James Ensor

James Ensor
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Pintor belga
NacimientoOstende, 13 de abril de 1860
Ostende, Bélgica, Bandera de Bélgica
Fallecimiento19 de noviembre de 1949
Ostende, Bélgica, Bandera de Bélgica
NacionalidadBelga
OcupaciónPintor
Obras destacadasMúsica rusa (1881); Los borrachos (1883), Entrada de Cristo en Bruselas (1888); entre otras.

James Ensor. Pintor belga. Miembro fundador del Grupo de los XX en 1884. Fue uno de los primeros representantes de la pintura expresionista, considerado como uno de los innovadores del arte decimonónico, y que influyó en Paul Klee, Emil Nolde, y otros expresionistas y surrealistas del siglo XX. Sus paisajes están inspirados en el realismo y en el impresionismo.

Síntesis biográfica

Nace en Ostende, Bélgica, el 13 de abril de 1860, en el seno de una familia pequeño burguesa. El padre era de origen inglés y su madre mexicana. Abandonó la escuela primaria a los 15 años de edad para comenzar a formarse como pintor bajo la supervisión de dos pintores locales.

Salió muy poco de Bélgica, incluso su ciudad natal Ostende sólo la dejó un par de años para ir a estudiar arte en Bruselas. Visitó París, Londres y Ámsterdam por un breve período; este amor a su terruño lo marginó, de cierta manera, del circuito artístico que hombres con menor talento y creatividad, que él, manejaron a la perfección. Esta puede ser la razón que sea poco conocido para la mayoría pero muy conocido en los segmentos artísticos de comienzos de siglo XX. Tan conocido fue, que su nombre se asocia a los precursores de estilos como el expresionismo o el surrealismo.

Trayectoria profesional

Entre los años 1877 y 1890 estudió en la Academia Real de Bellas Artes de Bruselas, donde tuvo como compañero de clase a Fernand Khnopff. En 1881 celebró su primera exposición.

Durante los últimos años del siglo XIX una importante parte de su obra fue alabada, en particular su pintura La entrada de Cristo en Bruselas, en 1888. Paulatinamente fue consiguiendo la aceptación de una Europa que desdeñaba al expresionismo.

En 1920 fue protagonista de grandes exposiciones y en 1929 el compositor belga Flor Alpaerts acabó la Suite James Ensor, este mismo año el pintor recibió el título de barón, nombramiento que el fue otorgado por el rey Alberto.

En las primeras décadas siglo XX la generalidad del artista comienza a mostrar signos de decadencia y disminuye considerablemente su producción. En su último período activo realizó grabados artísticos y dibujos de paisajes o escenas de la vida cotidiana, en los que la fusión de los sueños y la realidad anunciaron de algún modo el surrealismo.

Muerte

Murió el 19 de noviembre de 1949, en Ostende, Bélgica, a la edad de 89 años.

Características de su obra

Se caracteriza por una diversidad de materiales y de temas, como los retablos, los bodegones y los arlequines.

Sus primeras obras se caracterizan por mostrar paisajes brumosos de inspiración flamenca. A partir de 1880 el pintor alternó temas de bodegones, como por ejemplo “La col1880 y perteneciente actualmente a la colección de los Museos Reales de Bellas Artes en Bruselas, con los interiores. En ambas temáticas predominaron siempre los colores pardos, rojizos y las tonalidades de azules melancólicos, como en el caso de la pintura “La mujer de azul”, reralizada en 1881 y perteneciente a los Museos Reales de Bellas Artes, en Bruselas.

Pronto abandona este estilo "oscuro" y se interesa por las escenas de carácter fantástico y grotesco, donde imperara cierta expresión burlesca y esperpéntica en los personajes presentes en sus obras. Alcanza esta máxima expresión, en obras como “Las máscaras escandalizadas” de 1883 y “El asombro de la máscara” de 1889, Museo de Amberes. Estas obras parecen poseer inspiración en las máscaras que se vendían en la tienda de regalos de su madre durante el carnaval anual de Ostende.

En 1888 realizó su obra más célebre, “La entrada de Cristo en Bruselas”, pintura en la que representa en una escena carnavalesca colmada por la muchedumbre alienada y entre la que sobresale la figura de Jesucristo montado en un pollino.

En 1891 realiza la obra “Esqueletos disputándose un ahorcado”, pintura en la que continúa mostrando su apego a un fuerte y ácido expresionismo .

La individualidad creativa frente a los movimientos artísticos del momento se tradujo en sus obras a través del uso de fuertes y agresivas parodias irónicas como reflejo de su sociedad. Su obra, cargada por la presencia de máscaras, esqueletos y demonios, no es más que el reflejo de la tragicomedia humana y de la antítesis vida-muerte.

Fuentes