Sergio Restano Castro
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Sergio de la Caridad Restano Castro. Combatiente revolucionario cubano fallecido en accidente de aviación en Perú.
Sumario
Síntesis biográfica
Cuarto de los seis hijos de Perla Marina y José Indamiro. Nació el 18 de octubre de 1924, en el Reparto de La Fernanda, reparto de San Miguel del Padrón, antiguo municipio Guanabacoa.
Los primeros estudios los realizó en la Escuela Pública No. 51 en el barrio Rocafort donde cursó hasta el 4to. Grado pasando después a la Escuela Pública No. 48 (El Tejar) en la Calzada de Güines.
Con la muerte del padre víctima de la tuberculosis producto de la lucha contra la dictadura de Machado, quedó la familia sin ningún amparo económico contando solamente con el apoyo de su madre que tuvo que salir a la calle a trabajar lavando ropa, sirviendo en una clínica de salud, vendiendo casa por casa y de camarera en el Hotel Presidente. Solamente así pudo mantener a sus seis hijos.
Fueron épocas difíciles, pero siempre fueron guiados por su madre, vieja luchadora contra la dictadura de Machado y por la reivindicación de los trabajadores del sector gastronómico, así salieron adelante.
Para ayudar a su familia Sergio se incorporó desde muy temprana edad al trabajo, pues fue vendedor de dulces a domicilios, dependiente de café, repartidor de periódico “Hoy”, Órgano Oficial del Partido Unión Revolucionaria Comunista, fue sastre y obrero en la Concordia Textil (fábrica de cintas) en Guanabacoa, donde trabajó poco tiempo, pues su labor a favor de los trabajadores motivó la baja.
Trayectoria revolucionaria.
A los doce años realiza actividades con los pioneros orientado por la familia Almeida que era militante del Primer Partido Comunista, a los quince años fue fundador de los “Jóvenes del Pueblo”, organización juvenil del Partido Unión Revolucionaria Comunista.
Sus primeras actividades políticas las desarrolló en el barrio La Fernanda y Juanelo. Entre los años 40 y 48 se desarrollaron batallas difíciles pero hermosas como son:
- Campañas económicas para adquirir el periódico “Hoy” y la emisora de radio “Mil Diez”.
- La Clínica de los trabajadores de Ómnibus,
- El Centro Benéfico Jurídico, por la defensa y apoyo de la Unión Soviética durante la II Guerra Mundial, en contra de la acción de los politiqueros, contra el Diario de la Marina (periódico fascista de la época).
- Batallas en contra de la explotación de los obreros, de la discriminación racial y la corrupción administrativa
En los gobiernos de Prío Socarrás y Grau San Martín siguiendo la política del imperialismo dividen el movimiento obrero, destruyen a los verdaderos líderes y ponen en la Directiva de los Sindicatos a los traidores Cofiño y Mujal.
Estos nuevos dirigentes destruyen al líder Lázaro Peña y asesinan a líderes obreros como Jesús Menéndez, (Azucarero), Aracelio Iglesias (Portuario), clausuran el Periódico “Hoy” y la Emisora “Mil Diez” e ilegalizan al Partido Socialista Popular.
Contra todas estas injusticias Sergio desarrolla una gran actividad en los barrios de Luyanó y San Miguel del Padrón y en la movilización de los trabajadores y el pueblo.
El 30 de agosto de 1946 contrae matrimonio con la compañera Isaura Rodríguez Benega, maestra de profesión, de cuya unión nacieron dos hijos Sergio y Juan. De ella recibió un gran apoyo para realizar sus actividades políticas y revolucionarias.
A partir del golpe del 10 de marzo de 1952 dado por Batista, pasan siete años de tiranía, Sergio vive enfrascado en una incesante actividad conspirativa, distribuyendo La Carta Semanal, publicación clandestina del Partido Comunista, realizando campañas económicas, distribución de Manifiestos, mítines relámpago, sabotajes al tendido eléctrico, pintando paredes con lemas revolucionarios, entre otras acciones.Organiza los Comité de huelga en los centros de trabajo, siempre luchando por la unidad entre las fuerzas que combaten a Batista:
En fechas como la del 1 de mayo la presencia de los revolucionarios se hace sentir con más fuerza, con telas y letreros alusivos a la fecha que son puestos en el barrio; se confeccionan volantes en un viejo reproductor, se regaban tachuelas en la calle, se hacen recogidas de medicinas para la Sierra Maestra, etc.
