José Rego López

José Rego
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NombreJosé Vicente Rego López
Nacimiento8 de febrero de 1887
ciudad de Devesos,
provincia de Ortigueira,
provincia de Galicia,
Reino de España Bandera de España
Fallecimiento15 de agosto de 1976
ciudad de La Habana,
República de Cuba Bandera de Cuba

José Rego (Galicia, 8 de febrero de 1887 - La Habana, 15 de agosto de 1976) fue un sindicalista y político gallego expatriado en Cuba.

Su vida fue un ejemplo de entrega total a la causa de su clase y de su pueblo. Ni la persecución, ni la cárcel, ni el destierro, ni el terror brutal de las clases explotadoras lograron cambiar su trayectoria limpia y combativa ni las ideas que guiaron su pensamiento y su acción revolucionaria a lo largo de toda su existencia.

Fue uno de los fundadores en Cuba del primer Partido Comunista, precursor del actual Partido Comunista de Cuba.

Síntesis biográfica

Infancia y juventud

José Rego López de procedencia campesina al igual que sus padres Juan Antonio y Juana, vino a Cuba en los primeros años de la República, donde aprendió el oficio de planchador.

Labor revolucionaria

En la segunda década del siglo se vinculó al movimiento obrero cubano, en el Gremio de Obreros de Lavado y Planchado, del cual fue secretario financiero, y más tarde secretario general. Durante los gobiernos de Menocal y Zayas participó activamente en las huelgas que conmovieron al país. En unión de Alfredo López, Antonio Penichet, Alejandro Barreiro, José Peña Vilaboa y otros, formó parte de los organismos de frente único, denominados comités circunstanciales, encargados de dirigir las huelgas y las diversas actividades del movimiento sindical de la época.

En 1921 fue fundador con Peña Vilaboa y Alfredo López, de la Federación Obrera de La Habana, y de la Agrupación Comunista de La Habana, en 1923, cuando la influencia de la Revolución de Octubre y las ideas leninistas comenzaban a determinar la orientación del movimiento obrero cubano. En esta organización ocupó el cargo de secretario contador en 1923 y 1924, y de tesorero, en 1925.

Rego tuvo el honor de encontrarse entre los fundadores del Primer Partido Marxista-Leninista, en cuyo congreso fue electo miembro suplente del Comité Central y miembro de la Comisión Secretaria Fiscalizadora. Entrañable compañero de Julio Antonio Mella, Carlos Baliño y Rubén Martínez Villena, Rego fue un fiel defensor de los intereses de la clase obrera. Incanzable activista del movimiento sindical, se destacó durante la tiranía machadista por su lucha consecuente frente a los patronos y el gobierno, y contra los elementos reformistas y anarquistas, a favor del Frente Unico Obrero.

En 1930 fue detenido junto a otros compañeros suyos, pero la movilización del Partido, de Defensa Obrera Internacional y del Comité Conjunto de Colectividades, presionó de tal forma al gobierno de Machado, que este se vio obligado a liberarlos, después de varios meses de prisión. En 1931 fue expulsado del país y viajó a España, donde se vinculó al Partido Comunista Español.

Regreso a Cuba

Regresó a Cuba después de la caída de Machado y se incorporó rápidamente a los movimientos huelguísticos de aquella época, entre ellos la Huelga General de octubre de 1934. Después de la huelga de marzo de 1935 comenzó a trabajar como dependiente del ramo del tabaco en la Fábrica Partagás. Allí fue dirigente de la sección sindical y del comité del Partido, al tiempo que desplegaba una gran actividad en el comité del Partido del barrio de Arsenal, en la constitución del Ceiba, y como colaborador del comité provincial.

Durante la tiranía batistiana fue miembro del comité seccional del Partido Socialista Popular Arsenal, donde realizó una importante labor.

Al triunfo de la Revolución cubana (1 de enero de 1959), ya con una edad avanzada y enfermo, asumió la administración de la fábrica de tabacos Partagás, cuando fue nacionalizada. Después de jubilado, cumplió tareas como activista de la Sociedad de Amistad Cubano-Española. Rego pasó la mayor parte de su vida en nuestro país, al que amaba entrañablemente. A su firmeza, valentía, modestia e intransigencia revolucionaria se unía su fidelidad al Partido, al movimiento sindical y a las ideas del marxismo-leninismo.

Muerte

El 15 de agosto de 1976 falleció en La Habana, a los 92 años de edad.

Al morir era miembro del Partido Comunista de Cuba y contaba con 51 años de militancia en sus filas.

Sus restos fueron sepultados en el panteón de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.

Fuentes

  • El militante comunista (libro).
  • Archivo histórico.