Leyendas del cristianismo

Leyendas del cristianismo
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Concepto:Leyendas en la etapa del cristianismo.

Leyendas del cristianismo. Cuenta historias y leyendas del cristianismo, algunas de ellas con poco fundamento histórico pero arraigadas en el pensamiento popular de los cristianos.

Historias del paraíso

El Ave Fénix en el Paraíso

Cuenta la leyenda que el Fénix vivía en el jardín del Paraíso, y estaba anidando en el rosal. Cuando Adán y Eva fueron expulsados, de la espada del ángel que los desterró saltó una chispa y prendió el nido del Fénix, haciendo que ardiera este y su inquilino.

Por ser la única bestia que se había negado a probar la fruta del paraíso, se le concedieron varios dones, siendo el más destacado la inmortalidad a través de la capacidad de renacer de sus cenizas. Cuando le llegaba la hora de morir, hacía un nido de hierbas aromáticas y especias, ponía un único huevo que empollaba durante tres días y al tercer día ardía, no se sabe si por el fuego que él mismo provocaba o por causa accidental.

El Fénix se quemaba por completo, y al reducirse a cenizas, resurgía del huevo la misma ave Fénix, siempre única y eterna. Según el mito, se le añaden otros dones, como el de la virtud de que sus lágrimas fueran curativas.

Razas de la humanidad

Después del Gran Diluvio del que solo sobrevivió la familia de Noé, el mundo se pobló nuevamente poco a poco. Noé tenía tres hijos: Cam, Sem y Jafet, que —según los hebreos escritores de la Biblia— fueron los orígenes de todas las razas humanas.

Camitas o hamitas

Cam se burló de la desnudez y embriaguez de su padre Noé, por lo cual este lo maldijo en la persona de su hijo Canaán. Cam tuvo tres hijos más: Cus, Mesraim y Fut; a todos ellos se les considera ascendientes de los cananeos y africanos en general.

Los camitas (por Cam), serían la raza nativa del norte de África, a la que pertenecen los bereberes y los tuaregs, varias naciones del Sudán, los antiguos egipcios (que en realidad es una civilización más antigua que el mito de Noé) y las tribus etíopes. Son altos, de tez aceitunada; actualmente la mayoría son musulmanes.

Semitas

Sem fue el primogénito de Noé. Como tuvo un respeto piadoso por su padre al encontrarlo borracho y desnudo, este lo bendijo y tuvo a su vez cinco hijos; progenitor de los pueblos semitas, que han tomado de él su nombre. De la rama de Sem nació el gran patriarca Abraham quien fue padre de Ismael (quien a su vez —según los hebreos— fue uno de los orígenes de algunas tribus árabes) y padre de Isaac, padre de Jacob.

No se debe confundir el término semita con judío, los semitas son varios pueblos que tuvieron su origen probablemente en Arabia, de donde se extendieron a Mesopotamia, el oriente del Mar Mediterráneo y el valle del Río Nilo; comprende a los árabes, los sirios, los antiguos babilonios y asirios, a los moabitas, amonitas y a las tribus arameas, inclusive los judíos.

Jafitas

Jafet fue el tercer hijo de Noé, al que este bendijo después del Diluvio, prometiéndole una larga descendencia; extendió su raza por los valles del Cáucaso (de ahí el término caucásico) hasta las orillas del Río Ganges, y por el Asia Menor y las islas del Mar Egeo hasta las costas griegas; tuvo siete hijos siendo uno de ellos Tarsis, el Tartessos ibérico. Se considera que este mítico Jafet palestino equivale al titán griego Japeto). Se le identifica con la raza blanca.

