Rubén Aldama Rubio

Rubén Aldama Rubio
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NombreRubén Susano Rehustiano Aldama Arguelles
Nacimiento24 de mayo de 1919
Pedro Betancourt, Matanzas

Rubén Susano Rehustiano Aldama Arguelles es el primer mártir del Directorio Revolucionario, obrero de transporte y miembro de su comité ejecutivo. Mártir revolucionario cubano del municipio de Arroyo Naranjo. Asesinado por los esbirros de la tiranía de Fulgencio Batista.

Síntesis biográfica

Nació en Pedro Betancourt provincia de Matanzas el 24 de mayo de 1919 hijo de personas humildes; su papá se nombraba Francisco Aldama Sotomayor, hombre trabajador y enérgico y su mamá, Laura Arguelles, mujer bondadosa, dulce y noble.

Educación

Su educación siempre fue basada en la honradez, disciplina, el respeto hacia los demás y el patriotismo por Cuba.

Cursó su primera enseñanza en su pueblo natal, adquiriendo sus dos primeros empleos organizando competencias de boxeo donde se destacó.

Acciones Revolucionarias

El 20 de mayo , Rubén con sólo 13 años, exhortaba en el parque de la localidad en arenga pública a sus compañeros a combatir al tirano Machado y sus secuaces.

En el año 1934 se traslada a vivir a La Habana al reparto Altura de la Víbora, en la calle Damují, entre Sagua y Peralejo, ganando la amistad del revolucionario Antonio Guiteras, quien da forma al idealismo revolucionario de Rubén y quien le enseñaba el sagrado deber de vivir por la patria y para la libertad.

Participó por la afición en el torneo Guantes de Oro de 1940 e iba en varias ocasiones representando a Cuba, se alejó del boxeo por no estar de acuerdo con el control que sobre este deporte ejercían las pandillas norteamericanas.

Después del asesinato de Antonio Guiteras,en el Morrillo, Matanzas, sin dejar de trabajar en los tranvías se inicia en la tarea redentora de luchar por la libertad. Conjuntamente con otros jóvenes de esa época, pertenecía a organizaciones revolucionarias.

El 10 de marzo cuando se produce el golpe de estado de Fulgencio Batista, Rubén subió a la escalinata de la patria.

Testimonio

Se cuenta que en una ocasión los bandidos dirigentes obreros del mujalismo trataron de comprarlo para que abandonara las justas demandas que planteaban a favor de sus compañeros, rechazando con gestos coléricos y encendido expresó: "Los hombres que se venden, merecen la muerte".

Su rechazo le costó una zurra de las manos de los sicarios de Mujal. Comenzó a movilizar a las masas sindicales y al fundarse el Directorio Revolucionario marchando del brazo del revolucionario José Antonio Echeverría, siendo el primer mártir de la organización.

La policía batistiana sospechó de él y comenzaron las detenciones y las golpeaduras, pero nada lo hizo desistir de su firme propósito de luchar por la libertad de Cuba, de los pobres y para los pobres.

Cuentan sus compañeros que una vez que fue detenido por Ventura, lo amenazó con matarlo y él con su firmeza expresó: "Si, yo sé que a lo largo me matarás y matarás centenares más, pero de algo puedes estar seguro, ganaremos la batalla".

Esta no fue la única vez que fue encarcelado, además lo acusaron de participar en un plan para atentar contra Fulgencio Batista, siendo sometido a juicio junto con Armando, Enrique, Faustino Pérez y otros jóvenes. En esta ocasión, el fiscal se vió obligado a hacer una alusión jocosa al recordar a Rubén durante la pruebas de confección, había manifestado que se incluía en la causa porque la policía necesitaba que hubiera un negrito implicado, esto ocurrió en el año 1955. Finalmente un día irrumpieron en su casa Ventura y Carratara, donde fue detenido.

En el año 1958 lo acusan por conspirar contra el tirano Batista, no fue llevado a juicio, fue presentado a su favor un recurso de Haber Corpus por el doctor Alfredo Yabur Maluff a nombre de la madre de Rubén, Laura Arguelles, siendo declarado sin lugar, al explicar al jefe de la policía Salas Cañizares que Rubén no había sido detenido por ningún miembro de ese cuerpo. En consecuencias, se presentó de nuevo un escrito solicitando la detención de Carratara, Ventura y los agentes Barrero y Ramón, así como lo procedente en determinar las responsabilidades del general Salas Cañizares que también lo declararon sin lugar.

Muerte

Unas versiones plantean que su cadáver lo tiraron al mar, otras dicen que fue enterrado vivo. Hasta la fecha no se han determinado los pormenores de su muerte.

Su padre fue combatiente de Playa Girón y presidente de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en el año 1997. Faure Chomón, quien conociera a Rubén Aldama Arguelles, visitó la casa donde vivía y le entregaron los guantes que usaba en el torneo Guantes de Oro y hoy se exhiben en la sala Giraldo Córdova Cardín

Fuentes