Seminario de San Carlos y San Ambrosio

Seminario de San Carlos y San Ambrosio
SeminarioSanCarlosSanAmbrosio.jpg
Fundación1689
Localización
DirecciónDirección antigua
San Ignacio No. 5 e/ Empedrado y Chacón, Habana Vieja
Dirección actual
Carretera Monumental y Puente de Los Mangos, Guanabacoa

Seminario de San Carlos y San Ambrosio. Institución de estudios superiores de la Iglesia Católica que radicó en el Centro Histórico de la Habana. En la actualidad está ubicada en la Carretera Monumental en el municipio Guanabacoa. La construcción original ha sido considerado por especialistas y arquitectos como uno de los más importantes del período colonial, no solo por haberse formado aquí algunos de los más prestigiosos intelectuales cubanos, sino porque su arquitectura introduce elementos novedosos para su época.

Historia

El Colegio de San Ambrosio fue fundado en 1689 por el obispo Diego Evelio de Compostela, en una casa contigua a la suya, en la calle llamada Compostela en honor al obispo, y en la que estudiarían como matrícula inicial doce niños varones, pobres, entre los cuales se despertó la vocación religiosa, a fin de promover luego la carrera sacerdotal.

En tiempos del obispado de Gerónimo Valdés, al colegio de San Ambrosio se le adicionarían las Cátedras de Moral, Filosofía y Cánones y poco después se denominaría Colegio Seminario de San Carlos y San Ambrosio, en honor al Rey Carlos III de España, quien en 1777 le concedió el título de Conciliar, igualándolo a los seminarios españoles.

El edificio no era entonces el que es hoy, sino una construcción similar, comenzada a componer en 1700 por los miembros de la Compañía de Jesús y concluida definitivamente en 1767, poco antes ser expulsados del imperio. El obispo siguiente, el famoso Juan José Díaz de Espada, además de agregarle al seminario ciertas reformas constructivas, instruyó la formación de las cátedras de Química y Botánica, y un gabinete de Física.

Durante el obispado de Díaz de Espada, el colegio alcanzó tal renombre científico, que ni la universidad podía competir en cuanto al saber avanzado de la época. En opinión de Emilio Roig de Leuchsenring, sería este el período de más brillantez del Seminario.

Edificio actual del Seminario de San Carlos y San Ambrosio

Con el tiempo la Secularización de la enseñanza en Cuba hizo que la universidad dejara de ser la Real y Pontificia Universidad de San Gerónimo de La Habana, copia fiel de la Universidad de Santo Domingo, modelo de las primeras universidades del Nuevo mundo ―y según Bachiller y Morales―, con la enmarañada Lógica y las malas nociones de Física de la escolástica del siglo XVII.

Convertida la universidad en centro de Ciencias modernas, el colegio de San Carlos volvería a ser exclusivamente Seminario religioso. Según Leuchsenring, cuando Monseñor Manuel Arteaga ocupó la silla cardenalicia, dispuso que el Seminario cambiara el nombre por el de El Buen Pastor y fuera trasladado poco después para un lugar fuera de La Habana. El edificio se convertiría en dependencias del Arzobispado durante varios años, pero con el tiempo volvería a ser Seminario Conciliar de San Carlos y San Ambrosio.

Características de la antigua sede en la Habana Vieja

Portada (calles San Ignacio y Tejadillo)
Detalle de la portada (calle San Ignacio)
Portada (calle San Telmo)

El monumental edificio está formado por dos portadas, una que da hacia la calle San Ignacio y otra por la calle San Telmo.

La primera cerró la calle Tejadillo, dejándola trunca; afirman los especialistas en la materia que esta es una solución muy típica del Barroco, estilo al que se afilia en su conjunto, donde destaca la puerta de entrada al mismo, los nichos con estatuas y el tratamiento irregular de la cornisa entre otros elementos. Esta portada, el patio y la escalera principal, son consideradas entre las más fastuosas de la época colonial habanera.

