Mario Morales Mesa
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Mario Morales Mesa. Revolucionario y militante comunista cubano. Combatiente internacionalista cubano en la Guerra Civil Española. Vinculado a la lucha contra la dictadura de Fulgencio Batista. Fundador del Departamento de Seguridad del Estado cubano.
Sumario
Síntesis biográfica
Nació el 21 de febrero de 1916 en Cárdenas, provincia Matanzas en el seno de una familia obrera.
Su padre Manuel Morales Horrego, oficial del Ejército Libertador y Veterano de la Guerra de Independencia. Sus dos hermanos Florentino y Abelardo murieron en combate por la independencia de Cuba. Su madre, Carmela Mesa Trujillo, descendiente de cubanos que tuvieron participación en la gesta libertadora del yugo español, tuvo 24 partos, de los cuales sobrevivieron once hijos.
Desde muy temprana edad se vio obligado a abandonar los estudios y dedicarse a trabajar, al igual que sus hermanos, pues la pensión que percibía su padre como Veterano de la Guerra de Independencia y los haberes de su trabajo como sereno, apenas alcanzaban para mantener la familia.
Con escasos 12 años de edad limpiaba zapatos para ayudar a la familia. En el puerto de Cárdenas se inició como gurrupié en la goleta La María Mercedes, que se dedicaba al cabotaje.
En 1930 su familia se traslada para el pueblo de Regla en La Habana, pero Mario decide quedarse en Cárdenas. Por ese entonces dormía en la goleta.
En julio de 1931, se marcha para la ciudad de La Habana donde comienza a trabajar como ayudante de cocina en el restaurante Cabalgo, ubicado en la calle Moserrate esquina a calle Teniente Rey.
La situación económica de la familia continuaba siendo precaria, habían ido a residir en un cuarto en el edificio Palacio de la Ursulinas, sito en la calle Egido entre Sol y Muralla, los hermanos mayores y el propio Mario tenían que dormir en posadas y en ocasiones en los portales o parques, dado lo pequeño de la habitación; en ese entonces eran 13 de familia.
Muy joven comienza a trabajar en el sector del transporte.
Actividad política
En plena dictadura de Gerardo Machado, como miembro del sindicato gastronómico se relaciona con trabajadores de ese ramo que se oponían al gobierno y eran muy activos en los preparativos de la huelga general de julio de 1933. Por esos días lo hicieron miembro activo de la “comisión estaca”, para “convencer” a los patrones y empleados a que apoyaran la huelga cerrando sus comercios.
A los 17 años comienza a participar en manifestaciones y actos de masas organizados fundamentalmente por el Partido Comunista de Cuba.
En 1933 ingresa en la Liga Juvenil Comunista hasta su incorporación al Partido Comunista, organización en la que se vinculó a Osvaldo Sánchez Cabrera y otros comunistas. Participa en tareas de agitación y propaganda, en la organización de células de la Liga y de la huelga general revolucionaria de 1935 dirigida por la Joven Cuba. En plena huelga fue detenido, recibiendo maltratos y vejaciones en la estación de policía a que fue conducido por el propio José Eleuterio Pedraza. Fue trasladado para la prisión del Castillo del Príncipe y juzgado por los tribunales de urgencia en la causa No. 389/35, en la que fue condenado a dos años de prisión.
Estando en prisión participa en un motín de los reclusos por las pésimas condiciones de confinamiento a que fueron sometidos, fue acusado de rebelión en el penal, estando a punto de ser pasado por las armas en unión de varios reclusos más. En abril de 1937 fue puesto en libertad por la amnistía decretada por el gobierno.
Participación en la Guerra Civil Española
Al estallar la Guerra Civil Española, el Partido Comunista de Cuba hace un llamamiento al pueblo de Cuba para que se enrolara en un movimiento de ayuda a la República Española.
En 1937, el Partido Comunista de Cuba le designó miembro de la Comisión de Reclutamiento de voluntarios cubanos, para combatir en defensa de la República Española, presidida por el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido, Ramón Nicolau González.
A finales de 1937 parte hacia España a bordo del buque Reina del Pacífico, de bandera británica, al frente de un grupo de veinticuatro combatientes internacionalistas cubanos. Para ocultar el verdadero propósito del viaje, lo hicieron con visas para visitar la Exposición Internacional que se celebraría en Paris.
En este viaje estaba previsto viajarían muchos más voluntarios, pero hubo que reducir su cantidad, debido a la persecución de que eran objeto los antifranquistas en Cuba por el oficial policiaco [Mariano Faget Díaz]], y a la publicidad provocadora desarrollada por Salvador Díaz Versón, agente de la embajada de Estados Unidos en La Habana, empeñados en obstaculizar la labor de la Comisión de Reclutamiento.
Tras diez días de navegación arribaron a Francia por el puerto de La Pallice, desde donde se trasladaron a Paris por ferrocarril. En la capital francesa Mario estableció contacto con Félix Pita Rodríguez, quien era el encargado de recibirle y atenderles. Durante la estancia en Paris, mientras esperaba al resto de los internacionalistas cubanos se les realizó un chequeo médico y se les habilitó con la documentación necesaria de la República Española.
