secundarios en La Lisa.

Fuentes

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  • Dirección Municipal de Educación: Informe estadístico. 1998.
  • Caracterización 2001.
  • Dirección Municipal de la FMC: Constitución del Regional Marianao. Informe Político. 1964.
  • Gobierno Municipal de La Lisa: Informe estadístico. Diciembre 1998.
  • Ministerio de Salud Pública: Informe de la situación de salud 1998 ante la Reunión de Presidentes Municipales del Poder Popular.
  • Museo Municipal de Marianao: Libro de fincas rústicas del Municipio Marianao.
  • Memorias de la alfabetización. Marianao
  • Museo Municipal de La Lisa: Cronología local.
  • Fondos de Historia local
  • PCC Provincial: Informe a la Asamblea de Balance del PCC provincial Ciudad de La Habana. Noviembre 1999.
  • PCC Provincial. Ciudad de La Habana. Fondos históricos.
  • PURSC Comité Provincial. La Habana: Proyecto de nueva DPA de la Provincia de La Habana.
  • PCC Municipal: La Lisa. Fondo Documentos históricos.

Fuentes orales (Testimonios)

  • Acosta, Ramiro: Campesino
  • Artola Mitjans, Carmen: Diputada a la Asamblea Nacional
  • Barrios, Ezequiel: Ex consejal
  • Díaz, Félix: campesino
  • Lorenzo, Esther: profesora jubilada
  • Pérez Díaz, Jesús: Vecino de La Lisa desde principios del siglo XX
  • Pino, José Manuel: campesino
  • Sáenz, Margarita: campesina.
  • Soto, Jesús: Dirigente político
  • Valdés Pino, Ignacio: Obrero tejalero.