Pedro Fonseca Álvarez
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Pedro Fonseca Álvarez. Mártir revolucionario que luchó contra los mercenarios en Playa Girón, 1961.
Sumario
Síntesis biográfica
Infancia y Juventud
Nació el 16 de septiembre de 1937, en Ceiba Hueca, municipio de Campechuela, Oriente. Debido al exceso de trabajo y la poca alimentación, trae como consecuencia una lesión en un pulmón, enfermedad que mas tarde se agrava por la carencia de medios para someterse a un tratamiento, tratamiento que solamente estaba al alcance de las clases privilegiadas. Así transcurre el tiempo hasta que sus padres deciden mudarse para La Habana, específicamente en Punta Brava. La Lisa, en busca de mejores condiciones.
Cursa sus primeros estudios en una escuela rural del propio pueblo, por las condiciones de vida y miseria en que vivían solo pudo estudiar hasta el cuarto grado, pues desde muy temprana edad tuvo que incorporarse al trabajo para ayudar al sostén de la familia, al igual que su padre desempeña labores agrícolas en donde trabaja desde horas de la madrugada hasta la caída del sol, recibiendo un bajo salario y con un sistema de alimentación pésimo.
Ya en La Habana en 1952, Pedro sigue padeciendo de esta dura enfermedad y en ese estado enfrenta la dura tarea de ser el eje de la construcción de la modesta casita con que él soñaba que tuviesen sus padres, apenas sin comer y sin dormir con la ayuda de sus hermanos los que al igual que él dejaban de comer para poder comprar materiales.
Así lograron su sueño, ya terminada la casa en 1956. Por medio de un amigo de ellos logra ingresar en el sanatorio “Topes de Collantes” ya que le era necesario por el mal estado en que se encontraba, permaneciendo dos años ingresado en el mismo. Curado de esta dolencia empieza a trabajar de jardinero en el Country Club y en el Biltmore ganando $70.00 o séase $35.00 en cada lugar, trabajo que tenia que hacer para ayudar a sus padres, al servicio de los burgueses de la época y donde el bocado de comida que recibía era gracias a la cocinera que a escondidas se la traía al jardín, ya que dentro de la casa no se la permitían comérsela.
Trayectoria revolucionaria
Pedro, como tantos cubanos que sintieron en carne propia la miseria y la explotación de esa época, siente la necesidad de un cambio, lo esperaba. Este cambio llega, comienza el año 1959 y con él la Revolución, entra en La Habana Fidel victorioso, seguido de su ejército libertador para poner fin a la explotación.
Consciente de la patria que desde ese momento nos tocaría vivir y de que esta conquista tenia que ser apoyada por el pueblo. Pedro se incorpora a las milicias revolucionarias. Transcurre el año 1959 y en 1960 es llamado para pasar una escuela en el Batallón 116. Pasa con eficiencia el rigor de la primera escuela. Debido a las amenazas del Pentágono con el decrépito de Eisenhower al frente, el cual decía que al abandonar su presidencia en EE.UU. atacaría a Cuba, es atrincherando con su batallón.
El imperialismo yanqui, no pudiendo concebir que a solo 90 millas de su territorio estuviese el primer país socialista de América Latina, persiste en amenazas, surgen las bandas contrarrevolucionarias dirigidas y adiestradas por la CIA. Pedro marcha a la persecución de las mismas en el Escambray donde en su permanencia de dos meses y medio demuestra sus condiciones de revolucionario cabal, siempre dispuesto a combatir y acabar con los bandidos y vende-patrias contrarrevolucionarios.
Cuando en una ocasión recibe una carta de su esposa donde le plantea el regreso, ya que llevaba algún tiempo separada de él. Pedro firme y resueltamente le contesta que en aquellos momentos lo más importante era terminar con el foco contrarrevolucionario que tanto afectaba a Cuba, ahorcando campesinos, quemando cooperativas, casas y cañaverales.
Terminada la limpia del Escambray con la erradicación total de los enemigos de nuestra patria, regresa a La Habana junto a sus compañeros del batallón.
Su muerte
El día 10 de abril de 1961, ante el peligro de la invasión a Cuba, es movilizado nuevamente; cinco días después, el día 15 del propio mes, se producen los bombardeos mercenarios a la base de San Antonio, Ciudad Libertad y Santiago de Cuba y el día 17 parte con su compañía (ligera de combate) bajo las órdenes del capitán Carvó del ejército del pueblo, combate contra los enemigos de nuestra revolución los cuales estaban amparados por el mismo opresor de los pueblos explotados de nuestra América, los que desembarcaron en Playa Girón.
El día 19 nuestro ejército logra penetrar en las profundidades del enemigo y a las 7:30 a.m. entablan un recio combate contra los mercenarios vendidos a la CIA, sin moral ni prestigio y provistos de todo tipo de armas modernas. Surge ahí otro momento donde Pedro demuestra su valor y su condición de revolucionario, portando en sus manos una ametralladora checa y un grito de Patria o Muerte en su garganta, al caer herido de muerte baña con su sangre joven las arenas de nuestra playa, demuestra su decisión de luchar por nuestra Revolución o morir por ella.
Comentario
Como todos los que ofrendaron su vida por el sangrado deber patriótico y por el alto precio pagado en la lucha contra los enemigos de nuestra patria. Pedro Fonseca estará vigente en nuestra historia revolucionaria y vivirá mas presente que nunca, en cada obra de la Revolución porque la muerte de los héroes caídos no fue ni será jamás derramada en vano. Ellos hicieron patente una vez más la frase del Titán de Bronce.
“Quien intente apoderarse de nuestra patria solo recogerá el polvo de nuestro suelo anegado en sangre, si no perece en la lucha”.
¡Gloria eterna a los Héroes de Playa Girón¡
Fuente
- Archivo del Policlínico Pero Fonseca de Punta Brava, La lisa. Ciudad de La Habana. Cuba.
- Biblioteca Municipal de La Lisa.Cuba.
