Palacio Güell

Palacio Güell
Información sobre la plantilla
Obra Arquitectónica  |  (Vivienda)
PalacioGuell.jpg
Palacio Güell
Descripción
Tipo:Vivienda
Estilo:Modernismo catalán
Localización:Bandera de España España
Uso inicial:Vivienda
Uso actual:Museo de Arte Escénico
Datos de su construcción
Inicio:1989


Palacio Güell (Palau Güell en catalán). Obra arquitectónica construida en la Rambla, cerca del puerto en la ciudad de Barcelona, España entre los años (1886 - 1890). Fue diseñada por el arquitecto catalán Antoni Gaudí bajo los codigos del estilo modernismo catalán.

Historia

Este edificio, uno de los más lujosos de Barcelona, fue encargado por Eusebi Güell i Bacigalupi (Conde de Güell, industrial textil) al arquitecto Antoni Gaudí, quien empezó el proyecto alrededor de 1880 y lo terminó en 1886.

Este palacio que se levanta al lado mismo de La Rambla, en una zona que en su época era el centro de Barcelona, es una casa entre paredes medianeras, adosada a otra casa que también era propiedad de la familia Güell. La construcción se desarrolló entre 1886 y 1888, fecha que se menciona en la parte alta de la fachada, aunque la decoración no se acabaría hasta 1889.

La familia Güell vivió en esta casa desde 1888, celebrándose en sus algunos de los actos de la Exposición Universal de 1888. Sigue siendo la residencia de los Güell hasta 1945, en que el palacio fue vendido a la Diputación de Barcelona, que instaló en él, el Museo de Arte Escénico. Entre 1974 y 1976, esta institución realizó algunos cambios en el edificio, restaurando la primera planta, para permitir su apertura al público. La última restauración general del edificio, dirigida por Antoni González Moreno se inicia en 1983 y finaliza en 1997. Esta restauración incluye una reinterpretación, a cargo de diversos artistas, de las chimeneas y respiraderos del terrado, en el que solo se conserva una chimenea con el trencadis original de Gaudí.

Descripción

Este palacio fue construido con materiales de la mayor calidad, básicamente en piedra recubierta de mármol y decorada con los más delicados muebles y objetos artísticos. El edificio es de planta prácticamente cuadrada y la distribución cambia en cada piso desde el sótano - antiguas cuadras - al desván, para adaptarse a sus específicas funciones.

En el exterior nos encontramos con una fachada principal de factura muy sobria, construida en piedra de color gris claro. Sus dos puertas situadas en el centro - con las iniciales E y G del propietario en hierro forjado en su parte superior - presentan entre ellas un escudo de Cataluña también en hierro forjado.

En la primera planta una tribuna corrida abarca casi toda la anchura del edificio. En plantas superiores la fachada se hace plana y culmina con unos pequeños frontones triangulares de borde escalonado sobre los que se sitúan los extremos cónicos de chimeneas o respiraderos.

La fachada posterior también de gran sobriedad, presenta un original diseño basado en una tribuna con persianas venecianas de madera y adornada con cerámica de gran belleza, en la planta que corresponde al primer piso y en el piso superior hallamos un balcón decorado con una sorprendente pérgola.

El interior sorprende por su magnifica decoración que se observa en gran cantidad de detalles de un lujo extraordinario que refleja a la vez el buen gusto y originalidad del arquitecto. Gaudí diseñó diversos elementos del mobiliario, la iluminación y las vidrieras. La lujosísima decoración incluye columnas de mármol, techos cubiertos con maderas preciosas, muebles y apliques de marquetería de calidad extraordinaria. Destaca el sorprendente salón central coronado por una cúpula parabólica que sobrepasa el terrado en forma de cono que está perforada por círculos que, bajo la luz del día, le dan desde el interior una apariencia de planetarium. También hallamos en esta sala una pequeña capilla empotrada en la pared y un sinfín de elementos decorativos, todo el edificio está organizado alrededor de esta pieza central.

El terrado con sus chimeneas y respiraderos cónicos que recuerdan abetos representa probablemente uno de los primeros esbozos - pero ya de una gran maestría - de lo que alcanzaría la perfección, como elemento funcional y decorativo a la vez, con los guerreros del terrado de La Casa Milá. En esta obra, Gaudí usó por primera vez el "trencadis" (revestimiento de superficies con fragmentos de mosaico irregulares, que después fue ampliamente usada en el Modernismo).

Catalogación

Equipo de trabajo

Para este proyecto Gaudí contó con la colaboración del arquitecto Francesc Berenguer, uno de sus más fieles ayudantes y de diversos artesanos con los que trabajaba habitualmente, como el albañil Agustí Massip, los forjadores Joan Oñós y los hermanos Lluís y Josep Badia, los ebanistas Julià Soley y Eudald Puntí y los marmolistas hermanos Ventura.

Fuentes