Patio interior

La segunda fachada data de la década del 1950 del pasado siglo, sin embargo, no desentona con el conjunto ya que se realizó inspirada en los motivos de la fachada de la Catedral habanera. Esta ofreció mayor prestancia al edificio, ya que hacia este lado se dejaba ver como un gran lienzo de piedra con una distribución irregular de ventanas. A ambos lados de la puerta se observan dos bustos de los profesores más representativos e importantes en la formación de la nacionalidad cubana: José Agustín Caballero y Félix Varela, quienes ejercieron su magisterio en el Seminario. En su interior destaca el magnífico patio central rodeado de galerías por tres de sus lados, con arcos y columnas pareadas y pilares formados por pie derechos de madera, elementos que aparecen en diferentes de sus lados.

En el edificio sobresale el trabajo de carpintería, donde resaltan los balaustres torneados y las cancelas. La galería de la planta alta presenta una arcada que descansa en dobles columnas, solución que definen nuestros arquitectos como única en la arquitectura habanera de entonces. Como elemento tipológico de valor también se cita la escalera, cubierta por una bóveda de cañón.

En las aulas de este colegio religioso se formaron figuras prominentes de la nación cubana.

Este inmueble acoge en la actualidad al Centro Cultural Padre Félix Varela, donde el Papa Francisco se reunió con los jóvenes el 20 de septiembre de 2015 durante su visita a Cuba.

Nueva sede

El 3 de noviembre de 2010 en La Habana fue inaugurada la nueva sede del Seminario Interdiocesano San Carlos y San Ambrosio, ubicada en el capitalino municipio de Guanabacoa.

Nueva sede del Seminario Interdiocesano San Carlos y San Ambrosio

Al intervenir en la ceremonia, el Cardenal Jaime Ortega Alamino, Arzobispo de La Habana, relató cómo el Papa Juan Pablo II, durante su visita a Cuba en enero de 1998, bendijo la piedra que sería colocada como primer objeto de obra en la edificación; a la vez que recordó el apoyo prometido para tal empresa por el líder de la Revolución, Fidel Castro Ruz, desde tan temprana fecha y también agradeció en nombre de la Iglesia, tanto a Fidel como al actual Presidente Raúl Castro, «que esta obra haya contado hasta su conclusión con el apoyo estatal, para poder realizarla convenientemente». Además se refirió a la ayuda prestada por diferentes instituciones católicas de otros países, varias de ellas representadas en la inauguración del centro de formación sacerdotal.

El Cardenal Ortega dijo «Es nuestro Seminario de más de 200 años, con su historia gloriosa y sus avatares, con sabios y santos sacerdotes y obispos salidos de sus aulas. Con él se muda también para acá su historia, es un nuevo edificio, con modernas instalaciones, pero es el mismo Seminario que fue San Carlos y San Ambrosio en los inicios gloriosos para el pensamiento cubano del siglo XIX» y elogió la belleza de la capilla y el entorno del lugar, así como la privacidad de las habitaciones, sus salas de recreación y campos de juego.

Eusebio Leal, Historiador de la Ciudad de La Habana, realizó un recuento de la historia de la institución desde su fundación y recordó los nombres de destacadas figuras que, en su momento, estudiaron en ese centro, entre ellos Carlos Manuel de Céspedes, Félix Varela, José de la Luz y Caballero, Tomas Romay, Cirilo Villaverde y Rafael María de Mendive. Más adelante significó que, en la puerta de la institución y guardada en una urna de cristal, se encuentra la primera piedra del Seminario, que fue bendecida por el Papa Juan Pablo II durante su visita a Cuba en 1998.

Durante la ceremonia se dio a conocer un mensaje enviado especialmente para la ocasión por el Papa Benedicto XVI, en el que deseó «un renovado vigor en el compromiso de velar por una esmerada preparación humana, espiritual y académica de los que en esa institución caminan hacia el ministerio sacerdotal».

Fuentes