Lakshmi (diosa hinduista)

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Lakshmi
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Religión o MitologíaIndú
País o región de origenIndia
Venerado enIndia, China, Japón.


Lakshmi. Diosa hindú de la buena fortuna y la abundancia, del amor y la belleza, de la flor de loto y la fertilidad, es muy adorada en la India. Ella garantiza el bienestar y la prosperidad a los humanos en la tierra y la obtención de abundancia tanto material como espiritual. Es una energía de prosperidad, también es la encarnación de la belleza, gracia y encanto. Su nombre es equivalente a la riqueza material, y deriva del sánscrito que significa “meta”. Ella representa la meta vital de todo ser: la prosperidad espiritual y material. Se cree que todos aquellos que la adoran conocen la felicidad inmediata. Normalmente se le representa con su pareja Vishnú, el conquistador de la oscuridad y sobre la flor de loto.

Historia

Los altares dedicados a Lakshmi están cargados de aceite, leche y flores, ya que es voluble y se deja convencer fácilmente por los apasionados devotos, con tiernas palabras y ofrendas suntuosas. Se dice que nació en un lago de leche. En un principio la diosa Lakshmi se llamaba Sri y era una manifestación de Devi-shakty, el principio sexual que, gracias a sus esfuerzos, generó el universo. Es la representación de la fémina universal que permaneció sobre una flor de loto durante la creación. Se unió a los dioses después de que el océano primordial se agitara para conseguir el elixir que apartaría el mal del mundo. Se elevó en medio de la espuma, los ríos cambiaron de curso para fluir hacia ella y los elefantes celestiales recogieron las olas para asearla. Al surgir hermosísima de las aguas oceánicas se la compara con la diosa Afrodita. Hoy en día se la adora más como Mata-Lakshmi o diosa madre, que cuida y protege, a la vez que atiende los llamados de sus devotos.

En el momento que surgió hacia la tierra, la diosa escogió a Vishnú como su compañero eterno, tanto de las generaciones precedentes como de las sucesivas, ya que era el único que podía detener a Maya, la ilusión. Por ello se dice que en la encarnación de Vishnú como Rama, ella encarnó en Sita, su esposa. En la encarnación de Vishnú como Krishna, Lakshmi encarnó como Raddha. La poesía hindú con mayor carga erótica narra la historia de Raddha, una mujer casada que sentía una pasión desbordante por Krishna, y se aleja a escondidas de su marido mortal para reunirse con él. Estos poemas se reflejan el carácter voluble de la diosa y el gran amor que sentía por su esposo inmortal. Como consorte de Vishnú, ella representa el lado activo y la energía femenina del Ser Supremo.

El nacimiento de la fortuna

El colérico sabio Durvasas, encarnación parcial de Shiva, maldijo una vez a los devas (dioses) debido a que había dado una guirnalda a Indra, el rey de los devas y éste, en lugar de usarla, se la cedió a su montura, el elefante Airavata. Por esa razón los asuras (titanes) vencieron a los dioses y los arrojaron de los cielos. Los devas se refugiaron en Brahma, el productor del universo, quien les ordenó que batieran el Océano de Leche y obtuvieran el amrita o néctar de la inmortalidad que les permitiría vencer a los asuras. Luego visitaron a Vishnú, el conservador del universo, quien tomó la forma de una tortuga gigantesca para sostener la montaña Mandara que sería usada como palo de batir. Acordaron con los asuras batir juntos el Océano de Leche y compartir los dones que surgieran, para lo cual utilizaron a Vasuki, el rey de las serpientes como cuerda. Gracias al esfuerzo de dioses y titanes aparecieron diversas maravillas: la propia Lakshmi, Dhanvantari (dios de la medicina), Chandra (dios lunar), el árbol Parijata, el caballo Ucchaishshravas, el licor embriagante, el arco de Vishnú, la caracola Pañchajanya, la vaca Kamadhenu, la joya Kaustubha y el amrita o néctar de la inmortalidad. La diosa de la Fortuna colocó una guirnalda sobre los hombros de Vishnú y lo escogió como su esposo.

Palabras clave de la diosa

  • Abundancia.
  • Plenitud.


Afirmaciones de la diosa

  • “Yo fluyo como el agua”.
  • “El universo es rico y existe suficiente abundancia para todos”.
  • “Yo merezco ser próspera”.
  • “Reconozco y vivo desde la abundancia”.
  • “Siento mi unidad con toda la vida en un universo de abundancia”.
  • “Me abro al flujo de la abundancia del universo”.
  • “Reconozco la abundancia que hay en mi vida”.
  • “Soy consciente de la abundancia en mi vida”.

Leyenda de la lavandera

Diosa de la abundancia

Cuenta la leyenda que hubo un rey en el norte de la India que cierto día regaló a su adorada esposa un precioso collar de perlas para que ésta pudiera lucirlo durante la celebración del Diwali. Pero he aquí que, al día siguiente, y mientras la afortunada se bañaba en el río, un cuervo osó atrapar dicho collar con su pico y desaparecer con él en el inmenso cielo. Tal fue el disgusto de su esposa que el rey, ansiando consolarla de cualquier manera, ordenó a sus hombres que recorrieran todo el reino prometiendo una suculenta recompensa a quien lograra recuperar joya tan preciada.

