José Claro Fumero

José Claro Fumero
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NombreJosé Claro Santiago Betancourt
Nacimiento12 de agosto de 1906
ciudad de Matanzas,
provincia de Matanzas,
Cuba Bandera de Cuba
Fallecimiento1 de octubre de 1977 (71 años) 
ciudad de La Habana,
Cuba Bandera de Cuba
Nacionalidadcubana
Ocupaciónmúsico y compositor
CónyugeAna Rodríguez
PadresJuliana Francisca Betancourt, y Bernardo Romero Santiago

José Claro Fumero (Matanzas, 12 de agosto de 1906 - La Habana, 1 de octubre de 1977). Compositor y trombonista cubano. Integró la orquesta típica de Narciso Velasco y formó parte de la Orquesta de Aniceto Díaz y más adelante de la orquesta de Rafael Somavilla Pedroso.

Síntesis biográfica

Nació el 12 de agosto de 1906, en la ciudad de Matanzas. Hijo de Juliana Francisca Betancourt y Bernardo Romero Santiago, ambos de Matanzas.

Estudios

Cursó la primera enseñanza en la escuela Félix Varela y llegó a graduarse de bachiller; le gustaba la música y soñaba con ser médico. Al no poder continuar sus estudios, se decidió por la música, siendo su primer profesor el músico belga Oscar Verweiser, el cual desempeñaba el cargo de director de la Banda Municipal de Matanzas; quien le enseñó teoría, solfeo y posteriormente bombardino, trombón, trompeta, guitarra y piano.

Labor de músico

Comenzó a trabajar muy joven como músico. En el año 1926 fundó un conjunto de sones que llamó Rayo de Luz, con el que alcanzó grandes éxitos. Pasó a integrar la afamada orquesta típica del Maestro Narciso Velasco; después integra la Orquesta del Maestro Rafael Somavilla Pedroso; en esta última estuvo algunos años.

En el año 1929 trabajó como trombonista en la orquesta del Maestro Aniceto Díaz, creador del danzonete. El 2 de julio de 1929 contrajo matrimonio con Ana Rodríguez, quien fue su inseparable compañera, con la cual tuvo cinco hijos.

Ya en estos años Fumero había manifestado su inclinación por la composición y fue cuando compuso para Rita Montaner su obra Iyabó, la estrenó y fue un rotundo éxito en su voz, esto le sirvió de mucho estímulo al maestro y continuó componiendo y tocando en diferentes agrupaciones.

Llegó a La Habana en los primeros meses de 1945, formó parte de la orquesta de Generoso Jiménez y en alguna que otra orquesta bailable. Se publicó la convocatoria que anunciaba la necesidad de músicos para la Banda de la Policía Nacional y el maestro se llevó una plaza por oposición. Ingresó el 1 de junio de 1945. Por esa época estaba reconocido como un buen compositor; para la banda escribió muchos arreglos y mosaicos, esto fue lo suficiente para que se revolucionaran las bandas y todas pidiéndole al maestro Mosaicos.

Arregló toda la música afrocubana que interpretó la Sonora Matancera, fue también el arreglista de la Sonora Lira Matancera por más de diez años, pero lo que más distinguió a este creador fue la música que creó y arregló para un nuevo tipo de agrupación musical Las Sonoras, que junto a Severino Ramos, con sus arreglos crearon un estilo y un sonido diferente. La Sonora Lira Matancera, cuenta en su repertorio con varios temas musicales arreglados por Claro Fumero y que son interpretados en todas las presentaciones que hace esta agrupación.

Actuó como trombonista invitado en los conciertos ofrecidos por la Orquesta Filarmónica de Venezuela, en el Auditorio y la Plaza de la Catedral, en la obra titulada Los pinos de Roma. En 1952 actuó con la Banda de la Policía Mexicana y el colectivo de esa institución le hizo entrega en el Palacio de Bellas Artes de una hebilla de oro y plata y una cartera de piel. Después del Triunfo de la Revolución, el Departamento de Cultura y la Banda de Música de la Policía Nacional Revolucionaria le organizaron un homenaje y recibió numerosos reconocimientos.

El 16 de septiembre de 1961 se licenció de la Banda de la policía y creó una orquesta de cámara la cual dirigía y actuaba de forma voluntaria para diferentes colectivos de trabajadores.

Compuso innumerables obras, reconocidas en la Sociedad de Autores. Constan de esa sociedad 176 obras registradas y otras muchas inéditas. Musicalizó numerosos poemas del poeta nacional Nicolás Guillén.

Muerte

Murió en La Habana el 1 de octubre de 1977, a los 71 años.

Obras (selección)

  • Pero poquito a poco
  • Salvadores del mundo
  • Pobre de mí
  • Coco solo
  • La despediste
  • Cien pesos por un beso
  • Al cielo
  • Principio y fin
  • Mi mayoral
  • Pss silencio

Fuentes