José Ricardo Fresneda y Hernández

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Nacimiento9 de agosto de 1830
Melena del Sur, Mayabeque, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento2 de septiembre de 1851
Santiago de Compostela, España
Causa de la muerteSuicidio, consecuencia de los rigores del destierro, quebrantada la salud y padeciendo de profunda nostalgia, se quita la vida con un tiro de pistola en la cabeza.
NacionalidadCubana
CiudadaníaCubana
Alma materEstudiante de Derecho
TítuloJosé Ricardo Fresneda y Hernández, poeta y patriota melenero.
Obras destacadasA mi hermana, Sentir.

José Ricardo Fresneda y Hernández, poeta y patriota de Melena del Sur, Cuba durante el siglo XIX.

Síntesis biográfica

José Ricardo Fresneda y Hernández, Poeta y Patriota melenero, nacido el 9 de agosto de 1830 y fallecido el 2 de septiembre de 1851, estudiante de Derecho de la Universidad de La Habana, colaborador de varios periódicos. A consecuencia de los rigores del destierro, quebrantada la salud y padeciendo de profunda nostalgia se quita la vida con un tiro de pistola en la cabeza.

Marco histórico

El eminente historiador y profesor marxista Sergio Aguirre, en sus primeras conferencias sobre la interpretación de la historia de Cuba, sitúa el surgimiento de la nacionalidad cubana entre finales del siglo XVIII y principios del XIX. …“En los alrededores de 1790, surgieron simultáneamente los primeros grandes intelectuales nativos. Desde los primeros albores del siglo XIX se pondrán de manifiesto de forma precisa, las diferencias que marcarán la nacionalidad cubana de la española y que culminarán en un enfrentamiento político que tendría que resolverse con el surgimiento de una nación libre e independiente del tutelaje español. Este enfrentamiento asume, durante todo el siglo tres corrientes directrices en el pensamiento cubano: el Reformismo, el Independentismo y el Anexionismo, con etapas predominantes de una u otra corriente política. Se gesta igualmente una corriente social, el Abolicionismo, correspondiente a una nacionalidad que rechaza en sus más preclaros representantes, el sistema esclavista, incompatible con las aspiraciones de libertad e independencia que propugna y anhela. Todas estas corrientes, entrelazadas en el devenir histórico del pueblo cubano en la primera mitad del siglo XIX, influyeron de una u otra forma en las personalidades que van caracterizando el desarrollo político cultural de la nacionalidad cubana. Es en este marco histórico nacional que nace, el 9 de agosto de 1830, José Ricardo Fresneda y Hernández.

El marco familiar

El destacado intelectual e historiador melenero Gregorio Delgado Fernández sitúa el nacimiento de José Ricardo Fresneda en el antiguo cafetal “Merceditas “, posteriormente ingenio del mismo nombre, después CAI Gregorio Arleé Mañalich y hoy día Empresa Agroalimentaria Industrial mientras que el museólogo Osmany Ibarra Ortiz afirma que nació en el cafetal “La Luisa” donde posteriormente se edificara un ingenio azucarero del mismo nombre que ya no existe. La exactitud del sitio será difícil de determinar dada la poca información que tenemos de la época pero el intercambio con la pedagoga y actual historiadora melenera Rita Brito Sánchez, activa militante por el acervo histórico cultural del municipio, podemos incajinar las circunstancias. Era frecuente en ese tiempo que los ricos hacendados cafetaleros radicados en la capital de la entonces “Fiel Isla de Cuba” tuvieran en sus propiedades rurales casas señoriales a donde iba la familia a pasar vacaciones. Allí, rodeados de su esclavitud doméstica las matronas daban a luz sus hijos auxiliadas generalmente por una partera esclava de con fianza. En ocasiones, los niños pasaban en estas residencias campestres sus primeros años recibiendo el aprendizaje inicial que incluía la equitación y las primeras letras por algún pedagogo de la zona, pasando ya mayorcitos a centros de enseñanza de la capital. Este parece ser el marco infantil de José Ricardo pues “… desde muy joven sintió gran atracción por la poesía; tiene ocasión de cultivarla con cierto profesionalismo cuando cursaba estudios en el colegio de San Cristóbal de la Ciudad de La Habana actual La Habana. Aunque sin referencias precisas de la familia sabemos de la existencia de una hermana que suponemos es la confidente íntima que tienen casi siempre los poetas en cuyo seno vuelcan todas sus inquietudes y aspiraciones.

El Intelectual

José Ricardo Fresneda y Hernández, entra ya adolescente, en el Parnaso cubano. El romanticismo es la corriente de la lírica en esa época, años 40 de siglo XIX y el joven, que siente bullir la inspiración en todo su ser, vuelca un sus versos todo un mundo interior formado por vivencias familiares y una apreciación poética de la naturaleza circundante. Sus colaboraciones fueron muy apreciadas por importantes publicaciones de entonces como: los periódicos El Faro Industrial, El Artista, El Diario de La Habana y otros. Matriculó la carrera de Derecho en la Universidad de La Habana, por entonces ya se relacionaba con intelectuales de prestigio: …“Amigo y contertulio de Rafael María de Mendive, Desiderio Montalván, Joaquín G. Labredo, Antonio Cartas (que al ocurrir su muerte le dejó sentida elegía), Ramón Vélez Herrera, Juan Clemente Zenea, Miguel de Cárdenas Chávez, Francisco Calcagno y cuantos más lucían de la pléyade literaria joven de su tiempo, brillante porvenir le deparaban su talento, fortuna y posición social…”.

