Revista de Avance

Revista de Avance
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Principal órgano del movimiento vanguardista cubano.
Fecha de Fundación15 de marzo de 1927
PaísBandera de Cuba Cuba
IdiomaEspañol

Revista de Avance. Principal órgano del movimiento vanguardista cubano. De referencia obligada para estudiar el desarrollo de las artes en Cuba durante la época republicana. (1927-1930).

Historia

El nombre por el que pasó a conocerse esta revista no figuraba como centro de su cabezal. La actitud trasgresora de la vanguardia se manifestaba en toda la publicación, que llevaba como título el guarismo del año en curso (1927, 1928, 1929 y 1930) y debajo de él, con letras minúsculas: revista de avance. Desde que salió por primera vez, el 15 de marzo de 1927, la revista reunió a los creadores más innovadores y dio trascendencia a la apropiación criolla del movimiento vanguardista, tanto en la literatura y la música como en la plástica.

La Revista de Avance era correspondiente de homólogas de igual orientación en Iberoamérica, como Amauta, Contemporáneos, La Pluma y Repertorio Americano. También realizó alianzas con revistas nacionales como Musicalia, publicación de María Muñoz y Antonio Quevedo.

Objetivo

Desde su diseño hasta los contenidos, la Revista de Avance marcó pautas de cambio en la forma tradicional de concebir esa clase de publicaciones. Su objetivo era legitimar e impulsar el incipiente desarrollo de las vanguardias en la Isla, no solo con palabras, sino también mediante el auspicio de acciones culturales como conciertos y exposiciones de arte. Además, divulgó la labor de lo más destacado en Europa y América en ese movimiento, al reseñar nombres y obras desconocidas por la sociedad antillana de entonces.

En la Cuba de 1927 no eran en absoluto conocidos artistas de la talla de Pablo Picasso, Jean Cocteau, Diego Rivera, José Clemente Orozco, Bertrand Russell y Georg Brandes; o, si lo eran, sufrían rechazos. La Revista de Avance difundió las obras de esos artistas foráneos, y de artistas nacionales como Amadeo Roldán y Alejandro García Caturla, que rescataron la influencia de la cultura africana y la trasladaron a la música de concierto. La tarea de Pedro Sanjuán, director de la Orquesta Filarmónica y maestro de los dos músicos mencionados, también fue divulgada por la revolucionaria publicación. Relevantes pintores cubanos Carlos Enríquez Gómez, Eduardo Abela y Víctor Manuel entre ellos- ilustraron sus páginas, dejando en ellas una auténtica obra en el grabado. La portada de la revista empleaba los colores contrastantes que dieron trascendencia a la plástica vanguardista. En 1927 la revista coordinó la exposición Arte Nuevo, que marcó la inauguración de las avanzadas en la plástica cubana, según ha señalado la crítica.

Vocación de la revista

La revista exhibía una vocación latinoamericanista unida a la búsqueda de referentes y reconceptualizaciones de orden cultural. El acontecer nacional también tuvo espacio en ella, pero sin una consensuada posición ideológica ni partidista; así publicaba por igual textos de Jorge Mañach y de Juan Marinello, de filiaciones políticas diferentes. Asimismo, se publicaban poemas y cuentos de la recién surgida avant garde cubana.

La revista se inició con una frecuencia quincenal, pero a partir del número dieciocho se publicó mensualmente. Su primer consejo editorial estuvo compuesto por Alejo Carpentier, Martín Casanovas, Francisco Ichaso, Jorge Mañach y Juan Marinello. Al siguiente número, José Zacarías Tallet ocupó el espacio cedido por Carpentier. Desde el número vigesimoséptimo hasta su cierre, tuvo como editores a Francisco Ichaso, Jorge Mañach, Juan Marinello y Félix Lizaso.

La sección «Directrices» de la revista -siempre firmada por «Los 5»; es decir, los miembros del consejo editorial- estaba dirigida a reflejar los conflictos acuciantes de la vida nacional, y los de orden internacional que repercutieran en los del país. «Letras Extranjeras» ofrecía ideas sobre lo último de la estética y de la literatura no hispánica, y «Letras Hispánicas» hacía otro tanto, pero para el ámbito iberoamericano. En «Letras» y «Almanaque» aparecían comentarios sobre libros, películas y obras teatrales, y síntesis de publicaciones periódicas.

Legados culturales

Los números que la revista dedicó a Ramón Gómez de la Serna, a México y sus escritores, a José Martí, a Waldo Frank, y un homenaje póstumo a José Carlos Mariátegui, figuran en la historia del periodismo cubano como legados culturales de su época. En sus páginas también aparecieron los trabajos etnográficos de Fernando Ortíz Fernández y los cuentos folclóricos de Lydia Cabrera sobre el ascendente africano en la cultura cubana. El «negrismo», y el «indigenismo» sustentado por Mariátegui, que repercutieron en la poesía cubana, tuvieron eco en ella a través de representantes como Manuel Navarro Luna y Mariano Brull. La revista creó una empresa editorial, que publicó libros de Regino E. Boti, Francisco Ichaso, Jorge Mañach, Rafael Suárez Solís, Sergio Carbó, Eugenio Florit y Juan Marinello, entre otros.

Asesinato de Rafael Trejo

El 30 de septiembre de 1930 fue asesinado cerca de la Universidad de La Habana, en una manifestación contra la tiranía de Gerardo Machado, el estudiante de Derecho Rafael Trejo. En los disturbios, uno de los editores de la revista, Juan Marinello, cayó prisionero. La revista condenó el hecho y refirió rumores sobre la censura de prensa que promovía el gobierno, que los editores decidieron no acatar; prefirieron entonces despedirse del público lector, hasta que sus ideas pudieran expresarse nuevamente con libertad. Nunca más se publicó.

Colaboradores de la revista

Entre sus colaboradores, la revista contó con nombres de la valía de Agustín Acosta, Emilio Ballagas, Regino Boti, Mariano Brull, José María Chacón y Calvo, Rafael Esténger, Alfonso Hernández Catá, Lino Novás Calvo, Manuel Navarro Luna, Andrés Núñez Olano, Fernando Ortiz, Regino Pedroso, Félix Pita Rodríguez, Ramón Rubiera, José Antonio Ramos, Raúl Roa García, Luis Felipe Rodríguez, Ramón Guirao, Luis Rodríguez Embil, Medardo Vitier, Enrique José Varona, y destacados intelectuales extranjeros como Miguel Ángel Asturias.

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