León de Atlas

León del Atlas
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Subespecie de león originaria del norte de África que hoy se encuentra extinta en libertad.
Clasificación Científica
Nombre científicoPanthera leo leo
Reino:Animalia
Filo:Chordata
Clase:Mammalia
Orden:Carnívora
Familia:Felidae
Hábitat:Actualmente bosque de Bialowieza.

León de Atlas. También llamado león bárbaro o león de Berbería (Panthera leo leo). Subespecie de león originaria del norte de África que hoy se encuentra extinta en libertad.

Generales

El león del Atlas (Panthera leo leo), también llamado león Bárbaro y león de Berbería es una subespecie de león originaria del norte de África que se encuentra extinta en estado salvaje.

Se le considera el rey de reyes, entre los felinos. Su majestuoso porte, su gran melena y su gran tamaño lo convierten sin duda en el más imponente de los leones, y de los felinos en general. Sin embargo, ya solo quedan unos pocos en zoológicos y circos.

El número de leones del Atlas que quedan en cautividad, se desconoce. Muchos de los leones que se encuentran en zoológicos y circos no son individuos puros, sino que se han cruzado con otras subespecies de leones durante generaciones.

El león de Atlas se encuentra hoy en grave peligro de extinción, al igual que sus parientes: el león africano (Panthera leo) , el león asiático (P. leo persica) , el león sudafricano y el león blanco (Panthera leo krugeri)

Historia

Inicialmente estos leones estaban ampliamente distribuidos por el Magreb, toda el área ocupada actualmente por el Sahara, Egipto, noreste de Sudán, Eritrea y norte de Etiopía.

A partir del cuarto o tercer milenio antes de Cristo, el Sahara, hasta entonces ocupado por una sabana similar a la del este de África, comenzó a desecarse y convertirse en el desierto que es actualmente. Con la desaparición de las plantas lo hicieron también los grandes herbívoros, y con ellos los leones bereberes. Estos quedaron entonces divididos en tres zonas distintas, separadas entre sí por miles de kilómetros de desierto.

Decadencia

La primera zona de la que el león del Atlas desapareció por causas humanas, y no exclusivamente climáticas, fue el delta del Nilo, antes ya del 3000 a. C. Esta extinción no se debió realmente a la caza del león, (de hecho, era un animal sagrado bajo la figura de la diosa Sekhmet), sino fundamentalmente al impacto sobre el medio que causaron los primitivos egipcios, mediante la deforestación de los bosques, el roturado de las tierras y la construcción de presas y ciudades. A medida que la civilización se extendía río arriba, los leones iban retrocediendo.

Otros pueblos del norte de África también reverenciaron al león del Atlas por su fortaleza y ferocidad, entre ellos los etíopes, cuyos reyes tenían el título de Leones de Etiopía. El último de ellos, Haile Selassie, fue derrocado en 1974 y ostentaba dicho título.

Pero ningún pueblo dio tanta importancia a este animal como los romanos, que los importaron durante siglos para que participasen en sangrientos combates circenses contra otras fieras, o devorasen gladiadores, prisioneros y condenados cristianos.

La posesión de leones llegó a convertirse en un símbolo de poder, hasta el punto de que Julio César llegó a tener un cortejo de 600 leones del Atlas, y Pompeyo, uno de 400. Las capturas de los romanos hicieron mella en las poblaciones del Atlas, pero no tuvieron consecuencias tan dramáticas para los leones como la introducción de las armas de fuego en el norte de África.

Extinción

El león se extinguió hacia 1700 en Libia, y a mediados del siglo XIX lo hizo del este de África y el Tassili. En 1891 desaparecieron de Túnez y en 1893 de Argelia. Reducido ya a escasas áreas de Marruecos, se comenzó a recluir algunos ejemplares en jardines zoológicos para evitar una extinción que ya se presentía inminente. En 1922, la casa real marroquí recluyó una manada en el Zoológico Real de Temara, cuyos descendientes fueron cedidos en 1975 al Zoológico de Rabat.

El último león que vivió en libertad fue probablemente un macho tiroteado en 1922 en las montañas del Atlas en Marruecos, aunque hubo avistamientos sin confirmar hasta 1942 aproximadamente.

