Patronato local por Mantua

Patronato Local Por Cuba y por Mantua, M.N. Mejor
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Institución con sede en Cuba Bandera de Cuba
Fundación:20 de mayo de 1946
País:Cuba Bandera de Cuba
Dirección:Mantua, Pinar del Río


Patronato Local Por Cuba y por Mantua, M.N. Mejor. En Mayo de 1946, ante el incumplimiento de importantes mejoras anheladas por los pobladores de Mantua, se funda el Patronato Local Por Cuba y por Mantua, M.N. Mejor.

Fundación

El 20 de mayo de 1946, cuando los acólitos pro yanquis celebraban un profano aniversario de fundación republicana, poniendo de rodillas la patria mancillada, los pobladores de Mantua fundaban una herramienta de lucha contra el olvido.

El Patronato, constituido por acuerdo de la Cámara Municipal tomó bajo su cargo, entre otras obras de carácter cívico, la fundación y sostenimiento de la Academia de Música y de hecho, la Banda La Invasora, el Periódico municipal Ecos de Mantua y la biblioteca Municipal, con una colección iniciante de 200 ejemplares.

Motivaciones para su creación

La constitución del Patronato local tuvo como uno de sus motores motivacionales el incumplimiento por parte de los gobernantes de turno de un grupo importante de mejoras dejadas a cargo del Comité Nacional creado a instancias del Decreto ley No. 207 que declaró a Mantua, Monumento Nacional en 1935.

Entre las mejoras incumplidas, que eran anhelos profundos de los Mantuanos, se citaban las siguientes:

  • Carretera que uniese el poblado con el resto de la República.
  • Una Planta Eléctrica que llevaría el nombre de la Patriota Isabel Rubio.
  • Un edificio para Casa de Socorro, con el Ayuntamiento adjunto, que llevaría el nombre del Generalísimo, Máximo Gómez.
  • Un sistema de acueducto.
  • Una creche para niños pobres, con el Nombre de Mariana Grajales.
  • El cuartel del Ejército.
  • El cuerpo de bomberos con Ambulancia y otros medios
  • La Biblioteca Municipal, María Luisa Sánchez
  • El Hospital Civil Juan Bruno Sayas.
  • Centros escolares en los poblados de Dimas y Los Arroyos
  • La Carretera a Dimas.
  • Mejoramiento de Caminos Vecinales,
  • Construcción de la torre de la Iglesia, por ser estas campanas las que anunciaron la llegada de los libertadores en enero de 1896.

Resultados obtenidos

Fueron resultados iniciales del Patronato local la constitución de una Academia de Artes Gráficas, el Himno y el Escudo de Mantua, la fundación del periódico Ecos de Mantua, los trabajos de construcción de parques y monumentos que hasta hoy subsisten, y la fabricación de la réplica de los muebles utilizados en la firma del Acta Capitular con motivo del fin de la Invasión el 22 de enero de 1896.

El Patronato, con ese sentido práctico que caracterizó a sus miembros, empleó el marco de las Fiestas Patronales mantuanas para la promoción de sus obras cívicas. A lo largo de los años utilizó la fecha del 5 de Agosto como meta, tope para la inauguración de cuanto bueno se hacía por Mantua. Como ejemplos que trascendieron en la memoria podemos citar, la Imprenta Las Villas, La Academia de Artes Gráficas, la llegada de la Electricidad, el remozamiento de Mangos de Roque, el Parque José Martí, entre otros no menos importantes y necesarios. Ello sin dudas nos indica y confirma la tesis de que el Patronato local convirtió las festividades en un elemento cívico, dándole la oportunidad a la población mantuana de aglutinarse, manifestarse, socializarse, civilizarse y marchar en una misma dirección cuando de los intereses colectivos se tratase.

Otras acciones paralelas

Paralelo al Patronato local, se funda en la Habana el Comité de Acción Pro Mantua Liderado por el Doctor León Brunet y un grupo de Mantuanos residentes en la capital del país. El objetivo básico de este Comité es la acción múltiple de aquellos hijos y simpatizantes de nuestro terruño, en pos de lograr las metas planteadas por los fundadores del Patronato.

Especial significación tienen las gestiones profundas y sistemáticas del Doctor Brunet, las que, para su análisis y enjuiciamiento, deben ser enmarcadas dentro de una realidad económica, social, y política difíciles cuando de lograr obras y beneficios al pueblo se trataba. No obstante, el espíritu perseverante y su incansable labor convirtieron a este villareño en el hijo adoptivo más ilustre de nuestra historia pasada.

Lo indiscutible es que ambos elementos dotaron a Mantua de un instrumento culto, exquisito y persistente en grado sumo para lograr sus intereses e imprimir el esplendor necesario a todo cuanto significara orgullo y tradición Mantuana.

Fuentes

  • Mantua Mambisa y Mariana P. Joanquin Gaiga, Ediciones Vitral, 2009.
  • Historiadores del municipio Mantua. Investigación de la historia del municipio.
  • Ecos de Mantua