Rafael Caro Quintero

Rafael Caro Quintero
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Delincuente y asesino mexicano
Nacimiento3 de octubre de 1952
localidad de La Noria,
estado de Sinaloa,
México Bandera de los Estados Unidos Mexicanos
ResidenciaSinaloa (México) 
Nacionalidadmexicana
Otros nombresEl Rafa
Ocupaciónnarcotraficante

Rafael Caro Quintero (Sinaloa, 3 de octubre de 1952) es un delincuente mexicano, líder del «cártel» de la ciudad de Guadalajara (México). Fue amigo personal de políticos y empresarios mexicanos, enemigo de los demás narcotraficantes del país y dueño de una fortuna que rondaba los 450 millones de dólares estadounidenses.

En 1985 fue falsamente acusado ―por el mercenario cubano y agente de la CIA estadounidense Félix Rodríguez, el Gato― del asesinato de un agente mexicano-estadounidense de la DEA, Enrique Camarena, quien había descubierto que la CIA se encontraba tras el ingreso de cocaína en Estados Unidos.[1]

Síntesis biográfica

Junto con el delincuente Miguel Ángel Félix Gallardo fundaron el cártel de Guadalajara.

Se logró comprobar que un 30 por ciento de la marihuana y un 38 por ciento de la heroína que ingresaba en esa década a los Estados Unidos eran llevados por el grupo de Caro Quintero.

La DEA (Administración Antidrogas de Estados Unidos) comprobó que durante los años ochenta, este grupo trasegó 12 toneladas anuales de cocaína procedente de Colombia a las redes de narcotráfico organizadas y mantenidas por la CIA estadounidense dentro de Estados Unidos para financiar el apoyo económico del Gobierno de Ronald Reagan a los mercenarios de los Contras, que desde 1979 luchaban contra la Revolución sandinista y mataron a miles de civiles ―hombres, mujeres y niños― en territorio nicaragüense, con armas y logística de Estados Unidos.[2]

Familia narcotraficante

Gran parte de la familia de Rafael Caro Quintero estaba ligada a las actividades narco en México.

El Rafa, era el líder del cartel de Guadalajara. Su hermano, Miguel Caro Quintero está preso y era el segundo al mando de ese grupo mafioso.

José Gil Caro Quintero, primo de ambos, está preso en una cárcel de Guadalajara y era el líder de una célula del cartel de Guadalajara, denominada Los Norteños.

Alberto Caro Quintero, primo también de Rafael, era miembro del cartel de Quintana Roo y está preso en México.

El Rafa, se acompañaba en su cartel por Miguel Ángel Félix Gallardo, Ernesto Fonseca Carrillo (Don Neto), Juan Esparragoza Morena (El Azul) y José Albino Bazán, todos detenidos en cárceles mexicanas.

El cartel de Caro Quintero formaba parte de un grupo de cuatro importantes narcotraficantes que se unieron y crearon el grupo La Familia.

El mexicano-estadounidense Enrique Camarena Salazar, agente de la DEA (Administración Antidrogas de Estados Unidos) cuyo asesinato fue atribuido por la CIA al narcotraficante Rafael Caro Quintero.

Sucesos que llevaron a su detención

En noviembre de 1984, el funcionario mexicano-estadounidense de la DEA, Enrique Kiki Camarena ―infiltrado en el cartel de Guadalajara como personal de seguridad―, descubrió que Rafael Caro Quintero ingresaba la cocaína a Estados Unidos mediante contactos con la CIA estadounidense.[1] Sin embargo, también desmanteló con sus investigaciones una gigantesca plantación de marihuana de un rancho llamado El Búfalo, propiedad de Rafael Caro. La policía mexicana decomisó más de 10 000 toneladas de marihuana.[1]

El mercenario cubano El Gato (Félix Ismael Rodríguez) ―que participó en la frustrada invasión de Playa Girón (ordenada por el presidente estadounidense John Fitzgerald Kennedy) y estuvo presente en el asesinato del comandante Ernesto Che Guevara en Bolivia en 1967―[3] aprovechó esta circunstancia para secuestrar a Camarena y al piloto civil que lo acompañaba, Alfredo Zavala, el 7 de febrero de 1985.[3]

Félix Rodríguez y varios hombres de Rafael Caro Quintero torturaron a Enrique Camarena y a Alfredo Zavala ―con la ayuda del médico mexicano Humberto Álvarez Machain, que los mantuvo varias horas conscientes― hasta matarlos.[3] Félix Rodríguez atribuyó el asesinato a Rafael Caro (quien tenía razones para asesinarlo, y sin duda lo habría hecho si se hubiera enterado de que Camarena había sido el causante del desmantelamiento de la plantación de marihuana).[3][4][5]