El Patriota

José Ricardo Fresneda, como cualquier joven cubano de la época, comprendió, desde adolescente, la situación política en que se encontraban los cubanos, sin patria y con un amo brutal que les impedía el acceso a dirigir los destinos del país. Vástago de una familia rica, con elevada instrucción, intelectual sobresaliente, poeta, frecuentando peñas de ilustres animadores socioculturales, colaborador de publicaciones periódicas, no pudo ser ajeno a la tragedia de una nacionalidad a la que se le negaba su afirmación cultural y política a la que se reprimía brutalmente por cualquier empeño libertario. Siendo un entusiasta admirador de Cirilo Villaverde no hay dudas de que las concepciones políticas de éste influyeron en el no logrado poeta melenero. Señala Sergio Aguirre que hacia 1848 se produjo la durísima consecuencia económica que la isla sufrió con la guerra de tarifas arancelarias entre España y Estados Unidos, que resultó mortal para el café de Cuba pues habiendo llegado a ser el tercer país productor mundial de ese grano en la primera mitad del siglo XIX, vio deshacerse su riqueza cafetalera. Suponemos que la familia de Ricardo fuera afectada gravemente por ese hecho, incidiendo en la convicción del joven poeta de que España no solo reprimía violentamente las ansias libertarias de los cubanos sino que tampoco era capaz de proteger sus intereses económicos. Entre 1847 y 1848, se producen intentos anexionistas importantes en la historia de Cuba, como la formación del Club de L a Habana en la capital y el descubrimiento posterior de la llamada Conspiración de Manicaragua o también de la Rosa Cubana, ligada a las actividades del Club y de donde emerge la controvertida figura de Narciso López; el joven estudiante de Derecho vio seguramente en estos hechos razones para abrazar una causa que creyó la de su pueblo y quiso brindar su aporte. Así hizo publicar en el periódico matancero La Aurora del Yumurí del que era colaborador unos versos dedicados “A Lesbia” con aparente fondo amoroso pero que en realidad era un acróstico donde se formaba la frase ¡Libertad nuestra Patria, hijos de Cuba! El poema pudo burlar la terrible censura española a toda publicación de la intelectualidad cubana pero solamente por unos días. Al descubrirse el hecho fue aprehendido. Debido a su juventud no fue sometido a proceso judicial. Por decreto al entonces Capitán General D. Federico Roncolli, asesorado por el conocido enemigo de los cubanos Martín Galeano, fue desterrado a España.

Al partir de Cuba escribió estos tristes versos de despedida:
Cuando lejos de ti, suspirando,
yo recuerde mi vida dichosa
quién será, quién será, Cuba hermosa,
dulce alivio a mi negro pesar?
Separado de ti, sin amigos,
sin un alma ligada a la mía
Cuán intenso dolor, que agonía
Que me espera a través de la mar.

El 2 de septiembre de 1851 (Gregorio Delgado plantea 1850) José Ricardo se priva de la vida con un pistoletazo en la cabeza. Los intelectuales gallegos le rindieron póstumo homenaje y sus restos fueron depositados en el panteón consagrado a los poetas de Santiago de Compostela. Atendiendo a las duras condiciones del destierro, a la quebrantada salud y nostalgia comprendemos las razones de un suicidio que la religión rechaza y el ideal revolucionario no aprueba. José Ricardo envió a su hermana pocos días antes de morir, a manera de despedida el siguiente poema:

Adiós por siempre, cuando al tiempo vayas,
A rogar al Señor de las alturas
Pide por mí con tus palabras puras
Que si a la muerte me arrastró el sufrir
Tan lejos ¡ay! de mis nativas playas,
Dirás, hermana amante enternecida
Que si este mundo me llamó suicida
Tendrá este mundo compasión de mí.

Fuente

  • Aguirre, Sergio - Lecciones de Historia de Cuba. Primer Cuaderno. Ediciones Populares S.A. La Habana, 1960.
  • Delgado Fernández, Gregorio - Melena y sus hombres. José Ricardo Fresneda. Periódico las noticias. Año XV.15 de mayo de 1957, No.5
  • Ibarra Ortiz, Osmany – José Ricardo Fresneda y Hernández. Poeta y patriota melenero. Notas biográficas. Museo Municipal de melena del Sur. 12 de agosto de 1987.
  • Delgado Fernández, Gregorio - Op.Cit.
  • Aguirre, Sergio - Op.Cit.
  • Ibarra Ortiz, Osmany - Op.Cit.
  • Revista “Brisas de Cuba” Habana Imprenta de Spencer 1855 T-3P.56-57 Biblioteca Nacional.