Ingresa a territorio español a través del túnel internacional de Cerbére, en los Pirineos Orientales por vía férrea. Desde la villa de Port- Bou, Gerona se dirige al cuartel de Figueras, centro de recepción de la Brigadas Internacionales, donde recibe el armamento y vestuario militar. También en este lugar recibe una breve instrucción militar.
Ya en el poblado de Montbeanch, provincia de Tarragona, recibe un entrenamiento militar más riguroso, durante quince días. Al concluir el mismo fue asignado al 24 Batallón de la 15 Brigada Internacional, perteneciente a la 35 División.
Entre mayo y julio de 1938, participa en la preparación de la ofensiva del Ebro. Ante la solicitud del Estado Mayor de la 15 Brigada Internacional, de voluntarios para ser los primeros en cruzar el río, fue incorporado a la 13 Brigada Polaca, primera unidad de la Brigadas Internacionales en cruzar el río. Fue designado como primer artillero de una ametralladora 30 mm, marca Maxim de fabricación soviética, a bordo de una de las barcazas.
Cuando avanzaba con la Brigada Polaca, a las puertas del frente de Gandesa, recibió la orden de reintegrarse a la 15 Brigada, pero le fue imposible hacer contacto con el 24 Batallón, donde estaban los cubanos, por estar esta unidad encerrada en un despeñadero conocido como el Barranco de la Muerte. Ante esta situación se le ordenó presentarse en el Batallón canadiense Mackenzie – Papineau, donde permaneció unos tres meses, participando en la batalla del Ebro y en las operaciones de Corbera, Gandesa, Sierra Pandolls y Sierra Caballs. En este último lugar fue herido en ambas manos.
Durante su participación en la Guerra Civil Española, militó en el Partido Socialista Unificado de Cataluña.
Al decretarse la retirada de las Brigadas Internacionales, pasa a territorio francés, donde fue internado en el campo de concentración de Angeles-sur-Mer y posteriormente en el de Saint Ciprien.
Regreso a la patria
Por orientaciones del Partido Comunista de Cuba, cumple infinidad de misiones clandestinas. Se infiltra en los grupos gansteriles y anticomunistas, algunos de los cuales planeaban la eliminación física de dirigentes del partido. Esta tarea la cumplió por espacio de 12 años.
En 1947 se enrola en la expedición armada de Cayo Confites para derrocar al dictador Rafael Leónidas Trujillo de República Dominicana.
Durante la dictadura de Fulgencio Batista, fue un destacado combatiente y se vinculó a la operación del asalto al Palacio Presidencial el 13 de marzo de 1957.
El 1 de enero de 1959, participó en el asalto y ocupación de la sede de la Policía Secreta y la Policía Judicial. Con las armas ocupadas su grupo apoyó la huelga general orientada por [[Fidel Castro Ruz. El 10 de enero de 1959 es designado como jefe del Buró de Drogas de la Policía Secreta, cargo en el cual permanece hasta su disolución en septiembre de ese mismo año.
El 26 de marzo de 1959, sin dejar de ser el jefe del Buró de Drogas de la Policía Secreta, ingresa al Departamento de Seguridad del Estado, donde lo nombran jefe del Buró de Gánsteres del DSE, enfrentando a las primeras organizaciones contrarrevolucionarias que apoyadas por el Gobierno de Estados Unidos se enfrentaban a la Revolución triunfante.
Ante los planes de eliminación física del Comandante Fidel Castro Ruz y otros dirigentes de la Revolución por la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, en mayo de 1961 el Buró de Gánsteres del DSE se convierte en Buró de Atentados, dirigiendo el mismo hasta 1970 en que cumple otras misiones en el Departamento de Seguridad del Estado hasta su jubilación con el grado militar de teniente coronel.
En 1975 asiste como delegado al Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba. Al crearse la Agrupación de Veteranos Internacionalistas Cubanos en España, fue elegido como su presidente.
Condecoraciones y reconocimientos
- Orden Ernesto Che Guevara de Segundo Grado
- Medalla de las Brigadas Internacionales “Voluntarios de la Libertad”, España 1938
- Medalla Combatiente de la Lucha Clandestina
- Medalla XX Aniversario del Moncada
- Medalla XX Aniversario del Granma
- Medalla Combatiente Internacionalista de Primera Clase
- Medalla Por la Protección de las Fronteras
- Medalla XX Aniversario de las FAR
- Medalla XXX Aniversario de las FAR
- Medalla 40 Aniversario de las FAR
- Distinción Por el Servicio en el Ministerio del Interior (10, 15 y 20 años)
- Distinción Aracelio Iglesias
- Distinción José María Pérez
- Carnet de Honor de la 35 División
- Diploma del Consejo de Ministros de la República Española
- Sello de Fundador del Departamento de Seguridad del Estado.
Muerte
En el año 2000 fallece en La Habana.
Fuente
- Alfonso Bello, Alberto y Juan Pérez Díaz: Cuba en España, una gloriosa página de internacionalismo, Editorial de Ciencias Sociales, La Habana, 1990.
- Colectivo de Autores: Cuba y la defensa de la República Española (1936 – 1939, Editora Política, La Habana, 1981.