Fueron muchas y difíciles tareas cumplidas por él, aun a riesgo de su vida y sin dejar de cumplir ninguna de las misiones.
Los municipios San Miguel y Luyanó son barrios netamente frágiles (fábrica de pintura, latas, textiles, ferroviarios, etc.) y esto se aprovecha para la preparación de la “ Huelga del 9 de abril”, para esta acción y en la unión de los revolucionarios dedicó toda su energía.
Los revolucionarios del municipio de Regla, secuestran el monumento de la Virgen del Camino y no se puede realizar la procesión, el teniente Junco de la 13 Estación de Policía, tenía ya varios muertos entre ellos a Pedrito Valdés, este esbirro estaba en la casa de los revolucionaros y en especial de Sergio por su genuina integridad, moral e inquebrantable fidelidad a la causa de los pobres. Por ello, él se ganó el cariño y respeto de sus amigos y vecinos, que lo ayudaron en varias ocasiones a salir de las garras de los esbirros.
Un ejemplo de la ayuda brindada a Sergio ocurre cuando estando en la calle Mayor al fondo de la fábrica de latas (hoy Luis Melián en La Fernanda) , él es avisado por una vecina de que un policía apodado “El Indio”, lo estaba buscando, gracias a este aviso tuvo tiempo de salir descalzo y sin camisa por detrás de la casa y allí lo ayudaron los vecinos a escapar.
Días después se produce el asesinato de los jóvenes de Regla, la detención de Lidia y Clodomira en el barrio de Juanelo las cuales después fueron asesinadas. Tenían localizado a Sergio por medio de un chivato que se conocía por el apodo de “Papito Oreja”,. En la noche realizan un asalto a la casa y un registro por parte del Teniente Junco, no encontrando a nadie; y más tarde tiene que abandonar la casa, pasando a residir en Centro Habana donde prosigue su tarea revolucionaria.
Luego del Triunfo de la Revolución
Desde el 1 de enero de 1959 desarrolla una intensa actividad revolucionaria siguiendo la orden de huelga general dada por Fidel Castro, visita centros de trabajo, moviliza al pueblo para consolidar el Triunfo de la Revolución y hacer fracasar el intento de golpe de estado de Cantillo que incumplió lo pactado con Fidel en la Sierra Maestra.
Entre los años 1959 y 1962 siguió su intensa actividad revolucionaria, trabajó muy poco tiempo en el Ministerio de Gobernación.
Cuando se organiza el Departamento de Seguridad del Estado (G-2) fue fundador del mismo, pasando posteriormente a Seguridad Personal donde trabajó hasta su muerte.
Fue Jefe de La Ciudad Deportiva cuando Playa Girón; en la Crisis de Octubre viajó a la ONU con el Presidente Osvaldo Dorticós Torrado, con el Comandante Ernesto Che Guevara a Punta del Este en Uruguay. Integra la Delegación a los Juegos Centroamericanos celebrados en 1962 en Jamaica, estuvo en México, Checoslovaquia y Santo Domingo en funciones de trabajo y siempre en defensa del país. Trabajó arduamente con Celia Sánchez en labores revolucionarias.
Es nombrado Ministro Consejero, acreditado en Misión de Cuba en la ONU y forma parte de la delegación cubana a la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), celebrada en Río de Janeiro, Brasil en noviembre de 1962. Esta delegación la presidia el compañero Raúl Cepero Bonilla, Ministro Presidente del Banco Nacional de Cuba.
A pesar de haber estado en varios países, no logra su sueño que era visitar la Unión Soviética, pero logra ver triunfante su causa, la Revolución Cubana.
Muerte
De regreso a la patria, el 27 de noviembre de 1962, el avión en que viajaba se estrelló contra el Cerro de las Cruces, elevación andina en Lima, capital de Perú, país suramericano.
La noticia llenó de tristeza y consternación al pueblo, eran diez compañeros queridos por la Revolución.
En el amplio salón de la base del Monumento de nuestro Héroe Nacional “José Martí” por primera vez fueron expuestos los féretros de los revolucionarios caídos. Por allí desfiló todo nuestro pueblo para rendirle su último homenaje junto al Consejo de Ministros encabezado por el Presidente Dorticòs y el Primer Ministro Fidel Castro los cuales realizaron la última guardia de honor a los caídos.
Le fue otorgado por Post Morten los sellos de 20 y 30 años de la Seguridad del Estado.
Al despedir el duelo el Presidente Dorticòs dijo:
. Al pasar lista a los caídos, de Sergio dijo:
