Jan Vermeer

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Jan Vermeer
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Nacimientooctubre de 1632
Delft, Bandera de los Países Bajos Países Bajos
Fallecimiento1675
Delft, Bandera de los Países Bajos Países Bajos
NacionalidadHolandesa
CiudadaníaHolandesa
OcupaciónPintor
CónyugeCaterina Bolnes
PadresRaynier Janszoon y Dimpha Baltens
Obras destacadasEl ama y su criada, Dama en Azul, Astrónomo, Joven adormecida, etc.

Jan Vermeer. Pintor holandés, uno de los grandes del realismo del siglo XVII, que fue olvidado por sus paisanos y fue redescubierto y valorado por los expertos a partir del siglo pasado. Destacó especialmente, pintando retratos de escenas de interiores llenas de calma y serenidad, haciendo composiciones de una o dos figuras realizando alguna actividad rutinaria.

Síntesis biográfica

Nació en octubre de 1632 en Delft, Holanda, fue bautizado en Delft el 31 de octubre de 1632 como segundo hijo y único varón del matrimonio entre Revner Janszoon Vos y Dimpha Baltens.

Cuando el pequeño tenía nueve años, sus padres adquieren la hostería "Mechelen", situada en una zona privilegiada de Delft, en el norte del Marktvelde, contando entre sus clientes con la burguesía distinguida de la ciudad. Entre estos clientes se encuentran también un buen número de artistas como Balthasar van der Ast o Pieter Groenewengen, contactos que serán decisivos para la formación del joven pintor. No se dispone de ningún documento que haga referencia al aprendizaje de Jan. Sólo conocemos que el 29 de diciembre de 1653 fue admitido como maestro en el gremio de San Lucas de Delft.

Los estatutos exigían un periodo de aprendizaje de seis años de duración con uno de los artistas reconocidos, por lo que se barajan diversas hipótesis sobre quién fue su maestro. Algunas opiniones apuntan a Leonaert Bramer (1594-1674) aunque las diferencias estilísticas son mayores que las razones que les unen. La mayoría de los expertos apuntan a Carel Fabritius como el pintor que dirigió el aprendizaje de Vermeer, ya que Fabritius se instaló en Delft en 1650, ingresando en el gremio de San Lucas dos años más tarde.

Jan contrae matrimonio el 20 de abril de 1653 con Catharina Bolnes, en Schipluy, pequeño pueblo cercano a Delft. Catharina era hija de Maria Thies, mujer que disfrutaba de una aceptable posición económica, que en un primer momento se opuso al matrimonio, tanto por razones financieras como religiosas, ya que ella y su familia profesaban el catolicismo mientras que los Vermeer eran calvinistas. Los recién casados se instalaron en un primer momento en la pensión "Mechelen" pero siete años después se trasladaban a la casa de Maria Thins, sita en el barrio católico, en Oude Langendijk. Tuvieron once hijos. La necesidad de mantener a una familia tan numerosa le impidió gozar de suficiente desahogo económico, tal como demuestra el hecho de que, un año después de su fallecimiento, la viuda solicitara ser declarada insolvente.

Trayectoria artistica

Entró en el gremio de pintores en 1653, en 1662 fue nombrado vicedecano del gremio y al año siguiente, decano. Destacó por sus retratos de escenas de interiores llenas de serenidad, compuestas con una claridad matemática e imbuida de una luz fría y plateada, en los que una o dos figuras están leyendo, escribiendo, tocando un instrumento musical, o realizando alguna tarea doméstica.

Salvo una visita a La Haya en 1672 para actuar como testigo en un pleito, pasó toda su vida en Delft. Se cree, sin embargo, que nunca se dedicó profesionalmente a la pintura, sino que regentó el hostal heredado de su padre y el negocio de marchante de arte legado igualmente por su progenitor.

Su producción reconocida y certificada por los especialistas es poco numerosa, según las fuentes: está comprendida entre 45 o 50 cuadros.

Sus obras, realizadas probablemente por el puro placer de pintar, representan escenas de la vida cotidiana, por lo general interiores con una o dos figuras y algunos objetos, plasmados con pinceladas densas y pastosas y con una iluminación que realza el efecto de intimidad y otorga a la escena cierto halo de misterio. Muy pocas de sus creaciones se apartan de esta línea general (algunas escenas religiosas y mitológicas), que es con diferencia la más valorada del artista.

Por el rigor de la perspectiva y los reflejos se ha llegado a sugerir que pudo servirse de una cámara oscura para producir sus obras. Creaciones muy destacadas son también los dos únicos paisajes de su mano que se conocen, en particular la Vista de Delft, obra que supera las realizaciones de los mejores paisajistas de la época.

Muerte

Falleció en Delft en el año 1675, a la edad de cuarenta y tres años, totalmente arruinado, fue olvidado tras su muerte y no se le redescubrió hasta el Siglo XIX. A partir de entonces su reputación ha crecido de modo constante. Hoy se le considera uno de los más grandes pintores holandeses.

El taller del artista o El arte de la pintura

Es una famosa obra de este pintor holandés, quien hubo de pintarla hacia 1666. Está realizada al óleo sobre lienzo y mide 120 cm. de alto y 100 cm. de ancho, por lo que es la obra más grande dentro de la producción conocida de este artista. Se conserva en el Museo de Historia del Arte de Viena, Austria, donde ha estado expuesta desde que fue recibida por el gobierno austriaco en 1946. En neerlandés es conocido como De Schilderkunst o Allegorie op de schilderkunst. Este cuadro también es conocido con el título de El estudio del artista.

