Ordoño II de León

Ordoño II
Información sobre la plantilla
Rey de León
Rey de Galicia
Ordoño II de Leon.jpg
Coronación 10 de diciembre de 910
Nacimiento 871
Fallecimiento 20 de junio de 924
Zamora
Predecesor Alfonso III de Asturias
Sucesor Fruela II
Cónyuge/s Elvira Menéndez
Aragonta González
Sancha de Pamplona
Descendencia Sancho
Alfonso
Ramiro
García
Jimena
Residencia León
Dinastía Astur
Padre Alfonso III de Asturias

Ordoño II (871-924). Fue rey de Galicia (subordinado al rey de León) entre los años 910 y 914 y segundo Rey de León desde el año 914 hasta la fecha de su muerte. Nacido aproximadamente en el año 871 y muerto en Zamora en torno al 20 de junio de 924. Fue un soberano enérgico y batallador que sometió a su autoridad los territorios del reino leonés y combatiendo exitosamente contra los musulmanes, que aún dominaban la mayor parte de la península Ibérica. Su reinado supuso el tránsito tácito y tranquilo del "regnum asturum" al "regnum Legionis", con la sede regia establecida definitivamente en la ciudad de León.

Síntesis biográfica

Hijo de Alfonso III el Magno a pesar haber nacido en segundo lugar fue asociado al trono asturiano en el año 897, tras ser nombrado gobernador de Galicia, donde realizó una importante labor en nombre de su padre y emprendió una victoriosa campaña en la Bética frente a los musulmanes en el 908.

En el año 909 el rey Magno renunció al trono, tras la sublevación del futuro García I en Zamora, lo cual provocó que Ordoño se convirtiera en el rey de Galicia, aunque no asumió el trono de forma oficial hasta que no se produjo la muerte de su padre un año después.

En los años siguientes las relaciones con su hermano García I se vieron seriamente deterioradas, aunque siempre contó con el apoyo de la nobleza gallega, que siempre se plegó a sus deseos. Tras la prematura muerte de García I, en el 914, Ordoño fue llamado por los notables del reino leonés para que se hiciera cargo del poder, petición que fue aceptada por el monarca, aunque tardó en ser proclamado rey, debido a una enfermedad que contrajo en la última campaña que había dirigido por tierras extremeñas.

Desde su llegada al trono, Ordoño llevó a cabo importantes donaciones tanto a la iglesia compostelana como a la diócesis de León y además dedicó especial atención, al igual que su padre, a la fundación de monasterios y a la reconstrucción de iglesias.

Hombre de espíritu guerrero dirigió importantes campañas por tierras musulmanas en solitario y en compañía del monarca navarro Sancho I Garcés, que le llevaron a obtener sonadas victorias como la de Castro Muros o la de Nájera, aunque sufrió importantes derrotas en las batallas de Mutonia y de Valdejunquera.

Biografía

Niñez y juventud

Hijo del monarca asturiano Alfonso III el Magno y de la esposa de éste, Jimena, fue bautizado con el nombre de Ordoño en honor a su abuelo paterno, el también monarca astur Ordoño I. Se desconoce el lugar y la fecha de su nacimiento, aunque parece probado que fue el segundo hijo de Alfonso III, ya que en toda la documentación que se conserva del reinado de su padre en la que aparece su firma, ésta se encuentra detrás de la de su hermano García.

Algunos investigadores opinan que Ordoño debió destacar muy pronto en la corte de su padre por su gran inteligencia, motivo por el cual el monarca nunca ocultó la especial predilección que sintió hacia él. La primera referencia clara que encontramos sobre Ordoño en las fuentes escritas data del año 879, cuando éste contaba aproximadamente con 8 años. En ellas se recoge que Alfonso III tras llegar a un acuerdo con la noble familia de los Banu Qasi, cedió la custodia de su hijo "ad nutriendum" a los descendientes de Musa Ibn Musa (800-862), Ismail y Fortún.

Ordoño residió en la ciudad de Zaragoza durante tres años y aunque ignoramos cuales fueron sus actividades en la mencionada ciudad, su traslado debió causarle una enorme impresión debido a su corta edad. Pasado este periodo, una vez rotas las relaciones entre Alfonso III y los hijos de Musa, Ordoño regresó a la corte asturiana, donde fue un miembro destacado del séquito de su padre, ya que su firma aparece con frecuencia en la documentación de la época.

En los años siguientes los progresos de Ordoño, debieron ser muy notables, puesto que fueron capaces de convencer a Alfonso III de la necesidad de otorgarle mayor número de responsabilidades, en detrimento de su hermano mayor, el futuro García I, que siempre sintió celos por las atenciones que el monarca le prodigó.