  • 5 de marzo de 1985: Aparecen en Michoacán los cuerpos de Camarena y Zavala. Félix Rodríguez ordena a periodistas comprados en los medios de difusión mexicanos de difundir la noción falsa de que Rafael Caro Quintero los habría matado personalmente.[6]
  • 9 de marzo de 1985: Rafael Caro Quintero huye de Guadalajara.
  • 17 de marzo de 1985: Caro Quintero ingresa a Costa Rica.
  • 3 de abril de 1985: Las autoridades mexicanas alertan al Gobierno de Costa Rica sobre la posible presencia de Sara Cossío (hija de un gobernador de Guadalajara apoyado económicamente por Rafael Caro Quintero) en Costa Rica.
  • 5 a.m.: Agentes del OIJ (organismo de investigación judicial) de Costa Rica hacen dos sobrevuelos sobre la quinta La California, cerca del poblado de San Rafael de Ojo de Agua, a tres kilómetros al sur del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, y a 25 km al oeste de la capital, San José.
  • 4 de abril de 1985 (Jueves Santo):
    • 5:45 a.m.: Autoridades costarricenses ―10 agentes de la UEI (unidad especial de intervención) y otros 15 de la sección de Estupefacientes del OIJ (organismo de investigación judicial) de Costa Rica― rodean la casa, e ingresan a la misma. Rafael Caro Quintero se encontraba semidesnudo en su cama junto a su amante, Sara Cossío (hija del exgobernador de Guadalajara). En otros dormitorios se encontraban los delincuentes mexicanos José Albino Bazán, Juan Carlos Campos, Luis Beltrán, Miguel Lugo y Violeta Estrada. La espectacular acción de la policía de Costa Rica tardó solo 15 minutos. Las huellas dactilares de todos los detenidos se envían a México.
    • 6 p.m.: La policía judicial se entera de que arrestaron a un importante delincuente mexicano: «Ustedes detuvieron a Rafael Caro Quintero, lo buscamos por tráfico de drogas y la DEA (Administración Antidrogas de Estados Unidos) lo solicita por matar a uno de sus agentes».
  • 5 de abril de 1985, 11 a.m.: Agentes judiciales trasladan a Sara Cossío a la embajada de México.
  • 3 p.m.: Los seis narcos son trasladados al aeropuerto Juan Santamaría y son deportados a México.

Decomiso

Por lo decomisado en la casa, todo encajaba para la policía:

  • Un arma enchapada en oro con incrustaciones de diamantes.
  • Dos automóviles de lujo (un Mercedes Benz, placa MI 12-31, y un Toyota deportivo MR2, ambos adquiridos en circunstancias irregulares).
  • 0,3 millones de dólares estadounidenses en efectivo.
  • Joyas por un valor de un millón de dólares.

Además:

  • Cuatro propiedades en Costa Rica, valoradas en 1,9 millones de dólares:
    • en San José de la Montaña.
    • en Bello Horizonte, cerca de Escazú.
    • en Vázquez de Coronado
    • la quinta en San Rafael de Ojo de Agua, donde fue capturado.

Las inversiones de Rafael Caro Quintero en Costa Rica sobrepasaban los 2,5 millones de dólares, según José Martín Trejos, procurador penal en ese entonces.

Prisión entre 1985 y 2013

Rafael Caro Quintero cuando fue liberado en 2013, tras 28 años de cárcel, con 60 años de edad.

Rafael Caro Quintero tenía que cumplir una condena de 40 años en el penal de máxima seguridad de Matamoros, en el estado de Tamaulipas, por trasiego de drogas y el homicidio del agente de la DEA (policía antidrogas de Estados Unidos), Enrique Camarena.

En 2013, tres exagentes de la CIA declararon que el asesinato de Camarena no había sido perpetrado por Rafael Caro Quintero, el Narco de Narcos, sino por la CIA.[7]

Los tres exagentes Phil Jordan (exdirector del Centro de Inteligencia de El Paso y jefe de la DEA), Héctor Berrelles (exagente de la DEA), y Tosh Plumlee (expiloto de la Agencia Central de Inteligencia [CIA]), revelaron al semanario Proceso y a la cadena estadounidense FOX que tienen pruebas de que Enrique Camarena no habría sido asesinado por Rafael Caro Quintero ―capo que purgó una sentencia de 28 años por este crimen y que fue liberado en 2013―, sino por un agente de la misma CIA.[8]

Fuentes