Reynaldo Miravalles

Reinaldo Miravalles
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Actor cubano
NombreReynaldo Agustín Miravalles de la Luz
NacimientoEnero de 1923
La Habana, Bandera de Cuba Cuba
Fallecimiento31 de octubre de 2016
La Habana, Bandera de Cuba Cuba
ResidenciaMiami, Bandera de los Estados Unidos de América Estados Unidos (desde mediado de los años 90´)
NacionalidadCubana
OcupaciónActor

Reynaldo Agustín Miravalles de la Luz. Fue un destacado actor cubano. Sobresalió en la radio, la televisión y particularmente en el cine nacional. Son relevantes sus actuaciones en los filmes Las doce sillas, El hombre de Maisinicú, Los pájaros tirándole a la escopeta y otras muchas. Residía en Miami desde mediado de los años 90´sin perder su vínculo con Cuba, donde protagonizó su última película Esther en alguna parte, bajo la dirección de Gerardo Chijona.

Síntesis biográfica

Nació en La Habana en enero de 1923.

La primera manifestación artística por la que se inclinó fue la pintura, por lo que se matriculó, cuando tenía 17 años, en la escuela anexa de San Alejandro en su curso nocturno.

La difícil situación económica que atravesaba le impidió seguir estudiando, hasta que en 1944 hizo su primera actuación en la radioemisora La voz de los Ómnibus Aliados. A partir de esa fecha, trabajó en casi todas las emisoras radiales de La Habana.

Trayectoria artística

En la radio

Desde 1944, trabajó en la radio, donde debutó con el programa humorístico La voz de los ómnibus aliados. De esta primera etapa de su carrera, hay que destacar su intervención en la más famosa serie humorística –primero radial, luego televisiva- de la Cuba republicana: La gran Corte.

En la televisión

En 1951 comenzó a trabajar como actor en la Televisión Cubana, un medio que nunca abandonó del todo y ese año recibió el premio del actor más destacado. En su larga carrera televisiva interpretó cientos de personajes, entre ellos, el del guajiro Melesio, con el que alcanzó una altísima popularidad. Su calidad interpretativa le permitió encarnar tanto personajes cómicos como dramáticos.

En el teatro

En teatro también actuó en multitud de obras, aunque sin dudas fue en un clásico cubano, Santa Camila de la Habana Vieja, donde logró su mayor éxito.

En el cine

En el año 1957 se inició en el cine con el filme venezolano Papa Lepe. A partir de 1959, con la creación del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC), se fue perfilando como uno de los actores de mayor fuerza interpretativa del nuevo cine cubano.

Participó en algunas de las cintas más destacadas en la década de los sesenta en Cuba. Encarnó a un humilde lechero que se ve involucrado en la insurrección, en el relato titulado El herido, una de las tres partes de Historias de la Revolución (1960), de Tomás Gutiérrez Alea, obra que refleja la lucha que a finales de los años cincuenta derrocó al régimen dictatorial de Fulgencio Batista. Representó un personaje diametralmente opuesto, un cruel e inescrupuloso esbirro batistiano, en otro filme de similar temática: El joven rebelde (1961), dirigido por Julio García Espinosa y concebido por Cesare Zavattini, el mítico guionista del neorrealismo italiano. Apenas un año más tarde, coprotagonizó, nuevamente bajo la dirección de Gutiérrez Alea, una de las comedias más memorables de los años sesenta cubanos: Las doce sillas, en la que interpretó al picaresco chofer de un aristócrata venido a menos con la Revolución –papel que tuvo a su cargo Enrique Santiesteban- que busca desesperadamente unos diamantes que éste había ocultado en unas sillas confiscadas y subastadas por el gobierno revolucionario.

En la década siguiente y luego de su breve participación en Una pelea cubana contra los demonios (1971), también de Gutiérrez Alea, representó, en la película de Manuel Pérez Paredes El hombre de Maisinicú (1973), un papel que, aunque cuenta con pocas apariciones, tal vez le haya merecido mayor popularidad entre el público cubano: Cheíto León, jefe de un grupo de contrarrevolucionarios alzados en la región montañosa del Escambray (en el centro de la isla de Cuba), en el contexto de la denominada Lucha contra Bandidos de los años sesenta. Un índice de la relevancia de esta actuación lo constituye el hecho de que tres de las diez frases de Cheíto León en El hombre de Maisinicú figuran entre las diez más recordadas del cine cubano.

