Inhibidores

Inhibidores
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Concepto:inhibidores moléculas que se unen a enzimas y disminuyen su actividad

Los inhibidores son un problema médico grave que puede ocurrir cuando una persona con hemofilia presenta una respuesta inmunológica al tratamiento con concentrados de factor de coagulación.

El sistema inmunológico protege al cuerpo contra gérmene y virus dañinos. Algunas veces, en el caso de un inhibidor, el sistema inmunológico de una persona reacciona a las proteínas de los concentrados de factor como si fueran sustancias ajenas por que el cuerpo nunca las había reconocido. Cuando esto ocurre se forman inhibidores (también llamados anticuerpos) en la sangre para atacar a las proteínas de factor ajenas. Esto impide a los concentrados de factor corregir el problema hemorrágico.

Hemorragias

Las hemorragias son muy difíciles de controlar en una persona con hemofilia que presenta inhibidores. Una persona con inhibidores enfrenta más hemorragias y dolor porque el tratamiento con concentrados de factor no funciona. En pacientes con inhibidores que persisten, si las hemorragias en músculos y articulaciones (los tipos de hemorragias más comunes en la hemofilia) no llegaran a controlarse, existe el riesgo de daños articulares permanentes.

En el caso de pacientes con suficiente acceso a la atención médica, el tratamiento de los inhibidores es uno de los desafíos más importantes en el cuidado de la hemofilia en la actualidad. Es posible eliminar los inhibidores usando una técnica llamada inducción de la inmunotolerancia. Sin embargo, este tipo de tratamiento requiere experiencia médica especializada, es costoso y tarda mucho tiempo.

Pueden utilizarse medicamentos llamados agentes de desvío para circunvalar a los inhibidores y ayudar a la coagulación de la sangre.

Diagnóstico

Con frecuencia se sospecha la presencia de inhibidores durante una prueba de sangre de rutina conocida como ensayo de tiempo de tromboplastina parcial activado (TTPA). La prueba de TTPA mide el tiempo que tarda la sangre en coagular.

Cuando hay inhibidores presentes, la sangre tarda más en coagular y no coagula completamente, aun después de haberse mezclado con plasma normal. Para diagnosticar inhibidores también se realiza la prueba Bethesda, o una modificación de la misma conocida como método Nijmegen. Esta prueba puede determinar la fuerza (título) del inhibidor. No obstante, la prueba Bethesda/ método Nijmegen no está disponible en muchos laboratorios porque requiere de conocimientos especializados.

La concentración de inhibidores varía de una persona a otra y también puede variar en la misma persona durante el transcurso del tiempo. La cantidad de inhibidores en la sangre de una persona se mide en unidades Bethesda (BU) y se conoce como de “título alto” (más de 5 BU) o “título bajo” (menos de 5 BU). Generalmente, los inhibidores de título alto trabajan poderosamente para neutralizar rápidamente a los concentrados de factor de coagulación, mientras que los inhibidores de título bajo son más débiles y actúan más lentamente. No obstante, esto no siempre es así.

Los inhibidores también se clasifican como de “baja respuesta” o de “alta respuesta”, dependiendo de la fuerza de la reacción del sistema inmunológico de cada persona a los concentrados de factor, con base en una exposición anterior; esto se conoce como respuesta anamnésica. Una persona de alta respuesta es alguien cuyo título ha rebasado 5 BU por lo menos en una ocasión, y en quien la exposición repetida al concentrado de factor desencadenará rápidamente la formación de nuevos inhibidores. Una persona de baja respuesta es alguien cuyo título nunca ha rebasado 5 BU, y quien tendrá una respuesta inhibidora más débil a los concentrados de factor.

Signos y síntomas

Una persona con hemofilia que presenta inhibidores no mejorará después del tratamiento normal con concentrados de factor. Se sospecha la presencia de inhibidores cuando la persona, el familiar o el personal médico notan que el tratamiento es menos eficaz de lo que solía ser. Los siguientes son algunos signos y síntomas de la presencia de inhibidores:

  • Una hemorragia no se controla adecuadamente con la dosis usual de concentrados de factor
  • El tratamiento normal parece ser cada vez menos eficaz
  • La hemorragia es cada vez más difícil de controlar

En la actualidad, los inhibidores con frecuencia se descubren durante un examen de laboratorio de rutina. El diagnóstico basado en signos y síntomas de inhibidores debería confirmarse mediante repetidas pruebas de laboratorio.

Inhibidores de la aromatasa

Los inhibidores de la aromatasa son medicamentos que reducen los niveles de estrógeno al impedir que una enzima del tejido adiposo (aromatasa) transforme a otras hormonas a estrógeno. Estos medicamentos no detienen la producción de estrógeno en los ovarios. Dado que los ovarios son la fuente principal de estrógeno en el cuerpo, estos medicamentos sólo reducen los niveles de estrógeno en las mujeres cuyos ovarios no están produciendo estrógeno (como en las mujeres que ya han pasado por la menopausia). Los medicamentos en esta clase incluyen:

  • Exemestano (Aromasin
  • Letrozol (Femara
  • Anastrozol (Arimidex

Estos medicamentos se utilizan principalmente para tratar el cáncer de seno con receptores hormonales positivos. Se están estudiando para saber si pueden reducir el riesgo de cáncer de seno, pero hasta ahora aún no están aprobados para este uso en los EE.UU. Estos medicamentos se toman diariamente en forma de pastillas.

Inhibidores de la angiogénesis

La angiogénesis requiere que se unan moléculas de señalización, tal como el factor de crecimiento endotelial vascular (vascular endotelial growth factor, VEGF), a receptores en la superficie de células endoteliales normales. Cuando el (VEGF) y otros factores de crecimiento endotelial se unen a sus receptores en las células endoteliales, se inician señales dentro de estas células que promueven el crecimiento y la supervivencia de vasos sanguíneos nuevos.

Los inhibidores de la angiogénesis interfieren con varios pasos en este proceso. Por ejemplo, bevacizumab (Avastin) es un anticuerpo monoclonal que reconoce y se une específicamente al VEGF (1). Cuando el VEGF se une al fármaco bevacizumab, no puede activar el receptor del VEGF. Otros inhibidores de la angiogénesis, incluso el sorafenib y el sunitinib, se unen a receptores en la superficie de células endoteliales o a otras proteínas en las vías de señalización descendentes y bloquean sus actividades (2).

Enlaces externos

Fuentes

  • Química General. La Habana: Editorial pueblo y educación, 1985.