Gobernación de Galicia

En el año 896 Ordoño contrajo matrimonio con Elvira Menéndez, la cual pertenecía a una de las familias gallegas más importantes de la época, y poco después, en el año 897, fue nombrado por su padre gobernador de Galicia. Dicho nombramiento, ha sido considerado por los investigadores como prueba irrefutable de los deseos de Alfonso III de asociar a su hijo al trono, puesto que desde los tiempos de Ramiro I, el cargo de gobernador de Galicia había sido ocupado por el heredero a la corona.

Ordoño que desde su llegada a Galicia demostró, en opinión de todos los cronistas, sus grandes dotes como gobernador, fue capaz de imponer su autoridad en el territorio y sometió al pago de tributo a todas las ciudades, ganándose además el respeto y el cariño de todos sus súbditos, puesto que según nos indica la Crónica Silense: "Era prevenido en la guerra, justo y clemente con su súbditos y muy caritativo con los pobres, misericorde y piadoso y de notoria honestidad en el gobierno del reino".

Se ignora el papel que jugó Ordoño en la rebelión que encabezó su hermano García en el año 909, que obligó a Alfonso III a abandonar el poder, parece demostrado que no participó pero tampoco hizo nada por evitarla, lo cual enturbió las relaciones que mantenía con su padre, aunque muy pronto ambos se congraciaron. De este modo, que no participara en los hechos no implicó que no se beneficiara de las acciones de su hermano, ya que el 7 de junio del año 910 se reunió en Lugo con todos los condes gallegos para que le juraran lealtad. Pero al igual que sus hermanos, a pesar de que de facto fue rey de Galicia desde la renuncia de su padre, no adoptó oficialmente el título hasta la muerte de éste, el 10 de diciembre del año 910.

Reinado

Durante sus años como monarca en Galicia, Ordoño no cambió los parámetros que había regido su política hasta entonces, llevando a cabo la reconstrucción y repoblación de la ciudad de Lugo y con frecuentes donaciones realizadas por los monarcas a la iglesia compostelana.

Animado por el éxito de su anterior campaña, en el año 913 inició una nueva expedición militar por tierras de al-Andalus, que en esta ocasión le llevó a Evora enExtremadura, donde obtuvieron una importante victoria.

Tras la muerte de García I, según la crónica Silense, Ordoño "Fue unánimemente elegido rey por la asamblea de los magnates, celebrada por los obispos, abades, condes y principales personajes de España". Pero aunque éste ocupó nominalmente el trono desde la muerte de su hermano; decidió no acudir inmediatamente a la capital de su futuro reino, ya que en el verano del año 914 realizó una expedición de castigo por tierras de Mérida y Badajoz, como tenía previsto.

Concluidas las acciones militares con éxito, Ordoño descansó algunos días en Tierra de Campos y viajó hasta Compostela, ya que aquejado de fuertes fiebres y temiendo cercano el momento de su muerte, decidió solicitar la protección del apóstol Santiago.

Tras quedar totalmente restablecido de su enfermedad, Ordoño fue coronado solemnemente en la ciudad de León en presencia de algunos de los nobles y obispos más importantes del reino. Desde su llegada al poder contó con el apoyo y la colaboración de los gallegos y leoneses notables del reino. Tras quedar instalado en el trono se comprometió a financiar la construcción de una catedral para la capital de su reino, cediendo para ello sus palacios a la sede legionense, y reorganizar el territorio de la diócesis, por lo que también financió la reconstrucción de iglesias y conventos.

En el año 916 preparó una nueva expedición por tierras extremeñas. donde logró una nueva victoria frente a las tropas de la región, que habían sido reforzadas por un poderoso contingente enviado desde Córdoba. La humillación de los cordobeses fue tal que el emir no tardó en reunir un nuevo ejército, en agosto del año 917, para atacar las fronteras cristianas, pero sus esfuerzos fueron inútiles, Ordoño decidió presentar batalla y atacó su campamento instalado en San Esteban de Gormaz, destruyéndolo casi por completo en septiembre de ese mismo año.

En la primavera del año 918 lleva a cabo una nueva campaña en contra de la ciudad de Nájera, en compañía de su aliado el rey Sancho Garcés I de Navarra. Pero en esta ocasión no obtuvo los resultados que esperaba, ya que tras conseguir un cuantioso botín en Nájera y en Tudela, sus tropas sufrieron un tremendo revés en la Batalla de Mutonia.