Muchos expertos de arte creen que la obra de arte es una alegoría de la pintura, de ahí el título alternativo de este cuadro. Es el más grande y complejo de los cuadros de Vermeer.

La pintura es famosa por ser una de las favoritas de Vermeer, y un buen ejemplo del estilo óptico de pintura. Creado en una época sin fotografía, ofrece una representación visual realista de la escena y es un buen ejemplo del estilo de la cámara oscura. Otros puntos fuertes de la obra son: el uso de colores brillantes y el impacto de la luz filtrándose por las ventanas sobre varios elementos de la pintura.

El cuadro El arte de la pintura de Vermeer, se considera una pieza esencial en el catálogo de Vermeer porque el propio pintor no se separó de él ni lo vendió, ni siquiera cuando tuvo deudas. Incluso después de su muerte en 1676, su viuda Catharina lo legó a su madre, Maria Thins, en un intento de evitar su venta forzosa para satisfacer a los acreedores. El ejecutor de la herencia de Vermeer, el afamado microscopista de Delft, Anton van Leeuwenhoek, determinó que la transmisión de la obra a la suegra del pintor fue ilegal.

La pintura permaneció sin descubrir durante un siglo hasta su compra por 50 florines en 1813 por el conde austriaco, Johann Rudolf Czernin. Hasta 1860, la pintura pasó como obra de un archirrival contemporáneo de Vermeer, Pieter de Hooch. La firma de Pieter incluso se falsificó sobre la pintura. Sólo por la intervención del erudito francés experto en Vermeer, Thoré Bürger se reconoció como un original de Vermeer y de ahí comenzó su fama. El cuadro fue exhibido públicamente en Viena por la familia Czernin hasta la invasión de Austria por los nazis en 1939.

Después de la invasión nazi de Austria, altos oficiales nazis, incluido el Reichsmarschall Hermann Goering intentaron adquirir el cuadro. El conde Jaromir Czernin tenía previsto venderlo a otra persona, pero presionado por Adolf Hitler accedió a ofrecérselo por 2 millones de reichsmarks con destino al gran museo que Hitler pensaba erigir en Linz. Según alegan ahora los descendientes del conde, finalmente el precio pagado fue inferior ya que los alemanes amenazaron al propietario con enviarle a un campo de concentración. Algunas fuentes sitúan el precio en 1,65 millones, que fue pagado a través del agente Hans Posse el 20 de noviembre de 1940.

El cuadro fue rescatado de una mina de sal a finales de la Segunda Guerra Mundial en 1945, donde estaba protegido de los bombardeos aliados, con otras obras de arte. Los estadounidenses devolvieron la pintura al gobierno austriaco en 1946, puesto que se estimaba que la familia Czernin lo vendió voluntariamente, sin fuerza indebida por parte de Hitler. Pero en septiembre de 2009, los Czernin alegan que la venta fue forzosa, y reclaman una resolución justa del asunto. Según la página Web del periódico español El Mundo, las autoridades austriacas estudiarán cómo actuar.

La pintura representa una escena íntima de un pintor pintando a un modelo femenino en su estudio, junto a una ventana, con el fondo de un gran mapa de los Países Bajos. La pintura tiene sólo dos personajes, el pintor y su modelo. Se cree que el pintor sería un autorretrato del artista, aunque no resulta visible su cara. Viste con lujo, lo mismo que hizo Rembrandt en El pintor en su estudio. La vestimenta lujosa subraya la idea de que el pintor no es un mero artesano sino ejecutor de un trabajo distinguido, como dijo Leonardo en su tratado: «...el pintor está sentado delante de su obra y dirige ligero el pincel con colores bellos. Está vestido como más le gusta».

Una serie de objetos que se muestran en el estudio del artista se cree que están fuera de lugar. El suelo de mármol ajedrezado y el candelabro de oro son dos ejemplos de objetos que normalmente estarían reservados entonces para casas de las clases pudientes.

El mapa del fondo es de las Diecisiete Provincias Unidas de los Países Bajos, flanqueadas por vistas de los principales centros de poder. Fue publicado por Cleas Jansz Visscher en 1636.

Simbolismo y alegoría

Los expertos atribuyen simbolismo a varios aspectos de este cuadro. El tema es la Musa de la Historia, Clío. Esto se evidencia en que luce una corona de laurel, sostiene un cuerno (que representa la Fama, como encarnación de la celebridad), y lleva un libro (representando el conocimiento) según el libro del siglo XVI de Cesare Ripa sobre emblemas y personificaciones titulado Iconologia.

El águila de dos cabezas, símbolo de la dinastía austriaca de los Habsburgo y anteriores dirigentes de Holanda, que adorna el candelabro dorado central, puede haber representado la fe Católica. Vermeer era único al ser un católico en una Holanda predominantemente protestante. La ausencia de velas en el candelabro se supone que representaría la supresión de la fe católica.

La máscara que está sobre la mesa junto al artista se cree que sería una máscara mortuoria, representando la inefectividad de la monarquía habsburgo. Como corresponde a una alegoría, la luz natural se convierte en luz glorificadora, a través del recurso a la luz intensa que proviene de una ventana invisible, a la izquierda, y que cae directamente, sobre la modelo representando a la Musa.

Algunas obras

  • El ama y su criada.
  • Dama en Azul.
  • Dama tocando el virginal de pie. También conocido como:"Mujer de pie tocando la espineta".
  • Astrónomo.
  • Joven adormecida.
  • La carta de amor.
  • La joven con la copa de vino.
  • La lección de música interrumpida.
  • La mujer de la balanza.
  • La mujer del collar de perlas.
  • La mujer del laúd.
  • Muchacha con turbante.
  • Mujer con jarro de agua.

Galería

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Fuentes