Luis Borges Alducín
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Luis Borges Alducín. Destacado odontólogo cienfueguero que participó en las luchas por la independencia de Cuba. Participa en el Levantamiento del 5 de septiembre en Cienfuegos. Se incorpora a la lucha armada en la Sierra Maestra, desempaeñándose allí como médico y combatiente. Después del Triunfo de la Revolución ocupa varias responsabilidades en el INRA y el Ministerio de la agricultura.
Sumario
Síntesis Biográfica
Nació el 11 de marzo de 1929, en la ciudad de Cienfuegos. Sus padres fueron José F. Borges Cuestas, de origen talabartero, y María Eugenia Alducín Álvarez, ama de casa. Fue el menor de 3 hermanos.
Cursó la enseñanza primaria (hasta 5to. grado) en el colegio Champanag; luego pasó al Enrique José Varona, donde le sirvió como tutor Juan Alaiz Ladrón de Guevara, maestro querido por todos, ya que le brindaba su ayuda generosa a los pobres, para que pudieran estudiar. Pasó el bachillerato en el Instituto de Segunda Enseñanza de Cienfuegos, donde se graduó en 1947.
Se trasladó a La Habana y realizó el examen selectivo para ingresar en la Facultad de Odontología, donde se graduó de Doctor en Cirugía Dental, unos meses después del Golpe de Estado de Batista, en 1952. Los últimos años de la carrera los venció con muchas viscisitudes por problemas económicos. En esa etapa se vinculó con las personas más revolucionarias como Eberto Cué y Rodríguez Maribona.
Se trasladó para Cienfuegos y empezó a ejercer la profesión en una modesta consulta. En esta ciudad conoció al matrimonio de los doctores Flavia Sánchez y René Otazo, y se vinculó a la resistencia cívica, participando en la venta de bonos. Al lado de su casa vivía el sargento de la marina, René de Jesús González Cartaya, con quien conversaba sobre la situación política del país.
Actividad revolucionaria
En la mañana del 5 de septiembre de 1957, al producirse el Alzamiento de Cienfuegos, González Cartaya le avisó para que participara en este; él intervino en Cayo Loco y en la toma de la Estación de Policía. René Otazo le entregó un fusil para la lucha. Cuando avisaron que el Tercio Táctico de Santa Clara avanzaba sobre Cienfuegos, y al conocerse que el golpe esperado no se produciría, el sargento González le aconsejó que se retirara, pues la lucha continuaría entre militares. Al día siguiente, la consulta fue allanada por soldados de la tiranía, pero él pudo escapar milagrosamente por los tejados del vecindario.
Por la noche, una prima, Josefa Borges de León, y miembros del movimiento lo fueron a buscar a una casa deshabitada donde se había escondido. Con la prima se trasladó para La Habana en un tren, para lo cual utilizó una identificación como viajante de víveres.
Etapas importantes de su vida
En esa época, Borges era casado y tenía una hija que mantener, por lo que se vio obligado a trabajar en una casa de juego en La Habana, en contra de su voluntad; el propietario de la casa de juego era un oficial de la dictadura, llamado Felito Gutiérrez, que se encontraba en rejuegos conspirativos.
Mantuvo los contactos con Flavia Sánchez y René Otazo, y estuvo acuartelado en la casa de estos durante la Huelga del 9 de abril, esperando instrucciones. Después del fracaso de la huelga, mantuvo los contactos con Flavia y René; se le planteó entonces la necesidad de un dentista en la Comandancia del Ejército Rebelde, y acudió a dicha solicitud.
Incoporación a la Sierra Maestra
Se trasladó a la Sierra Maestra con una compañera que era correo del Movimiento 26 de Julio, llamada Lila León. Arribó al pueblo de Barrancas (provincia Granma), y se dirigió a una finca, propiedad de la familia de Lila; 2 ó 3 días después, acompañado por un guía, Inocencio Panqué (El Niño) se trasladó a la Comandancia de la Sierra Maestra, en el momento en que culminaba la Batalla del Jigüe (finales de julio).
En la etapa inicial no disponía de materiales, ni de instrumental de uso estomatológico para ejercer la profesión, los que fueron solicitados por Celia Sánchez a Santiago de Cuba. Entre las cosas llevadas para la Sierra había una máquina de pedal, la cual, en el momento de usarla, era operada por un compañero, porque no coordinaba los movimientos de los pies con los de las manos.
Sus servicios no sólo los brindó a la tropa, sino también a los campesinos de la zona de la Plata. Borges señala que siempre observó las normas de higiene en su actividad profesional. Los propios campesinos se encargaban de llevar el agua, con la cual se esterilizaban los instrumentos; nunca tuvo una complicación como hemorragia o infección.
En su labor como dentista atendió al Comandante Fidel Castro; también acompañaba al Comandante en sus movimientos con las tropas, llevando el instrumental; le brindó atención a los comandantes Bernabé Ordaz y Martínez Páez, y al capitán Lafferte.
También al comandante Camilo Cienfuegos, en los días previos a la salida a la invasión hacia Las Villas; tuvo el honor de atender al comandante Ernesto Che Guevara, en agradecimiento, el Che le regaló una caja de tabacos, que trató de rehusar, a lo que el Che le replicó que no se podía negar a esa atención que quería tener con él. Al llegar a la Sierra Maestra, el comandante Sergio del Valle, médico también, ejercía como dentista en su tropa y Borges le dio algunas indicaciones técnicas mínimas, como la anestesia troncular inferior.
Médico combatiente
Simultáneamente al ejercicio de la profesión, participó como combatiente, teniendo su bautizo de fuego en el combate de "Cerro Pelado", en el que se desempeñó como ayudante de una ametralladora 50, que era manejada por el capitán Fidel Vargas. Después, en el transcurso de la Batalla de Guisa, se le asignó la responsabilidad de cuartel maestre de la columna, a cargo de todo el parque y del armamento de reserva, función que desempeñó hasta el final de la guerra.
Además de la toma de Guisa, participó en la toma de Baire, Jiguaní, Maffo y Palma Soriano, por lo que fue ascendido al grado de capitán por el propio Comandante Fidel Castro, en reconocimiento a sus actividades desplegadas. Al triunfo de la Revolución desempeñó simultáneamente el cargo de subdirector del Hospital Militar "Carlos J. Finlay" y jefe de Servicios Dentales del Ejército.
Después del Triunfo de la Revolución
En julio de 1959 se le encomendó hacer una inspección a la zona de la Ciénaga de Zapata; al regresar de dicha misión fue designado delegado jefe de desarrollo agrario. Una semana después fue designado delegado provincial del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA), en Las Villas, cargo que ejerció hasta septiembre de 1961.
En 1962 se desempeñó como jefe de la Sección de Granos del Organismo Central del INRA. Se acuarteló en el edificio de esa institución durante la Crisis de Octubre. En 1963 fue fundador de la Empresa de Semillas del INRA, de la que fue su director hasta 1975. Posteriormente ocupó varios cargos en el Ministerio de la Agricultura, hasta su jubilación.
Muerte
Muere en horas de la madrugada del 24 de febrero del 2007 en la Habana. Con los grados de Comandante de la Revolución.
Fuentes
- Contribución a la historia de la estomatología cubana. Dentistas en las luchas revolucionarias. Cap 11.