Sin desanimarse por la derrota Ordoño organizó una nueva campaña para el mes de octubre del año 919, pero la rápida acción de las tropas musulmanas le obligó a replegarse. Sin embargo a pesar de la victoria de los cordobeses Abd al-Rahman III no estaba dispuesto a tolerar por más tiempo las incursiones del rey de León en sus territorios, por lo que decidió acabar con estos ataques personalmente.

El 23 de abril del año 920 partió de Córdoba al mando de un poderoso ejército que realizó una brillante campaña por tierras cristianas, enfrentándose finalmente a las tropas de Ordoño y de Sancho Garcés en la Batalla de Valdejunquera, donde obtuvo una importante victoria. Ordoño II parte entonces hacia la ciudad de Zamora, donde a su llegada recibió la noticia de la muerte de su esposa Jimena y madre de sus 5 hijos: Sancho, Alfonso, Ramiro, García y Jimena.

Tras estos acontecimientos marchó a Castilla con el fin de acabar con la rebeldía de algunos condes de este territorio. Al llegar a Burgos convocó una reunión en Tejar, lugar donde fueron detenidos poco después los condes Nuño Fernández, Aboldomar Albo y su hijo Diego, y Fernando Ansúez, aunque no duró mucho su cautiverio. Por estas mismas fechas contrajo matrimonio por segunda vez con una joven llamada Aragonta González, la cual fue repudiada poco tiempo después por no ser de su agrado.

Ordoño II dedicó una atención especial a la repoblación de algunos de sus territorios y a la fundación de nuevos monasterios, a los que dotó generosamente. Ordoño finalmente retomó su actividad guerrera a finales del verano del 923, puesto que decidió acudir a Navarra para respaldar al monarca de este territorio, en los planes que tenía de atacar las fortalezas de Viguera y Nájera. Ambos monarcas obtuvieron notables resultados en sus campañas y Ordoño II en agradecimiento por su triunfo llevó a cabo la fundación del Monasterio de Santa Coloma.

Las relaciones entre ambos reinos eran cordiales y con el fin de estrechar más sus lazos se concertó el matrimonio del monarca con una de las hijas de Sancho Garcés, doña Sancha, la cual se convirtió en su tercera esposa ese mismo año, aunque la unión duró apenas unos meses puesto que Ordoño falleció a principios del verano siguiente (924).

Matrimonios y descendencia

Contrajo matrimonio por primera vez con Elvira Menéndez, hija del conde Hermenegildo Gutiérrez y de Ermesenda Gatónez, hija de Gatón del Bierzo. De este matrimonio le nacieron cinco hijos:

  • Sancho Ordóñez (m. 929). Rey de Galicia.
  • Alfonso IV de León (m. 933). Rey de León.
  • Ramiro II de León (m. 951). Rey de León. Ocupó el trono leonés cuando su hermano Alfonso IV renunció al mismo.
  • Jimena Ordóñez (m. después de 935). Figura por última vez en la documentación del Monasterio de Celanova el 6 de enero de 935 confirmando a su primo hermano, Froila, hijo de Gutierre Menéndez e Ilduara Eriz, la villa de Uillare que había heredado de sus padres y que su hermano el rey Sancho concedió a los padres de Froila, que la tenían en encomienda.
  • García (m. después de 934). Su nombre figura en varios de los privilegios emitidos durante el reinado de su padre.

Se casa en 922 con Aragonta González, hija del conde Gonzalo Betótez y de la condesa Teresa Eriz, hija del conde Ero Fernández, y hermana de los condes Pelayo González y Hermenegildo González, con quien no tuvo descendencia, pues fue repudiada por el rey.

Contrae matrimonio en el año 923 con Sancha de Pamplona, hija del rey Sancho Garcés I de Pamplona, con quien tampoco tuvo descendencia. Su viuda se vuelve a casar con Álvaro Herrameliz, conde de Álava y posteriormente con Fernán González, conde de Castilla.

Muerte y Sepultura

La muerte de Ordoño II se produjo por causas naturales en torno al 20 de junio del año 924, en la ciudad de Zamora, cuando contaba con 52 años. Tras su fallecimiento sus restos mortales fueron trasladados a la ciudad de León, donde fueron enterrados en la iglesia del Salvador o Catedral de León que el mismo había mandado construir. Poco días después su hermano Fruela II se proclamó rey, usurpando el trono que correspondía a sus hijos y que se vieron obligados a refugiarse en Galicia por un tiempo.

Enlaces Externos

Fuentes