Kairouan

Kairouan
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EntidadCiudad
 • PaísBandera de Túnez Túnez
Población 
 • Total150 000 hab.

Kairouan. Ciudad de Túnez, sede de un gobierno regional, localizada a unos 160 kilómetros al sur de la capital. En el 2002 su población superaba los 150 000 habitantes. Fue fundada en el año 50 de la Hégira, 670 de n.e., por el jefe militar Okba Ibn Nafi. Su nombre original deriva del persa Kâravân y acabó convirtiéndose en kairuwân. Es la primera ciudad santa musulmana de África y la cuarta del mundo detrás de La Meca, Medina y Jerusalén.

Fundación

La ciudad de Kairouan se levantó sobre un emplazamiento estratégicamente situado, por un lado, a una jornada de camino del mar, que en aquella época estaba dominado por la flota bizantina, y por otro lado, de las montañas donde se refugiaban las tribus bereberes hostiles al Islam.

Su fundador, el jefe militar Okba Ibn Nafi, concibió la planificación de la ciudad e implantó en su centro la Gran Mezquita. A su lado hizo edificar el Palacio de Gobierno y trazó la arteria principal de la población, antes de proceder a la distribución de parcelas de terrenos para su soldados.

Historia

Kairouan nació en un medio hostil. En el año 64 de la Hégira, 684 d. C, tuvo lugar la revuelta de Kusayla y entre el 78 y el 82 de la Hégira, del 696 al 702 d. C, la rebelión de la Kahena contra Hassen Ben Nooman. Los bereberes Kharijitas saquearon y masacraron a su población. De esta manera, en el año 144 de la Hégira, 762 J.C, su primer gobernador abásida, Mohamed Ibn Al Ach´aath, decidió protegerla con una muralla de diez codos de ancho, es decir, 4,2 metros.

Desde mediados del siglo VIII, la ciudad entró en un período de relativa paz. En el año 155 de la Hégira, 772 J.C. Yazib Ben Hatem emprendió trabajos de restauración y ampliación de la Gran Mezquita. Organizó también los zocos y puso en marcha las diferentes corporaciones de oficios.

Kairouan se preparó para convertirse en un importante centro árabe musulmán, muy poblado, aunque de viviendas modestas, pero sólo con la llegada de los aglábidas se pudo equiparar a las grandes capitales del Mediterráneo, alcanzó su plena expansión y fue dotada con sus más bellos monumentos.

Ziyadat-Allah I puso en marcha, a partir del 221 de la Hégira, 836 de nuestra era, la reconstrucción de la Gran Mezquita para hacerla digna del papel espiritual que jugaba la ciudad, en constante crecimiento. Algunos años más tarde, en el 246 de la Hégira, 860 J.C, Abu Ibrahim Ahmed encargó a su liberto Khalaf construir un estanque que se convertiría en una de las obras hidráulicas más importantes del mundo musulmán. Da testimonio por sus excepcionales dimensiones, el tamaño de la ciudad y los esfuerzos que se realizaban para asegurar el aprovisionamiento de agua.

Cuando los fatimidas, cuya dinastía y seguidores pertenecían a la corriente ismailí dentro de la rama del Islam de los chiíes, se instalaron en Ifriqiya (Túnez) en el 296 de la Hégira, 909 J. C. no concedieron importancia a Kairouan, que opuso una resistencia feroz a los chiítas. Estos se replegaron a la costa, donde fundaron la ciudad de Mahdia, actualmente una de las veinticuatro gobernaciones de Túnez, situada en el centro oriental del país.

Los kairouanenses se aliaron incluso con los kharijitas durante la revuelta del ¨hombre en asno¨ en el 333 de la Hégira, 945 J. C. Pero superados por las exacciones de los bereberes, terminaron por apoyar al calida fatimida Isma'il al-Mansur Bi-Nasrillah, que tras su victoria perdonó a Kairouan su falta, y estableció su nueva capital, Sabra el-Mansouiriya en el 337 de la Hégira, 949 J.C, a las puertas de la población. Su hijo, Ma'ad al-Muizz Li Dinillah, edificó un acueducto que aprovisionaba las cisternas de Kairouan de agua potable después de haber alimentado su propia capital. Kairouán alcanzó alrededor de cuatro kilómetros de diámetro y una quincena de arterias irradiaban alrededor de la Gran Mezquita, proporcionando a la ciudad una configuración circular.

La decadencia de la ciudad tuvo su causa principal en las rivalidades entre las tribus bereberes Sanhaja y Zenâta y a la lucha por el poder sobre el Magreb entre los ziridas y los hammaditas. Esto provocó la movilización de todas las energías y la dilapidación de los recursos del país, lo que hizo más difícil la lucha contra los cristianos, que se aseguraron a partir de entonces el dominio de las vías marítimas en el Meditarráneo.

Por último la ciudad no pudo resistir a las invasiones de las tribus hilalianas procedentes del Alto Egipto, las cuales, formadas por las facciones de Riah y Sulaym, la saquearon en el año 449 de la Hégira, 1057 J.C, y expulsaron a su población. A partir de entonces, Fez y Túnez pasaron a ser las ciudades más importantes del Magreb.