En 1976, protagonizó el filme de Sergio Giral Rancheador, ambientado en la etapa colonial cubana, en el que encarnó a Francisco Estévez, violento perseguidor de esclavos fugitivos. Dos años más tarde, volvió a ubicarse bajo la dirección de Gutiérrez Alea en Los sobrevivientes, donde interpretó a uno de los miembros de una aristocrática familia cubana que se recluyen en su palacete para refugiarse de las profundas transformaciones impulsadas por el nuevo gobierno socialista.

En la década siguiente, luego de su participación en Polvo Rojo (1981), de Jesús Díaz, y en El Señor Presidente (1983), versión cinematográfica de Manuel Octavio Gómez de la conocida novela homónima de Miguel Ángel Asturias, Miravalles protagonizó, en 1984, una de las comedias más populares de esos años: Los pájaros tirándole a la escopeta, de Rolando Díaz. En esta cinta, en la que también participó Consuelo Vidal -otra figura legendaria de los medios audiovisuales cubanos- interpretó a un hombre maduro, chofer de ómnibus, que entabla un romance con la madre del novio de su hija. Esta película, que cuenta además con las actuaciones de los jóvenes, pero ya descollantes actores Alberto Pujols y Beatriz Valdés, fue pródigamente premiada en festivales nacionales e internacionales.

Reynaldo Miravalles (en el centro) observa al actor Carlos Moctezuma (a la derecha) que se da la mano con el actor Enrique Santiesteban (a la izquierda).

Dos años más tarde, regresó al género de la comedia con su personaje de Pedro Cero por Ciento, un campesino que ostenta un récord en materia de natalidad vacuna, en la película de Luis Felipe Bernaza De tal Pedro tal astilla (1985), una suerte de recreación en tono humorístico de la obra shakesperiana Romeo y Julieta, llevada al campo cubano. Este papel le mereció a Miravalles un premio Caracol –galardón ofrecido por la Unión de Escritores y Artistas de Cuba- a la mejor actuación masculina.

En el año que inaugura la década de los noventa, un período sumamente difícil en términos económicos y políticos para Cuba, participó en una de las películas más polémicas del cine cubano: la comedia de humor negro Alicia en el pueblo de Maravillas, de Daniel Díaz Torres, en la que encarnó al líder, de tintes diabólicos, de un remoto pueblo cubano al que son “deportadas” personas que han sido degradadas de sus cargos.

Al año siguiente, protagonizó Mascaró, el cazador americano, de Constante (Rapi) Diego, una actuación que fue premiada con un Caracol a la mejor actuación masculina en el marco del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, en 1992.

Emigrado a los Estados Unidos desde mediados de los años noventa, Miravalles interpretó el papel de un veterano agente de la CIA, junto a actores de fama internacional como Saffron Burrows y Harvey Keitel, en la película española de Gerardo Herrera El misterio Galíndez, basada en la novela de Manuel Vázquez Montalbán. También trabajó en Cercanía (2008), de Rolando Díaz, una película que trata sobre la vida de los emigrantes cubanos en Miami.

Su último trabajo, Esther en alguna parte, lo realizó en La Habana bajo la dirección de Gerardo Chijona. Sobre este trabajo dijo:

"Si tú no vives en tu país, no hay un estilo de producción para que te seleccionen. Para esta película, no hay mucha gente que tenga la edad que tiene que salir en ella. Los viejos trabajan en el cine porque abren la puerta y solo dicen: “el señor no está”, y cierran la puerta. Los argumentos para viejos no existen en el cine. No para mí, que tengo ya muchos años y ahorita voy a tener un siglo. Actores famosísimos del cine americano no ponen la cara ahora en el cine. Lo que ponen es dinero para que hagan las películas, pero sus caras no se ponen más. ¡Já, já, já! Y además, para hacer una película, el argumento tiene que estar bueno. Si me ofrecen una película que no esté bien el argumento… ni aquí, ni allá. No la hago tranquilamente. Aquí, no quiero especificar, me han ofrecido películas. Pero las películas que no me interesen, no las hago, porque me parece que es perder prestigio.


Chijona encontró a un actor que tiene la edad que necesita tener el personaje de esta película, y me invitó a que yo viniera a Cuba. Lo primero que yo le dije es: me tienes que dar el guión, para yo saber si el guión me conviene. No la economía -aclara-, sino el guión. Entonces me dieron dos guiones que eran demasiado amplios, y les dije que no. Después me trajeron otra versión. A mí me pareció que era una cosa agradable, y acepté venir a hacerla."

Muerte

Falleció el 31 de octubre de 2016 en La Habana, Cuba, a los 93 años de edad, víctima de complicaciones derivadas de varios padecimientos[1].

Filmografía

Premios y reconocimientos

Referencias

  1. Fallecio Reynaldo Miravalles. Disponible en:Diario Granma. Consultado el 1 de noviembre de 2016

Fuentes