Revolución de 1868

Revolución de Septiembre
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Fecha:1868
Sitio:Bandera de España España


Revolución de 1868 La Revolución de 1868, llamada la Gloriosa o Revolución de Septiembre, también conocida por la Septembrina, fue una sublevación militar con elementos civiles que tuvo lugar en España

Datos biográficos

El 18-IX-1868, la escuadra española concentrada en la bahía de Cádiz y mandada por Topete, se sublevó contra Isabel II, con el apoyo de Prim. La sublevación pronto encontró un gran apoyo popular y se crearon juntas revolucionarias. En Zaragoza, a pesar de que la Junta Revolucionaria actuaba en la clandestinidad desde 1867, las medidas adoptadas por el capitán general, que el día 19 declaró el estado de guerra en Aragón, impidieron que la ciudad se sumara al movimiento hasta el 29 de septiembre, cuando ya la suerte de la sublevación había sido decidida en la batalla del Puente de Alcolea.

El 30 de septiembre hace su primera declaración pública la Junta de Zaragoza, presidida por el progresista Ángel Gallifa: anuncia el derrocamiento de la dinastía borbónica y proclama los objetivos de Cortes constituyentes, soberanía nacional y derechos individuales. Al día siguiente era suspendida durante breves días la Exposición Aragonesa, que había sido inaugurada el 15 de septiembre. Entre las primeras disposiciones de la Junta de Zaragoza se halla la abolición del derecho de consumos.

El 30 de septiembre se publica la constitución de la Junta Revolucionaria de Huesca, que presidía Alejandro Laguna; actúa como secretario Antonio Torres Solanot, cuyo papel ha estudiado A. Gil Novales. Los conflictos de esta Junta con la Iglesia fueron muy importantes, llegando a desterrar al obispo Basilio Gil y Bueno.

El 29 de septiembre se había formado también en Teruel una Junta Revolucionaria, una de las primeras en protestar contra la actitud de la Junta de Madrid, que se había arrogado la facultad de constituir un Gobierno provisional. Por el contrario, las juntas de Teruel y Huesca (junto con las de Soria y Valladolid), propugnaban la constitución de una Junta Central, formada por representantes de las provinciales, que debía asumir el poder en un proceso parecido al de 1808.

En diciembre de 1868 se celebran elecciones municipales; de ellas saldrán nuevos ayuntamientos, que tendrán que enfrentarse con el importantísimo problema del paro, y de la mala cosecha de 1869.

Las elecciones a diputados de enero de este año darán en Aragón la victoria a los republicanos, que obtienen 12 escaños frente a los 8 de los monárquicos, mientras que en el conjunto del Estado la situación es muy distinta (85 republicanos sobre 352 diputados). Los republicanos cubren todos los puestos de la circunscripción de Huesca, la mayoría de la de Zaragoza y minorías en Calatayud y Teruel. Con la celebración de estas elecciones puede considerarse consolidada la llamada «Gloriosa Revolución», que sería el comienzo del Sexenio Revolucionario.

Bibliografía

Gil Novales, A.: La Revolución de 1868 en el Alto Aragón; Zaragoza, 1980. López González, J. J.: «La revolución de 1868 y las secuelas de la crisis económica»; Aragón en su Historia, Zaragoza, l980, pp. 404-405.

Fuentes