Historias sobre Cristo

Fecha del nacimiento de Jesús

Se cree que el nacimiento de Jesús fue el año 6 a.C y no en diciembre del año 1 a. C. El error se debió a los cálculos hechos por Dionisio el Exiguo en el siglo IV. La palabra Navidad viene del latín nativitas. Mientras que los católicos romanos la celebran el 25 de diciembre, los ortodoxos lo hacen el 6 de enero y los armenios el 18 de enero. Alrededor del solsticio de invierno los romanos celebraban a Mitra, el dios solar, había paz y la gente se repartía regalos. En el siglo IV la Iglesia Católica —teniendo en cuenta que Jesús era «la luz verdadera que alumbra a toda la humanidad» (Juan 1;9)— cristianizó la fiesta.

Cristo sobrevivió a la cruz

Para los miembros de Adhamadayya, un grupo evangélico musulmán, Jesús sobrevivió a la cruz y murió en India a los 120 años de edad. Su tumba se localizaría en Srinagar, capital del estado de Cachemira, al norte de la India, donde dicen que Jesús fue a buscar a las diez tribus de Israel perdidas.

El Judío Errante

Para explicar por qué habían muerto todos los contemporáneos de Jesucristo y no había sucedido el fin del mundo, los cristianos crearon la leyenda antisemita del Judío Errante.

Un zapatero judío llamado Ashaverus tenía un pequeño comercio cerca del sitio donde pasó Jesús con la cruz a cuestas. Le negó a Jesús que descansara un momento y le golpeó con una herramienta, al tiempo que le decía: «¡Camina!». Jesús entonces le maldijo: «Yo ahora voy a descansar, pero tú vas a caminar hasta que yo vuelva». En otras versiones, Jesucristo terminó la maldición con «hasta que no nazca niño alguno» o «hasta que las mujeres dejen de parir»).

Desde entonces aquel judío comenzó a recorrer la Tierra y sus pies cansados jamás pudieron detenerse, porque las palabras de Jesús lo impulsan a caminar hasta el día del Juicio Final, en el que Jesucristo le enviará al infierno eterno.

Variante oriental del Judío Errante

Un judío llamado Cortafilo era el portero de Pilatos. Durante el juicio, cuando sacaron al Mesías de la presencia del gobernador romano, Cortafilo le clavó un puñal en la espalda, gritándole «¡Camina!». Jesús le respondió: «El Hijo del Hombre se va, pero tú esperarás a que Él vuelva». Después Cortafilo se convirtió al cristianismo y fue bautizado por Ananías, recibiendo el nombre de José; pero debido a la maldición continúa su peregrinación por el mundo.

El judío errante solo lleva cinco monedas de cobre, hay incluso quien afirma que lo ha visto en cualquier parte del mundo. Un autor de la Edad Media estableció que cada cien años el maldito sufre una terrible enfermedad de la que se recupera pues no puede morir sino hasta que regrese Jesús.

Historias de los Reyes Magos

Los tres Reyes Magos

Una tradición dice que los tres Reyes Magos eran hermanos. Según otra tradición, Melchor venía de Persia, Baltasar de India y Gaspar de Arabia.

En la antigüedad los magos tenían muchas funciones: astrólogos, médicos, sacerdotes y consejeros de los reyes. Nunca se trataba de personas jóvenes, sino de ancianos (aunque probablemente ya a los cuarenta años una persona era considerada «anciana» y sabia).

Una leyenda apócrifa dice que después de la resurrección de Jesús, el apóstolTomás los halló en Sabá (probablemente India), los bautizó y los consagró obispos. Habrían sido martirizados en el año 70 (cuando cada uno) en el tendría entre 110 y 140 años de edad...) y depositados en el mismo sarcófago.

Santa Elena (madre del emperador romano Constantino) llevó a Constantinopla unos huesos humanos y dijo que eran los restos mortales de los Reyes Magos. Posteriormente, en el siglo XII, Federico Barbarroja dijo haberlos encontrado (junto con las tres coronas que habrían llevado durante su existencia). Hizo construir un mausoleo en la catedral de Colonia (Alemania). Pero el solo hecho de que los magos fueran tres, es ya un mito. Así como sus nombres, los cuales tampoco son mencionados en la Biblia

El cuarto Rey Mago

Hay varias leyendas acerca de este personaje. Algunos le dan el nombre de Azael, otros de Artabán. Cuenta la leyenda que este hombre partió junto con los otros tres a venerar al Niño Dios pero por detenerse en su camino a ayudar a los demás, gastando a veces parte del regalo que daría al Mesías, su camino se alargó muchos años.

