San Benito de Palermo

San Benito de Palermo
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Santo
San Benito de Palermo de la Iglesia Catedral de Camagüey.jpg
Religión o MitologíaCatólica
Día celebración29 de diciembre

San Benito de Palermo. Es un santo negro de la Iglesia Católica a quien se le rinde culto en numerosos países, además es el Santo patrón de los Afroamericanos y su fiesta se celebra el 4 de abril, aunque en algunas regiones de Venezuela, se realizan celebraciones en su nombre el 29 de Diciembre.

Biografía

San Benito de Palermo, es también conocido como San Benito o Benedicto el Africano, el Moro o el Negro, este fue un monje y santo italiano nacido en Sicilia] en el año 1524 en las proximidades de Mesina en San Filadelfio, por lo que a veces se le llama San Benito de San Filadelfio, falleció en el año 1589 en la ciudad de Palermo.

Este hombre negro de origen africano, fue hijo de esclavos y se cree que sus padres laboraban en una plantación cercana a Mesina, sin embargo recibió la libertad de sus amos tras su nacimiento y en sus primeros años se ganó la vida como pastor.

Contaba con más de 20 años cuando conoció a un grupo de ermitaños de la Orden de San Francisco de Asís a los que se unió, NO obstante en 1564 el grupo se disolvió y Benito ingresó en el convento de Santa María de Palermo, donde debido a su analfabetismo fue inicialmente relegado a la cocina del convento. A pesar de ello su piedad, su humildad y los milagros que se le atribuyeron, sobre todo curaciones, le dieron gran fama, lo que le llevó a ser elegido prior en 1578, luego fue maestro de novicios, para curiosamente retornar tiempo después a la cocinero, donde sus platos le daban fama de taumaturgo o sea, de milagroso.

Canonización

Benito fue beatificado por el Papa Benedicto XIV en 1712 y canonizado en 1807 por el Papa Pío VII. También se dice que su cuerpo fue encontrado incorrupto cuando fue exhumado pocos años después.

Se le reconoce en la actualidad como el Santo patrón de los Afroamericanos y es recordado por su paciencia y entendimiento cuando se enfrentaba a prejuicios raciales. Existen al menos cinco parroquias católicas romanas negras que llevan su nombre en los Estados Unidos, una en Queens, Nueva York, una en Chicago, Illinois, una en Pittsburgh, en el norte Omaha, Nebraska, una en el sur Columbus, Georgia, y otra en Savannah, Georgia.

La devoción a San Benito está extendida a lo largo de América Latina, desde México hasta Argentina, en especial en Venezuela, donde su devoción se extiende a lo largo de los varios estados del país y es celebrado en muchas fechas distintas, de acuerdo con tradiciones locales. Como por ejemplo en el sur del lago de Maracaibo o Costa Oriental del Lago se celebra el 27 de diciembre (al igual que Palmarito, Santa María, San José y San Antonio), el 1ero de enero en Bobures y el 6 del mismo mes en Gibraltar, entre otros.

En la región también existen algunos templos dedicados a él en Medellín, Colombia, que le da nombre a un tradicional barrio de la Ciudad. Mientras que en Paysandú, Uruguay, la Basílica es también dedicada a Nuestra Señora del Rosario y San Benito de Palermo. De igual manera es el Santo patrón de la población de algunos pueblos del páramo en el estado Mérida, en Venezuela, donde se realizan celebraciones en su nombre el 29 de Diciembre. En el Perú, en la ciudad de Lima, en la Iglesia de San Francisco de Asís, situada en el centro histórico, los días 4 de cada mes se celebra una misa en su honor y recorre en procesión la iglesia.

El culto del santo en Cuba

San Benito de Palermo es uno de los dos Santos negros que existen en las iglesias católicas de la provincia de Camagüey, en su caso se encuentra enclavado en Iglesia Catedral de Camagüey, también conocida como Parroquial Mayor, Catedral de la ciudad; mientras que el otro santo negro San Martín de Porres está en la Iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje (Camagüey).

La imagen de este santo negro es una escultura de madera cubierta en yeso y pintada de aproximadamente 1,30 m de alto, donde se representa a un negro relativamente joven, con el pelo rizado característico de su raza, en sus ojos resalta el blanco de su iris, lo que da expresividad al rostro. Se encuentra parado sobre una nube y viste de azul con un cordón blanco atado a la cintura que le llega prácticamente hasta los pies, con tres nudos a cada lado. En una mano sostiene una cruz y en la otra una espiga de lirios blancos. En los pliegues del ropaje, sobre todo en la parte inferior hay cierto intento de lograr movimiento, así como en la pose del santo con un pie delante y el otro ligeramente atrás.

Llamado el Negro o el Moro este ermitaño hijo de esclavos africanos y monje franciscano no se tiene referencia de la fecha en que aparece por primera vez la imagen en los templos de la ciudad de Camagüey, pero su repercusión sociocultural está relacionada con la epidemia de viruelas que azotó la ciudad a fines de marzo de 1888. Cuentan que ante la ineficacia de las rogaciones organizadas en los templos los principeños decidieron escuchar la iniciativa de un sastre “de la raza de color” consistente en ofrecer una fiesta a San Benito de Palermo, cuya imagen servía de apoyo a una puerta de la Catedral, logrando cumplir con el exvoto —la festividad— el segundo domingo de abril con procesión en horas de la noche. De los sucesos que acompañaron dicho acontecimiento refiere el investigador Camagueyano Juárez Cano:

" Por tratarse de una fiesta de personas de color y todavía en Puerto Príncipe existían prejuicios raciales porque el patronato se había extinguido poco antes, el acompañamiento de San Benito de Palermo, claro está, era formado únicamente por creyentes de dicha raza y tuvo que recorrer el barrio del Matadero, por ser esa la ruta que le fijó la autoridad eclesiástica a dicha ceremonia. El vecindario de dicho barrio, sorprendido con la aparición del santo por aquellos lugares y su acompañamiento uniforme, le recibió con gran rechifla, piedras y ‘chirimoyas’ que mancharon la imagen sagrada que intercedía en aquellos momentos para que Dios aplacara la cólera divina que azotaba a la población y la procesión volvió ‘corrida’ para la iglesia. Sin embargo, desde entonces San Berenito, como la gente de color ha dado en llamar a San Benito de Palermo, quedó consagrado como un santo camagüeyano y se le atribuyen grandes milagros.”

Fuentes

  • Wikipedia
  • Libro inédito “Iconografía e Iconología religiosa católica en Camaguey” de Alberto Chio, Premio Anual de Investigaciones Juan Marinelllo del año 2006