Isla Clarión

Isla Clarión
Información  sobre la plantilla
(Isla Clarión)
Isla Clarión
País(es)México
Subdivisión(es)Colima
Datos geográficos
Superficie19,80km2 km²

Isla Clarión. Antiguamente llamada "Isla de Santa Rosa", es la segunda isla más extensa y la más occidental de las Islas Revillagigedo (pertenecientes a México, específicamente a Colima), 314 km al oeste de la Isla Socorro.

Ubicación

Ubicada en el Archipilélago Islas Revillagigedo, México.

Demografía

La isla tiene una superficie de 19,80 km2.

Características

Esta isla es considerada por el Gobierno Mexicano como reserva de la biósfera desde el año 1994. Situada a unos 240 kilómetros al oeste de Isla Socorro, cuenta con tres picos volcánicos, laminados y un paisaje rocoso, con grandes acantilados. Tiene 8,5 kilómetros de longitud 3,5 en su parte más ancha y una altura máxima de 335 m en el monte Gallegos. La costa es acantilada en todo el perímetro de la isla excepto en su parte sur donde hay un par de playas y fondeaderos.

No hay registros de erupciones en la isla en los últimos 223 años. En el centro sur de la isla hay una zona baja de marismas que en la época de lluvias se inunda y forma dos lagunas. También en el sur, en bahía Sulfurosa hay un destacamento de la marina mexicana con 8 o 10 hombres que son relevados periódicamente. En las instalaciones de la Secretaría de Marina hay una cisterna y cerca de ella, un pozo de agua salobre. El desembarco es dificil y, a veces, peligroso. Se fondeará más o menos cerca de la playa en función del calado de la embarcación.

Características geológicas

La isla Clairón forma parte del archipilelago Islas Revillagigedo, junto a Socorro, San Benedicto y Roca Partida. El archipiélago tiene gran importancia para México, ya que gracias a estas lejanas fronteras insulares nuestro país amplia su Zona Económica Exclusiva, constituyéndose en un paso aduanal marítimo de embarcaciones tanto nacionales como extranjeras. El 5 de junio de 1994 (Día Mundial del Medio Ambiente) el Ejecutivo Federal decidió incorporar el Archipiélago Revillagigedo al Sistema Nacional de Areas Protegidas, con carácter de Reserva Especial de la Biosfera. La Reserva Especial del Archipiélago incluyendo el área de mar patrimonial comprende una superficie total de 636 mil 685 hectáreas.

Clima

El clima en general es cálido subhúmedo en las partes altas.

Flora y Fauna

Tiene una gran riqueza de especies de flora y fauna terrestre y marina de alto valor biológico, algunas de ellas únicas en el mundo. En la región terrestre se localizan tipos de vegetación endémicas de gran valor en la preservación del equilibrio ecológico, además de una fauna rica en reptiles, mamíferos e insectos. En la parte marina existe una gran variedad de algas, corales, anélidos, equinodermos, crustáceos, mamíferos como ballenas, orcas y delfines, tiburones y una amplia gamas de peces de escama.

La vegetación se ha desarrollado en la isla al igual que en la de Socorro, existe vegetación halófita costera, matorral de crotón y guayabillo, selva de zapotillo, de higuera, matorral de chapulixtli y pradera, cactáceas y manchones de palo fierro. Entre la fauna sobresaliente se encuentran al borrego, perico, el gavilán de cola roja, cenzontle, así como gran variedad de reptiles e insectos. La flora y fauna marina está formada por algas, pastos, mamíferos, crustáceos, moluscos, tiburones y peces.

Desarrollo Económico

Atractivos

La isla es un lugar ideal para bucear. Una de las características únicas de este lugar es la constante presencia del pez ángel clarión, llamado así por ser endémico de estas islas. Es un precioso pez que de juvenil cuenta con brillantes bandas azules que se desvanecen según el pez va alcanzando la madurez. Es muy común ver a los adultos limpiando de parásitos a las mantarrayas que visitan esta isla.