Una versión cuenta que este cuarto rey mago llegó finalmente a Jerusalén un viernes antes de la Gran Fiesta de la Pascua, la gente estaba alborotada. Comentaban que un rabino llamado Jesús agonizaba en el Gólgota. Azael o Artabán, ya muy anciano, supo de quien se trataba y llegó casi a rastras como si él mismo hubiera cargado la cruz. Se dirigió hacia el agonizante Jesús y susurró: «Perdóname. Llegué demasiado tarde». Desde la cruz escuchó la voz de Jesús que decía: «Hoy estarás conmigo en el Paraíso».

Historias sobre reliquias cristianas

El prepucio de Cristo

Jesús, al ser judío, fue circuncidado como lo indica la tradición judía. Debido a ello, algunos discutieron que cuando Jesús ascendió al Cielo con su cuerpo físico (después de la Resurrección), lo hizo con su prepucio. Por otro lado, hubo otros que decían que este se quedó en el mundo. Muchas iglesias (en Europa y sobre todo en Francia) afirman tenerlo. Así, la teoría de que el prepucio se fue con su dueño al Cielo generó una interesante aunque descabellada historia.

Durante del siglo XVII el académico y teólogo católico León Alacio especuló con que el Santo Prepucio había ascendido al Cielo al mismo que tiempo que Jesús y se había convertido en los anillos de Saturno (que acababan de ser descubiertos).

La Cruz de Jesús y el emperador Heraclio

El Emperador Heraclio, decía haber recuperado de los persas la Santa Cruz. Dijo que había intentado cargar el precioso madero, pero no había podido moverlo ni un centímetro. El patriarca Zacarías le indicó que lo que no le permitía cargar la cruz con toda su pompa imperial (pues poco o nada tenía que ver con la humildad de Jesús). Entonces el Emperador se despojó de sus prendas imperiales y avanzó por la ciudad con la Cruz a cuestas, seguido de todo su pueblo.

Depositó la Cruz dentro del cofre de plata donde antes había sido venerada y del cual se la habían llevado los persas. Todos veneraron el madero con mucho fervor e inmediatamente se produjeron milagros. Muchos templos cristianos que se construyeron recibieron un fragmento de la Cruz como reliquia, por lo que Calvino dijo que se podría cargar un gran barco con ellos. Pero Rohault de Fleury demostró en 1.870 que las reliquias de la Vera Cruz eran todas de madera de oliva y que, puestas en conjunto, no alcanzarían para construir ni siquiera un tercio de lo que debió ser la Cruz original.

El Arca de la Alianza

Según las tradiciones de la iglesia cristiana en Etiopía; ellos son los guardianes actuales del Arca.

La muerte de José de Nazaret

Jesús le pidió a su Padre, Yahvéh, por su padre José y le pidió una escolta de ángeles para que lo guiaran por el inframundo. La Muerte tenía miedo de llevarse a José porque le intimidaba la presencia de Jesús y eso solo alargaba la agonía, entonces Jesús fue con Abbaton (la muerte) y le dijo que ejecutara su trabajo, que no debía temerle. Abbaton cumplió y José fue escoltado al Cielo por los arcángeles Gabriel y Miguel. Jesús consoló a los hijos de José y hubo duelo en todo Nazaret.

Jesús dijo que el cuerpo de su padre no se corrompería ni se separaría de su mortaja sino después de mil años. Jesús llora sobre el cuerpo amortajado de José y reflexiona sobre la misión de la Muerte. Y fue enterrado. José murió de ciento once años.

