Liberación de Baracoa

Liberación de Baracoa
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Cerco, hostigamiento y toma de la ciudad de Baracoa por las fuerzas revolucionarias en lucha contra el ejército de la tiranía.
Fecha:27 de diciembre de 1958


Liberación de Baracoa. En noviembre de 1958 fuerzas de la compañía 18 "Antonio López Fernández" del Segundo Frente Oriental del Ejército Rebelde, al mando del comandante Félix Pena Díaz, realizaron ataques y emboscadas a fuerzas del ejército del tirano Fulgencio Batista en los caminos que conducían a Baracoa, cercaron la ciudad, y el 27 de ese mes la liberaron completamente.

Localización

La ciudad de Baracoa, la más antigua de Cuba, se encuentra en la parte nordeste de la actual provincia de Guantánamo. En esa época era una importante plaza del ejército del dictador Fulgencio Batista, contando con un puerto, aeropuerto y fuertes y fortalezas que databan de la época española.

Contexto

Félix Pena Díaz perteneció a los grupos de acción de Frank País, que lo seleccionó entre los primeros refuerzos que envió en marzo de 1957 a la Sierra Maestra. Participó, entre otras acciones en el combate de El Uvero y en febrero de 1958, al iniciarse la creación del Segundo Frente Oriental, dirigido por el comandante Raúl Castro, pasó a formar parte éste.

El 3 de septiembre de 1958 fue ascendido a comandante y designado jefe de la recién constituida Columna 8 Antonio López Fernández (luego columna 18), una de las seis columnas que constituyeron ese Frente, operando en la parte más oriental de la actual provincia de Guantánamo.

El cerco de la ciudad

El 20 de junio de 1958 se produjo el primer ataque de efectivos del Ejército Rebelde a las postas que custodiaban el aeropuerto ubicado en Sabanilla y simultáneamente otros miembros del pelotón emboscaron al enemigo en el acueducto del río Macaguanigua y Jaitecico, sosteniendo tiroteos prolongados contra el puesto del ejército en la tiranía en ese lugar.

Diversas acciones continuaron en la zona, por lo que el 5 de noviembre de 1958 el ejército de la tiranía envió un potente refuerzo proveniente del Escuadrón 17 de la Guardia Rural, compuesto por cinco vehículos y 70 efectivos. Félix Pena ubicó sus efectivos en una emboscada en el camino hacia Guamá, a 3 km de Baracoa, que debía tomar la tropa enemiga, la cual fue completamente aniquilada, causándoles 60 bajas entre prisioneros, muertos y heridos, ocupándose un importante armamento. Vea: Combates en El Guamá.

En los días de 9 al 14 de noviembre fuerzas de la Columna de Pena sitiaron el cuartel de Imías, que contaba con una fuerte guarnición, el cual tomaron después de aniquilar una compañía de refuerzo que había llegado por mar.

La toma de Baracoa

Una vez tomados los cuarteles y apostaderos rurales, y encerrada la ciudad de Baracoa en un semicerco por tierra, por dos pelotones de la Compañía A, al mando del capitán Zapata, las fuerzas batistianas fueron sometidas a constantes hostigamientos de los rebeldes, que los obligaban a permanecer encerrados.

El enemigo no podía recibir ayuda por tierra, y los pocos abastecimientos que le llegaban era por vía marítima. No obstante, por cumplir órdenes superiores que constituían un verdadero sacrificio para ellos, resistieron durante el mes de diciembre e hicieron algunos amagos de ofensiva al tratar de salir de la ciudad hacia Duaba y Cabacú, pero fueron rechazados en todos sus intentos.

En la noche del 26 de diciembre, sin otra alternativa, el grueso de las tropas batistianas abandonaron la ciudad por vía marítima, dirigiéndose hacia Santiago de Cuba. Un grupo de militares que conspiraban contra la dictadura dentro de la guarnición de Baracoa, decidió incorporarse al Ejército Rebelde. Coordinaron la operación con los contactos del Movimiento y, al amanecer del día 27 se presentaron 13 soldados y clases con armas y parque y se unieron definitivamente a la guerrilla. Baracoa fue ocupada de inmediato ese día en horas de la mañana.

Al tomar Baracoa, liberar a los presos políticos y consolidar el poder revolucionario en la ciudad, el jefe de la Compañía A, por disposición del comandante Pena, partió con uno de los pelotones que allí quedaban rumbo al territorio de la Compañía E, entregando el mando de la ciudad al primer teniente Lahite y al doctor Gilberto Cervantes, el día 28.

Fuentes

  • Arcadio Ríos. Hechos y personajes de la Historia de Cuba. Recopilación Bibliográfica. La Habana, 2015. 320 p.
  • Belarmino Castilla. Segundo Frente Oriental Frank País. Un Estado revolucionario dentro de otro. Revista Bohemia. La Habana, 8 de marzo de 2013.Págs. 12-13.