Indios mambises de Yatera (1868–1895)
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Los indios mambises de yateras en las guerras por la independencia. Los indios de Yateras tienen sus antecedentes en dos zonas del oriente cubano: la población más numerosa, los Rojas, proceden de la comunidad del Caney, en Santiago de Cuba, y encuentran refugio a finales del siglo XVIII en la zona de Tiguabos, pueblo que fue luego reconocido por las autoridades peninsulares como de indios. Esta emigración se produce prácticamente sin que se observen cruzamientos con otras familias y otros se entrelazan con los Pérez.
Sumario
Guerra grande y el conflicto de 1879 y 1880
Cuando estalla la Guerra de los Diez Años, en 1868, los indios fueron sorprendidos por el conflicto armado que estremece la isla, aunque tardaron en llegar las noticias a las montañas de Yateras, muchas de ellas tergiversadas por los representantes coloniales. Dirigido por su cacique, al cual respetaban y acataban sus decisiones, habían participado en los asaltos a los palenques de esclavos que encontraron refugios en las Cuchillas del Toa.
Guerra del 68
Ante el conflicto que se inició, mantuvieron la posición de no inmiscuirse en la guerra, al desarrollarse la invasión a la región de Guantánamo por el general Máximo Gómez seguido de Antonio Maceo, en 1871, la tea redentora llega a los cafetales franceses de Yateras. Estas circunstancias determinan que un número de indios se incorporen como voluntarios, y reciban de los propietarios del ejército español armas y la paga por los servicios.
El 25 de julio de 1875 el general Antonio Maceo jefe de la División Cuba, inicia una campaña por el territorio, se entrevista con voluntarios en los cafetales y deciden incorporarse a los mambises, en este sitio se incorpora con algunos hombres armados, Francisco Abad Rojas, alférez integrista. Maceo ordena a Abad que incendiara los cafetales Joven María y Dios Ayuda, indicación que cumple al pie de la letra. Entre los hombres de Abad Rojas se encuentra ramón Ramírez Suarez (después esposo de la patriota Cristina Pérez). En la jornada se incorpora el Alférez Félix Lescaille, dueño de un cafetal, con gran influencia en la comunidad india, después peleo bajo el mando de Flor Crombet y fue escolta de Antonio Maceo.
Rescate de Mariana y María, heroínas mambises
Por esos días el servicio de inteligencia español obtuvo informaciones que revelaban la presencia en los montes del Toa de Mariana Grajales y María Cabrales, madre y esposa, de Antonio Maceo, quienes estaban acompañadas de otros familiares, sobre ellos se inicia una tenaz persecución a cargo de efectivos peninsulares.
Mariana y maría fueron protegidas por la escolta que mandaba el capitán Manuel Romero y conducidas por el indio yaterano Juan Rojas, quienes logran burlar la persecución mediante un movimiento continuo por los bosques de las Cuchillas del Toa y el norte de Caujerí.
Al iniciarse nuevamente la guerra en 1879, Francisco Abad Rojas al frente de un grupo de indios entre ellos Carlos Rojas Ramírez, Cancio, se levantaron en armas y el 29 de septiembre emboscan y aniquilan a seis guardias civiles en la Talanquera en san Andrés. Estos yateranos estuvieron después bajo el mando de José Maceo y participaron en el último combate de la Guerra Chiquita, donde derrotaron al batallón de infantes de marina del Regimiento Isabel II.
Los arduos años de entreguerras (1880–1894)
Los indios mambises y voluntarios al servicio del colonialismo regresaron agotados a sus hogares, los primeros sin ningún tipo de recurso, los segundos con una limitada cantidad de dinero, ambos encontraron un cuadro desolador en las familias: los cultivos abandonados, los potreros casi sin animales, y algunos habían perdidos sus trabajo, ya dentro de sus casa se percataron de que el hambre y las enfermedades habían provocado la muerte de sus infantes y ancianos.
La dispersa comunidad india de Yateras y Caujerí, no poseía patrones de referencia sólidos en lo que respecta a estas autoridades, y era para ellos hasta cierto grado un reflejo y prolongación de su propia forma de vida comunitaria.
Guerra de 1895
Años antes de que estallara la guerra, con el pretexto de defender la zona de bandoleros que incursionaban las propiedades los hermanos Lescaille crearon el cuerpo de los Voluntarios de Yateras, siendo presionados los indios para que se incorporaran y como resultado ingresaron en estas filas un grupo numeroso de ellos. Esta unidad combativa tenía la misión de perseguir y capturar a individuos considerados fuera de la ley. En la preparación militar que se organizaba se destaca Ezequiel Rojas Ramírez, propietario de un cafetal en La Alegría y considerado Cacique Menor de Arroyo Bueno y Bernardo.
Reorganizan los mandos de las pequeñas unidades, entregan fusiles y asignan los reclutados en pelotones mixtos, indios y pobladores en general, quienes tenían la misión de defender la zona cafetalera, la base de operaciones donde radicaba la jefatura de la capitanía se ubica en el caserío de Felicidad.
El cacique José Francisco Rojas, ex sargento mambí del 68, también presionado, dio su consentimiento de incorporarse a los Voluntarios de Yateras, solo se limitó con sus hombres más cercanos a realizar guardias en las proximidades de su propiedad, momento en que Ezequiel es ascendido a alférez , en realidad ambicionaba a convertirse en el cacique de los indios de Yateras.
Fuente
Boletin “Cajobabo” Volumen doble No. 1/2017 y No. 2 /2018