La dinastía bereber hafsida le dedicó gran atención y a partir del siglo XIII de nuestra era, de nuevo Kairouan se rodeó de murallas de tres kilómetros de longitud, aunque ellas sólo cubrían una décima parte de la superficie en los tiempos del apogeo de la ciudad. La Gran Mezquita fue motivo de preocupación, y numerosos mausoleos, morabitos y cúpulas edificadas por sufitas, ascetas y hombres religiosos se extendieron por la ciudad proporcionámdole un sello excepcional de espiritualidad.

Mientras tanto afluyeron nuevos habitantes y los beduinos se instalaron en ella. Los zocos se reorganizaron y la ciudad se transformó en un centro de teñido, peletería y tejido, en un mercado para las tierras interiores. Se edificó la medersa Huseinita.

En 1861 la población de Kairouan se estimaba en 12 000 habitantes.

La primera Ciudad Santa musulmana

Kairouan influyó como centro intelectual en todo el Magreb. A finales del siglo III de la Hégira se creó una academia especializada en traducción y en diversas disciplinas, como la medicina, la astrología y la geometría.

También fue centro de una escuela de medicina ifriqiana, que alcanzó su apogeo en las épocas fatimida-zirida bajo la dirección de Ahmad Ibn Al Jazzar, autor de más cuarenta obras, entre ellas la célebre Zad al Musafir, que tuvo gran impacto tanto en Oriente como en Andalucía. Esta escuela compitió con las escuelas de medicina orientales e influyó en la Europa medieval. Fue además determinante en la transferencia de los conocimientos médicos árabes hacia los países de la orilla del norte del Mediterráneo, a través de las ciudades andaluzas y las universidades de Salerno y Montpellier. Varios manuales médicos ifriqianos fueron traducidos al latín, al griego y al hebreo.

Kairouan fue decisiva también en la consolidación de la ley islámica del Magreb, pues el Madhab malikí, una de las diferentes escuelas o corrientes de interpretación de la jurisprudencia islámica, nacida en Medina, fue formulada en la ciudad gracias a Asad Ibn Al Furat y Sahnun Ibn Saïd, fundador de la escuela malikita ifiriqiana y el más celebre jurisconsulto del occidente musulmán.

Desde el siglo XIII, la construcción de varios morabitos, aumentó la atracción espiritual de Kairouan hasta el punto de convertirse en la primera Ciudad Santa musulmana de África y la cuarta del mundo.

Actualidad

La actual ciudad está formada por una medina rodeada de sus murallas y por barrios modernos que reagrupan los servicios administrativos.

Kairouan continúa siendo la capital espiritual de Túnez y ha sabido guardar una cierta vocación de ciudad santa. Las fiestas religiosas se celebran con suntuosidad. Cada año se celebra el Mouled, aniversario del nacimiento del profeta, en la Gran Mezquita y en el mausoleo de Sidi-Saheb, compañero del profeta.

Cada uno de los numerosos zocos tradicionales de la ciudad está especializado en una actividad: zoco de la lana, de los tejedores, del cuero, de los cinceladores y de las alfombras, que es la artesanía más desarrollada y que se encuentra en manos principalmente femeninas. Otra actividades artesanales, consideradas ¨sucias¨, se realizan fuera de las murallas, como la de los caldereros, estañadores o tintoreros.

Patrimonio Mundial

Great mosque Kairouan.jpg

Kairouan fue inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial el 9 de diciembre de 1988. Algunos de sus monumentos más pretigiosos son:

  • Gran Mezquita Sidi Oqba. Construida en el año 670 de nuestra era por Oqba Ibn Nafi, fundador de la ciudad. Se restauró completamente en el siglo IX. Es el más antiguo y el más prestigioso edificio religioso del occidente musulmán.
  • Mausoleo Abn Zam´a Al Balawi (Sidi Sahbi). Tumba de uno de los compañeros del profeta.
  • Mausoleo Sidi Abid Al-Ghariani. Construido en el siglo XIV d. C. Su estilo es hispano morisco.
  • Mausoleo Sidi Amor Abada. Construido en 1872. Alberga el túmulo de un maestro herrero, personaje fuera de lo común, de una gran fuerza y tamaño, que gozó de gran notoriedad en la región.
  • Pozo de Bir Barrouta. Data del 796 d C. Según la leyenda, el agua de este pozo comunica con la del pozo de Bir Zem-Zem, el célebre pozo sagrado de La Meca.
  • Estanques de los aglábidas. Representan el conjunto hidráulico más antiguo del mundo musulmán.
  • Mezquita de Ibn Khayrun. Conocida como ¨la de las tres puertas¨. Es uno de los raros edificios que ha conservado su arquitectura y fachada en piedra esculpida de la época agábida, mediados del siglo IX.

Muralla

La primera muralla se construyó en Kairouan entre el 762 y el 763 d. C. y era de adobe. Su recinto se reconstruiría más de siete veces. La que hoy se ve, es la construida por los soberanos huseinitas entre 1756 y 1772.

Tiene más de 3,8 kilómetros de largo, una altura entre los 4 y los 8 metros, y los muros, de 2, 7 metros de ancho, están recorridos por un camino de ronda. La muralla se encuentra atravesada por varias puertas que datan de 1773: Bab Túnez, Bab al-Jalladines, Bab al-Jadid y Bab al-Khukha.

Fuentes

  • Rammah, Mourad. Kairouan. En Revista del Patrimonio Mundial No. 28 2002.

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