Redescubrimiento

Pese a los posibles avistamientos, durante muchas décadas se creyó extinguido, aunque a mitad del siglo XX salieron algunos datos sorprendentes a la luz. Un par de científicos en un zoológico en Rabat, Marruecos, encontraron a un grupo de leones que tenían un gran parecido con la descripción de los leones del Atlas. Estos son los leones pertenecientes a la casa real marroquí, de los que se había perdido la pista hasta el redescubrimiento.

En los años ochenta se descubrieron más leones en Etiopía, que pertenecieron al depuesto emperador Haile Selassie y que estaban en un zoológico hasta entonces olvidado.

Desde entonces, se han sido identificado en otros parques zoológicos de todo el mundo por su parecido, aunque su confirmación aún no está realizada.

Características

Estos leones son los terceros más grandes que han existido detrás del león de las cavernas (Panthera leo spelaea), desaparecido hace 10.000 años, y del león americano (Panthera leo atrox), desparecido también en el Pleistoceno.Viven una media de 15 años.

Dimensiones

Las hembras miden de longitud entre 2,13 metros y 2,74 metros, mientras que los machos miden entre 2,74 y 3,35 metros. Los machos pesan entre 230 y 270 kg mientras que las hembras pesan entre 140 y 160 kg.

Melena

Los machos cuentan con una larga y espesa melena de color rojiza alrededor de la cara y negra el resto, que se prolonga hasta el pecho y los costados de forma similar a la del león Asiático (P. leo pérsica), su pariente más cercano. Las hembras no tienen melena.

Sin embargo hay que tener cuidado a la hora de intentar identificar a los leones por su melena, ya que se ha visto que no solo los genes influyen sobre el tipo de melena, sino que también lo hacen algunas condiciones externas como el clima. Por ello, según el lugar donde se encuentren estos leones pueden variar sus melenas, o incluso otros leones pueden aparentemente parecer leones del Atlas y no serlos.

Pelaje, cola y rostro

Con respecto al color de su pelaje, este es de color arena claro y muy corto, con las puntas de las orejas negras. El iris de sus ojos son de color muy claro, de color ámbar.

La cola tiene un gran mechón de pelo que también le diferencia de otros leones, y la forma del cráneo y la estructura facial son muy diferenciadoras, y bastante similares a las del león asiático. Sus patas se ven cortas en comparación con su gran tamaño.

Hábitat

Aunque se suele utilizar mucho el título de Rey de la Selva para los leones, normalmente estos felinos habitan zonas de sabana, por lo que estaría mal llamarlos así. Sin embargo, el león del Atlas era un depredador del bosque, habituado a cazar en espesos pinares de las montañas del Atlas. Si tenemos en cuenta que en latín silva se refiere a cualquier bosque cerrado, es posible que se les llame Reyes de la Selva por el comportamiento de estos leones.

Estos leones cazaban en bosques del Atlas, aunque también se adentraba en zonas más llanas y peladas, llegando por el oeste hasta el moderno Sahara Occidental y por el este estando igualmente presente en los llanos Libia, Egipto y Sudán como en la montañosa Etiopía. Muchos de los lugares donde un día habitaron los leones del Atlas son hoy desérticos, aunque hace miles de años estaban recubiertos en su mayor parte por estepas y sabanas.

Comportamiento

En su comportamiento es semejante a otros leones, aunque diferenciándose por su menor sociabilidad. Esto es seguramente debido a que el alimento siempre ha sido escaso en su hábitat.

Reproducción

El período de gestación dura entre 100 y 110 días, con una media de 103 días, tras lo cual nacen entre 2 y 6 crías. Los cachorros están generalmente muy manchados con rosetas muy oscuras, y abren los ojos a los 6 días. Estas crías maduran entre los 18 meses y los 2 años, cuando se separan de su madre.

Aunque alcanzan la madurez a los 2 años, hasta los 3 o 4 no suelen reproducirse. Normalmente los machos se separan del grupo al alcanzar la madurez sexual, en este caso las hembras también se separan al ser más solitarios, marchándose a buscar su territorio en el medio silvestre.