Muerte de los apóstoles

Casi todas estas historias carecen de respaldo historiográfico suficiente para ser aceptadas como ciertas. Algunos autores opinan que a mediados del primer siglo en Jerusalén no había ningún seguidor de Jesús, por lo que estas historias serían las justificaciones de qué es lo que hizo cada apóstol (se agregó también incluso sus formas de martirio, etc.).

  • Pedro, según la antigua tradición católica el primer Papa, se dice que murió crucificado cabeza abajo (pidió esa variación ya que no quería imitar a Jesús) por Nerón hacia el año 64. El Vaticano dice tener sus reliquias.
  • Juan Evangelista está casi constantemente junto a Pedro, fue echado a una caldera de aceite hirviente de la que salió completo, lo desterraron a la isla de Patmos (donde escribió su Apocalipsis) y murió de edad en Éfeso (Asia Menor, actual Turquía); con él se cierra el ciclo de los libros de la revelación pública (Biblia).
  • Santiago el Mayor (o Santiago de Compostela) cristianizó España y fue decapitado en el año 42. Fue el primer apóstol martirizado. Su cuerpo fue llevado a Santiago de Compostela (Galicia). Es probable que se trate de un «mito de navegación», un leitmotiv del imaginario celta, de un dios decapitado en Carnaval, al que se le sobreimprimió la historia de Sant’Yago, como la de San Tropez y San Vicente de los Cuervos, que arriban a las costas decapitados, en una barca mágica sin tripulación.
  • Santiago el Menor fue obispo de Jerusalén después del martirio de Santiago el Mayor. Lo arrojaron del pináculo del templo y luego fue lapidado en el año 61 por Anás II.
  • Andrés murió crucificado en una cruz con forma de X —la ahora llamada cruz de San Andrés(tampoco quiso estar igual que Jesús) en Petras de Acaya. Su cuerpo fue llevado a Constantinopla y después a Amalfi (cerca de Nápoles). En 1462 fue enviada a Roma una cabeza que se decía era de san Andrés, pero en el siglo XX el papa Paulo VI la regresó a los griegos.
  • Bartolomé habría sido misionero en Arabia e India. A la vuelta habría sido despellejado y decapitado en Armenia.
  • Felipe fue crucificado en Hierápolis bajo Domiciano o Trajano. En la iglesia de los Santos Apóstoles (Roma) se dice que se encuentran sus reliquias.
  • Matías fue decapitado en Etiopía.
  • Judas Tadeo predicó en Medio Oriente y Libia. Murió en Beirut (capital del actual Líbano).
  • Tomás habría cristianizado India, donde habría sido martirizado.
  • San Pablo, por ser ciudadano romano, tuvo el privilegio de ser decapitado en Roma por Nerón y aproximadamente en la misma época que san Pedro. Muchas iglesias dicen tener alguna parte de sus reliquias: San Pablo Extramuros (recientemente se descubrieron aquí sus restos), San Juan de Letrán entre otras.

La santidad de Poncio Pilatos

Los relatos antiguos afirman que en el año 36 de nuestra era, Pilatos fue llamado desde Roma por el emperador romano Tiberio, y según el teólogo e historiador de la Iglesia Eusebio de Cesarea, se suicidó ahogándose en un lago. Pero por otro lado algunas leyendas afirman que Pilatos, luego de la crucifixión de Jesús, abrazó el cristianismo y que murió mártir. Así la Iglesia copta lo venera mártir y lo festeja el 25 de mayo.