El ave ladronzuela, por otra parte, quien sabe con qué propósito, dejó caer el collar en un barrio muy pobre, concretamente muy cerca de donde vivía una lavandera que así, de pronto, se encontró con él en las manos. Poco tardó la humilde joven en presentarse ante el Rey y devolver el botín robado. Pero no quiso reclamar recompensa por ello, para sorpresa del monarca, sino que rogó que aquella noche, punto de partida de las fiestas del Diwali de ese año, todas las luces del reino fueran apagadas quedando tan sólo encendidas las lámparas de aceite de su casa. Esperaba así ser vista y escuchada por fin por Lakshmi, diosa de la buena suerte y de la prosperidad.

Y llegó la noche, y su deseo fue concedido. Todo el reino quedó a oscuras, todo excepto el pequeño hogar de la joven lavandera. Así, cuando Lakshmi apareció para honrar a todos aquellos que cada año celebraban su existencia, sus ojos sólo pudieron fijarse en aquella humilde casita. Pero he aquí que cuando la diosa tocó a la puerta de la lavandera, tras abrir, ésta le dijo que sólo la dejaría entrar si prometía quedarse en ella durante las próximas 7 generaciones. La diosa Lakshmi, emocionada ante una fe en ella tan profunda, no pudo sino aceptar sumamente complacida. Así la lavandera dejó atrás su vida de pobreza y durante 7 generaciones sus descendientes fueron los más afortunados y prósperos del reino.

Homenaje

Durante el año nuevo hindú -la festividad de Diwali- se le rinde el mayor homenaje a Lakshmi. Esta es una fecha en que las familias encienden lámparas con la esperanza de que la diosa visite sus hogares. Las lámparas son de terracota y tienen dentro aceite comestible o mantequilla líquida y rodean las casas y tiendas o en los lagos donde flotan. En algunas regiones de la India vuelan atadas a los hilos de las cometas. Se la representa como una bella y sonriente mujer de pelo negro y ondulado que le cubre la espalda. Luce muchas joyas y tiene la piel clara y dorada.

Sus hermosas vestiduras rojas y doradas representan actividad y prosperidad. Usualmente se la representa con cuatro brazos: al lado derecho uno sostiene una flor de loto y con el otro reparte bendiciones; al lado izquierdo uno reparte monedas y el otro un loto. Sus cuatro brazos simbolizan los cuatro fines que se deben buscar en la vida humana: dharma (justicia), kama (deseos genuinos), artha (abundancia), y moksha (liberación del ciclo de reencarnación). Su asociación con los lotos se refiere a la pureza y el poder espiritual. Ella nos vincula con la fuerza de la prosperidad y nos ayuda a pensar de una manera abundante.

En el occidente

Existen las estampitas o estatuillas, al igual que en oriente. Pero, con la diferencia que en oriente las representaciones de la vocación o ayuda que puede brindar el santo es mucho más representativa. Por ejemplo: en occidente se sabe que un santo venció a un dragón o que es el patrón de los imposibles o de los pobres, pero su figura o estampita o estatuilla apenas nos dice algo al respecto. En cambio, en oriente: India, China, Japón, Tailandia, entre las principales, las representaciones, ayudan en incentivar el poder mental o el poder que nosotros le podamos dar a estas representaciones y que constituyen una ayuda adicional para lograr el “milagro” o la suerte que estamos necesitando para determinada actividad.

Lakshmi en otras tradiciones

Dada su popularidad, Lakshmi fue adoptada fácilmente por los jainas]] y los budistas, quienes se encuentran fuera de la tradición hindú.

  • Festival:La principal fiesta de la Fortuna es Dipavali o Divali, la fiesta de las luces, la cual se celebra el día 15 de la quincena oscura del mes de Karttika (octubre-noviembre). Esa noche se encienden todas las luces de la casa y se prenden velas fuera de ella para que la Fortuna bendiga a sus habitantes.
  • Veneración cotidiana:Lakshmi es venerada por personas de todas las castas para adquirir o preservar su riqueza. Pero debemos advertir que Lakshmi solamente entra en los hogares limpios y ordenados y donde la gente trabaja duro. No visita los lugares sucios o desordenados ni a la gente floja. Dada su asociación con la esposa y el matrimonio, los recién casados llevan a cabo un puja o ritual de veneración después de que la novia es llevada a la casa de su esposo.
  • Santuarios:Como mencionamos en un artículo anterior dedicado a Sarasvati, las tres rocas sagradas en el santuario de Vaishno Devi en Cachemira simbolizan a Sarasvati, Lakshmi y Parvati. Lakshmi también es venerada como patrona de la ciudad de Kolhapur, en Maharashtra, al oeste de la India.
  • Bija mantra de Lakshmi:Semilla de fortuna (lakshmi-bija).

Referencias

Fuente

Enlaces externos