Alimentación

Entre sus presas típicas estaban el ciervo común, el gamo persa, el asno salvaje del norte de África, el arruí, el jabalí y diferentes antílopes. Se piensa que utilizaban el estrangulamiento una vez capturaban a sus presas para matarlas.

Competidores y depredadores

Sus competidores en el medio natural eran los osos y leopardos, también extintos en el África septentrional; sin embargo, no tenía depredadores.

Fama

Estos leones fueron utilizados en los circos romanos, y eran animales de sultanes y emperadores. Muchos poblados los respetaban y admiraban. Incluso en la actualidad, algunos han sido actores como Zamba, un león de Berbería que ahora vive retirado en un zoológico y que fue león de la Metro Goldwyn Mayer (MGM).

De los ejemplares antes de su extinción en libertad quedan pocas pieles, cráneos y fotografías que sirvan de referencia para diferenciarlos.

Causas de su extinción

La caza, sin duda, contribuyó a la extinción del León de Berbería, aunque no fue la única razón.

La ocupación de su hábitat y la transformación del mismo por causas humanas es otra razón de peso. Además el uso de los bosques para pastoreo de ganado lo degradaron, perdiendo estos calidad.

Otra causa importante fue la falta de presas también en su hábitat, lo que les obligó a depredar animales domésticos como burros, cabras y dromedarios. Esto se convirtió en un bucle que le llevó a la extinción, ya que la depredación sobre estos animales impulsó su persecución por parte de las personas.

Conservación

Durante su existencia en libertad no se hizo nada, y ahora ya redescubierto, lo que se intenta es localizar a los ejemplares para en un futuro, poder reintroducirlo en libertad.

Quedan muchos leones de este tipo en cautividad en zoológicos de diversas ciudades como las de Rabat (Marruecos), Tampa (Estados Unidos), Madrid (España) y Addis Abeba (Etiopía); también hay ejemplares en el Parque Nacional Kruger de Sudáfrica y en circos de todo el mundo, aunque su pureza genética tendría aún que ser demostrada.

Reintroducción en el medio natural

Gracias a los supuestos ejemplares de leones de Atlas conservados en zoológicos y circos del mundo, surgieron las propuestas de su reintroducción en el medio natural: la primera de ellas en el parque nacional ubicado en el Atlas marroquí, en 1978, la cual no se llevó a cabo.

Otro intento fallido fue el de la empresa WildLink International, que recientemente en colaboración con la Universidad de Oxford, puso en marcha el proyecto de recuperarlo e introducirlo en zonas protegidas.

Para ello lo primero a realizar, eran los análisis de ADN de ejemplares disecados, ya que son estos los que tienen el genoma de león del Atlas que se podrá comparar con el de los supuestos leones del Atlas actuales.

Tras la obtención del patrón genético y la selección de ejemplares se criarían en cautividad para obtener auténticos leones del Atlas que devolver al norte de África.

Sin embargo, esta empresa se ha retirado del proyecto cuando ya se tenían resultados de muestras de museos de París, Bruselas y Turín. Así el proyecto ha quedado estancado hasta encontrar financiación, aunque los investigadores de la Universidad de Oxford no desisten de la idea y están decididos a encontrar a los verdaderos leones del Atlas.

Por otro lado, hay otro proyecto en la Universidad de Michigan dirigido por Dan York de las mismas características, pero menos avanzado.

Libro genealógico

Algunos conservacionistas han creado un libro genealógico que detalla todos los descendientes de un grupo de leones, una vez propiedad del sultán de Marruecos. Estos leones, todos cautivos, podrían ser de los pocos leones de Berbería auténticos que quedan actualmente.

A partir de estos descendientes se podría llevar a cabo un auténtico programa de cría, así como resolver la controversia de si se trata realmente de una subespecie distinta a las demás.

Mientras las cosas se ponen en marcha se sigue la situación de esos leones y de su reproducción actual, para que cuando en el futuro se ponga en marcha realmente la reintroducción, estos ejemplares y sus descendientes sigan localizados y listos para un futuro mejor de la subespecie. Mientras, se podrán seguir estudiando a los ejemplares y su material genético.

Los leones están protegidos por el Apéndice II del CITES.

Fuente