La educación en Tacajó antes de 1959

La educación en Tacajó antes de 1959
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La educación en Tacajó antes de 1959. Antes de 1959 Tacajó era una localidad donde solo interesaba una gran producción de azúcar para el enriquecimiento de sus gobernantes y ricos hacendados, nunca preocupó la educación de aquella masa de trabajadores que era la más sacrificada.


Inicios

La enseñanza y la cultura se mantuvieron marcadas en todos los niveles por el interés de defender y prolongar la situación injusta y opresora inherente en la realidad colonial. El deseo fue impedir que con la escuela y el libro cobrase el pueblo conciencia de sus largas servidumbres y se levantara contra ella. En la nacionalidad que surgía las mentes más claras denunciaron el terco retrazo de la educación y la cultura.Los funcionarios norteamericanos moldearon al interés de sus jefes la tarea de la cultura y la educación.

A partir de 1903, comienzan a llegar los primeros pobladores que en 1913 iniciaría la construcción del central que echó a andar su primera zafra en 1917, la formación de esta zona como comunidad data del siglo XX aunque ya en el siglo XIX vivían muchísimos pobladores en las zonas de Tacajó Viejo, Alcalá, etc., que nunca habían recibido clases.

Primeras maestras

La maestra Isabel Ochoa inicia en el aula No.1 de la escuela No.10  el 10 de septiembre de 1910. Fue una de las que formaron el distrito escolar de Antilla, al constituirse el ayuntamiento. Un año después, en 1911 se inicia como profesora de instrucción pública Consuelo Ochoa Ochoa desempeñando su labor en una escuela en el poblado de Tacajó Viejo un 20 de diciembre. Luego pasó a San Jerónimo donde dirige el aula única de la escuela rural mixta No.8. En 1915, comienza a desempeñar el aula No.2 de la escuela No.10 de Tierra Buena (Central Tacajó), la maestra Urbana Rodríguez Saenz. Forma parte de las 9 maestras que iniciaron el distrito de Antilla.

Enedina Alcántara Matos, ejerció como maestra en el aula No.5 de Tacajó Viejo desde el 13 de septiembre de 1926. Su labor mereció el cariño y consideración de los alumnos.La Dra. Rita Ochoa Zaldivar, después de graduarse de Doctora en pedagogía en la Universidad Nacional en 1934 pasó a ejercer el aula No.12 de la Luisa el 18 de marzo de 1935. Esperanza Rodríguez B. Maestra normalista, natural de Santiago de Cuba, fue enviada el 10 de febrero de 1935 para ocupar el aula única No.4 de Tacajó Viejo. Concepción Guarch F, ocupó el aula No.17 del cartón “Las Calabazas”, barrio de Tacajó Viejo un 4 de noviembre de 1936 donde hizo su inauguración. Estas fueron las primeras maestras que  iniciaron su labor educacional en Tacajó , con muy pocos recursos y en escuelitas rurales que solo impartían hasta el sexto grado, pocos niños llegaban hasta ellas por la lejanía, por no tener como pagar o por la pobreza y desinterés que los envolvía.

Creación de escuelas públicas y privadas

Posteriormente fue construida una escuela pública primaria que estaba dirigida por la maestra Isabel Ochoa Ochoa y Urbana Rodríguez Sainz, que radicaba en la localidad, además de dos escuelas privadas una que radicaba en la logia masónica de la cual era director el señor Armando Bofil y su esposa Elvia Santos. Tenía una matrícula de 23 alumnos en dos sesiones de clases; fue iniciada en 1930. La otra escuela privada tenía como profesora a Olimpia Céspedes. Pocos eran los que después de concluir sus estudios pagaban a maestros particulares para su preparación e ingreso en el Instituto de Segunda Enseñanza o en la escuela normal para maestros.

Estos estudios se realizaban en Holguín y debían tener recursos para hacerlo como: dinero, alojamiento, materiales de estudio y alimentación entre otros.Para la década del 50 surge la academia particular “Don Ramón Fernández Ventura”, dedicada a la enseñanza secundaria, donde se impartía el séptimo y octavo grado y los jóvenes que deseaban carreras debían prepararse en esta academia para presentarse a los exámenes que se hacían antes de comienzo en la escuela normal para maestros y otras carreras deseadas.

También para estos años la alcaldía de Antilla, las Iglesias Metodistas, los Masones pagaban a algunos maestros para que impartieran clases por algunos barrios como: Raquel Rodríguez , en Kingston, Minaelia Utria en Mamey, Lilia Almaguer en Kingston e Irma Morales que le impartía clases a niños que sus padres no tenían dinero para pagar su educación.

Surge una escuela con otras oportunidades

En el curso 1955-1956 y reconocido por el Ministerio de Educación se da apertura a la matrícula del curso el cual tiene lugar en el Colegio “La Amistad” en la localidad de Báguano, el cual ofertaba estudios en: Primera enseñanza, Ingreso al Instituto, Primer Año de Bachillerato, Secretariado, Mecanografía, Taquigrafía, Inglés, Música y otros.

Se abre de esta forma una oportunidad para los pobladores de Tacajó,  dirigirse hasta Báguanos a estudiar.

La luz del saber

Al triunfar la Revolución un nuevo horizonte se abre para el pueblo de Cuba y comienzan a abrirse escuelas a todo lo largo y ancho del país, los cuarteles que presenciaron tantos horrores vieron entrar a los niños que recibían la luz de la enseñanza. En la localidad  de Tacajó también se comenzó a sentir el calor de esta luz.

Fuentes

  • Archivos de la Biblioteca Municipal de Báguanos