Ramiro Pérez Ortiz
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Ramiro Pérez Ortiz. Joven mambí. Combatiente en las guerras de independencia.
Síntesis biográfica
Nació el 15 de enero de 1877 en Nueva Paz, Provincia Mayabeque. Hijo de Serafín y Mercedes. Fue el tercero de una docena de hijos que tuvo el matrimonio.
Desde muy niño trazó su ruta manifestando inclinaciones por las causas patrióticas; se interesaba con las personas mayores para que le contaran sucesos vinculados con el desarrollo de la Guerra de los Diez Años, así como anécdotas relacionadas con los patriotas que dirigieron la misma; en sus expresiones se comprendía que sentía devoción por Carlos Manuel de Céspedes, Antonio Maceo y Máximo Gómez, y en general por los mambises que lucharon por su pueblo.
Pequeño aún se traslada con toda su familia para residir en la finca propiedad de sus padres, "Las Mercedes", cerca de la población; allí aprende a montar a caballo y se hace buen jinete. Corriendo por aquellos entornos e impregnado con espíritu de fe, en su imaginación, se hacía la idea que iba triunfante en su brioso corcel de guerra y peleando por la libertad de su patria; se cuenta que por sabanas y caminos, al tropel, gritaba a viva voz y con energía en medio del potrero: VIVA CUBA LIBRE!; así lo veían y escuchaban desde lejos los vecinos de la comarca.
Labor revolucionaria
A la edad de 18 años y en la alborada del 1 de enero de 1896, las tropas invasoras pasaron por su sitio de residencia acampando los combatientes en el central "Nueva Paz", muy cerca de él, decidiendo unirse a ellos.
Oportuno y sin perder un minuto, se dio a la tarea de conversar con sus amigos, organizando un grupo de hombres que bajo su mando se incorporaron a las fuerzas insurrectas, donde en reconocimiento a su disciplina, arrojo y valentía, obtuvo el grado de Capitán.
Desde aquel día no tuvo descanso; su único objetivo de acción era ir al frente de los suyos, chocar con los enemigos y accionar incansable en la contienda por la libertad de su suelo, participando en muchos combates en que nunca se le vio retroceder, demostrando siempre su desinterés con coraje y decisión.
Muerte
El 7 de diciembre de 1896, guiaba su tropa hacia San Pedro para incorporársele a Antonio Maceo, cuando le dieron la noticia de que una columna española había salido en su persecución; sostiene una encarnizada batalla durante horas, en "El Plátano", cerca de San José de las Lajas.
Fue mortalmente herido, y moribundo y anegado en sangre, compatriotas dispersos oyen su última voluntad: "Adelante Cubanos!".
Contaba al caer con 20 años de edad, y pasaba a formar parte de la gloriosa galería heroica de los mártires.
Reconocimiento
A la entrada de su pueblo, la calle donde nació lleva su nombre en señal del merecido respeto.
Fuente
- Abilio González González, Investigador Agregado, Museo de Güines.
