Mantra

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Concepto:Los mantras son palabras o frases generalmente en sánscrito, que se recitan en voz alta o bien de manera interna, de forma rítmica y repetitiva como objeto de la meditación.

Mantras son sílabas o grupos de sílabas sin un significado o definición literal o específico, es sonido, vibración. Todo en el universo vibra.

La palabra mantra proviene del sánscrito man, que significa mente, y tra que tiene el sentido de protección, y también de instrumento. Los mantras son recursos para proteger a la mente contra los ciclos improductivos de pensamiento y acción. Aparte de sus aspectos vibracionales benéficos, los mantras sirven para enfocar y sosegar la mente. Al concentrarse en la repetición del sonido, todos los demás pensamientos se desvanecen poco a poco hasta que la mente queda clara y tranquila.

Los mantras se repiten un determinado número de veces con un propósito específico, y por el ritmo y vibración que producen, tienen el poder de enfocar la mente y motivar cambios.. El principio de un mantra es el concepto básico de que el sonido es vibración y toda vibración a su vez genera energía y por lo tanto tiene la habilidad de generar cambio en el campo donde se introduce.

Los mantras pueden repetirse en voz alta o mentalmente y frecuentemente se usan junto con mandalas y otras herramientas de meditación. El mantra actúa como una herramienta que ayuda a liberar la mente del flujo constante de pensamientos. Gracias a la repetición del mantra, la persona ingresa en un estado de concentración profunda. La meditación, con la ayuda de la mantra, permite que el sujeto concentre su atención en su propia conciencia, en un pensamiento o un objeto externo. Aunque los mantras no tienen un significado exacto o preciso, se dice que cada sonido corresponde a un aspecto de la iluminación y permite asociar la mente con uno de estos aspectos.

Surgimiento

La meditación con mantras es anterior al surgimiento del budismo, probablemente le antecede por varios cientos de años. Por eso es que puede calcularse que el origen de los mantras se remonta al menos a la tradición védica que precedió al Buda, en la cual se empleaban los mantras de distintas maneras en multiples ceremonias, para hacer pedidos o asi mismo, invocar dioses.

A través de la historia, las culturas han creído en el poder sagrado de las palabras y han imaginado que al pronunciar determinados vocablos o nombres podrían controlar el mundo externo o a los poderes invisibles, como los dioses o los espíritus, los cuales se creía que actuaban sobre el mundo, y decidían el destino de cada uno.

Mantra primordial OM

Se considera que Om es el sonido primordial, el sonido del universo, el sonido del cual se derivan todos los demás. Se puede ver como el equivalente de la luz blanca, en la cual se pueden encontrar todos los colores del arco iris.

El "Om" solo debe usarse para empezar o terminar la meditación, pronunciándolo tres veces. Y en diferentes situaciones que se desee tener un buen augurio. Pero no es conveniente hacer "Japa mantra": 108 veces, ya que su poder es muy grande y se puede tener una depuración energética muy abrupta.

A veces aparece como un monosílabo místico, puede interpretarse como un así sea, lo que vendría a ser comparativamente en la religión católica, el "Amén", y tiene la intención de ser objeto de una profunda meditación religiosa, cuya más alta eficacia espiritual se atribuye no sólo a la palabra en su conjunto, sino también a los tres sonidos que la componen: A, U, M.

A u m deriva de la raíz que significa todo y hace referencia a los conceptos de omnipresencia, omnisciencia y omnipotencia. El sonido Aum se compone de tres sílabas las letras A, U, M que escritas presentan una línea ascendente rematada con un punto en la cima.

La letra A simboliza la conciencia o estado de vigilia, la U es estado de ensueño y M es estado de dormición sin ensueños tanto de la mente como del espíritu. El símbolo completo, con su línea ascendente y el punto cimero, indica el cuarto estado que comprende y combina los otros tres y los trasciende. Es el estado de samadhi.