Historia de la culebra nocturna de Isla Clarión

En 1936 el naturalista estadounidense William Beebe, visitó Isla Clarión. Él observó y colectó un solo ejemplar de una culebra muy distinta a la que había observado durante sus caminatas diurnas. A su regreso depositó el espécimen en el Museo Americano de Historia Natural de Nueva Cork sin saber cuál era su clasificación taxonómica. La culebra fue descrita y clasificada en 1944 por Wilmer Tanner como una subespecie endémica de Isla Clarión (Hypsiglena ochrorhyncha unaocularus). Desde que fue descubierta, esta culebra no fue observada por ningún visitante de la isla durante décadas. En 1953 Bayard Brattstrom, otro destacado investigador visitó Isla Clarión por tres días y no pudo encontrarla Esto lo llevó a suponer que el registro de Beebe era erróneo y la especie fue borrada de los anales de la ciencia. A lo largo de décadas y en diferentes expediciones a Isla Clarión, esta culebra no fue observada nuevamente, todo parecía apoyar la hipótesis de Brattstrom de que un error al etiquetar los especimenes era la causa de que existiera en el museo un ejemplar de una culebra nocturna de Isla Clarión. A pesar de que la isla ha sido habitada por un destacamento de marinos mexicanos desde los años setenta, no hubo ningún otro reporte de esa especie. Solo se tenía certeza de una culebra en la isla, la culebra chirriadora de Clarión (Masticophys anthonyi), descubierta a principios del siglo XX. Una especie activa durante el día que ha sido observada con frecuencia por los residentes de la isla y por los visitantes de varias expediciones científicas.

A pesar de que la existencia de Hypsiglena ochrorhyncha unaocularus fue descartada por completo, Daniel Mulcahy, un investigador del Museo Nacional de Historia Natural del Instituto Smithsoniano, quien ha estudiado la biología y relaciones evolutivas de las especies de culebras nocturnas del género Hypsiglena, no estaba conforme con la decisión tomada por Brattstrom. Con el fin de eliminar toda duda al respecto se puso en contacto con Juan Martínez, investigador del Instituto de Ecología, A.C., poseedor de una amplia experiencia de trabajo en el Archipiélago de Revillagigedo. Este investigador además ha trabajado con especies endémicas en peligros de extinción, algunas de ellas muy raras y difíciles de detectar.

Juan Martínez y Daniel se convencieron de que la culebra nocturna de Isla Clarión existía después de un estudio minucioso de las notas de Beebe. Martínez entonces organizó la búsqueda del reptil en Isla Clarión y reunió a un equipo de personas con cualidades diferentes y complementarias. Se sumaron Gustavo Aguirre, un distinguido herpetólogo mexicano experto en las zonas desérticas de México, y Juan Cervantes, un estudiante del mismo instituto, que se ha destacado por su gran capacidad de observación. Durante una estancia en Clarión en mayo y junio de 2013, este grupo de trabajo, después de 78 años de no ser vista, logró detectar la que resultó ser una especie nueva de culebra nocturna, a la que corresponde el nombre Hypsiglena unaocularus. Durante el trabajo de campo, este equipo de trabajo fue acompañado por un observador del Instituto Oceanográfico del Pacífico de la Secretaría de Marina. Este descubrimiento fue dado a conocer en la revista PLoS ONE del 16 de mayo de 2014 (Mulcahy, D.G., J.E. Martínez-Gómez, G. Aguirre-León, J.A. Cervantes-Pasqualli y George R. Zug. 2014.

Los análsisis del ADN de las culebras nocturnas del noroeste de México sugieren que la culebra noctura de Clarión está relacionada con culebras nocturnas que habitan en Sonora y la Isla Santa Catalina, a más de 800 kilómetros de distancia de Isla Clarión, y no de Baja California Sur, como se llegó a pensar. Es muy probable que las primeras culebras nocturnas que llegaron a Isla Clarión hace miles de años lo hayan hecho viajando en un tronco a la deriva. Otras especies de Hypsiglena tienen una amplia distribución en gran parte del oeste y sur de los Estados Unidos, así como en México en la península de Baja California e islas del Golfo de California, en los estados de la costa del Pacífico hasta Guerrero, y por el centro y este del país hasta Guanajuato e Hidalgo. Esta una nueva especie endémica de Isla Clarión pertenece a la familia Colubridae.

La adición de una especie más de vertebrado a la biodiversidad de las islas del Archipiélago de Revillagigedo ilustra la importancia de conocer, estudiar y conservar este legado natural. Actualmente hay un creciente número de esfuerzos encaminados a conservar la gran riqueza biológica y los procesos ecológicos de este Archipiélago que recibe protección bajo las figuras de Reserva de la Biosfera, Sitio Ramsar y Área de Importancia para la Conservación de las Aves. El redescubrimiento de esta especie de culebra marca un acontecimiento extraordinario que debe contribuir a reforzar las estrategias de conservación y la restauración de los ecosistemas insulares. Las extinciones son consecuencia de la pérdida de hábitat, del calentamiento global, de las enfermedades infecciosas y de la introducción de especies exóticas por los humanos, entre otras causas. Los ecosistemas insulares son sumamente vulnerables a las perturbaciones del ambiente y se debe promover la cooperación interinstitucional para salvar los tesoros biológicos que albergan las islas mexicanas.

Galería

Fuentes