Leyendas insólitas

San Antonio el grande

San Antonio el Grande (251-356): cuando tenía dieciocho años, sus padres murieron y quedó a cargo de su hermana menor. Abandonó a su hermana en un convento, donde donó todos los bienes de sus padres (incluida la parte de su hermana). Vivió como ermitaño en una tumba abandonada en el cementerio del pueblo. Luchaba constantemente con el demonio (que se le aparecía constantemente en dos «formas aterradoras»: «una bella mujer desnuda» y «un negro», y cada día solo tomaba una comida de pan y agua. Según su amigo y hagiógrafo san Anastasio, «él no bañaba su cuerpo con agua para quitarse la suciedad, ni tampoco se lavaba nunca los pies, ni siquiera soportaba ponerlos en agua, a menos que se viera obligado por la necesidad». Se difundió el rumor sobre el estilo de vida de Antonio, y el cementerio se pobló de admiradores, por lo que a los 41 años se trasladó a un antiguo fuerte sobre una montaña próxima, dónde solo comía lo que le arrojaban sobre el muro de fuerte. Para el año 305, la cima de la montaña estaba literalmente atestada de admiradores, tanto que Antonio los organizó en una comunidad estructurada: el primer monasterio del mundo. Terminó por retirarse a una cueva en la cima de la montaña, donde murió a los 105 años.

Santa Brígida

Santa Brígida (c. 450-525): según contaba esta anciana monja irlandesa, cuando era joven estaba muy avergonzada por su belleza porque tentaba a los hombres a tener malos pensamientos. Entonces le rezó a Dios para que la hiciera fea. Dios le concedió su deseo: uno de sus ojos pasó al centro de la frente, creciendo hasta alcanzar un tamaño enorme; el otro se redujo a la nada. Su padre, un caudillo celta pagano, le concedió el deseo de toda su vida de ingresar en un convento cristiano. En cuanto se convirtió en monja, sus ojos volvieron instantáneamente a la normalidad, y ella dedicó el resto de su vida a fundar decenas de iglesias, conventos y monasterios, y a contar su maravillosa historia. Es la santa patrona de Irlanda.

San Gueñol

Una iglesia de la ciudad francesa de Brest posee una estatua de madera de san Gueñol (quien supuestamente habría vivido en el siglo VI), cuyo rasgo más destacado es «un miembro masculino que sobresale rígidamente». Generaciones de fieles han extraído astillas de la virilidad de la estatua, en la creencia de que los fragmentos curaban la impotencia. Aun así, el atributo más famoso de la estatua se ha conservado absolutamente intacto, hecho que los lugareños atribuyen a la intervención divina. Es el santo patrono de la disfunción eréctil. Se lo retrata con una gran erección.

Santa Lucía

Santa Lucía de Siracusa (304): según contaba esta anciana monja siciliana, cuando era joven era muy bonita. Hizo voto de castidad religiosa, y estaba tan decidida a mantener este voto que cuando un pretendiente le elogió sus bellos ojos, ella se los arrancó y se los dio en una bandeja. El hombre había quedado tan impresionado que se convirtió al cristianismo. Inmediatamente los ojos le fueron devueltos a la joven santa. Se la retrata llevando los ojos en una bandeja.

Santa María Magdalena

Santa María Magdalena de los Locos (1556-1607): habitualmente corría por su convento desnuda, azotándose y tirándose sobre los arbustos espinosos del bosque que rodeaba el convento. A menudo les pedía a sus compañeras monjas que la ataran desnuda y le arrojaran cera caliente, lo que le generaba intensos éxtasis, pero rara vez sus hermanas la satisfacían. Se la retrata con los senos en llamas, untados de parafina.

El rey Arturo y su relación con el cristianismo

Arturo, rey de Bretaña en la fiesta de Pentecostés

En la leyenda artúrica hay una predilección por la fiesta de Pentecostés, en esa fecha siempre ocurren acontecimientos singulares. Uno de los ejemplos es la coronación de Arturo. Según la leyenda, en la fiesta de Pentecostés del año 1028, en la iglesia más grande de Londres apareció la espada Excalibur, mágicamente hincada en un yunque de acero. En la espada estaba escrita la siguiente inscripción: «Quienquiera que saque esta espada de esta piedra y yunque, es legítimo rey nato de toda Inglaterra». El joven Arturo —frente a los principales caballeros de Inglaterra— sacó la espada, y ese mismo día de Pentecostés fue coronado rey.

Fuentes