Las letras A, U, M simbolizan respectivamente lenguaje, mente y aliento vital mientras que el símbolo completo indica el espíritu viviente, que es, a su vez, una parte del espíritu divino. Las letras A, U, M, representan asimismo las dimensiones en longitud, anchura y profundidad en tanto que el símbolo entero representa la Divinidad, más allá de las limitaciones de hechura y forma.

Las tres letras simbolizan la ausencia de deseo, temor o enojo, mientras que el símbolo entero indica el hombre perfecto o sea, aquél cuya sabiduría se halla firmemente establecida en lo divino. Representan, asimismo, los tres géneros: masculino, femenino y neutro, mientras que el símbolo completo representa la creación junto con el Creador.

También representan las tres gunas o calidades de satva, rajas y tamas, al paso que todo el símbolo entero representa en gunatita o sea el hombre que ha vencido y se ha situado más allá de la influencia de las gunas.

Igualmente, las tres letras corresponden, a los tres tiempos de verbo: presente, pasado y futuro, en tanto que el símbolo completo indica al Creador trascendiendo las limitaciones del tiempo. Representan también el magisterio de la madre, el padre y el Guru respectivamente, mientras la totalidad del símbolo representan Brahma-Vidya, el conocimiento de sí mismo, del Ser, cuya enseñanza es imperecedera.

La A, la U y la M son además la representación de los tres estados de la disciplina yogui o sea, asana, pranayama y pratyahara. El símbolo en conjunto indica el samhadi, la meta por la cual se han recorrido los tres estados.

Por otra parte, representan la tríada de la Divinidad, es decir: Brama, el Creador; Visnú el protector; y Siva, el Destructor del universo. El conjunto simbólico representa Brahman de quien emana el universo con su desarrollo y disfrute y en el cual se inmerge al final. Él no se desarrolla ni cambia y si bien lo múltiple cambia y pasa, Brahman es el Uno que permanece siempre sin cambio alguno.

Las letras A, U, M, indican, al propio tiempo, el mantra "Tat Twam Así" (Esto eres Tú), o sea, la realización de la divinidad en el interior de sí mismo, y el símbolo completo significa esta realización que libra el espíritu humano de los límites de cuerpo, mente, intelecto y "ego".

Efectos fisiológicos de los Mantras

Con la repetición de los diferentes mantras el poder irá manifestándose más y más, los obstáculos mentales y físicos empezarán a desvanecerse.

El mantra vigoriza la mente y produce energía. El canto interno de los mantras crea una vibración favorable en el sistema límbico del cerebro, éste es afectado por la repetición mental de sonidos solamente internos.

Los mantras fluyen en forma de ondas a través del cuerpo, haciendo vibrar las glándulas endócrinas; así las vibraciones de la mente y el cuerpo son sincronizadas por el mantra.

El trabajo con la voz y el sonido es muy importante como trabajo de autoexpresión y descarga energética, ya que el sonido es una herramienta poderosa y un vehículo muy potente de circulación energética.

Aquí intervienen simultáneamente mecanismos corporales (funcionamiento del músculo del diafragma, del cuello, base de la lengua), mecanismos respiratorios (uso del aire) y mecanismos sonoros (producción de armónicos, amplificación del sonido en los resonadores del cuerpo).

Ejercicios para utilizar el Mantra

  • Sentarse en un lugar donde no será interrumpido por al menos media hora.
  • Escoger el mantra de su preferencia o empiece con un Om.
  • Identificar la intención de la meditación y el uso del mantra.
  • Seguir los pasos para meditar. Concéntrese en su respiración por 5 minutos, siguiendo el ritmo natural del cuerpo.
  • Empezar a vocalizar el mantra, tomando aire lentamente y pronunciando el sonido al exhalar, prolongándolo lo que más pueda. *No forzar. Repetir a su propio ritmo, intentando no dejar momentos de silencio entre un mantra y el siguiente.
  • Seguir el ritmo natural de su respiración sin quedar sin aliento. *Cuando sienta que la transición es natural y sin esfuerzo, vaya bajando la voz hasta que el canto del mantra sea interno.
  • Dejar que el canto interno vaya bajando de volumen también hasta encontrarse con silencio.

Fuentes